viernes, 23 de junio de 2017

Hoy 23 de Junio se celebra el Día Mundial del Olimpismo

Por Compartiendo mi Opinión

El Día Olímpico o Día Mundial del Olimpismo es celebrado en todo el mundo: cientos de miles de personas quienes participan en actividades deportivas, como carreras, exhibiciones, música y seminarios educativos. 

En las últimas dos décadas, el evento ha contribuido a difundir los ideales Olímpicos en todos los rincones del mundo. 

El Día Olímpico se introdujo en 1948 para conmemorar el nacimiento de los modernos Juegos Olímpicos el 23 de junio de 1894 en la Sorbona de París. 

El objetivo era promover la práctica del deporte en todo el mundo independientemente de la edad, género o habilidad atlética.

El COI celebró el primer Día Olímpico Mundial el 23 de junio de 1948 con nueve Comités Olímpicos Nacionales organizando ceremonias en sus respectivos países. 

Hoy, el Día Olímpico ha evolucionado hasta convertirse en una fecha clave en el calendario del Movimiento Olímpico y ha ganado impulso en todo el mundo, con casi cinco millones de participantes de todo el mundo y más de 150 Comités Olímpicos Nacionales participantes.

Hoy 23 de junio se conmemora el Día Internacional de las Viudas

Por Compartiendo mi Opinión
El 21 de diciembre de 2010 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 65/189 decidió observar el 23 de Junio el Día Internacional de las Viudas.

Ausentes en las estadísticas, inadvertidas por los investigadores, abandonadas por las autoridades locales y nacionales y mayormente ignoradas por las organizaciones de la sociedad civil, la situación de las viudas es, en efecto, invisible. 

Sin embargo, el abuso de las viudas y sus hijos constituye una de las más graves violaciones a los derechos humanos y obstaculiza el desarrollo actual. 

Millones de viudas en el mundo soportan extrema pobreza, aislamiento, violencia, falta de vivienda, enfermedades y discriminación en lo que respecta a la ley y las costumbres. 

A fin de darle un reconocimiento especial a la situación de las viudas de todas las edades y de todas las regiones y culturas, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró al día 23 de junio de 2011 como el primer Día Internacional de las Viudas de la historia.

miércoles, 21 de junio de 2017

Hoy 21 de Junio se celebra el Día internacional del Yoga

Por Compartiendo mi Opinión


Yoga es una práctica física, mental y espiritual de tradición antigua y que se originó en la India. La palabra «Yoga» proviene del sánscrito y significa unidad porque simboliza la unión del cuerpo y la mente.

En la actualidad se practican varias formas de Yoga y su popularidad crece en el mundo.

En reconocimiento de su popularidad universal, el 11 de diciembre de 2014, las Naciones Unidas proclamaron el 21 de junio como el Día Internacional del Yoga, con la resolución 69/131.

Este Día quiere concienciar a la población de los beneficios de esta práctica.

En septiembre del 2014, Narendra Modi, Primer Ministro de la India, presentó ante las Naciones Unidas la idea de conmemorar el Día Internacional del Yoga, en esa ocasión usó las siguientes palabras:

“El Yoga es un presente inestimable de la antigua tradición hindú. Encarna la unidad entre la mente y el cuerpo; pensamiento y acción; el control y la plenitud; la armonía del hombre con la naturaleza; un enfoque holístico de la salud y el bienestar ” .

A partir de esto, su propuesta fue aceptada por la ONU (Organización de las Naciones Unidas), así como por 175 países y este año 2015 se conmemorará el primer Día Internacional del Yoga este 21 de junio, durante el Solsticio de Invierno.

Yoga significa la comunión de la mente y el espíritu a partir del equilibrio interior.

Esta práctica puede ser realizada por cualquier persona a cualquier edad.

Mientras que en la cultura occidental la mayoría de las personas conocen el Yoga como un conjunto de posturas, en realidad es un método más completo, que propone no solo un bienestar físico, sino también la práctica de valores éticos, virtudes mentales, meditaciones y elementos consistentes para la construcción de una vida con más calidad en todos los aspectos.

