jueves, 30 de octubre de 2014

Se duplica número de inmigrantes cubanos llegando a EEUU

Tomado de The Wall Street Journal

Luis Alberto Cuan Lio (con camiseta anaranjada) y su esposa Yordana Bravo Pérez (sentada en el colchón) llegaron a EE.UU. después de una travesía que los llevó a Ecuador, Perú y México. MICHAEL STRAVATO para The Wall Street Journal

Nueva ola de cubanos llega a EE.UU.


En junio, Luis Alberto Cuan Lio voló con su esposa embarazada, Yordana Brazo Pérez, de Cuba a Ecuador como turistas. Era la primera escala de una travesía que terminaría cuando ambos cruzaran por tierra la frontera de México hacia Estados Unidos, donde están construyendo una nueva vida.
Este año, una ola de inmigrantes indocumentados de América Central acaparó los titulares, pero más de 22.000 cubanos ingresaron a EE.UU. por tierra en los 12 meses que terminaron el 30 de septiembre, el doble que en el mismo periodo del año previo. Además, otros 3.940 cubanos buscaron llegar a territorio estadounidense a través de rutas marítimas, casi el doble que el año previo y el número más alto desde 2008, cuando la isla fue golpeada por varios huracanes, sus exportaciones estaban de capa caída y Raúl Castro asumió la presidencia.
Los factores detrás de este nuevo éxodo apuntan al relajamiento de las restricciones de viaje que el gobierno cubano decretó el año pasado y una falta de esperanza entre los ciudadanos sobre las perspectivas económicas de su nación.
“La gente está cada vez más frustrada con el alcance y el ritmo de las reformas económicas”, dijo Ted Henken, profesor de estudios latinoamericanos en el Baruch College en Nueva York.
Washington también ha relajado las restricciones de visas para cubanos que llegan por aire como turistas, algunos de los cuales se cree se quedan en EE.UU. Cerca de 300.000 de estas visas fueron emitidas en el año fiscal que terminó el 30 de septiembre de 2013.
La Sección de Intereses de Cuba en Washington, la representación consular de la isla en la capital estadounidense, no respondió llamadas pidiendo comentarios.
Los inmigrantes cubanos en EE.UU. gozan de un trato especial. La Ley de Ajuste Cubano de 1966 permite que aquellos que tocan suelo estadounidense puedan quedarse en lugar de ser deportados. También reciben algunos de los beneficios que son concedidos a refugiados que huyen de la persecución. Después de un año, pueden solicitar la residencia permanente o green card.

