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domingo, 3 de noviembre de 2013

Muere el novelista francés con mayores ventas y menos reconocimiento literario

Tomado de RFI

Muere Gérard de Villiers, ‘el novelista de espionaje que sabía demasiado’

Por Alejo Schapire

Las doscientas novelas de su saga “SAS”, que mezclan sexo, geopolítica y violencia, fueron vendidas en millones de ejemplares en todo el planeta. Sus viajes y sus amistades del mundo del espionaje y la diplomacia le permitían ofrecer relatos bien documentados y en muchos casos que anticiparon sucesos históricos. Las portadas de sus obras, donde posaban mujeres con pocas ropas y muchas armas, pueden encontrarse en cualquier estación de tren de Francia.
El novelista Gérard de Villiers falleció este jueves en París a los 83 años de un cáncer de páncreas, “él tipo de muerte que él no hubiese querido”, precisó Christine de Villiers, la última esposa de un hombre que contrajo seis veces matrimonio.

De Villiers acaba de publicar la 200° novela de su saga de espionaje SAS, y probablemente habría preferido un final más exótico, por ejemplo en Afganistán, a donde había viajado con un deambulador a principios de año para juntar material para dos de sus últimas obras. Sin embargo, la muerte lo sorprendió en su inmenso, pero triste y gris, apartamento de la Avenue Foche, a dos pasos del Arco del Triunfo.

En cuanto a su legado literario, jamás será considerado uno de los grandes escritores de Francia, por más de que haya vendido más de 100.000 millones de ejemplares en todo el mundo y sus libros puedan conseguirse en cualquier estación de tren o supermercado de Francia, lejos de la nobleza literaria. Lo suyo era el “pulp fiction thrillers”, como lo definió este año el New York Times, que vio este año en él “al autor de novelas de espionaje que sabía demasiado”.

Su saga comenzó tras la muerte del padre de James Bond, Ian Fleming. En 1965, De Villiers crea a Malko Linge, alias SAS (Su Altesa Serenísima), un austríaco - “a un francés nadie lo hubiese tomado en serio”, le dijo recientemente a Le Monde- que trabaja para la CIA. Héroe de la Guerra Fría primero, y luego de la lucha contra el terrorismo islámico, Malko es un duro de la vieja escuela que conquista siempre a una mujer a la que somete a una rutina sexual bastante repetitiva en escenarios exóticos.

Lejos de la sofisticación de James Bond y de la sutiliza de un John Le Carré, SAS carece de estas pretensiones literarias. Las portadas anuncian todo: invariablemente una mujer con poca ropa y muchas armas, de preferencia kalashnikovs, como las que ornaban el escritorio del autor.

Sin embargo, todos parecen reconocer hoy que era una de las plumas mejor documentadas sobre el mundo del espionaje, gracias a sus contactos en el submundo de las operaciones clandestinas y del terciopelo de la diplomacia, que luego podían reconocerse en las novelas bajo otros nombres. Sus investigaciones lo llevaron a 130 países y en varias ocasiones supo anticipar hechos políticos desde la ficción, como el asesinato del presidente Anuar Al Sadat, un año antes de que se produjera efectivamente el atentado.

Pese al éxito popular, De Villiers se murió sin el reconocimiento literario parisino ni de Hollywood, al que aspiró a conquistar para ver adaptadas sus películas en superproducciones. Es necesario añadir que su perfil no pegaba con el arquetipo del escritor francés contemporáneo. Se autodefinía como “claramente de derecha, liberal, anticomunista, antiislamista, anticomunitarista, antisocialista”… antisemita y racista, agregaban sus detractores. Algo que confirmaba en alguna medida uno de sus mejores amigos, el escritor francés Claude Lanzmann, autor del documental sobre el holocausto “Shoah”. 

miércoles, 30 de octubre de 2013

Hollande rompe récord de impopularidad de presidentes franceses

 Por RFI
 Francia nunca tuvo un presidente tan impopular

François Hollande acaba de romper el récord de desamor de los franceses, con apenas el 26% de opiniones favorables, algo nunca visto para un presidente de la República. Los titubeos de su gestión en temas como la expulsión de una estudiante gitana y el alza de los impuestos son algunas de las claves de la impopularidad del mandatario, que se acompañan con un ascenso de la imagen del partido ultraderechista Front National.

