domingo, 22 de junio de 2014

Gobierno mexicano descarga responsabilidad de crisis migratoria

Tomado de El País
El Gobierno mexicano culpa ahora a EEUU de la crisis migratoria
El secretario de Gobernación insta al Gabinete de Obama a desarrollar una campaña informativa

Por Paula Chouza

“Estados Unidos, con su propuesta migratoria y algunos discursos que se han escuchado, ha hecho creer a los países de Centroamérica, a los papás que están en Estados Unidos, que pueden recibir a sus hijos y que les van a dar ya la posibilidad del registro permanente”, ha asegurado este viernes el segundo del Gobierno mexicano, Miguel Ángel Osorio Chong.
El secretario de Gobernación hizo estas declaraciones en una entrevista radiofónica al finalizar una reunión con el vicepresidente de EE UU, Joseph Biden, los mandatarios de Guatemala y El Salvador, Otto Pérez y Salvador Sánchez, y representantes de Honduras para abordar el drama humanitario de los niños migrantes que llegan solos a Estados Unidos.
En palabras de Osorio Chong, el Gobierno de Obama debe poner en marcha una “campaña de información para los migrantes que están en Estados Unidos” y que estos a su vez pueden “avisar a los familiares de toda Centroamérica de que no hay posibilidad de que los menores sean recibidos al llegar” al país norteamericano. El secretario, quien fue enviado a la reunión en representación del presidente Enrique Peña Nieto, aseguró además que el de los niños migrantes es también un problema de seguridad: “Las familias al mandarlos solos los ponen en un riesgo muy importante”.
Por su ubicación geográfica, México es un país de paso obligado en la ruta hacia Estados Unidos. Tan solo del 17 al 24 de marzo de este año, en la que fue una semana negra, el Instituto Nacional de Migración rescató a 370 menores de edad. De ellos, 163 habían sido abandonados por presuntos traficantes de personas. Los polleros o coyotes, como se les conoce en la región, cobran alrededor de 8.000 dólares por trasladar a los niños desde Centroamérica, pero cuando aparecen las autoridades, huyen dejando solos a los menores. A su paso por México los migrantes se exponen a secuestros, violaciones, extorsiones o asesinatos por parte de los grupos del crimen organizado que operan en los diferentes Estados del país.
Para Osorio Chong es fundamental que haya una “perspectiva regional, políticas públicas conjuntas, y no que sea un solo país el que afronte el problema”. “Hasta ahora cada uno trae su propuesta, no hay una coordinación”, denuncia.
El secretario aseguró que en estos términos expuso el problema y que el vicepresidente Joe Biden se mostró de acuerdo con sus planteamientos. Además, emplazó a todos los países a abordar el asunto en la próxima reunión que se celebrará en Managua a finales de junio.
Hace unas semanas Barack Obama se refirió al cruce de niños sin papales hacia Estados Unidos como un “asunto humanitario urgente”. El presidente pidió al Congreso una partida extraordinaria para poder hacer frente a la oleada de indocumentados y el Gobierno habilitó bases militares para atenderlos. Sin embargo, la capacidad de estos albergues también se vio desbordada, lo que ha generado una crisis sin precedentes en el país.

Entre octubre de 2013 y mayo de 2014 la Patrulla Fronteriza ha detenido a 46.188 menores de 17 años. Hace 13 años la cantidad de niños indocumentados que llegaban a EE UU no superaba un promedio de 6.700 al año.

sábado, 21 de junio de 2014

COLOMBIA: REELECCIÓN AUTORIZA A SANTOS A SEGUIR NEGOCIANDO LA PAZ

Tomado de esglobal 

COLOMBIA, LUZ VERDE A LA PAZ

El país latinoamericano se perfila cada vez más como un Estado pluralista, moderno y democrático.