El número de cubanos recién llegados palidece junto a los alrededor de los 130.000 centroamericanos que cruzaron a EE.UU. sin documentos en el último año fiscal, o los estimados 125.000 cubanos que llegaron por mar en el éxodo del Mariel en los años 80. Pero las llegadas por tierra abren un nuevo capítulo en la migración cubana hacia EE.UU., y los expertos esperan que el éxodo aumente.
En la frontera entre México y Texas, los cubanos se unen a los que esperan permiso para entrar a EE.UU. “Saben exactamente a dónde ir, llegan con sus documentos y dicen que quieren acogerse a la Ley de Ajuste Cubano”, dijo Adriana Arce, directora asistente en el puerto de entrada de Laredo de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, que ha tenido que aumentar su personal para procesar el aumento en las llegadas. Después de una entrevista, los cubanos usualmente reciben permiso para ingresar bajo palabra, un proceso que toma alrededor de dos horas. Luego, armados con papeles concedidos por el gobierno, son libres para ir a donde quieran.
Cuan, un médico, y su esposa, una maestra de preescolar, ahorraron dinero por años y con la ayuda de amigos y parientes en EE.UU. pagaron su viaje, que costó alrededor de US$8.000.
“Perdimos la esperanza de que Cuba mejorara”, dijo Cuan, de 47 años, quien dice que en la isla ganaba el equivalente a US$20 al mes. En lugar de arriesgar sus vidas en el mar, optaron por una ruta más segura, aunque más larga y cara.
La pareja voló a Ecuador porque no necesitaban visa para ingresar a ese país, luego viajaron a Lima, donde consiguieron pasaportes peruanos falsos que les permitieron ingresar a México sin visa. En Monterrey, tomaron un bus a Laredo, donde les dijeron a inspectores fronterizos estadounidenses que eran ciudadanos cubanos.
Ahora viven en Houston, donde están siendo ayudados por los Servicios de Refugio de Texas. La agencia sin fines de lucro procesó en el tercer trimestre a tantos cubanos como a asilados de todos los otros países combinados. “Es mucha gente al mismo tiempo”, dijo Sara Kauffman, directora de área.
Wafa Abdin, vicepresidenta de Caridades Católicas de la Arquidiócesis de Galveston-Houston, dice que este año la agencia ha estado atendiendo a alrededor de 50 cubanos a la semana, frente a entre cinco y 15 semanales dos años atrás. “Nuestro personal está acostumbrado a ayudar a todos los que cruzan la puerta”, eso está llevando al límite los recursos, dijo Margaret Ayot, supervisora del programa.
YMCA International Services de Houston ayudó a 700 refugiados de África, Asia y otros países en el año fiscal 2014. En el mismo periodo, proveyó asistencia a 434 cubanos. “Vienen a nosotros y juntos ideamos un plan rápidamente”, dijo Jeff Watkins, director ejecutivo.
Los cubanos son aptos para recibir una asistencia en efectivo durante ocho meses, seguro de salud y servicios de búsqueda de empleo así como clases gratuitas de inglés, entre otros beneficios ofrecidos a refugiados. Para una familia de tres, ocho meses de asistencia en efectivo equivale a un total de US$4.300, para una sola persona es alrededor de US$2.500. Los cubanos también reciben cupones de alimentos si cumplen con ciertos requisitos de ingresos.
Algunos dicen que los cubanos no son refugiados en el sentido tradicional de la palabra, aunque tienen esos derechos. “La mayoría de cubanos son migrantes económicos”, dijo Jodi Goodwin, un abogado de inmigración que trabaja cerca de la frontera con Texas. EE.UU. recibió a 70.000 refugiados el año pasado, en su mayoría de África, Asia y Medio Oriente.
Los cubanos que toman la ruta marítima para llegar a Miami usualmente son los más pobres, viajando en embarcaciones de acero corrugado, madera y poliestireno, según el capitán Mark Fedor, jefe de reacción del Séptimo Distrito de la Guardia Costera de Miami. El ritmo de las recientes llegadas está causando alarma, dijo. “A veces son cosas tan ingeniosas las que arman”, dijo. “Pero tan poco aptas para el mar”.
Se espera que la ola de cubanos se acelere, dicen los expertos, especialmente si la economía estadounidense sigue mejorando.
Cuan dice que está buscando empleo en cualquier campo tras recibir su autorización de trabajo y número de Seguro Social. “No tenemos nada aquí”, dijo. Pero “es un mejor lugar para vivir”. 

domingo, 26 de octubre de 2014

Recetas caceras para eliminar las indeseables pero infaltables cucarachas

Tomado de Entremujeres

¿Cucarachas? Recetas caseras para eliminarlas

Son uno de los insectos más desagradables que pueden "atacar" una casa. Además de ser repulsivas, transmiten enfermedades y contaminan la comida. Dónde se esconden, cómo evitar su ingreso y medidas simples para combatirlas.

 

Las cucarachas son unos de los insectos que más encontramos en los hogares hoy en día. Comen cualquier cosa orgánica: restos de comida, grasa, basura, telas de lana y algodón, cartón y papel de empapelar. Suelen ser más activas durante la noche y, en el día, viven en huecos y grietas oscuras y húmedas. Les gusta pasar tiempo en las superficies porosas, como la madera, el cartón y el papel. Dejan su olor estos espacios y este aroma es el encargado de atraer a otras cucarachas a la misma área.

Empecemos por: ¿Dónde se esconden?

* Dentro de los muebles de la cocina y del baño y, sobre todo, en las hendiduras y grietas.
 
* En los caños de desagüe de cloacas y canillas de cocina, baño, lavaderos, salidas de gas, calefacción o aire acondicionado, cajas eléctricas, cielo raso, entre otros. Incluso los que salen a la calle. Suelen ser uno de los principales lugares por donde ingresan a la casa.

* Detrás y debajo de las heladeras, cocinas, hornos, freezers, microondas y otros electrodomésticos. 

* Sótanos, altillos y lugares de depósito y almacenamiento de alimentos, herramientas, ropa, telas, papeles, bolsas del súper, diarios, alimentos de mascotas, entre otros.  
* Debajo de los pisos de madera y detrás de los zócalos de los pisos.

* En el exterior, donde haya escombros, leña o tachos de basura.