Sólo el 26% de los franceses tiene una opinión favorable de François Hollande, lo que lo convierte en el presidente más impopular de la historia de la República, de acuerdo con una encuesta de BVA publicada este lunes por L’Express, France Inter y la prensa regional.

“En este mes de octubre de 2013, François Hollande cae 6 puntos, hasta el 26% de opiniones favorables (frente a un 73% de opiniones negativas), hundiendo el mítico piso del 30% y pulverizando al mismo tiempo el récord histórico de impopularidad para un presidente de la República”, sintetiza la encuestadora BVA.

De acuerdo con el instituto de sondeos, la causa principal del fenómeno es el “caso Leonarda”, nombre de la estudiante kosovar de origen gitano expulsada de Francia, y la propuesta presidencial de la que la mujer de 15 años pudiese volver al país pero sin su familia, también deportada.

La crisis del empleo o el aumento de los impuestos tampoco ayudan. Por el contrario, esta coyuntura es propicia para la extrema derecha. El Front National (FN) de Marine Le Pen experimenta un crecimiento de su imagen, juzgada positiva por el 28% de los franceses, es decir el mismo nivel de simpatía que recaba el Partido Socialista en el poder. La tendencia es todavía más clara en cuanto a la popularidad de la jefa del FN: Marine Le Pen obtiene en octubre un 30% de opiniones favorables, lo que supone un aumento del 4%. 

jueves, 29 de agosto de 2013

Francia a favor de intervenir militarmente en Siria

Tomado de RFI
Militares franceses que participaron en la operación en Mali. 

Los franceses, favorables a una intervención en Siria… si otros se encargan de ella

El 55% de la opinión francesa ve con buenos ojos una intervención militar de las Naciones Unidas en el conflicto sirio, pero sólo el 41% la apoyaría si París debe implicarse, de acuerdo con un sondeo publicado este jueves. Los simpatizantes de izquierda son quienes más apoyan la opción armada tras la difusión de imágenes de civiles presuntamente gaseados por el régimen; la extrema derecha es el sector más refractario.
Mientras se perfila una intervención militar en Siria con Estados Unidos, Reino Unido y Francia a la cabeza, la opinión pública francesa se encuentra dividida. El 55% de las personas consultadas se dice a favor de implicar a sus soldados en una operación armada, después de que el régimen de Bashar al Asad fuera acusado de utilizar su arsenal químico contra la población civil de su país. Sin embargo, el apoyo a la iniciativa pasa a ser sólo del 45% si Francia debe intervenir, de acuerdo con la encuesta del instituto Ipsos, realizada entre el 26 y el 28 de agosto y publicada este jueves por Le Figaro.
“Los franceses tienen la sensación de que ya dieron mucho, en Siria y en otros frentes, como en Mali”, explica Jérôme Fourquet, director del departamento de opinión pública de Ifop, en Le Figaro.
Los franceses no suelen mostrarse muy belicosos. La intervención en Afganistán contó con la aprobación del 55%, en Libia era apenas del 36% de la población. En Mali, en cambio, el entusiasmo por la llamada Operación Serval alcanzó el 60%.
El apoyo a una intervención en Siria, ya sea a través de la ONU o de Francia, depende de cómo se definen políticamente los encuestados. El 70% de los simpatizantes de izquierda quiere ver a las Naciones Unidas intervenir tras la matanza de agosto, aunque sólo el 54% se dice dispuesta a enviar a sus soldados.
La derecha se dice favorable en un 55% si es la ONU, pero apenas el 40% quiere ver a Francia mezclada en el asunto. La extrema derecha, tradicionalmente aislacionista, se opone en un 68% a represalias internacionales y hasta el 81% expresa su rechazo si es llevada a cabo por París.



sábado, 3 de agosto de 2013

Fabricantes franceses de colas en intensa guerra de marketing. Reclaman origen galo de la Coca Cola

Tomado de The Wall treet Journal 


  

La guerra de las colas 'parisiennes'


  Por Sam Schechner

PARÍS—Una nueva bebida conocida como Paris Cola se está abriendo espacio en las tiendas de la capital francesa en una batalla por socavar el dominio de Coca-Cola  . Pero la bebida local enfrenta un problema doméstico: otra marca llamada Parisgo Cola también compitiendo en el mercado.
Una nueva guerra de las colas se desata por estos meses en París entre dos productos con casi el mismo nombre. Ambas tienen tapa roja y un logotipo que resalta la Torre Eiffel. Las dos marcas han tratado de convencer a los comercios pequeños y a los grandes supermercados de que vendan su producto. Y las dos argumentan que representan mejor el espíritu de París.