Mi versión de lo que ocurrió en la historia un día como hoy 21 de Junio

Compilado por Luis Montes Brito
Un día como hoy 21 de Junio de 1788 en EE. UU., Nuevo Hampshire se convierte en el estado número 9. Los pennacooks, miembros de la cultura algonquina, se encontraban entre los antiguos grupos aborígenes que habitaban New Hampshire. El primer europeo que exploró la región fue el capitán inglés Martin Pring, quien en 1603 ancló en el puerto de Piscataqua. Dos años más tarde, el explorador francés Samuel de Champlain navegó a lo largo de la costa y llegó hasta las islas de Shoals. En 1620, se concedió la región al Consejo de Nueva Inglaterra, la anteriormente denominada Compañía de Plymouth, por parte de Jacobo I Estuardo, rey de Inglaterra. En 1629, la provincia fue dividida y al colono inglés John Mason le fue otorgada la parte comprendida entre los ríos Piscataqua y Merrimack; el título de la concesión fue el de New Hampshire. En 1635, se disolvió el Consejo de Nueva Inglaterra y la Corona británica confirmó a Mason en todas sus concesiones; además, se le dieron otras 40.500 ha situadas al oeste del río Kennebec. En 1638, John Wheelwright, un clérigo que había sido expulsado de Massachusetts, fundó el asentamiento de Exeter. Desde 1686 hasta 1689, la provincia de New Hampshire formó parte del Dominio de Nueva Inglaterra. En 1776, New Hampshire se convirtió en la primera colonia que adoptó su propia Constitución, y pasó a ser el noveno estado del país un día como hoy 21 de junio de 1788, al ratificar la Constitución de Estados Unidos. Durante los años que precedieron a la Guerra Civil estadounidense (1861-1865), los movimientos que abogaban por la abolición de la esclavitud ganaron fuerza en el estado. Después de la guerra civil, la industria (en especial la textil, de los transportes y las comunicaciones) se expandió con rapidez. Durante la segunda mitad del siglo XIX, la llegada masiva de francocanadienses alteró la composición étnica de la población, que hasta ese momento había sido en su mayor parte inglesa, escocesa e irlandesa. En la década de 1970, la industria continuaba siendo el sector económico más importante, pero el turismo, que había desempeñado un papel destacado desde principios de siglo, se expandió con gran rapidez durante las décadas de 1970 y 1980 y ganó peso en la economía de New Hampshire, gracias a las medidas tomadas por el gobierno del estado contra la contaminación medioambiental. Nuevo Hampshire es uno de los cincuenta estados que, junto con Washington D. C., forman los Estados Unidos de América. Su capital es Concord y su ciudad más poblada, Manchester. Está ubicado en región Noreste del país, división Nueva Inglaterra, limitando al norte con Canadá, al este con Maine, al sureste con el golfo de Maine (océano Atlántico), al sur con Massachusetts y al oeste con Vermont. Con 24 216 km² es el quinto estado menos extenso —por delante de Nueva Jersey, Connecticut, Delaware y Rhode Island, el menos extenso— y con 1 316 470 habitantes en 2010, el noveno menos poblado, por delante de Rhode Island, Montana, Delaware, Dakota del Sur, Alaska, Dakota del Norte, Vermont y Wyoming, el menos poblado. Fue admitido en la Unión un día como hoy 21 de junio de 1788, como el estado número 9. Es conocido internacionalmente por ser el primer estado en el que se celebran las elecciones primarias para la presidencia de EE. UU. Estas elecciones atraen la atención de la opinión pública y de los observadores políticos, ya que son un indicador del favor de los electores hacia los candidatos presentados. Las matrículas de los vehículos tienen escrito el lema del estado: "Vive libre o muere". El apodo del estado es "el Estado de Granito" (the Granite State), pues hace referencia a su geología y a su tradicional autosuficiencia. El estado posee otros apodos, pero raramente se usan. Personajes famosos relacionados con el estado fueron: el senador Daniel Webster, el editor Horace Greeley, la fundadora de la Iglesia de la Ciencia Cristiana Mary Baker Eddy, y el comediante Adam Sandler. Franklin Pierce, 14º presidente de los EE. UU., nació aquí. 
Un día como hoy 21 de Junio de 1791 en Varennes-en-Argonne, Francia, el rey Luis XVI es detenido durante su huida del país. Un día como hoy 21 de junio de 1791, por la noche Luis XVI, su esposa María Antonieta y su familia salieron en secreto de París, en una carroza con destino a la frontera. Cuando casi habían llegado a la meta, fueron reconocidos y arrestados. Con información de National Geographic. En la noche del 21 de junio de 1791, Luis XVI y su familia salieron en secreto de París, en una carroza con destino a la frontera. Cuando casi habían llegado a la meta, fueron reconocidos y arrestados. El 6 de octubre de 1789, después de que una muchedumbre asaltara el palacio de Versalles, Luis XVI decidió trasladarse con su familia a otro palacio en el mismo centro de París, el de las Tullerías. Acostumbrados al lujo y a la libertad de movimientos de que gozaban en Versalles, Luis y su esposa, la reina María Antonieta, se vieron de repente recluidos en unos apartamentos relativamente pequeños, rodeados por el tumulto de la ciudad y debiendo soportar la presencia constante de la Guardia Nacional, que más que protegerlos parecía a veces vigilarlos. Para muchos partidarios de la vieja monarquía, aquello parecía un arresto domiciliario. La prueba definitiva llegó el 19 de abril de 1791, cuando los reyes decidieron salir de París para pasar el Domingo de Ramos en su residencia campestre de Saint-Cloud y se vieron envueltos por una multitud que les impidió partir e incluso los cubrió de insultos. Tras el incidente, el rey no se recató en declarar públicamente que era un prisionero; en privado, instado por su esposa, decidió escapar. Hacía meses que muchos nobles le habían aconsejado huir; de hecho, sus hermanos pequeños, el duque de Anjou y el conde de Artois, habían emigrado justo después de la toma de la Bastilla. El rey se había mostrado indeciso, pero no así María Antonieta, quien pese a su fama de frivolidad demostró estar forjada en un metal más duro que su marido. Decidida a escapar, buscó la ayuda del conde Axel von Fersen, un aristócrata sueco que se había ganado su confianza. Tras el fiasco de Saint-Cloud, el proyecto se puso en marcha. El plan consistía en escapar de noche y viajar de incógnito hasta la ciudad fronteriza más próxima, Montmédy, unos 287 kilómetros al este de París, en la actual frontera con Bélgica (entonces posesión austríaca); veinte horas de viaje sin pausa podían ser suficientes. Allí, el rey lanzaría una proclama para denunciar los abusos de la Revolución. La gran escapada. A las diez de la noche del 20 de junio de 1791, la reina llevó a sus hijos a Fersen en secreto. Luego volvió al salón, como si nada hubiera sucedido. Poco después se retiró a su dormitorio, dio las instrucciones a sus doncellas para el día siguiente y se acostó. Pero nada más quedarse sola se vistió con un traje sencillo de color gris, se tapó la cara con un velo y salió por unas puertas ocultas del palacio. El rey, por su parte, debió quedarse departiendo con los cortesanos hasta las once y media de la noche. Cuando se fue a dormir, su ayuda de cámara, como era tradición, se acostó a sus pies con un cordel atado a su muñeca para que el monarca pudiera llamarlo en cualquier momento. Para despistarlo, Luis le hizo un encargo; cuando el ayuda de cámara volvió, pensó que el rey estaba dormido dentro de su cama con dosel, pero, en realidad, el monarca ya había huido. Luis, María Antonieta, sus dos hijos y Fersen se reunieron por fin a las dos de la madrugada, con dos horas de retraso. Iban en un vehículo nuevo, enorme y lujoso, en el que cabían cómodamente los cinco fugitivos más el aya de los príncipes, dos camareras, el peluquero de la reina y otros ayudantes, con baúles repletos de ropa, vajilla, botellas de vino y otros lujos. No era una comitiva precisamente discreta, pero aun así salió de París sin levantar sospechas. La fuga se descubrió a las ocho de la mañana. Al principio, algunos intentaron hacer creer que el rey