Por Guillermo Pérez Flores

Colombia ha autorizado a Juan Manuel Santos para seguir en el Gobierno y continuar con las negociaciones de paz, pero ello no significa que le haya extendido un cheque en blanco. Las urnas han dicho también que su margen de maniobra es limitado, y así lo reconoció él mismo en el discurso de victoria, en el cual afirmó que corregiría todo lo que tuviera que corregir y ajustaría todo lo que tuviera que ajustar. Un giño, sin duda, a la ex candidata Martha Lucía Ramírez y al ex presidente Andrés Pastrana (1998-02), e inclusive al mismo candidato Oscar Iván Zuluaga, quien a diferencia de su mentor, el ex presidente Álvaro Uribe (2002-10), aceptó la derrota sin intentar, como éste, deslegitimar el triunfo con acusaciones fraude y corrupción.
Esta campaña electoral se enmarcó en dos plebiscitos paralelos. Uno en torno a la paz, esbozado por el presidente Santos en el dilema de escoger entre el fin de la guerra y la guerra sin fin. Y otro sobre el regreso del uribismo al poder. Decidir si Colombia se matriculaba en una era post Uribe, que tiene una honda significación política e incluso cultural. Al ex presidente, tirios y troyanos le reconocen que durante sus ocho años de “Seguridad Democrática” logró alterar la correlación militar de fuerzas en favor del Estado. Pero ese reconocimiento no supone aprobación de sus métodos ni mucho menos de su mentalidad política tribal, que induce a estar de acuerdo solo con quienes piensan igual, en una estrecha visión de que quien no está con él está contra él.
Fue precisamente ese marco lo que permitió gestar -tras la primera vuelta- una amplia coalición política y social en favor de la paz, con participación de sectores socialdemócratas, de liberales conservadores (Antanas Mockus), de progresistas (Gustavo Petro), de izquierda y oposición (Clara López, Aida Avella y Piedad Córdoba), de líderes de la Alianza Verde (Antonio Navarro y Claudia López) y de las principales centrales sindicales y de víctimas del conflicto (Íngrid Betancourt). Coalición que recibió la bendición de empresarios importantes como Luis Carlos Sarmiento (dueño de una tercera parte de la banca) o Nicanor Restrepo, ex presidente de uno de los conglomerados económicos más grandes. Esta amplia y diversa alianza le dio un nuevo aire a Santos, que con la Unidad Nacional (coalición de gobierno) fue incapaz de transmitir durante la primera vuelta el mensaje gubernamental y de movilizar un electorado apático y escéptico frente a la paz.
Santos ha cosechado casi cinco millones de votos más que en la primera vuelta, 900.000 más que Zuluaga, los suficientes para proseguir las conversaciones de paz con las FARC (que ahora se amplían a la segunda guerrilla, el Ejército de Liberación Nacional, ELN) y frenar el regreso al poder del uribismo. El pleito político, sin embargo, no ha concluido. Santos tiene grandes desafíos. El primero, y quizás el más trascendente, llegar al cese al fuego y de hostilidades bilateral y definitivo, antes de que termine este año. La paciencia del país tiene límites. Bajo la égida de Álvaro Uribe hablar de paz era políticamente incorrecto, con este resultado se invierte la ecuación, no obstante, el país  demanda resultados concretos y no se conforma con declaraciones o ceses unilateral de fuego de una o dos semanas, como los decretados por las FARC durante las elecciones.  Otro desafío es mantener y ampliar la coalición de apoyo a la paz –que es frágil y podría tornarse volátil–, pues los acuerdos a los que llegue con las guerrillas tendrán que ser refrendados popularmente.
Hasta el pasado 15 de junio las conversaciones de paz tenían más respaldo externo que interno. El gobierno de Estados Unidos, la Unión Europea, la ONU, la OEA, UNASUR, la Alianza del Pacífico y todo el vecindario las apoyan. Esto ha mejorado, pero falta un respaldo interno más sólido. Santos creyó que la campaña electoral sería fácil, jugó a adormecerla y se equivocó. Ese error le ha obligado a hacer de la necesidad virtud y salir a conseguir el apoyo de más sectores a las negociaciones. Ahora tendrá que transformar la paz en política de Estado, y compartir la bandera de la paz con muchas otras manos, para hacerle saber a las guerrillas que están negociando no con un Ejecutivo sino con todo un país y acelerar las negociaciones. 
Con el resultado electoral del pasado domingo, Colombia comienza a diseñarse un perfil más pluralista, moderno y democrático del que tenía. El ejercicio de diálogo político interno que acaba de hacer Santos es positivo, y contribuirá, inclusive, a reforzar su política exterior, de respeto y no injerencia en asuntos internos de otros países (léase Venezuela y Ecuador). En concordancia con el mandato político recibido, y con ese nuevo perfil, Colombia podría pasar de ser país problema (como se proyectó hace unos años) a país solución. Ayudar, por ejemplo, a normalizar las relaciones entre Washington y La Habana, darle un enfoque más integrador a UNASUR o solucionar, mediante la diplomacia, la divergencia que aún mantiene con Nicaragua tras el fallo del Tribunal de Justicia de La Haya, o mediar, si se lo piden las partes, en la crisis venezolana.
No cabe duda de que estas elecciones le han permitido a la democracia colombiana un salto de calidad que oxigena a Santos. Ya nadie podrá acusarle de haber traicionado el mandato de las urnas, como sucedió tras abrir las negociaciones con las FARC. Seguramente también, tendrá que hacer un gobierno menos ideológico, acentuar en lo social y modular sus políticas neoliberales, algo que ofreció hacer Zuluaga, quien prometió no celebrar más tratados de libre comercio durante cuatro años. Con razón o sin ella, los agricultores adjudican su quiebra a las políticas de apertura y al libre comercio. Santos se ha comprometido con los trabajadores a devolverles a las horas extras nocturnas y dominicales que la primera administración de Uribe les quitó.
Adicionalmente, el reelegido presidente colombiano tendrá que resolver un problema que no es de poca monta: de dónde saldrán los recursos para financiar la paz y el postconflicto. Se necesitará una nueva reforma tributaria. ¿Quién va a pagar la factura? Ampliar la base tributaria sería excesivamente impopular, pero aumentar los impuestos a los más ricos y a las grandes empresas podría desestimular la inversión privada y extranjera, y desatar una fuga de capitales. En cualquier caso, la política es el arte de hacer posible lo imposible, y Juan Manuel Santos, con su segunda elección a la que se presenta en su vida, ha demostrado que es, ante todo, un buen político. 

