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miércoles, 15 de mayo de 2019

Hoy 15 de Mayo se celebra el Día internacional de la Familia

Por Compartiendo mi Opinión

Esta celebración busca fomentar y promover la transmisión de valores representativos del núcleo más importante de la sociedad.

El Día Internacional de la Familia se celebra cada año el 15 de mayo desde 1994. Esta celebración busca crear conciencia sobre el papel fundamental de las familias en la educación de los hijos desde la primera infancia, y las oportunidades de aprendizaje permanente que existen para los niños y las niñas y los jóvenes.

A pesar de que el concepto de familia se ha transformado en las últimas décadas, evolucionando de acuerdo a las tendencias mundiales y los cambios demográficos, las Naciones Unidas consideran que la familia constituye la unidad básica de la sociedad. En este contexto, el Día Internacional de las Familias nos da la oportunidad de reconocer, identificar y analizar cuestiones sociales, económicas y demográficas que afectan a su desarrollo y evolución. Por este motivo, para celebrar este día se organizan actividades, tales como talleres, conferencias, programas de radio y televisión, entre otros, con el objetivo de fomentar y favorecer el mantenimiento y la mejora de la unidad familiar.

Esta fecha fue proclamada en 1993 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, haciendo eco de la importancia que la comunidad internacional le otorga a la familia.

Esta es la ocasión propicia para promover la concienciación y un mejor conocimiento de los procesos sociales, económicos y demográficos que afectan a este importante núcleo de la sociedad.

Sin lugar a dudas, el Día de la Familia es parte importante de esa lucha por llevar de nueva cuenta a la familia, en su papel y rol educador y que no se lo delegue únicamente al estado, a los maestros y a la información externa que reciben, señala el portal oficial del Día de la familia.

Esta celebración ha inspirado una serie de actos de sensibilización. En numerosos países, ese día ofrece una oportunidad para poner de relieve los distintos ámbitos de interés para las familias. Entre las actividades se incluyen cursos prácticos y conferencias, programas de radio y televisión, artículos periodísticos y programas culturales que hacen hincapié en los temas pertinentes.

Durante esta fecha también se destaca la importancia de los miembros de la familia que se dedican al cuidado de los otros, sean padres, abuelos o hermanos y se focaliza en las buenas prácticas dirigidas a conciliar la vida familiar y laboral y a asistir a los progenitores en su papel de educadores y cuidadores.

Además, se destacan las buenas prácticas en el sector privado que apoyan a madres y padres trabajadores, así como a los jóvenes y las personas mayores, en sus lugares de trabajo.

La celebración también tiene por objetivo fomentar el debate acerca de la importancia de «los conocimientos teóricos y prácticos necesarios para promover el desarrollo sostenible, entre otras cosas mediante la educación para el desarrollo sostenible y la adopción de estilos de vida sostenibles, los derechos humanos, la igualdad entre los géneros, la promoción de una cultura de paz y no violencia, la ciudadanía mundial y la valoración de la diversidad cultural y de la contribución de la cultura al desarrollo sostenible».

sábado, 2 de febrero de 2019

SALUD MENTAL LA MEJOR HERENCIA FAMILIAR: DESNUDEZ O PUDOR


Hay pocas imágenes más tiernas que la de un padre o una madre en la bañera jugando con su pequeña criatura. Pero inmediatamente a muchos les entra la duda: ¿Está bien que los niños vean a sus padres desnudos? Pues eso depende de lo que los padres hayan decidido hacer. Debe verse la desnudez como algo natural, pero si los padres se sienten incómodos no deben hacerlo. Si no, no hay problemas, y serán nuestros hijos, cuando crezcan, los que pondrán un límite en su momento.

En la primera infancia, hasta los seis años, la desnudez no supone ningún trauma, al contrario. Lo confirman estudios realizados por el psicólogo Paul Okami, de la Universidad de Los Ángeles, que indican que “cuando los padres de niños entre 0 y 6 años se muestran desnudos con naturalidad en casa, su autoestima es mejor en la juventud y se sienten más cómodos con su cuerpo”. Eso sí, generalmente los niños se vuelven más pudorosos al ir iniciando la pubertad y la decisión de dejar de ver a sus padres desnudos será tan natural como espontánea. 