había sido raptado por contrarrevolucionarios, pero a mediodía se descubrió que Luis había dejado un documento en el que explicaba las razones de su huida. Las autoridades reaccionaron ordenando el arresto de cualquier persona que intentara abandonar el reino. Los fugitivos viajaban bajo identidades falsas: la marquesa de Tourzel, aya de los príncipes, se hacía pasar por una aristócrata rusa, la baronesa De Korff, mientras que la reina y la hermana del rey fingirían ser sus doncellas; el rey, por su parte, era el criado Durand. Cambiaron de caballos en Bondy, a media hora de París. Allí, por voluntad del rey, se separaron de Fersen, que al marcharse gritó bien fuerte: «¡Adiós, madame De Korff!». Continuaron sin novedad hasta Châlons, adonde llegaron a las seis de la tarde. Se pararon a merendar y tuvieron una avería en una rueda, que les llevó media hora reparar, lo que hizo que llegaran a Pont-de-Somme-Vesle con dos horas de retraso, cuando las tropas que los esperaban para escoltarlos se habían marchado ya. Los reyes avanzaron hasta llegar a Sainte-Menehould a eso de las ocho. La noticia de la huida del rey se había difundido ya y cundía la agitación entre el pueblo. Uno de los más exaltados era el maestro de postas del lugar, Jean-Baptiste Drouet, quien había visto a la reina tiempo atrás, cuando era militar. Cuando echó un vistazo al interior de la carroza reconoció a María Antonieta de inmediato y también se percató de que el supuesto criado Durand tenía los mismos rasgos que el rey, tal como se lo representaba en los billetes que circulaban por entonces. El drama de Varennes. La carroza real logró continuar el camino, pero Drouet, tomando otra ruta, llegó antes que ellos a la siguiente etapa, el pequeño municipio de Varennes-en-Argonne, a tan sólo 50 kilómetros de Montmédy. Los fugitivos llegaron allí cuando ya era de noche y se detuvieron a las afueras. Drouet había dado la voz de alerta e hizo que el procurador, monsieur Sauce, máxima autoridad del lugar dado que el alcalde estaba ausente, examinara los papeles a los viajeros. Inicialmente, Sauce declaró que los pasaportes estaban en regla y no había motivo para retener a la carroza, pero Drouet dio un puñetazo sobre la mesa y respondió: «Son el rey y su familia, y si los dejáis marchar al extranjero seréis culpable de alta traición». Sauce se inclinó; a la espera de comprobar la identidad de los viajeros, los alojó en su propia casa. El glotón Luis XVI aceptó gustosamente el pan y el queso que la esposa del anfitrión les ofreció para reponerse. Entonces a Sauce se le ocurrió despertar a un vecino ya mayor, antiguo juez de paz, que había estado en Versalles y que sin duda había visto al monarca; él podría resolver la duda de si aquél era verdaderamente el rey. Así sucedió. Cuando el anciano se presentó ante el rey se arrodilló y exclamó «¡Ah, Sire!»; Luis XVI no pudo, o no quiso, seguir ocultando su identidad. Declaró a todos que era el monarca y les pidió que lo dejaran continuar a Montmédy. Justo entonces se presentó en el pueblo un destacamento de húsares alemanes dispuesto a rescatar a sablazos al rey. Pero Luis XVI temía por la seguridad de su familia y quiso esperar a que acudieran más tropas. Entrada la madrugada ya era demasiado tarde: los revolucionarios les bloqueaban el paso. Luego llegaron dos de los muchos comisarios que la Asamblea Nacional había enviado en todas direcciones para detener al rey. Luis XVI no marcharía a Montmédy, sino que regresaría con su familia a París. El humillante regreso. Los fugitivos tardaron tres días en desandar lo que habían recorrido en veinte horas de frenética fuga. Seis mil ciudadanos armados y guardias nacionales los acompañaron durante el trayecto. El 25 de junio entraron en París, en medio de un silencio sepulcral. Según los testigos, el abúlico monarca parecía extraordinariamente tranquilo, como si nada especial hubiese pasado. Tras la huida de Varennes, la oposición de los revolucionarios a la monarquía se hizo cada vez más virulenta. El 10 de agosto de 1792, el palacio de las Tullerías fue asaltado y un mes después se proclamó la República, mientras la familia real era encerrada en el Temple. Luis XVI sería juzgado ante la Asamblea por traición, condenado a muerte y ejecutado en la guillotina el 21 de enero de 1793. Meses más tarde, el 16 de octubre, su esposa María Antonieta también fue ajusticiada. Fersen, el artífice de la huida, no corrió mejor suerte. De vuelta en Suecia, sería linchado en 1810 por una multitud que lo acusaba de haber envenenado al príncipe heredero.
Un día como hoy 21 de Junio de 1916 en la Batalla de El Carrizal, los mexicanos vencen a los estadounidenses que habían entrado en México durante la Expedición Punitiva para castigar a Pancho Villa. Con información de Voltairenet.org por General Samuel Lara, General brigadier retirado del Ejército Mexicano; presidente de la Federación de Militares Retirados Francisco J Múgica, AC. No hay libro de texto que aborde este hecho glorioso ocurrido un día como hoy 21 de junio de 1916; que recuerde a los mexicanos esta victoria del soldado del pueblo que, sin más uniforme que sombrero de palma y huaraches, mal comido, mal armado, sin equipo apropiado, mal montado, pero guiado por personajes heroicos que nunca han faltado para vencer ejércitos imperialistas, pasó a la historia por su arrojo ante los enemigos de la patria. El ejército estadounidense había penetrado imperiosamente hasta Parral, Chihuahua, buscando al guerrillero Pancho Villa que, atravesando la frontera con afán vengativo, atacó al pueblo de Columbus. En Parral fue detenido el ejército invasor por la gente del pueblo, armada con palos, piedras e instrumentos de labranza y arengada por la maestra Elisa Griensen. Los estadunidenses fueron obligados a retroceder hasta las afueras de la comunidad. El presidente Venustiano Carranza ordenó entonces a las Fuerzas Revolucionarias que no les permitieran avanzar más en otra dirección que no fuera al Norte, de regreso a su país. El general Jacinto B Treviño, comandante de la Guarnición de Ciudad Juárez, así lo comunicó al general John J. Pershing. El comandante del ejército invasor respondió amenazante que sólo acataría las órdenes del mandatario de Estados Unidos y en seguida montó un ataque de reconocimiento que, saliendo de su cuartel general en Colonia Dublán, marcharía en dirección Este: rumbo a Villa Ahumada, Chihuahua, con intenciones de verificar hasta dónde podrían cumplir las tropas mexicanas las órdenes de su presidente. Al efecto, Pershing seleccionó dos compañías de soldados afroamericanos –con experiencia en la invasión a Filipinas– al mando del capitán Charles Trumball Boyd con otros dos oficiales blancos también, quienes iniciaron la marcha rumbo a Villa Ahumada. En el trayecto aprovecharon la oportunidad de burlarse de la indumentaria de los soldados mexicanos que encontraban en su camino, de sus caballos y sus arreos, así como de su armamento. Aproximadamente 15 kilómetros antes de su objetivo, llegaron a El Carrizal, Chihuahua, donde se encontraba un regimiento de la Brigada Canales, al mando del general Félix Uresti Gómez, quien marcó el alto al capitán Boyd. Éste le manifestó que tenía órdenes de llegar a Villa Ahumada. Como el general Uresti le contestó que las suyas consistían en impedírselo, el extranjero respondió que cumpliría aunque tuviera que pasar sobre los defensores. El general Uresti contestó que los mexicanos también sabían morir en cumplimiento de las suyas y se retiró a las orillas del poblado donde lo esperaba su tropa. Se colocó al frente, disponiéndose a la defensa y el oficial extranjero regresó a ordenar desmontar y formar en orden de batalla. En seguida se escuchó una descarga de fusilería que derrumbó a los jinetes que se encontraban en el poblado, entre ellos el propio comandante general Félix Uresti Gómez. Fue entonces que el teniente coronel Genovevo Rivas Guillén asumió el mando de las acciones. Ordenó un envolvimiento por el flanco izquierdo conducido por él mismo. En tanto, la única ametralladora que poseían los mexicanos detenía el avance enemigo y cobró las vidas del capitán Boyd y de un oficial; otro más quedó herido. El combate duró 2 horas. Se rindieron los soldados negros que sobrevivieron. El resto huyó rumbo al desierto. Mexicanos muertos en combate fueron un general, cuatro oficiales y 25 de tropa.