"Tenemos un producto real terroir", dijo Rodolphe Grosset, de Paris Cola, usando la palabra en francés para describir un producto local de la tierra. Para su bebida, la empresa de Grosset, François de Fonbelle, buscó azúcar de remolacha cultivada en la región de París.
La rival Parisgo Cola dice que su meta es mostrar a los parisinos que han sido lobotomizados por Coca-Cola, y que los sabores de la gaseosa deberían ser tan variados como los vinos franceses. Su fundador, Bruno Vaussenat, un director independiente de cine y publicista, dice que su bebida apela a los gustos parisinos con "burbujas menos agresivas" y un sello negro y rojo con una tipografía sans-serif.
"Paris Cola es para los turistas, y eso está bien. Es una visión extranjera de la París de los años 50, como una película de Fred Astaire", dijo Vaussenat del producto rival. "Yo no estoy haciendo una cola para los turistas. La mía es para parisinos de verdad".
Grosset respondió: "Paris Cola no es concebida para turistas. Es concebida para parisinos. Y si seduce también a los turistas, mucho mejor".

La guerra de las colas en París es producto de un sector burbujeante de la economía francesa: una ola de productores de cola que imprimen un enfoque local a la bebida global, aprovechando el orgullo nacional en especialidades regionales como el queso Roquefort y el vino de Borgoña.
En la última década, más de 30 colas regionales han surgido a lo largo de Francia, incluyendo Breizh Cola en Bretaña, Corsica Cola de la costa Mediterránea, Ehka Kola en el País Vasco y Elsass-Cola en Alsacia, al oriente.
"El efecto 'terroir' es muy fuerte en Francia", dijo Louis-Henri Chouane, quien fundó la Asociación Francesa de Colas Regionales y cuya empresa fabrica tres colas regionales en el occidente de Francia. "Es un orgullo que está anclado en la mentalidad francesa".
Algunos productores de colas francesas dicen que sus bebidas tienen raíces en la tierra gala. Señalan a Angelo Mariani, original de Córcega, quien en el siglo XIX añadió vino de Burdeos a las hojas de coca para crear una bebida llamada Vin Mariani. En anuncios de publicidad, Mariani proclamaba que la bebida era un "tónico estimulante" aprobado por el papa Leo XIII.
Mariani se volvió popular en EE.UU. donde el farmacista John Pemberton la usó como inspiración para su propio French Wine Coca, según Mark Pendergrast, autor del libro Dios, patria y Coca-Cola. En 1886, Pemberton introdujo la versión no alcohólica de Coca-Cola. "Vin Mariani es el abuelo de Coca-Cola", dice Pendergrast.
A pesar de reacciones en contra en Francia, como un esfuerzo en 1950 de declararla ilegal, Coca-Cola es muy popular en el país. La marca domina más de 80% del mercado de las colas en minoristas masivos que mueve US$1.900 millones, según Nielsen. En contraste, las colas regionales tienen menos de 0,9% del mercado minorista masivo.
Los productores de colas regionales sostienen que sus totales son más altos cuando se contabilizan las bebidas vendidas en bares, restaurantes y hoteles. Pero incluso la líder Breizh Cola, cuyo nombre es una traducción de Bretaña en el lenguaje local bretón, argumenta que domina 15% del mercado de su región.
Coca-Cola ha respondido resaltando sus propios lazos franceses. La compañía dice que la versión francesa solo usa azúcar local, en su mayoría de remolacha. Los anuncios de la bebida global hacen alarde de sus plantas locales, dos de las cuales están a 30 kilómetros de París, mucho más cerca que las usadas por Paris Cola o Parisgo Cola.
"El problema con algunas de estas colas regionales es que no hacen mucho más allá del sello. Hay que mirar lo que hay detrás", dijo Manuel Berquet-Clignet, director de marketing para Coca-Cola Francia.
La guerra de las colas casi llega a los tribunales. En mayo, Parisgo Cola demandó a Paris Cola por tener una "marca registrada inválida" y por "competencia desleal", dijeron las dos partes. Parisgo retiró la demanda a comienzos de julio como parte de un acuerdo confidencial de "coexistencia de marca" que las dos firmaron.
Ahora, lo que se ha intensificado es la batalla comercial. Las dos marcas han desplegado promociones en las tiendas y apuntalado su marketing. Ninguna de las dos suministró cifras de ventas, pero dicen que las tendencias son positivas.
—Quentin Marion contribuyó a este artículo. 