Crisis económica venezolana se profundiza con fractura de su equipo rector

Tomado de The Wall Street Journal

Jorge Giordani, ministro de Planificación saliente de Venezuela.

Maduro reemplaza al arquitecto de la economía venezolana

Por  Kejal Vyas

CARACAS—El presidente Nicolás Maduro reemplazó a Jorge Giordani, el arquitecto del modelo económico centralizado del gobierno de Venezuela, por otro miembro del Partido Socialista, quien tendrá que lidiar con una economía socavada por la tasa de inflación más alta de la región y una escasez crónica de bienes.
Giordani, un prominente economista de izquierda septuagenario, era un hombre de confianza del fallecido presidente Hugo Chávez y se desempeñó como ministro de Planificación durante los más de 15 años del Partido Socialista Unido de Venezuela en el poder. El funcionario fue reemplazado por Ricardo Menéndez, ex profesor y ex ministro de Industrias y de Educación Universitaria, quien comparte puntos de vista similares, en una señal de que la política no cambiará mucho.
"Si bien es positivo que salgan algunos de los marxistas más estridentes, creo que es el equivalente a reordenar las sillas en la cubierta del Titanic", dice Russ Dallen, socio de la firma de corretaje Caracas Capital Markets.
Giordani es el cerebro detrás del rígido sistema de precios máximos y controles cambiarios que han restringido el acceso a dólares desde que las medidas fueron implementadas en 2003. Chávez adoptó los controles para prevenir la fuga de capitales, pero los detractores dicen que han desalentado la inversión extranjera, limitado el acceso del sector privado a divisas necesarias para realizar sus importaciones y provocado distorsiones en la economía, incluido un vibrante mercado negro de divisas.
"[Giordani] es un hombre entregado con honestidad absoluta a todas las tareas que la revolución le ha encomendado", dijo Maduro durante su discurso televisado en el que anunció cambios en su gabinete "para mejorar, ampliar, refrescar áreas vitales del gobierno".
"Él va seguramente a incorporarse a algunas nuevas tareas que la revolución le asignará", aseveró el presidente.
No obstante, pese al elogio de Maduro, la salida del ex ministro de Planificación muestra una grieta entre los ideólogos radicales y los miembros más pragmáticos del partido de Maduro.
En una carta supuestamente escrita por Giordani y publicada el miércoles en medios locales y canales pro gobierno, el ex ministro criticó duramente a Maduro por su gestión, sugiriendo que no era capaz de controlar instituciones clave y corregir la moribunda economía de Venezuela. "Resulta doloroso y alarmante ver una Presidencia que no transmite liderazgo, y que parece querer afirmarlo en la repetición, sin la debida coherencia, de los planteamientos como los formulaba el Comandante Chávez", dice la carta. También acusa a Maduro de desviarse de principios socialistas.