Un día como hoy 21 de Junio de 1963 en el Vaticano, el cónclave de cardenales elige a Giovanni Montini como papa. Este adopta el nombre de Pablo VI. El cónclave es la reunión que celebra el Colegio Cardenalicio de la Iglesia católica romana para elegir a un nuevo obispo de Roma, cargo que lleva aparejados el de papa (sumo pontífice y pastor supremo de la Iglesia católica) y el de jefe de Estado de la Ciudad del Vaticano. Desde hace siglos la Capilla Sixtina del Palacio Apostólico situado en la Ciudad del Vaticano es el lugar donde se celebra el cónclave. El término cónclave procede del latín cum clavis («bajo llave»), por las condiciones de reclusión y máximo aislamiento del mundo exterior en que debe desarrollarse la elección, con el fin de evitar intromisiones de cualquier tipo. Este sistema de encerrar a los electores del papa, vigente al menos desde el II Concilio de Lyon (1274), fue mitigado por Juan Pablo II en la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis (UDG), sobre la Vacante Apostólica y la elección del nuevo Pontífice (22 de febrero de 1996). Se establece en ella que los electores pueden residir, mientras dura el cónclave, en la recién construida Casa de Santa Marta, una residencia al efecto en el propio Vaticano, pero manteniendo la rigurosa prohibición de cualquier clase de contacto con el mundo exterior. El cónclave de 1963 fue convocado luego de la muerte del papa Juan XXIII, ocurrida el 3 de junio del mismo año en el Palacio Apostólico de la Ciudad del Vaticano. El cónclave para elegir al nuevo pontífice comenzó el 19 de junio y terminó dos días más tarde, un día como hoy 21 de junio de 1963, después de seis votaciones. Los cardenales eligieron a Giovanni Montini, arzobispo de Milán, como nuevo papa. Él aceptó la elección y tomó el nombre de Pablo VI. La muerte de Juan XXIII dejó al Concilio Vaticano Segundo en una balanza, si se elegía a un papa anti-conciliar podrían verse severamente refrenados el papel y la influencia del concilio en la Iglesia. La guerra tácita que había entre conservadores y liberales se reflejó en la batalla que hubo durante el cónclave, entre los partidarios y los opositores del concilio. El principal candidato pro-conciliar era Giovanni Montini, mientras que su principal oponente era Giuseppe Siri, que en el cónclave de 1958 había sido considerado como el mejor sucesor de la obra de Pío XII. Al parecer Juan XXIII había dejado entrever que pensaba en Montini como un buen continuador de su obra. Los electores del cónclave de 1963 fueron la mayor cantidad de cardenales reunidos hasta la fecha. Había ochenta y dos cardenales, pero debido a su arresto domiciliario, József Mindszenty no pudo viajar a Roma, mientras que Carlos María de la Torre no participó debido a su avanzada edad y problemas de salud crónicos. De los ochenta cardenales que participaron, ocho habían sido proclamados por el Papa Pío XI, veintisiete por Pío XII, y el resto por Juan XXIII. Se rumorea que la facción liberal, para recordar a los electores que el papa no tiene que ser necesariamente italiano, habrían votado inicialmente por Léon Joseph Suenens, arzobispo de Malinas-Bruselas y por Franz König de arzobispo de Viena. El favorito, Giovanni Montini, fue elegido después de sólo seis escrutinios. Cuando el cardenal Eugène Tisserant le preguntó formalmente si aceptaba la elección Montini respondió: «Si, en nombre del Señor. Aquí estoy, crucificado con Cristo». En un quiebro con los recientes nombres pontificios, Montini eligió llamarse Pablo VI. A las 11:22 hora local, el humo blanco salió de la chimenea de la Capilla Sixtina, lo que significaba que se había elegido un nuevo papa. Alfredo Ottaviani, en su calidad de cardenal protodiácono, anunció la elección de Montini en latín, antes de que Ottaviani hubiera terminado siquiera de decir el nombre de Montini, la multitud bajo el balcón de la Basílica de San Pedro estalló en aplausos. Giovanni Battista Enrico Antonio Maria Montini Alghisi; nació en Concesio, cerca de Brescia, Lombardía; el 26 de septiembre de 1897, falleciendo en Castel Gandolfo; el 6 de agosto de 1978, fue el papa 262.º de la Iglesia católica y soberano de la Ciudad del Vaticano desde un día como hoy 21 de junio de 1963 hasta su muerte el 6 de agosto de 1978. Ordenado sacerdote en 1920, estudió diplomacia en Roma, entrando a formar parte de la secretaría de Estado vaticana en 1923, tras un breve paso por la nunciatura de Varsovia. Como consiliario eclesiástico de la Federación universitaria tomó parte en los conflictos de esta organización con el régimen de Mussolini. Durante la guerra, llevó a cabo una importante labor al frente de la Comisión pontificia de asistencia. Su tarea pastoral y sus tendencias renovadoras lo alejaron de la curia vaticana, siendo nombrado arzobispo de Milán en 1954. Fue el primer cardenal nombrado por el papa Juan XXIII, con quien colaboró estrechamente en la organización del concilio Vaticano II. A la muerte del pontífice le sucedió como tal y dio continuidad a la renovación emprendida en la Iglesia. Tomó el nombre de Pablo para indicar su misión renovadora en todo el mundo de la difusión del mensaje de Cristo. Reabrió el Concilio Vaticano II, dándole prioridad y dirección. Después de que el Concilio hubiera finalizado su labor, Pablo VI se hizo cargo de la interpretación y aplicación de sus mandatos, a menudo caminando por una delgada línea entre las expectativas contrapuestas de los distintos grupos dentro de la Iglesia católica. La magnitud y la profundidad de las reformas afectaron a todas las áreas de la Iglesia, superando durante su pontificado las políticas similares de reforma de sus predecesores y sucesores. En 1965 pronunció un importante discurso ante la Asamblea general de la ONU, hechos que constituyeron los primeros hitos de una serie de viajes pastorales en el marco de una amplia política ecuménica y de acercamiento a los problemas del mundo. Al final de su pontificado, no obstante, dio muestras de ceder a las presiones de los sectores más conservadores. En este sentido fueron tomadas sus encíclicas Sacerdotalis coelibatus y Humanae vitae, que aparecieron como un retroceso frente a otras como Ecclesiam suam y Populorum progressio.
Un día como hoy 21 de Junio de 2002 la Organización Mundial de la Salud declara a Europa zona libre de poliomielitis. La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró un día como hoy 21 de Junio de 2002 a Europa (incluidas las antiguas repúblicas de la URSS) zona libre de polio. La región comprende 51 países y tiene una población de 870 millones de personas. La OMS da así un paso más en su lucha contra al enfermedad, que empezó en 1988 con la extensión de las campañas de vacunación masiva contra el virus de la polio. Antes que Europa han sido declaradas libres de polio América, en 1994, y la cuenca del Pacífico en 2000. Los últimos casos en Europa se produjeron en 1998. Los enfermos fueron tres niños de Roma que se infectaron en Bulgaria, y uno de Georgia. Les infectó un virus procedente de la India. El último caso de infección por un virus de una cepa europea se dio en 1998 en un niño de dos años sin vacunar de Turquía. En España no se registran incidentes desde 1988. La mayor preocupación en Europa debe ser 'evitar la circulación de virus importados', afirmó el director de la OMS en la zona europea, Marc Danzon. El objetivo de la máxima organización sanitaria mundial es conseguir un mundo libre de polio en 2005, aunque para ello todavía hacen falta unos 285 millones de euros, según cálculos de la Organización Mundial de la Salud. Los países donde la polio aún es endémica son Afganistán, Angola, Egipto, Etiopía, India, Niger, Nigeria, Pakistán, Somalia y Sudán. Desde 1988 el número de casos ha bajado en el mundo de 350.000 en 125 países a 48 en 10 países en 2001.