martes, 14 de mayo de 2013

Carlos “el chacal”, huérfano de la ayuda de Chávez, busca reducir pena por terrorismo


Tomado de RFI 
El venezolano Ilich Ramírez Sánchez, alias "Carlos" o "el Chacal", compareció de nuevo este lunes ante un tribunal de París por cuatro atentados cometidos en Francia en los años 1980.
AFP PHOTO /BENOIT PEYRUCQ

‘El Chacal’ comparece en apelación por atentados cometidos en los años 1980 

Ilich Ramírez Sánchez, alias “Carlos, el Chacal”, quien fue considerado durante las décadas de los 70 y los 80 como el terrorista internacional más temido del mundo, comparece en juicio de apelación desde este lunes en el Palacio de Justicia de París. El 15 de noviembre de 2011, “Carlos” fue condenado por el juez Olivier Laurent a cadena perpetua por cuatro atentados terroristas que dejaron en Francia 11 muertos y unos 150 heridos. Esta sentencia, de hacerse efectiva, le impondría al imputado al menos 18 años de condena obligatoria suplementarios, sin posibilidad de obtener rebajas de pena.
Por Camilo Moreno

Cerca de las 9 de la mañana, “Carlos” tomó por sorpresa a todos los asistentes al empezar la audiencia sin sus abogados defensores, a los que el acusado pidió explícitamente no asistir. “He prohibido a mis abogados que vengan a defenderme”, declaró “Carlos”. Paso seguido el inculpado pidió que le fueran designados abogados de oficio que lo defendieran para poder seguir con el juicio. Si los abogados defensores se rehúsan a defenderlo, el juicio sería aplazado hasta próximo aviso. “No tengo ninguna intención de sabotear el proceso”, añadió Carlos, haciendo gala de su histrionismo habitual. El juicio, sin embargo, tuvo que ser suspendido durante algunas horas a la espera de una decisión sobre su posible aplazamiento.

Finalmente, el tribunal decidió empezar con el juicio en las horas de la tarde. A “Carlos” se le asignaron unos abogados de oficio, quienes serán los encargados de defenderlo en un juicio previsto hasta el próximo 26 de junio.

La semana pasada, la abogada y actual esposa de Ilich Ramírez Sánchez, Isabelle-Coutant-Peyre, fue a Caracas con la intención de buscar la ayuda del gobierno venezolano. Coutant-Peyre declaró que la embajada venezolana en Francia no estaba haciendo lo suficiente para defender a un ciudadano de su país. Desafortunadamente para los intereses del acusado, esta tentativa no parece haber cumplido sus frutos. Durante la audiencia el mismo Carlos denunció como “sabotaje” la negativa de las autoridades de Venezuela de asumir los gastos del juicio para su defensa.

El actual gobierno de Nicolás Maduro parece distanciarse del apoyo que había recibido “Carlos” de parte de Hugo Chávez. En el 2011, así como en otras ocasiones, el entonces presidente de Venezuela había afirmado que Ilich Ramírez Sánchez era un “digno heredero” de los revolucionarios que luchan por los pueblos.

“Carlos” permanece en la prisión de máxima seguridad de Clairvaux (cerca a la frontera con Ginebra, Suiza) desde que fue capturado en Sudán en 1994. En ese entonces, fue detenido por sus escoltas personales, quienes lo apresaron y lo trasladaron a un aeropuerto privado. Allí, miembros de la policía Francesa lo embarcaron directamente en un vuelo a Francia, con el consentimiento del gobierno sudanés. En el 2011 La defensa había alegado la irregularidad de esta captura, que había violado el derecho internacional según el cuál Francia tendría que haber pedido la extradición de “Carlos” siguiendo los canales jurídicos y diplomáticos tradicionales. Por esta razón, según argumentaban los defensores del inculpado, el dictamen condenatorio carecía de cualquier validez.