Sin embargo, puede ocurrir que esto se prolongue por un periodo largo de tiempo, y en ese caso puede ser negativo o sea que los padres no perciban las cambiantes necesidades de sus hijos, pero si hay buena comunicación, los niños mismos dirán a los progenitores que se cubran para evitar un momento de incomodidad 

Esencialmente se van dando las situaciones ligadas a las emociones y con poca asertividad que se tenga será fácil detectarlo. 

Es importante que pese a demostrar desnudez o pudor se les hable de su cuerpo como un templo al que tienen que cuidar, y esto aplica igual a ambos sexos. Es necesario hablarles de sexualidad y respeto. Si bien el pudor normalmente empieza a manifestarse alrededor de la pubertad, la verdad es que cada niño es diferente. Debe tratarse con naturalidad y a la vez hay que hablar de los otros temas ya mencionados. Si les hemos hablado de respeto... habrá que respetarlos y hacer que ellos respeten. 

Esto lo explica bien la española Rosa Collado, psicóloga especializada en sexología: “Al final los padres educan con su actitud. 

Si el niño después de descubrir naturalmente su cuerpo, ve que sus padres se cambian de ropa en la intimidad o piden permiso para entrar en el baño si hay otra persona… al final los niños aprenden a respetar la intimidad de los demás y de sí mismos y lo incluirán como un aprendizaje más para ellos”. 

La pubertad, además, coincide con que empiezan a madurar tanto física, mental como emocionalmente, entonces comienzan a distanciarse de los padres. Se vuelven más secretivos y probablemente más pudorosos. En general funciona igual con niños y niñas, pero está muy aparejado con la cultura, la religión y los estilos de vida. Generalmente en nuestras culturas latina y religiosas, las niñas mostrarán más pudor. Por otro lado, la maduración mental y emocional de ellas va por delante de los varones y eso también influirá. 

También es importante aprender a convivir con la desnudez, especialmente cuando tienen que compartir el vestuario en un club o algún gimnasio con otras personas, incluso muchas veces desconocidas. Ellos buscarán más o menor intimidad y se supone que los demás deben respetar. Por eso es tan importante hablarles de su cuerpo, su sexualidad, sus derechos, para que así aprendan a decir NO cuando no desean ser molestados. 

Ese diálogo permitirá, además, elevar la autoestima y fomentar la comunicación con los padres para externar cualquier tipo de problemas que pudiesen aparecer. 

En ese sentido, se debe tratar por igual a un adolescente más allá de su género, algo que no siempre vemos en hermanos de diferente sexo. Es importante enfatizar que gran parte de los problemas se dan porque hacemos mucha diferenciación en la forma de educar, hablar, actuar dependiendo del sexo, cuando lo ideal es que vayan compartiendo la misma educación y los mismos valores.

Acerca de la Dra. Mendoza Burgos
Consultas on line

Titulaciones en Psiquiatría General y Psicología Médica, Psiquiatría infantojuvenil, y Terapia de familia, obtenidas en la Universidad Complutense de Madrid, España.

Mi actividad profesional, desde 1,993, en El Salvador, se ha enfocado en dos direcciones fundamentales: una es el ejercicio de la profesión en mi clínica privada; y la segunda es la colaboración con los diferentes medios de comunicación nacionales, y en ocasiones también internacionales, con objeto de extender la conciencia de la necesidad de salud mental, y de apartarla de su tradicional estigma.

Fui la primera Psiquiatra infanto-juvenil y Terapeuta familiar acreditada en ejercer dichas especialidades en El Salvador.

Ocasionalmente he colaborado también con otras instituciones en sus programas, entre ellas, Ayúdame a Vivir, Ministerio de Educación, Hospital Benjamín Bloom, o Universidad de El Salvador. He sido también acreditada por la embajada de U.S.A. en El Salvador para la atención a su personal. Todo ello me hizo acreedora en 2007, de un Diploma de reconocimiento especial otorgado por la Honorable Asamblea Legislativa de El Salvador, por la labor realizada en el campo de la salud mental. Desde 2008 resido en Florida, Estados Unidos, donde compatibilizo mi actividad profesional con otras actividades.

La tecnología actual me ha permitido establecer métodos como video conferencia y teleconferencia, doy consulta a distancia a pacientes en diferentes partes del mundo, lo cual brinda la comodidad para mantener su terapia regularmente aunque esté de viaje. De igual manera permite a aquellos pacientes que viven en ciudades donde los servicios de terapeuta son demasiado altos acceder a ellos. Todo dentro de un ambiente de absoluta privacidad.