¿Qué hacer?
Suelen esconderse en lugares húmedos, pero también en grietas o recovecos secos y cálidos, sobre todo sin acceso de luz. Entonces, un primer paso es eliminar los sitios con humedad, reparar fisuras en los caños de las cloacas y sellar los huecos alrededor de los lavaplatos, lavamanos, duchas y bañaderas. Mantener la cocina y el baño lo más seco posible. 

Algunas veces, pueden encontrarse en los lugares secos de la casa, como los dormitorios y demás ambientes cerrados. Se recomienda aspirar las cortinas y muebles, especialmente debajo de los sillones, camas, colchones, almohadones, alfombras y, sobre todo, en los huecos entre éstos y las paredes o ventadas. También es fundamental vaciar y limpiar estantes de libros y sacudirlos, revisar armarios, escritorios, relojes de pared, radios, computadoras y televisores. En definitiva, todos aquellos lugares donde la temperatura sea cálida y esté oscuro. 

Lo ideal es guardar toda la comida, incluyendo el alimento para mascotas, en contenedores bien cerrados y resistentes a las cucarachas. Lavar y secar los platos, utensilios, ollas y sartenes después de utilizarlas y no dejar que los platos sucios permanezcan en la superficie de la cocina durante toda la noche. Finalmente, hay que mantener la basura y las cosas para reciclar en sitios herméticos.

¿Cuáles son los "remedios caseros" anti-cucaracha?

El laurel. Para que no ingresen a tu casa, una solución fácil y accesible es colocar hojas de laurel picadas en los sitios donde puedan entrar los insectos. Suelen no resistir su olor y se alejan de inmediato.

La cebolla y el polvo bórico. Uno de los remedios más utilizados para eliminarlas es crear una pasta muy barata y súper efectiva. La receta: mezclar media cebolla picada en pedazos bien chiquitos, media taza de harina común, cantidad necesaria de cerveza o agua, una pizca de azúcar y 3 o 4 cucharitas de polvo bórico. El mismo es de venta libre y se consigue en farmacias o droguerías. Tiene fecha de vencimiento y se humedece rápido, por lo que lo mejor es cerrar correctamente su envase después de usarlo. Colocar los ingredientes en un recipiente e integrarlos hasta generar una pasta no muy líquida. Utilizar tapitas de gaseosas para ubicar la mezcla adentro. Poner estas tapas en los lugares (principalmente rincones) por donde andan las cucarachas. Se recomienda controlar que las mascotas del hogar no la consuman, porque puede ser tóxico para ellos. 

La lavanda. Colocá ramitos de lavanda o saquitos con trozos de ésta en los sitios por donde salen las cucarachas. Su aroma, placentero para el olfato humano, suele alejar a estos insectos.

Azúcar y bicarbonato de sodio. Las cucarachas tienen un estomago ácido. Para erradicarlas realizá una mezcla sencilla de azúcar con bicarbonato de sodio y ubicálo en los sitios favoritos de estos insectos. No se podrán resistir al sabor dulce y lo comerán enseguida. Así, el bicarbonato hará efecto inmediato en su organismo.

Pasar la aspiradora. Parece ser muy simple, pero… ¡Sí funciona! Ayuda a reducir poblaciones de cucarachas que encuentres detrás de los electrodomésticos o muebles. Los accesorios suelen ser muy útiles para llegar a lugares alejados y de difícil acceso. Al terminar, sacá la bolsa, sellála y tirála.  

El frío y el calor. Algunos tratamientos térmicos pueden ser prácticos. Lo ideal son las temperaturas extremas que eliminarán estos insectos al instante. Pero, como no es tan conveniente dejar que tu casa se congele en el invierno, sacá ciertos muebles o electrodomésticos al exterior y el clima hará su trabajo. Lo mismo sucede con el sol y su excesivo calor en los meses de verano, que accionará contra las cucarachas inmediatamente.

Y más. Si aparecen en alacenas, muebles o armarios retirá todo lo que haya dentro de éstos y aplicá insecticida químico concentrado en cada recoveco del amoblamiento, en las fisuras de los azulejos, en los zócalos, motores y cables de heladeras, de cocinas y de freezers. Dejá actuar una hora y limpiá con un trapo sólo con agua.

¿Cómo prevenir que entren? 

- Evitá que las cucarachas entren en tu jardín y tu casa tapando los huecos y grietas. Colocá una malla o tejido metálico o plástico (tipo mosquitero) en cada una de las rejillas de las cloacas de la casa, tanto interiores como exteriores para evitar que ingresen por esas aperturas. Colocá algún insecticida químico con aspersor manual en todos los sitios por donde considéres que pueden entrar. Podés realizar lo mismo en las puertas de ingreso y en los zócalos de las paredes.