Historia de un hombre tristemente célebre

Ilich Ramírez Sánchez nació en la ciudad de Michelena, en Venezuela, en el seno de una familia rica de izquierda. El joven siguió estudios en Inglaterra y posteriormente en Rusia gracias a una beca del partido Comunista de Venezuela. A mediados de los años 70 aprendió en un campamento del Frente Popular para la liberación de Palestina (FPLP) en Jordania las tácticas de guerrilla urbana por las que se haría tristemente célebre.

“Carlos”, quien se convirtió al islam, y que se encuentra casado con su actual esposa por esta religión, declaró en el 2011 que reconocía todos los atentados que lo vinculaban con la causa de la liberación de Palestina, pero desconocía aquellos por los cuales era condenado. Se trata de cuatro bombas colocadas en dos trenes de alta velocidad, en una estación de trenes en Marsella y en una calle de París entre marzo de 1982 y diciembre de 1983. El objetivo de estos atentados era el de forzar al entonces presidente François Mitterrand a liberar a su brazo derecho Bruno Bréguet y a su entonces compañera sentimental, Magdalena Kopp, quienes habían sido capturados por las autoridades francesas.

“Carlos, el Chacal” ya fue condenado en Francia a una primera cadena perpetua en 1997 por el asesinato de tres hombres, de los cuales dos eran policías.

miércoles, 27 de febrero de 2013

Muere autor de panfleto que generó sendos movimientos sociales en Europa


Tomado de El País

El joven nonagenario que gritó ‘¡Indignaos!’

Desaparece el referente moral del último gran movimiento de descontento social en Europa