martes, 20 de junio de 2017

Mi versión de lo que ocurrió en la historia un día como hoy 20 de Junio

Compilado por Luis Montes Brito
Un día como hoy 20 de Junio de 1782 en Estados Unidos, el Congreso aprueba el diseño del emblema de la nación: el Sello de Estados Unidos. El Gran Sello de los Estados Unidos es un signo para la certificación de documentos utilizado en los Estados Unidos, país que no cuenta con un escudo heráldico propiamente dicho. En la composición figura el lema nacional: E Pluribus Unum, que significa en latín "de varios, uno" o "de muchos, uno". El sello aparece en el reverso de los billetes de un dólar. El Congreso de los Estados Unidos aprobó un día como hoy 20 de junio de 1782 el modelo actual y único vigente hasta el momento que fue presentado por una comisión designada para su creación presidida por Benjamín Franklin y sus elementos fueron ideados por Charles Thompson. En el anverso del mencionado sello, figura un águila de cabeza blanca, con el blasón de los 13 estados primeros unidos como confederación (comúnmente conocida como águila calva o águila marina de cabeza blanca), con las alas extendidas, que porta sobre su pecho un blasón con trece barras verticales, de gules y plata, alternadas que simbolizan los trece primeros estados que se independizaron de Gran Bretaña y crearon la Federación. En la parte superior figura otra franja horizontal en azur. El águila sostiene en sus garras una rama de olivo con trece hojas y trece flechas. La rama de olivo significa paz y las flechas poder militar. Sobre la cabeza del águila figuran trece estrellas agrupadas que representan también a los trece primeros estados de la Federación. El reverso del sello muestra una pirámide incompleta con trece escalones (los trece estados iniciales), coronada por un triángulo con un ojo inscrito (el "Ojo de la Providencia", tradicionalmente símbolo de Dios) y los lemas latinos "Annuit Coeptis" ("Aprobar las cosas que se han iniciado") y "Novus Ordo Seclorum" ("Nuevo Orden de los Siglos"). Una versión de este dibujo figura también en el reverso de los billetes de 1 dólar estadounidenses. Los símbolos de este reverso han sido relacionados con la masonería, pues muchos de los próceres de la Independencia de Estados Unidos eran masones, pero al momento de la creación del sello el Ojo de la Providencia no era un símbolo masón.
Un día como hoy 20 de Junio de 1789 se presenta en Versalles el compromiso Juramento del Juego de Pelota, por el cual los diputados del Tercer Estado se comprometen a no separarse hasta obtener una nueva Constitución. El Juramento del Juego de la pelota fue un compromiso de unión presentado un día como hoy 20 de junio de 1789 entre los 577 diputados del tercer estado para no separarse hasta dotar a Francia de una constitución, haciendo frente a las presiones del rey de Francia Luis XVI. Con el pretexto de unas reparaciones que debían hacerse en la sala de los Menus-Plaisirs, en la que se celebraban las sesiones de los Estados Generales de Francia, la guardia impidió que los diputados del tercer estado se reunieran allí un día como hoy 20 de junio de 1789. Los diputados entonces se reunieron en la sala del jeu de paume de Versalles. Con la ayuda del diputado Jean-Joseph Mounier, el abad Emmanuel-Joseph Sieyès se compromete a redactar la fórmula del célebre juramento del Jeu de Paume: [...] De no separarse jamás, y reunirse siempre que las circunstancias lo exijan hasta que la constitución sea aprobada y consolidada sobre unas bases sólidas. Este texto fue leído por Jean Sylvain Bailly, y el juramento fue votado por unanimidad, excepto por una voz, la de Martin d’Auch. La Asamblea Nacional se declaró Constituyente. Fue éste un acto determinante y una afirmación política de autodeterminación del pueblo llevada a cabo por sus representantes, y fue considerado como el nacimiento de la Revolución Francesa. La sala del jeu de paume (en francés, juego de pelota) se llamaba, antes del 20 de junio de 1789, "Tripot", y fue construida por Nicolas Cretteé en 1686 a fin y efecto de que los miembros de la Corte se distrajeran jugando al jeu de paume, un precedente de juegos de pelota como el tenis y la pelota vasca.
Un día como hoy 20 de Junio de 1837 en Gran Bretaña, Alejandrina Victoria es coronada reina del Reino Unido y de Irlanda con el nombre de Victoria I (comienza la era victoriana). Victoria del Reino Unido nació en Londres, Reino Unido, el 24 de mayo de 1819. Falleció en la Isla de Wight, Reino Unido, el 22 de enero de 1901. Fue reina del Reino Unido desde la muerte de su tío paterno, Guillermo IV, un día como hoy 20 de junio de 1837, hasta su fallecimiento el 22 de enero de 1901, mientras que como emperatriz de la India fue la primera en ostentar el título desde el 1 de enero de 1877 hasta su deceso. Victoria era hija del príncipe Eduardo, duque de Kent y Strathearn, cuarto hijo del rey Jorge III. Tanto el duque como el rey murieron en 1820, lo que provocó que Victoria fuera criada bajo la supervisión de su madre, la princesa alemana Victoria de Sajonia-Coburgo-Saalfeld. Heredó el trono a los dieciocho años, tras la muerte sin descendencia legítima de tres tíos paternos. El Reino Unido era ya en aquella época una monarquía constitucional establecida, en la que el soberano tenía relativamente pocos poderes políticos directos. En privado, Victoria intentó influir en el gobierno y en el nombramiento de ministros. En público, se convirtió en un icono nacional y en la figura que encarnaba el modelo de valores férreos y de moral personal típico de la época. Se casó con su primo, el príncipe Alberto de Sajonia-Coburgo-Gotha en 1840. Sus nueve hijos y veintiséis de sus cuarenta y dos nietos se casaron con otros miembros de la realeza o de la nobleza de Europa, uniendo a estas entre sí. Esto le valió el apodo de «abuela de Europa». Tras la muerte de Alberto en 1861, Victoria comenzó un luto riguroso durante el cual evitó aparecer en público. Como resultado de su aislamiento, el republicanismo ganó fuerza durante algún tiempo, pero en la segunda mitad de su reinado, su popularidad volvió a aumentar. Sus jubileos de oro y de diamante fueron muy celebrados. Su reinado de 63 años y 7 meses era el más largo en la historia del Reino Unido (superado recientemente por el de la actual monarca, la Reina Elizabeth) y se le conoció como época victoriana. Fue un periodo de cambio industrial, cultural, político, científico y militar en el Reino Unido y estuvo marcado por la expansión del Imperio británico. Victoria fue la última monarca de la casa de Hannover. Su hijo y sucesor, Eduardo VII, pertenecía a la nueva casa de Sajonia-Coburgo-Gotha.
Un día como hoy 20 de Junio de 1963 Estados Unidos y Rusia firman en Ginebra, Suiza, el acuerdo para establecer un hotline (línea caliente) conocida popularmente como el teléfono Rojo. Con información de El Periódico Internacional por Mateo Madridejos. Con el mundo a punto de estallar en una guerra nuclear entre las dos potencias, tanto Washington como Moscú decidieron poner en marcha, un día como hoy 20 de junio de 1963 una vía de comunicación directa. Se le llamó teléfono rojo, pero era una línea de teletipo para intercambiar mensajes. El teléfono rojo -que no fue teléfono ni rojo- es uno de los mitos de la “Guerra Fría”, la situación geopolítica y, sobre todo, el equilibrio de armas nucleares que dominó la vida internacional durante la mayor parte de la segunda mitad del siglo XX, desde el puente aéreo de Berlín, en 1948, organizado por los occidentales para proteger la libertad de los berlineses, hasta la desintegración de la Unión Soviética, el 25 de diciembre de 1991, pasando por la guerra de Corea (1950), las crisis de Berlín (1961) y Cuba (1962) y numerosos conflictos regionales. Ésa es la cronología que prevalece en los estudios más exhaustivos sobre la materia. La crisis de los misiles soviéticos en Cuba, que colocó a las dos grandes potencias al borde del holocausto nuclear, en octubre de 1962, generó la necesidad apremiante de una comunicación directa que solventara los problemas que habían obstaculizado o demorado el diálogo entre el presidente John Kennedy y el líder soviético, Nikita Jruschov. Hoy sabemos que los norteamericanos tardaron nada menos que 12 horas en descodificar el mensaje inicial del líder del Kremlin, que había sido entregado en la embajada de Moscú, cifrado y transmitido por ésta. Una pérdida de tiempo altamente peligrosa en unos momentos de alarma nuclear. El mal llamado teléfono rojo, concebido como una necesidad urgente, fue en sus inicios un doble circuito telegráfico, una línea directa de teletipo que unió Washington con Moscú -de hecho el Pentágono (no la Casa Blanca) con el Kremlin-, pasando por Londres, Copenhague, Estocolmo y Helsinki. El acuerdo para esa hotline (línea caliente) fue firmado por ambos gobiernos en Ginebra, un día como hoy 20 de junio de 1963, pero la primera prueba se efectuó el 30 de agosto del mismo año, cuando Washington transmitió a Moscú el siguiente mensaje: «Un zorro rápido y pardo saltó sobre el lomo de un perro holgazán 1234567890», que incluía todas las letras y números del alfabeto latino. La leyenda del teléfono rojo alcanzó una gran popularidad al prodigarse en series de TV, novelas de espionaje y películas, entre las que descolló la amarga sátira antimilitarista de Stanley Kubrick que se estrenó en España con el título de ¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú, que poco tiene ver con el original inglés, cuya traducción literal es Dr. Insólito (Strangelove) o cómo aprendí a dejar de preocuparme y amar la bomba, protagonizada por Peter Sellers, que relata las peripecias de un grupo de militares norteamericanos paranoicos que tratan de provocar una catástrofe nuclear. Para comprender la situación parece oportuno recordar que la guerra fría entrañó un deterioro de las relaciones internacionales y unas conductas con frecuencia histéricas en ambos bloques antagónicos, así como una tendencia acusada a exagerar la maldad y los métodos diabólicos del adversario. Una época presidida por el equilibrio del terror, el pánico de una guerra nuclear por un error de cálculo, un accidente o simplemente por la aplicación de la doctrina del tecnócrata Robert McNamara, secretario de Defensa con John Kennedy, empecinado en racionalizar el conflicto, es decir, en «combatir en la guerra nuclear de un modo muy similar a como en el pasado se desarrollaban las operaciones militares convencionales». Una pretensión que resultó ilusoria. La confrontación al borde del abismo nuclear se vislumbró al menos en tres momentos paroxísticos que pusieron a prueba las doctrinas de los estrategas, los nervios de los líderes y la conveniencia de una comunicación directa más fluida: la guerra de Corea (1950-1953), la erección del muro de Berlín (13 de agosto de 1961) y la crisis de los misiles soviéticos instalados en Cuba (octubre de 1962). Los dos últimos episodios señalaron, además, el carácter tumultuoso de las relaciones entre Kennedy y el líder soviético Jruschov, dos hombres de convicciones que hubieron de retroceder al asomarse al abismo. La doctrina de la racionalización del conflicto nuclear de McNamara fracasó estrepitosamente porque tanto Kennedy como Jruschov, al llegar la hora decisiva, al verle las orejas al lobo, actuaron movidos por el pánico irracional, el terror del aniquilamiento recíproco y total, la llamada mutua destrucción asegurada (MAD -loco- en su sigla inglesa), durante las horas angustiosas que siguieron al descubrimiento por los aviones-espía norteamericanos (U-2) de que los soviéticos habían instalado en Cuba misiles de alcance medio, capaces de transportar cabezas nucleares y de impactar en el territorio estadounidense. Kennedy y Jruschov no se entendieron nunca. Celebraron una primera reunión en Viena, en terreno neutral, el 3 y 4 de junio de 1961, que resultó un fiasco, entre recriminaciones recíprocas e intentos de confundir a la prensa. El líder soviético insistió en que firmaría un tratado de paz con la República Democrática Alemana (RDA), lo que hubiera significado dejar las vías de acceso a Berlín occidental en manos de los comunistas alemanes y las tropas soviéticas. El presidente norteamericano replicó: «Si eso es verdad, será un invierno muy frío». Y luego teorizó ante sus compatriotas: «Existe el peligro de que los gobiernos totalitarios que no están sometidos a vigoroso debate popular subestimen la voluntad y unidad de las sociedades democráticas en lo que concierne a sus intereses vitales». La ruptura fue inevitable y la crisis de Berlín llegó a su desenlace de la peor manera para Occidente: la erección del muro, iniciada el 13 de agosto de 1961, la fortificación de la horrenda cicatriz que consagró la división de Europa, de manera que la fractura de Alemania, las alambradas, los bloques de cemento y la brutalidad de los guardias fronterizos (vopos) al disparar contra los fugitivos se convirtieron en el símbolo ominoso de dos mundos hostiles e irreconciliables. El siniestro monumento de la guerra fría. Las protestas occidentales, empezando por las del mismo Kennedy, no pasaron de la retórica, cuando era evidente que la libertad se inclinaba ante la opresión, y a pesar de que la superioridad nuclear de Estados Unidos era incontestable. Con estos antecedentes, Kennedy desconfiaba profundamente, y cuando supo que los soviéticos habían instalado en Cuba algunas rampas de lanzamiento de misiles, apuntando a Florida, concluyó que el líder soviético no le había comprendido o no había tomado en serio sus advertencias. En un dramático mensaje a la nación (22 de octubre), el presidente proclamó que la conversión de Cuba en una base nuclear soviética era intolerable, ordenó el bloqueo naval de la isla, para impedir la llegada de nuevos misiles, y conminó al Kremlin para que retirara los ya instalados. Después de una semana de forcejeo al borde del abismo, con varios mensajes cruzados entre la Casa Blanca y el Kremlin, Jruschov aceptó la retirada de los misiles a cambio de que Kennedy hiciera lo mismo con los de Turquía y reiterara su promesa de no invadir la isla. A principios de noviembre, los soviéticos desmantelaron y repatriaron los misiles. Fidel Castro, muy molesto por la batalla que se había librado a sus espaldas, aseguró siempre que la idea de instalar los misiles se le había ocurrido a Jruschov, aparentemente encandilado por la emoción de que la revolución cubana pudiera extenderse por América Latina. Jruschov pasó a la historia como un optimista compulsivo. El desenlace de la crisis aceleró los contactos diplomáticos para mejorar las comunicaciones entre Washington y Moscú. La primera utilización intensiva de la línea roja se produjo durante la Guerra de los Seis Días (1967). En 1985, la comunicación empezó a hacerse por fax, y en 1991 se estableció el teléfono directo, vía satélite, que utilizaron por primera vez los presidentes Gorbachov y Bush padre, los hombres que sellaron precisamente el fin de la guerra fría.
Un día como hoy 20 de Junio de 1971 en México se estrena el programa El Chavo del Ocho. El Chavo del 8 es una serie de televisión cómica mexicana creada por Roberto Gómez Bolaños, producida por Televisión Independiente de México (más tarde, Televisa) y emitida por primera vez un día como hoy 20 de junio de 1971 en el Canal 8 de México. El programa trata sobre las vivencias de un grupo de personas que habitan en una vecindad mexicana donde su protagonista, El Chavo, lleva a cabo travesuras junto con sus amigos que ocasionan malentendidos y discusiones entre los mismos vecinos, por lo general de tono cómico. El guion surgió de un sketch escrito por Gómez Bolaños en donde un niño pobre de 8 años discute con un vendedor de globos en un parque. Se le prestó una mayor importancia al desarrollo de los personajes, a los cuales se les asignó una personalidad distintiva. Desde un comienzo, su creador contempló que El Chavo estaría dirigido al público adulto, no al infantil, aún cuando se tratara de adultos interpretando a niños. El elenco principal estuvo integrado por Gómez Bolaños, Ramón Valdés, Carlos Villagrán, María Antonieta de las Nieves, Florinda Meza, Rubén Aguirre, Angelines Fernández y Édgar Vivar, que interpretaron al Chavo, Don Ramón,Quico, la Chilindrina, Doña Florinda, el profesor Jirafales, Doña Clotilde y el señor Barriga, respectivamente. La dirección y producción de la serie recayeron en Enrique Segoviano y en Carmen Ochoa. El éxito de El Chavo del Ocho fue tal que, para 1973, era transmitido en varios países de Hispanoamérica y tenía altos índices de audiencia televisiva. Se estimó que en 1975 era vista por más de 350 millones de televidentes cada semana. Dada la popularidad, el reparto realizó una gira internacional que abarcó varios de los países en los que se transmitía el programa en ese entonces, en una serie de presentaciones donde bailaban y actuaban en vivo frente a un público. En 1978, Villagrán dejó el programa de forma definitiva debido a conflictos con Gómez Bolaños respecto a la autoría del personaje de Quico, y al año siguiente hizo lo mismo Valdés debido a motivos personales. A pesar de ello, este último se reincorporó al programa tiempo después. La última emisión de El Chavo del 8 como programa independiente se dio el 1 de enero de 1980, aunque continuó como parte de Chespirito hasta el 12 de junio de 1992. Gómez Bolaños consideró que el impacto de la serie en otros países se debía al éxito previo de El Chapulín Colorado. En cuanto a la crítica, obtuvo una recepción mayormente negativa en sus primeras emisiones, ya que su contenido era calificado como «vulgar», «bobo e insulso», «enajenante» y «no recomendable». Uno de los temas que más críticas negativas ha generado es la violencia explícita a través de los golpes e insultos entre algunos de los personajes. No obstante, otros medios aseguraron que un aspecto positivo de El Chavo es el uso de «situaciones universales» con las que la audiencia puede identificarse fácilmente, sin importar la edad o nacionalidades. A pesar de su conclusión a comienzos de los años 1990, la serie ha sido transmitida de forma ininterrumpida en varios países desde entonces. Hasta 2011, se tenía noción de 20 países que aún la emitían como parte de su programación habitual. En 2006 debutó El Chavo animado, un programa de animación basado en El Chavo del 8 y producido también por Televisa. Su éxito, equiparable al del formato original, ha permitido que la franquicia se haya expandido en cuanto a mercadotecnia y productos comerciales. Televisa la considera como una de las marcas más exitosas de su propiedad. Entre algunos productos derivados del programa se incluyen el libro El diario del Chavo del ocho (escrito por Gómez Bolaños y publicado en 1995), el musical El Chavo animado - Show en vivo (estrenado en 2010), un videojuego para Wii lanzado en 2012, así como aplicaciones para Facebook y dispositivos móviles de Apple. En cuanto a la cultura popular, El Chavo del 8 ha perdurado como uno de los programas de entretenimiento más reconocidos y exitosos de la televisión hispanohablante. 