- Vigilá los rincones que acumulan humedad y falta de luz. No conserves cajas o cestos vacíos en el jardín porque pueden servirles de refugio.

- Prestá atención a los marcos de las puertas y ventanas.

- Sellá el espacio entre las cañerías, las griferías, los cables de electricidad y de teléfono.

- Probá los distintos métodos caseros para erradicarlas.

- Inspeccioná especialmente la comida de mascotas, los cestos de ropa sucia y el espacio detrás de la heladera, el freezer, el horno, el microondas y la cocina. 

Si, luego de tomar todas estas medidas, la "invasión" continúa, lo recomendable es utilizar productos químicos concentrados. Siempre leé bien las etiquetas y utilizálos con las medidas de seguridad correspondientes ya que pueden ser altamente tóxicos. Una última opción, si es que las cucarachas continúan en tu casa, es que contrátes un profesional que fumigue los lugares donde aparecen, y continuar con la prevención para que no vuelvan a ingresar.

Fuente: Manual para el control de cucarachas de la UNL Universidad de Nebraska - Lincoln, Estados Unidos.


"Chikungunya" de Africa al Caribe y de allí al resto de América

Tomado de El País

El mosquito que te deja doblado

El chikungunya, una enfermedad vírica que puede dejar secuelas durante meses, se expande desde El Caribe al resto de América

En la República Dominicana, el país con mayor incidencia, la mayoría de los consultados dice haber tenido la enfermedad, que califican de "dolorosísima"


Su nombre puede sonar chistoso, pero no tiene ninguna gracia. La palabra chikungunya proviene de una lengua tanzana, país de origen de la enfermedad; significa hombre doblado y deja literalmente así a quienes contraen este virus transmitido por los mismos mosquitos que contagian el dengue. Se está expandiendo con rapidez por el continente americano desde donde brotó hace casi un año: el Caribe. En el país más afectado, la República Dominicana, el pico de la epidemia pasó hace unos meses. Allí, cualquiera de las decenas de personas consultadas para este reportaje la ha pasado (la mayoría de los preguntados) o tiene numerosos de familiares directos y amigos cercanos que la padecieron.
"No se lo deseo a nadie. A nadie, señor", repite una y otra vez Romeo Álvarez, un taxista a quien el chikungunya retuvo en la cama durante cuatro días. Es aproximadamente el periodo agudo de la enfermedad, con fiebres muy altas y un malestar que le deja a uno "doblado", en palabras de Álvarez. "Duele todo el cuerpo, hasta las uñas", enfatiza. Después de eso los síntomas disminuyen, pero no cesan. Sara Menéndez, que también superó la enfermedad, sufrió tras las fiebres unas enormes llagas por todo el cuerpo, especialmente en los brazos, pero también dentro de la oreja y en la boca. Coincide con Álvarez: "Me dejó traumatizada. Ahora sé realmente lo que es pasarlo mal".
No existe vacuna para evitar el chikungunya y el tratamiento es meramente paliativo de los síntomas. Más allá del periodo agudo, las secuelas pueden durar semanas, incluso más de un año. Tanto Menéndez, que además es médico, como Álvarez la pasaron hace tres meses y todavía la sufren. "Aún me duelen todas las coyunturas de los dedos. Muchas mañanas no puedo cerrar la mano", explica el taxista. "Al levantarme, la rodilla no me responde. En ocasiones no puedo subir escaleras", añade la doctora. Amaira González, pediatra del Hospital Antonio Musa, en San Pedro de Macorís, añade que las secuelas suelen durar más en personas mayores de 30 años: "A muchos niños casi ni se les manifiesta".
La parte positiva de la enfermedad es, por un lado, que registra tasas de mortalidad muy bajas; se han reportado por su causa 118 fallecimientos desde que la enfermedad entró en América por primera vez, en diciembre de 2013. La inmensa mayoría de los decesos (108) fueron notificados en Martinica y de Guadalupe. Esto no quiere decir que en el resto de países solo hayan muerto 10 personas. Lo que sucede, según Pilar Ramón-Pardo, consejera de enfermedades infecciosas de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), es que en estos dos territorios se han afanado en hallar las causas de muerte, cosa que no sucede en todos. "La calidad del certificado de defunción no llega a ser óptima en todos los países afectados y no siempre pueden comprobar retrospectivamente los diagnósticos", asegura. En cualquier caso, morir por chikungunya es muy improbable; la mayoría de los fallecidos eran ancianos o padecían enfermedades previas que se complicaron con el virus.
Además de la baja mortalidad, otras dos facetas positivas de la enfermedad son que no se contagia entre humanos, solo con la picadura del pequeño mosquito infectado, y que una vez pasada la dolencia, el individuo queda inmunizado. Esto es lo que produce que, tras los picos en en determinado territorio, la enfermedad prácticamente desaparezca. En palabras de Ramón-Pardo, se "agota la población susceptible".
En la Maternidad de la Altagracia, uno de los principales hospitales de Santo Domingo, una enfermera de urgencias explica que la epidemia remitió, que hace días que no les llegan pacientes con la enfermedad, pero que un par de meses atrás era constante. En la República Dominicana se han registrado oficialmente 486.306 casos de chikungunya, lo que supondría un 4,6% de la población, segúnlos últimos datos de la OPS, actualizados el pasado 3 de octubre. Pero la percepción de la ciudadanía, la que se encuentra al preguntar en las calles de la capital, en un pueblecito del interior rural o en una playa de la zona más turística, es que la cifra es mucho mayor. “Soy de los pocos aquí que no la cogió”, asegura Carlos, empleado de un hotel de Bávaro.
Una de las posibles explicaciones es que muchos de los enfermos no pasan por el hospital. La doctora Bautista, internista de el Luis Eduardo Aybar, explica que normalmente las personas no se quedan hospitalizadas, a no ser que sufran alguna "condición". Diabéticos, hipertensos, embarazadas y ancianos deben tener especial cuidado. "Para el resto se suele recetar acetaminofén, antiinflamatorios y complejo B", explica la médica, que sigue la guía para el manejo clínico de la enfermedad que elaboró el Ministerio de Salud dominicano.