Por Miguel Mora
Stéphane Hessel, autor del panfleto de 32 páginas ¡Indignaos!, que catalizó el movimiento ciudadano de resistencia pacífica en Grecia y España, falleció esta madrugada en París a los 95 años, anunció su esposa, Christiane Chabry. Antiguo diplomático, miembro destacado de la Resistencia contra los nazis, europeísta y humanista convencido e infatigable defensor de los Derechos Humanos, Hessel atravesó todo el siglo XX enfundado en la bandera de la libertad y se convirtió en una celebridad tardía al vender más de cuatro millones de ejemplares de¡Indignaos!, que se publicó en casi 100 países tras ser editada en Francia en octubre de 2010.
Nacido en Berlín en 1917, año de la revolución rusa, le gustaba decir, Hessel procedía de una familia alemana judía convertida al luteranismo que se instaló en París en 1925. Su padre, el escritor Franz Hessel, y su madre, la pintora sin vocación Helen Grund, vivieron un trío amoroso con el también escritor francés Henri-Pierre Roché, que acabaría dando origen a una de las películas más célebres del cine francés, Jules et Jim (1962), dirigida por François Truffaut e interpretada por Jeanne Moreau, Oskar Werner y Henri Serre.
Roché contó la historia real en una novela, y Truffaut le dio un giro al terminar la película con un suicidio-homicidio, aunque en la vida el trío acabó en una simple separación. Hessel contaba que su padre "se apartó voluntariamente" ante la pasión vivida por "los dos seres que más amaba en el mundo". Y cuando recordaba su propia actitud ante aquel trío tan alejado de la convención, solía decir que decidió que lo mejor que podía hacer era ser "el preferido de cada uno de los tres".
Su madre —una mujer libre y dominadora que intentó hacer de su vida una obra de arte—, su padre —que tradujo a Proust al alemán con el filósofo Walter Benjamin— y Roché trasmitieron al pequeño su amor por la cultura, la poesía y la literatura. En 2006, Hessel publicó O ma mémoire: la poésie, ma nécessité. Se dice que nada le gustaba más que recitar a Baudelaire y a Verlaine, a Goethe o a Melville, y que presumía de conocer de memoria más de cien poemas.
Hessel se hizo ciudadano francés en 1937, y se convertiría en un activista precoz siguiendo los cursos de Maurice Merleau-Ponty y leyendo a Sartre. En 1941 se enroló en la Resistencia como miembro de los servicios secretos de la Francia Libre (BCRA, por sus siglas en francés), que operaba desde Londres bajo el mando de Charles de Gaulle.
Según contó en Le Monde su amigo Jean-Louis Crémieux-Brilhac, de 96 años y desde ayer único superviviente del BCRA junto a Daniel Cordier, de 92, Hessel era entonces un "joven brillante, que hablaba con fluidez alemán, inglés y francés", y que formaba con su mujer, Vitia, "una pareja encantadora, muy integrada en la vida social de la Francia libre de Londres, llena de esperanza y de coraje".
En marzo de 1944, Hessel se apuntó como voluntario para una misión en Francia, pero fue arrestado y torturado por la Gestapo. Deportado en septiembre al campo de concentración de Buchenwald, fue condenado a muerte, pero tras trabajar descargando y desnudando cadáveres, logró cambiar su identidad con la de un preso francés recién fallecido de tifus y se libró de la horca. Luego se evadió, fue otra vez capturado, y finalmente saltó del tren que le llevaba a Bergen-Belsen y se sumó a las tropas estadounidenses que entraron en París en mayo de 1945.
Después de la guerra, Daniel Cordier y Stéphane Hessel escribieron elLibro Blanco de la BCRA, y Hessel inició su carrera diplomática. Se fue a Nueva York, donde coordinó la redacción de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, aprobada en 1948; medió en numerosos conflictos nacionales y extranjeros, y se convirtió en un referente moral del compromiso humanista y la justicia social.
Nombrado embajador de Francia por François Mitterrand en 1981 y galardonado con la Legión de Honor por Jacques Chirac en 2006, Hessel no se dejó atrapar por los honores, y mostró siempre una adolescente capacidad de indignación y denuncia. De una batalla pasaba a otra: los derechos de los inmigrantes sin papeles, el ecologismo, la pobreza, la causa palestina (que le valió la cólera de las asociaciones judías)... En 2008, indignado por la política de inmigración que impuso el ministro Brice Hortefeux, Hessel afirmó: "Desde hace dos años, asistimos a un espectáculo desolador y deshonroso, la caza de inmigrantes que viven en Francia desde hace años, y la de sus hijos que dan clase en nuestros colegios".
Hombre de izquierdas y europeísta de alma, en política se limitó a mirar desde fuera: fue seguidor del socialista Pierre Mendès-France, apoyó a Michel Rocard en 1985, se presentó como independiente no elegible en las listas de Europa Ecología en 2010 y sostuvo a François Hollande en la campaña electoral de 2012. Durante el último congreso socialista, Hessel presentó una moción, titulada Más lejos, más deprisa, que animaba a Hollande a acelerar y profundizar en el cambio político.
Pasada la frontera de los noventa, siguió dando ejemplo y militando por la libertad. El impresionante éxito deIndignez-vous! (¡Indignaos!) le llenó de alegría y le llevó a ser uno de los referentes de los movimientos de jóvenes airados en España o Grecia. En una entrevista publicada por EL PAÍS en mayo de 2011 contó que no esperaba que su librito tuviera tal repercusión en el extranjero. "Cuando empezamos con la idea teníamos a Francia en la cabeza. Ocurrió que en pocas semanas se produjeron varios acontecimientos. La popularidad de Sarkozy se fue hundiendo, lo mismo ocurrió en Italia con Berlusconi, e incluso en España con Zapatero, y en Portugal con Sócrates. Antes de que se produjeran las revueltas del norte de África, la idea de que los Gobiernos de varias partes del mundo rozaban comportamientos que provocaban la indignación de la gente era algo que raramente habíamos visto", aseguró.
Con su vitalidad intacta hasta casi el final de sus días, no dejó de viajar, de conceder entrevistas y de dar conferencias. Su espíritu incansable y aventurero, su apertura de mente, su seductora y apasionada inteligencia y su amor a la cultura dieron a Hessel un aura de sabio totémico, aunque él siempre dijo que su tardío éxito entre los jóvenes se explicaba por el momento histórico que vive Europa: "Las sociedades actuales están perdidas, se preguntan qué hacer para encontrarse y buscan un sentido a la aventura humana".
En la hora de su desaparición, que deja a Francia casi sin protagonistas directos de la Resistencia, el presidente de la República, el primer ministro, la oposición, los sindicatos y cientos de ciudadanos y lectores expresaron su admiración por el combatiente de la paz y la libertad, y el PS pidió a Hollande que se le dedique "un gran homenaje nacional".
El Elíseo emitió una nota que subraya que Hessel fue "una gran figura que consagró su vida excepcional a la defensa de la dignidad humana", y destacó que "su capacidad de indignación no tenía más límite que el de su propia vida".

sábado, 23 de febrero de 2013

Amante de DSK lo describe como “cerdo” en su libro convertido en Best Seller


Tomado de RFI


Escándalo por libro de la argentina Marcela Iacub sobre su ex amante, el ‘cerdo’ Strauss-Kahn

Por Ashel López

El libro de la argentina Marcela Iacub sobre su relación con Dominique Strauss-Kahn cuando éste ya había caído en desgracia se ha convertido en un fenómeno literario en Francia. ‘La bella y la bestia’ cautiva por el lenguaje crudo y la descripción de DSK como un ‘cerdo sublime’.