Un día como hoy 20 de Junio de 1973 regresa a la Argentina el expresidente constitucional Juan Domingo Perón, tras 18 años en el exilio. En cercanías del Aeropuerto Internacional de Ezeiza, durante la bienvenida al líder, sucede la masacre de Ezeiza: francotiradores disparan contra peronistas de izquierda, matando a por lo menos 13, e hiriendo a más de 300.El 25 de mayo de 1973 asumió el gobierno el presidente Héctor J. Campora y el 20 de junio retorno al país Juan domingo Perón. Ese día, cuando se había congregado en Ezeiza una inmensa multitud, un enfrentamiento entre grupos armados de distintas tendencias del peronismo provoco una masacre. El 13 de julio Campora y el vicepresidente solano lima renunciaron; ausente el titular del cenado, asumió la presidencia el de la Cámara de Diputados, Raúl Lastiri, que era yerno de José López Rega, el secretario privado de Perón y a la vez ministro de Bienestar Social. En septiembre se realizaron las nuevas elecciones y la formula Perón-Perón, que el líder compartió con su esposa Isabel (Maria Estela Martínez) alcanzo el 62% de los votos. El primero de julio del año siguiente murió Perón e Isabel lo reemplazo, hasta que fue depuesta por los jefes militares el 24 de marzo de 1976. Los tres años de la segunda experiencia peronista, verdaderamente prodigiosos por la concentración por la concentración de acontecimientos y sentidos, clausuraron- de manera desdichada y tenebrosa toda una época de la historia argentina. Es difícil saber en que momento de su exilio Perón dejo de verse a sí mismo como el insobornable jefe de la resistencia, dispuesto a desbaratar las tentaciones provenientes del poder, y se considero el destinado a pilotear el vasto proyecto de reconstrucción que asumió como ultima misión de su vida. Puede  dudarse, incluso, de si se trato de una decisión deliberada o si resulto arrastrado por sus circunstancias incontrolables aun para su talento táctico. Lo cierto es que, puesto en el juego armo su proyecto- parecido pero distinto al de 1945- sobre tres bases: un acuerdo democrático con las fuerzas políticas, un pacto social con los grandes representantes corporativos en una conducción mas centralizada de su movimiento, hasta entonces desplegado en varios frente y dividido en estrategias heterogéneas. Para  que funcionara, Perón necesitaba que la economía tuviera un desempeño medianamente satisfactorio- las expectativas eran buenas- y que pudiera reforzarse el poder del Estado, tal como lo reclamaba la mayoría de la sociedad. Este era un punto débil:  los mecanismo e instrumentos estaban desgastados y resultaron eficaces , y el control que Perón podía tener no era pleno, pues las Fuerzas Armadas se mostraban reticentes, pese a la rehabilitación mutua que se concedieron con Perón; el gobierno, finalmente, resulto corroído por la formidable lucha desencadenada dentro del movimiento. Así, una de las premisas de su acción fallo de entrada. El pacto social funciono mal casi desde el principio y termino echo añicos, mientras que el pacto democrático, aunque funciono formalmente bien y se respetaron los acuerdos, finalmente resulto irrelevante pues no sirvió ni para constituir una oposición eficiente ni para suministrar de por si, cuando los otros mecanismos fallaron, el respaldo necesario para el mantenimiento del gobierno constitucional. El gobierno de Reconstrucción i Liberación Nacional, presentado en mayo de 1973, pese a la concesión al clima de época que había en su titulo, consistía en un intento de superar las limitaciones al crecimiento de una economía cuyos rasgos básicos no se pensaba modificar. No había en el nada que indicaba una orientación hacia el "socialismo nacional", y tampoco un intento de buscar nuevos rumbos al desarrollo del capitalismo. Como en 1946, Perón recurrió para pilotearlo a un empresario exitoso, en este caso ajeno al peronismo: José Ver Gelbard, jefe de la Confederación General Económica, donde se nucleaba la mayoría de las empresas de capital básicamente nacional. Sus objetivos, acordes con los cambios ya consolidados en la estructura económica del país, eran fuertemente intervencionistas y en menor medida, nacionalistas y distribucionistas, y no implicaban un ataque directo a ninguno de los intereses establecidos. Siguiendo las tendencias de la década anterior, se esperaba apoyar el crecimiento de la economía tanto en una expansión del mercado interno- según la tradición de los empresarios que apoyaban a ambos partidos mayoritarios- cuanto en el crecimiento de las exportaciones.
Un día como hoy 20 de Junio de 2010 Juan Manuel Santos gana presidencia de Colombia con casi el 70% de los votos a su favor en segunda vuelta. El ex ministro de Defensa obtuvo el 69,5% de los votos en la segunda vuelta de las elecciones tras una jornada en la que murieron 10 militares y seis guerrilleros en incidentes aislados. Con el aplastante triunfo sobre Antanas Mockus y sus más de nueve millones de votos en el bolsillo, casi dos millones más que los logrados el 30 de mayo anterior, podrá imponer su sello personal. Además, se convirtió en el candidato a la Presidencia de Colombia que más votos ha logrado en los últimos 50 años. El ex ministro consiguió casi un millón y medio de votos más que el presidente Álvaro Uribe en las elecciones de 2006, cuando logró la mayoría absoluta en primera vuelta con 7,4 millones de votos. Pese a su derrota, Mockus logró un resultado digno con 3.570.543 votos, el 27,52% de los sufragios y unos 350.000 más que en la primera vuelta. Su reto será mantener unido el movimiento y prepararse para los comicios regionales y locales del año próximo. El lunar de la jornada electoral fue la alta abstención, que superó el 55%. La diferencia de 25 puntos en la primera vuelta, que hacía casi imposible superar la distancia entre ambos candidatos; el Mundial de Fútbol y la lluvia que no dejó de caer en varias ciudades a lo largo de toda la jornada fueron algunas razones que alejaron a los ciudadanos de las urnas. Santos, que debe buena parte de su caudal electoral a ser el heredero del legado uribista, consiguió que le votara una parte de los conservadores, liberales, así como seguidores de Cambio Radical cuyos principales líderes se habían adherido a su campaña. Al día siguiente lunes 21 de junio empezaría la conformación de su Gobierno, porque no quiso hablar antes con nadie sobre las carteras. Los nombres que elijiría serían la primera señal para saber hasta que punto es capaz de alejarse del uribismo y rodearse, como prometió, de los mejores con independencia de su procedencia partidista. También pronto anunciaría los países que visitaría como Presidente electo, aunque adelantó que no figuraría Washington en su agenda. Otro reto que empezaría a afrontar es el de superar las abismales diferencias que le separan de Hugo Chávez y solventar el problema judicial que enturbia sus relaciones con el Ejecutivo ecuatoriano. Poco después de conocer los resultados, Antanas Mockus se dirigió al país. "Las organizaciones y los partidos no están hechos para renunciar. A partir de hoy se consolida una nueva fuerza política independiente, el Partido Verde, una fuerza confiable, responsable, deliberante, con vocación de gobernar y permanecer en el tiempo", dijo un Mockus serio. El ex alcalde de Bogotá se mostró sereno, reposado, con aire presidencial, alejado de la imagen de predicador televisivo de la noche del 30 de mayo que tantos disgustos y críticas le generaron. Dijo que su relación con el nuevo gobierno estará caracterizada por la independencia. "Apoyaremos lo bueno y nos opondremos a lo malo". Repitió varias veces que seguirán trabajando en la política, que persistirán en su empeño de imponer sus ideas de transparencia, de legalidad y de respeto a la vida que les mueve. "Tenemos un sueño bueno y verdadero que ya se hizo realidad. Esta historia no termina hoy, hoy apenas comienza, hoy empezamos a cambiar Colombia", concluyó.