Muchos enfermos que son contagiados con el virus ni siquiera acuden al médico y consumen los mismos remedios con los que se han tratado familiares cercanos. "Yo no fui. Mi hija, mi hermana y mi abuela tampoco pasaron por el médico, así que no están en los registros epidemiológicos, como la mayoría de los enfermos. A mi abuela sí la llevé a urgencias, porque es anciana, pero tardábamos tanto en ser atendidos que nos fuimos, así que, oficialmente, ella tampoco pasó el chikungunya", explica Menéndez.
Así, es muy probable que las cifras oficiales infravaloren la expansión de un virus que ya ha alcanzado 36 países y territorios (generalmente colonias europeas) en América, 18 de ellos caribeños. Ahora mismo se está expandiendo por Centroamérica. y hay brotes registrados en El Salvador, Gutaemala, Honduras, Panamá y Costa Rica. También va hacia el norte de América del Sur: se ha detectado en Venezuela y Colombia, donde el Gobierno prevé que afecte a 400.000 personas y ha preparado un plan de contingencia.
En el país más afectado, la República Dominicana, mucha gente no se cree que sea un mosquito el que la transmite. "El 99% piensa que no se trata de un insecto, creen que es por algún tipo de contaminante", dice la enfermera de Altagracia. Esto se debe a dos motivos: por un lado, a su altísima prevalencia. "Aquí ha habido también dengue, pero nunca se ha expandido de forma tan masiva y rápida", dice la doctora González. Por otro a algunos síntomas: "Sientes como si estuvieras intoxicado", asegura Menéndez. Algunos lo achacan a un vertido en el puerto de Jaina, donde se detectaron los primeros casos. Otros incluso culpan al Gobierno. El taxista Romeo Álvarez es de los que se muestran escépticos con su verdadera causa, el mosquito: "Eso dicen, pero yo no me lo creo. Si me pregunta, yo pienso que es un virus que está en el aire, lo ha cogido todo el mundo".
Esto no ayuda a combatir al chikungunya. Al no creer que sea un mosquito, parte de la población no se protegía con mangas largas y repelentes del insecto, que son algunas de las recomendaciones de la OPS para los países donde se está expandiendo. Sin embargo, la más importante, según la consejera Ramón-Pardo, es trabajar con el vector, controlarlo y limpiar sus criaderos, aunque reconoce que “es sumamente difícil”. Tanto en Italia como en Francia hubo brotes de Chikungunya. Pararon cuando llegó el invierno y desaparecieron los mosquitos. En las zonas tropicales lo tienen más complicado: siempre es verano.