Enamorarse del chivo expiatorio, pero no de cualquiera, sino del más famoso del planeta, del más odiado por las mujeres del mundo entero: Dominique Strauss-Kahn, el ex director del FMI. Amarlo, además, cuando era sospechoso de haber violado a la empleada de un hotel en Nueva York y sin dejar de considerarlo, de manera metafórica, como un “cerdo”.

Hasta aquí, la historia podía ser la aventura de una osada oportunista en busca de una presa. Pero hay un detalle que escapa al estereotipo: la protagonista es una mujer inteligente con talento literario. Es decir, una escritora capaz de convertir una relación cualquiera en un episodio más de la larga historia universal de la bestialidad.

De ahí que hoy podamos hablar de un “fenómeno literario Marcela Iacub” en Francia. Prueba de ello son las portadas que le han dedicado esta semana dos importantes medios franceses. Libération publica este 21 de febrero la foto de la jurista experta en filosofía del derecho bajo el título: “Una relación peligrosa”. El diario comenta: “La escritora Marcela Iacub cuenta sus siete meses de pasión con un ‘cerdo’ escandaloso y célebre”.

En su edición de esta semana, el semanario Nouvel Obs publica extractos del libro que saldrá a la venta el 27 de febrero así como una larga entrevista con la escritora, primera y última vez que evocará de manera explícita, según dijo, su relación con DSK, cuyo nombre no es mencionado ni una sola vez en el libro. 


Iacub, columnista de Libération, demuestra en los fragmentos publicados por el Nouvel Obs su talento literario. “Eras viejo, eras gordo, era pequeño y feo. Eras machista, vulgar insensible y mezquino. Eras egoísta, brutal y no tenías ninguna cultura. Y yo estaba loca por ti”, escribe Iacub. En cuanto a la relación entre los defectos de DSK y los “sentimientos oceánicos” que ella experimentaba por él, la escritora sólo encuentra una explicación: “una curiosa coincidencia”.


Su pluma se muestra implacable cuando evoca las desviaciones de DSK. “Yo estaba segura de que si te pusieran a escoger entre Angelina Jolie y una fea, tú habrías escogido a la fea. Tu deseo de fealdad era para mi una señal de que pertenecías a esta raza ferozmente anti-aristocrática, trágicamente democrática de los cerdos”.

En la entrevista que concedió al Nouvel Obs, Marcela Iacub cuenta que se entrevistó con la esposa de DSK, Anne Sinclair, lo que le permitió entender que tanto ella como él consideran que forman parte de “la casta de los amos del mundo”. Iacub explica que Sinclair le dijo: “No veo ningún problema en dejársela 'chupar' (tener sexo oral) por una empleada del servicio”.

En la entrevista, Iacub comenta: “Estuve a punto de responderle que chupársela a un hombre no es el trabajo de una empleada del servicio como aspirar, que este tipo de cosas hay que pedírselas a una puta, etc. Pero para ella, el mundo se divide entre los amos y los sirvientes, entre los dominantes y los dominados. Esto me asustó. Era como si viviéramos todavía en la época de la monarquía”.

En el testimonio novelado de Iacub, según aclaró ella misma a Nouvel Obs, hay una buena parte de ficción. “El recurso a lo maravilloso, a lo fantástico, me ha permitido contar acontecimientos que habría sido sórdido o mezquino contar tal como ocurrieron. En ocasiones hay que mentir para decir la verdad: la verdad no es la realidad”.

Iacub había defendido a DSK en un libro titulado “¿Una sociedad de violadores?”, en el que criticaba a las feministas francesas en el momento de su arresto en Nueva York. Fue después de la publicación de ese libro que conoció a Strauss Kahn. Desde hace varios años, Iacub, que estudió derecho en Buenos Aires especializándose en derecho laboral, aboga por el derecho a la prostitución.