Hoy 20 de Junio se celebra el Día Mundial de los Refugiados

Por Compartiendo mi Opinión
Cada minuto, ocho personas lo dejan todo para huir de la guerra, la persecución o el terror y la mayoría tienen que elegir entre algo horrible o algo aún peor.

La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiaos, también conocida como ACNUR, trata de proporcionarles cierto bienestar, pero tiene que hacer frente a un número cada vez mayor de desplazados. 

Como una expresión de solidaridad con África, continente que alberga a la mayoría de los refugiados del mundo, la Asamblea General de las Naciones Unidas, adoptó la resolución 55/76 el 4 de diciembre de 2000, en la que declaraba el 20 de junio Día Mundial del Refugiado, haciéndolo coincidir así con el aniversario de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951.

En un mundo donde la violencia obliga a cientos de familias a huir cada día, La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados actualmente cree que ahora es el momento para mostrar a los líderes mundiales que el público global está aliado con los refugiados, y por lo tanto, presentó su petición de #ConLosRefugiados el 20 de junio de 2016 para enviar un mensaje a los gobiernos que deben trabajar juntos y hacer su parte con los refugiados.

La petición #ConLosRefugiados fue entregada en la sede de la ONU en Nueva York con ocasión de la sesión de la Asamblea General del 19 de septiembre. La petición pide a los gobiernos que:

Garanticen que todos los niños refugiados tengan acceso a la educación.

Garanticen que todas las familias refugiadas tengan un lugar seguro donde vivir.

Garanticen que todos los refugiados puedan trabajar o formarse para adquirir nuevas competencias y así poder contribuir positivamente a sus comunidades.

lunes, 19 de junio de 2017

Hoy 19 de Junio se celebra el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia Sexual en los Conflictos

Por Compartiendo mi Opinión
En Junio de 2015, la Asamblea General proclamó, en su resolución A/RES/69/293, el 19 de junio Día Internacional para la Eliminación de la Violencia Sexual en los Conflictos con el objetivo de concienciar sobre la necesidad de ponerle fin, honrar a las víctimas y los supervivientes de la violencia sexual de todo el mundo y rendir homenaje a todos quienes han dedicado su vida con valentía a la lucha para erradicar estos delitos y han perdido la vida en esa empresa.

La fecha fue elegida para conmemorar la adopción de la resolución 1820 del Consejo de Seguridad, el 19 de junio de 2008, en la que el Consejo condenó la violencia sexual como táctica de guerra y un impedimento para la consolidación de la paz.

La iniciativa de las Naciones Unidas contra la Violencia Sexual en los Conflictos (Campaña de la ONU Disponible en inglés), integrada por 13 entidades, fue lanzada en 2007 y representa un esfuerzo concertado de la ONU para mejorar la coordinación y rendición de cuentas, y apoyar los esfuerzos nacionales en esta materia, así omo más eficazmente a las necesidades de los sobrevivientes.

La iniciativa de la ONU está presidida por el Representante Especial del Secretario General sobre la violencia sexual en los conflictos, puesto ocupado por Pramila Patten de Mauricio desde abril del 2017. Ella sucede en el cargo a Zainab Hawa Bangura de Sierra Leone.

En 2015, esta campaña proporcionó un fondo catalizador para el despliegue de asesores de protección de la mujer a Côte d' Ivoire y la República Democrática del Congo, apoyando una asignación de las intervenciones para implementar la estrategia nacional con la que combatir la violencia por razón de género. También financió un proyecto conjunto en Bosnia y Herzegovina que apoya la justicia transicional.

Durante el año 2016 se celebraron por vez primera tres iniciativas dirigidas a combatir la violencia sexual en los conflictos. Todas ellas eran largamente esperadas y tenían una cosa en común: la fuerza incontenible de la voz y el liderazgo de las mujeres.

En febrero 2016, un tribunal nacional de Guatemala condenó a dos ex oficiales militares por cometer violencia sexual durante la guerra civil del país; fue la primera vez en la historia del mundo que un tribunal nacional imputaba cargos de esclavitud sexual durante un conflicto armado. Las organizaciones de mujeres trabajaron durante años con las mujeres indígenas para profundizar en el asunto, que la Fiscal General de Guatemala presentó ante el tribunal, que estaba presidido por una magistrada.

En marzo 2016, la Corte Penal Internacional (CPI) dictó su primera condena por delitos sexuales y de género. Un tribunal íntegramente femenino, formado por tres juezas, presidió el asunto contra el ex Vicepresidente congoleño Jean-Pierre Bemba, al que una fiscal logró enjuiciar gracias a unos niveles de participación sin precedentes por parte de las mujeres víctimas y testigos en la República Centroafricana.

En mayo 2016, las Salas Africanas Extraordinarias del Senegal condenaron al ex Presidente del Chad, Hissène Habré, por crímenes de guerra y delitos de lesa humanidad, que incluían la violación y la esclavitud sexual. Fue el primer asunto de jurisdicción universal enjuiciado en África, y la primera vez que se declaraba la responsabilidad personal de un ex Jefe de Estado por cometer violaciones como delito internacional. Esta condena no habría sido posible sin los testimonios de las mujeres y la inspiradora resolución de las y los abogados, de las y los defensores de las víctimas y los derechos humanos, así como de las organizaciones de la sociedad civil locales e internacionales.