Trato de orientar cada vez más mi profesión hacia la prevención, y dentro de ello, a la asesoría sobre relaciones familiares y dirección y educación de los hijos, porque después de tantos años de experiencia profesional estoy cada vez más convencida de que el desenvolvimiento que cada persona tiene a lo largo de su vida está muy fuertemente condicionado por la educación que recibió y el ambiente que vivió en su familia de origen, desde que nació, hasta que se hizo adulto o se independizó, e incluso después.

Estoy absolutamente convencida del rol fundamental que juega la familia en lo que cada persona es o va a ser en el futuro.

sábado, 22 de diciembre de 2018

SALUD MENTAL LA MEJOR HERENCIA FAMILIAR: LA NAVIDAD DE SULTAN ( El perro de casi todos)


Por Dra. Margarita Mendoza Burgos
Hola, soy Sultán, un perro común y corriente que no pretende presumir de su raza. De lo que sí me siento orgulloso es de mis amos, con quienes tengo una excelente relación. Pocas verdades hay en la vida más ciertas que aquella que dice que el hombre -o en este caso la mujer y los niños- son el mejor amigo del perro. Aunque realmente es al revés, yo soy el mejor amigo de ellos 

Por eso yo soy el perro más feliz del mundo: solo necesito abrazar o lamer a mis seres queridos para lograr esa sensación. 

Deseo contarles que también he tenido una familia canina...Desgraciadamente mi pareja murió, pues habían dejado que se embarazara muchas veces . Yo afortunadamente solo salgo a la calle con mis amos, pues cuando una perrita anda en celo... Me vuelvo un " perro" y no paro hasta que se embarazan...Les recomiendo a los humanos, que por favor esterilicen a sus animalitos, pues así no habrá muchos huerfanitos en las calles...... Todos merecemos un hogar.... Y me da mucha tristeza ver a perros callejeros, los cuales suelen ser maltratados , también traten de adoptar y de cooperar con los albergues y personas de buen corazón que desean ayudarnos. 

Los animales tenemos muchos sentimientos, y hay personas que no llegan a comprenderlos, pues no nos comunicamos hablando, pero aquellos que han tratado con nosotros saben todo lo que podemos amar, sufrir y hasta llorar en silencio… Somos muy fieles y amamos mucho a los seres humanos....Mi ama dice que somos ángeles que Dios manda a la tierra . 

Perdonen si ahora que llega Navidad me pongo algo sentimental con miedo y un poco de mal humor. Todos los años me sucede lo mismo. Es que si mis dueños están mal, yo no puedo estar bien. La veo correr agitada, levantarse sin deseos… También, la vi bajo un intenso stress confeccionando listas y listas de regalos, organizar comidas y preocuparse por cómo arreglar la casa para la llegada de los invitados, cuya lista aún no terminó de decidir... 

¿Por qué vive así? Esa fue mi primera pregunta. No lo entiendo. Si todos dicen que esta es la época más linda del año, ¿cómo se explica tanta angustia y tanta tensión de parte de la gente? Tampoco entiendo por qué tienen que asociar la Navidad a lo estruendoso. Eso es lo que más sufro, sobre todo cuando empieza el bombardeo de cohetes y pólvora que me dejan aturdido. 

Yo sé que los humanos se sienten más alegres si hacen un escándalo de su alegría y si esta es visible a todos. Normalmente gritan de entusiasmo, beben hasta emborracharse y explotan cohetes para demostrar con ruido su felicidad. A mí, como a todos mis colegas perros, dichas explosiones me hacen sufrir mucho. Para empezar, me dan miedo. Me molesta los oídos y el olor a pólvora quemada, además intuyo el peligro que eso genera. No es más feliz ni mejor aquella familia que revienta más pólvora. 

En tiempos como este, donde prima el consumismo extremo, no hay nada como una caricia o una demostración de afecto. Siento que mis amos solo están tranquilos los pocos minutos al día en los cuales aprovecho para descansar en sus regazos… 

Ese momento es de felicidad plena, tanto para mí como para ellos. 

Muchos asocian la Navidad al poder de gastar y gastar en regalos, a competir por tener la mejor iluminación, a organizar las mejores fiestas e ir a los mejores lugares… En fin, al consumismo en su máxima potencia. Se olvidan de que esta es una festividad religiosa, de practicar la caridad y de agradecer por todo lo que tenemos. Yo, en cambio, soy feliz con mi amo cerca, acariciándome y dándome la seguridad de ser amado.... Solo eso me importa. 