La autenticidad de la carta, ampliamente circulada en foros de izquierda en Internet que son populares entre los miembros del Partido Socialista, no pudo ser confirmada. Giordani no pudo ser contactado para que comentara. Su ex viceministro, Ramón Yánez, no quiso contestar preguntas sobre la carta en dos llamadas telefónicas.
Por su parte, voceros del Ministerio de Planificación no respondieron a pedidos de comentarios.
Giordani fue un pilar del equipo de intelectuales izquierdistas formado por Chávez durante los primeros días de su autoproclamada revolución socialista del siglo XXI. Los dos formaron una relación estrecha cuando Giordani le dio clases al ex comandante mientras cumplía una pena en una prisión militar por liderar un golpe de Estado fallido en 1992.
Conocido alguna vez como "el Albanés" por sus opiniones comunistas ortodoxas durante sus estudios de postgrado, en los últimos años Giordani empezó a hacerse conocido como "el Monje", por su estilo de vida austero. En declaraciones públicas, arremetió contra la llamada "burguesía bolivariana" por amasar enormes riquezas a través de sus lazos en el gobierno central.
Giordani solía destacar los logros sociales de su gobierno, incluida la creación del Fonden, un fondo de desarrollo feura del presupuesto fiscal que estaba controlado por la oficina ejecutiva del país.
Cerca de US$100.000 millones en ingresos petroleros han sido destinados al fondo en la última década, para programas en beneficio de millones de los venezolanos más pobres.
No obstante, las opacas finanzas del país han provocado la ira de detractores que dicen que el dinero se ha desperdiciado en proyectos no terminados o perdido debido a la corrupción. Veintenas de proyectos de obras públicas están paralizados en un país en el que los cortes de electricidad y calles en malas condiciones son la norma. El área metropolitana alrededor de Caracas se ha visto afectada por racionamientos de agua durante varios meses debido a la falta de inversión en una red de distribución de agua, dicen los detractores.
Se prevé que las dificultades lleven a Venezuela a una recesión este año pese a los altos precios internacionales del petróleo. La consultora de negocios Ecoanalítica, con sede en Caracas, estima que la inflación podría superar 80% este año, de lejos la más alta de América.
Bajo la influencia de Giordano, Venezuela mantuvo un engorroso régimen cambiario de diferentes niveles que vendió dólares subsidiados a sectores económicos de alta prioridad. Sin embargo, el sistema se ha visto manchado por la corrupción y líderes empresariales se quejan de que ahoga la actividad económica.

Biden advierte a representantes de El Salvador, Guatemala y Honduras “Llegada de niños indocumentados “socava” reforma migratoria"

Tomado de La Prensa Gráfica 


El vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, hizo ayer una promesa a El Salvador, Guatemala y Honduras: los miles de niños migrantes centroamericanos sin acompañantes adultos que están retenidos en albergues en Estados Unidos serán tratados con todas las garantías de protección y derechos de la niñez mientras sean preparados para ser devueltos a sus países de origen.

Biden, quien visitó Guatemala ayer para tratar la emergencia de los niños migrantes centroamericanos que viajan sin acompañantes con los presidentes Salvador Sánchez Cerén, de El Salvador; Otto Pérez Molina, de Guatemala; y delegados de Honduras y México, hizo énfasis en que hasta el momento se están destinando recursos económicos en el país norteamericano para garantizar la protección de los derechos a la niñez y adolescencia de los menores de edad retenidos, pero que según la ley migratoria estadounidense los niños, en su gran mayoría, serán deportados.

El vicepresidente estadounidense anunció un desembolso a la brevedad de $160 millones para reforzar los programas de la existente Estrategia de Seguridad Centroamericana, que nació con la firma de los presidentes del Sistema de Integración Centroamericana, e incluso habló de otros $40 millones para la repatriación adecuada de los niños migrantes.

Biden explicó a los representantes centroamericanos que “se está llevando a muchos jueces migratorios y abogados” a las fronteras estadounidenses a atender cada caso y que se revisa si en cada proceso hay opción de apertura migratoria, pero dijo que lo más probable es la deportación.

“Pero en realidad la gran mayoría de los niños, ni por las leyes internacionales, ni por las leyes estadounidenses, no pueden tener visas especiales ni asilo bajo ninguna figura legal. No existe”, dijo.

Explicó que en los casos que los jueces estudian, si se determina que los niños tienen al menos a uno de sus padres en sus países de origen, Estados Unidos procederá a devolverlos, a pesar de que tengan al otro de sus padres en el país norteamericano.

Exigencias

El funcionario escuchó las exigencias de “corresponsabilidad” de cada uno de los países del Triángulo Norte de Centroamérica, que pidieron entre otras cosas que Estados Unidos les otorgue a los miles de niños que están retenidos en las fronteras un asilo o les extiendan visas especiales.

El presidente Sánchez Cerén señaló que una de las principales causas de la migración infantil, más allá de la inseguridad y la falta de oportunidades económicas –que no las dejó de mencionar–, es la búsqueda de la reunificación de las familias cuando los padres se encuentran en Estados Unidos.

Sánchez Cerén fue secundado por Pérez Molina y por Jorge Ramón Hernández, secretario de Estado de Honduras, e incluso los centroamericanos añadieron ante Biden que la migración de personas adultas a Estados Unidos para buscar mejores oportunidades ha generado en los países la fractura de las familias y que en muchos casos la migración infantil se da con ese fin de reunificación familiar.

Biden respondió que si bien se comprendían “las causas” de la migración y del deseo de la reunificación familiar, por parte de Estados Unidos la corresponsabilidad de ese país la traducen en la ayuda que ya otorgan a la región para el combate a la corrupción y la inseguridad generada por el crimen organizado y el narcotráfico, así como el respaldo para el crecimiento económico, para lograr el bienestar social y erradicar la necesidad de emigrar.

“Reconocemos que la solución pasa por resolver los problemas de raíz como la pobreza, la inseguridad, el Estado de Derecho.

Por ello, reiteró el apoyo a Centroamérica en el combate a la inseguridad y el desarrollo económico, pero también fue firme en decir que las leyes migratorias de Estados Unidos son claras y deben respetarse.

“No hay boleto gratuito”, aseveró Biden en advertencia a que la mayoría de niños que están retenidos en fronteras estadounidenses serán devueltos, así como se refirió a que las personas que piensan entregar a los niños “a coyotes, narcotraficantes y otros criminales” bajo “el engaño” de que al llegar de forma ilegal a Estados Unidos este país los acogerá para darles asilo o cualquier otra figura jurídica que no existe en la ley estadounidense, “están equivocadas”.

Efectos en la reforma

Biden llamó la atención a los representantes de los Gobiernos de El Salvador, Guatemala y Honduras al decir que la llegada de niños migrantes a las fronteras estadounidenses, sin documentos y sin acompañantes adultos, “socava” las posibilidades de que la reforma migratoria que busca la administración del presidente Barack Obama sea aprobada en el congreso estadounidense.

El funcionario aseguró que el congreso de su país está atento a lo que pasa en las fronteras y pidió a los gobernantes que hagan “comprender” a sus ciudadanos que la reforma migratoria está en grave peligro si los niños indocumentados sin acompañantes siguen llegando a Estados Unidos, en lo que calificó como una confusión de parte de los centroamericanos sobre el tema de reforma migratoria.



United States announces plan to arrest undocumented immigrants and to accelerate their trials in order to deport them faster

Taken From The New York Times 

U.S. Moves to Stop Surge in Illegal Immigration

By Julia Preston and Randal C. Archibold

McALLEN, Tex. — White House officials, saying that misinformation about administration policies helped drive a surge of illegal migrants from Central America across the South Texas border, on Friday announced plans to detain more of them and to accelerate their court cases so as to deport them more quickly. 

In tandem with those measures, Vice President Joseph R. Biden Jr. met in Guatemala on Friday with senior leaders of the three countries where most of the migrants come from — El Salvador, Guatemala and Honduras — to secure their help in conveying the message that there are no new legal channels to come to the United States and that those crossing illegally will be deported. 

Department of Homeland Security officials are rushing to open more detention centers intended for families with children caught coming illegally to this country and will also expand the use of monitoring devices, such as electronic ankle bracelets, to keep track of migrants after they are released, the officials said.