No es que falten mensajes positivos en la Navidad, porque los hay a montones. Lo que nos hace falta es vivirlos y dejar de lado la superficialidad. 

De parte mía y de mi familia les deseo que pasen bonitas celebraciones y abracen mucho a sus seres queridos. Nosotros vivimos menos que los humanos, tal vez por eso no desperdiciamos ni un minuto, para hacerles sentir lo mucho que significan para nosotros.  

Feliz Navidad , queridos amigos. 

Sultán
Acerca de la Dra. Mendoza Burgos
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Titulaciones en Psiquiatría General y Psicología Médica, Psiquiatría infantojuvenil, y Terapia de familia, obtenidas en la Universidad Complutense de Madrid, España.

Mi actividad profesional, desde 1,993, en El Salvador, se ha enfocado en dos direcciones fundamentales: una es el ejercicio de la profesión en mi clínica privada; y la segunda es la colaboración con los diferentes medios de comunicación nacionales, y en ocasiones también internacionales, con objeto de extender la conciencia de la necesidad de salud mental, y de apartarla de su tradicional estigma.

Fui la primera Psiquiatra infanto-juvenil y Terapeuta familiar acreditada en ejercer dichas especialidades en El Salvador.

Ocasionalmente he colaborado también con otras instituciones en sus programas, entre ellas, Ayúdame a Vivir, Ministerio de Educación, Hospital Benjamín Bloom, o Universidad de El Salvador. He sido también acreditada por la embajada de U.S.A. en El Salvador para la atención a su personal. Todo ello me hizo acreedora en 2007, de un Diploma de reconocimiento especial otorgado por la Honorable Asamblea Legislativa de El Salvador, por la labor realizada en el campo de la salud mental. Desde 2008 resido en Florida, Estados Unidos, donde compatibilizo mi actividad profesional con otras actividades.

La tecnología actual me ha permitido establecer métodos como video conferencia y teleconferencia, doy consulta a distancia a pacientes en diferentes partes del mundo, lo cual brinda la comodidad para mantener su terapia regularmente aunque esté de viaje. De igual manera permite a aquellos pacientes que viven en ciudades donde los servicios de terapeuta son demasiado altos acceder a ellos. Todo dentro de un ambiente de absoluta privacidad.

Trato de orientar cada vez más mi profesión hacia la prevención, y dentro de ello, a la asesoría sobre relaciones familiares y dirección y educación de los hijos, porque después de tantos años de experiencia profesional estoy cada vez más convencida de que el desenvolvimiento que cada persona tiene a lo largo de su vida está muy fuertemente condicionado por la educación que recibió y el ambiente que vivió en su familia de origen, desde que nació, hasta que se hizo adulto o se independizó, e incluso después.

Estoy absolutamente convencida del rol fundamental que juega la familia en lo que cada persona es o va a ser en el futuro.

domingo, 9 de diciembre de 2018

SALUD MENTAL LA MEJOR HERENCIA FAMILIAR: LA TEMIDA MUERTE


Por Dra. Margarita Mendoza Burgos

Siempre vemos a la muerte con recelo y temor. Es inevitable. Muchos, incluso, desarrollan un miedo excesivo, algo que la ciencia llama tanatofobia -en honor al dios griego Tanatos, al que se le encomendaba la tarea de quitar la vida a los hombres- y que puede resultar perturbador. 

Pero es lógico que tengamos temor, es el miedo a lo desconocido, a dejar de existir de la forma que conocemos. 

“Lejos de considerar la muerte como algo natural ligado a nuestra condición de seres orgánicos, morir es una tragedia para la existencia humana”. La reflexión surge de los psicólogos españoles Francisco Cruz Quintana y María Paz García Caro, autores del libro SOS, déjame morir: ayudando a aceptar la muerte. “En una sociedad desarrollada donde hay objetos y soluciones para casi todo lo imaginable resulta incomprensible que aún no se haya encontrado remedio a la muerte, a lo que nos hace morir”, concluyen. 

Y es que la muerte sigue siendo un misterio. De alguna forma las religiones desean dar soporte al miedo y a la incertidumbre sobre lo que habrá más allá de la muerte. Pero la verdad es que no estamos preparados para afrontar ese momento: ni el nuestro ni el de nuestros seres queridos. Las religiones viven centradas en eso, nos ayudan a encontrar una explicación a la misma y, sobre todo, a tener esperanza ante ella. 

Sin embargo, en el hogar esos temas son tabú, porque se siente que es como llamar a la muerte solo por el hecho de hablar de ella. Lo mismo por preparar testamentos, por pedir no tener asistencia extra para vivir o para hablar de cremación o entierro cuando llegue la hora. 

Aquellos con profunda fe aceptan la muerte como algo natural, lo consideran parte de un proceso y no el final de una vida. Otros, como en el caso de los enfermos terminales o gente que sufre mucho, ven a la muerte como una solución. Actualmente, con el tema de la eutanasia -también llamado suicidio asistido-, una persona enferma puede decidir en qué momento quiere morir. Claro, esto en caso de que viva en uno de los países donde esto se considere legal, como Bélgica, Holanda o Japón. Hace poco, un señor de 104 años pidió morir y lo hizo cantando y alegre. 

Una interrogante interesante es ¿cómo reaccionaría un ser humano si supiera la fecha exacta de su muerte? Imagino dos tipos de casos. Para algunos creo que podría ser más atemorizante: entrarían en pánico y hasta morirían antes por el susto, ya sea de un ataque al corazón u otra enfermedad. Otros, en cambio, planificarían mejor sus días, disfrutarían más su tiempo y valorarían todo lo que han logrado. 

A la muerte hay que darle la importancia que se merece. Ni más ni menos. Pero no nos debe condicionar nuestras vidas. Hay algunos hechos que podrían ayudar a desdramatizar el tema. Por ejemplo, vivir una vida rica o productiva, sin asignaturas pendientes. Por otro, tener fe en la vida eterna al final de los tiempos, una creencia religiosa que genera paz y ayuda a aceptar la muerte. También es importante planificar temas como el testamento, la cremación o el entierro y otras voluntades. Pero, por sobre todas las cosas, empezar a hablar con total naturalidad de la misma. Al fin y al cabo, a todos nos llegará la hora.
Acerca de la Dra. Mendoza Burgos
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Titulaciones en Psiquiatría General y Psicología Médica, Psiquiatría infantojuvenil, y Terapia de familia, obtenidas en la Universidad Complutense de Madrid, España.

Mi actividad profesional, desde 1,993, en El Salvador, se ha enfocado en dos direcciones fundamentales: una es el ejercicio de la profesión en mi clínica privada; y la segunda es la colaboración con los diferentes medios de comunicación nacionales, y en ocasiones también internacionales, con objeto de extender la conciencia de la necesidad de salud mental, y de apartarla de su tradicional estigma.

Fui la primera Psiquiatra infanto-juvenil y Terapeuta familiar acreditada en ejercer dichas especialidades en El Salvador.

Ocasionalmente he colaborado también con otras instituciones en sus programas, entre ellas, Ayúdame a Vivir, Ministerio de Educación, Hospital Benjamín Bloom, o Universidad de El Salvador. He sido también acreditada por la embajada de U.S.A. en El Salvador para la atención a su personal. Todo ello me hizo acreedora en 2007, de un Diploma de reconocimiento especial otorgado por la Honorable Asamblea Legislativa de El Salvador, por la labor realizada en el campo de la salud mental. Desde 2008 resido en Florida, Estados Unidos, donde compatibilizo mi actividad profesional con otras actividades. 

La tecnología actual me ha permitido establecer métodos como video conferencia y teleconferencia, doy consulta a distancia a pacientes en diferentes partes del mundo, lo cual brinda la comodidad para mantener su terapia regularmente aunque esté de viaje. De igual manera permite a aquellos pacientes que viven en ciudades donde los servicios de terapeuta son demasiado altos acceder a ellos. Todo dentro de un ambiente de absoluta privacidad.

Trato de orientar cada vez más mi profesión hacia la prevención, y dentro de ello, a la asesoría sobre relaciones familiares y dirección y educación de los hijos, porque después de tantos años de experiencia profesional estoy cada vez más convencida de que el desenvolvimiento que cada persona tiene a lo largo de su vida está muy fuertemente condicionado por la educación que recibió y el ambiente que vivió en su familia de origen, desde que nació, hasta que se hizo adulto o se independizó, e incluso después. 

Estoy absolutamente convencida del rol fundamental que juega la familia en lo que cada persona es o va a ser en el futuro.