Compilado por Luis Montes Brito
Un
día como hoy 7 de junio de 1099 se inicia el sitio de Jerusalén, durante la
Primera Cruzada. Las Cruzadas fueron una serie de campañas militares impulsadas
por el papa y llevadas a cabo por gran parte de la Europa latina cristiana,
principalmente por la Francia de los Capetos y el Sacro Imperio Romano. Las
cruzadas, con el objetivo específico inicial de restablecer el control
cristiano sobre Tierra Santa, se libraron durante un período de casi doscientos
años, entre 1099 y 1291. Más adelante, otras campañas en España y Europa
Oriental, de las que algunas no vieron su final hasta el siglo XV, recibieron
la misma calificación. Las cruzadas fueron sostenidas principalmente contra los
musulmanes, aunque también contra los esclavos paganos, judíos, cristianos
ortodoxos griegos y rusos, mongoles, cátaros, husitas, valdense, prusianos y
contra enemigos políticos de los papas. Los cruzados tomaban votos y se les
concedía indulgencia por los pecados del pasado. El origen de la palabra
cruzada se remonta a la cruz hecha de tela y usada como insignia en la ropa
exterior de los que tomaron parte en esas iniciativas. Gregorio VII fue uno de
los papas que más abiertamente apoyó la cruzada contra el islam en la península
ibérica y quien, a la vista de los éxitos conseguidos, concibió utilizarla en
Asia Menor para proteger a Bizancio de las invasiones turcomanas. Su sucesor,
Urbano II, fue quien la puso en práctica. El llamamiento formal tuvo lugar en
el penúltimo día del Concilio de Clermont (Francia), el martes 27 de noviembre
de 1095. En una sesión pública extraordinaria celebrada fuera de la catedral,
el papa se dirigió a la multitud de religiosos y laicos congregados para
comunicarles una noticia muy especial. Haciendo gala de sus dotes de orador,
expuso la necesidad de que los cristianos de Occidente se comprometieran a una
guerra santa contra los turcos, que estaban ejerciendo violencia sobre los
reinos cristianos de Oriente y maltratando a los peregrinos que iban a
Jerusalén. Prometió remisión de los pecados para quienes acudieran, una misión
a la altura de las exigencias de Dios y una alternativa esperanzadora para la
desgraciada y pecaminosa vida terrenal que llevaban. Deberían estar listos para
partir al verano siguiente y contarían con la guía divina. La multitud
respondió apasionadamente con gritos de Deus lo vult ('¡Dios lo quiere!') y un
gran número de los presentes se arrodillaron ante el papa solicitando su
bendición para unirse a la sagrada campaña. La Primera Cruzada (1095-1099)
había comenzado. El sitio de Jerusalén comprendido dentro de las batallas de la
Primera Cruzada fue un asedio que tuvo lugar entre un día como hoy 7 de junio de 1099 y el 15 de julio del mismo
comprendida durante la Primera Cruzada. Los cruzados lograron penetrar y
conquistar la ciudad santa de Jerusalén de manos del califato fatimí de Egipto.
Los fatimíes intentaron llegar a un acuerdo de paz con la condición de que los
cruzados no continuasen hacia Jerusalén, pero fueron ignorados. Iftikhar
ad-Daula, el gobernador fatimí de Jerusalén, aparentemente no entendía el
motivo que había llevado a los cruzados hasta ahí. El día 13 de mayo de 1099 llegaron
a Trípoli, y su gobernante les dio dinero y caballos. Según la crónica anónima
Gesta Francorum, también juró convertirse al cristianismo si los cruzados
tenían éxito en la captura de Jerusalén de manos de sus enemigos fatimíes. Desde
ahí, los cruzados siguieron en dirección sur, a lo largo de la costa, y pasaron
por Beirut el 19 de mayo y por Tiro el 23 de mayo, girando entonces tierra adentro
hacia Jaffa para llegar a Ramala el 3 de junio. Esta última ciudad ya había
sido abandonada por sus habitantes cuando llegaron los cruzados. Los cruzados
se detuvieron para establecer ahí la iglesia de San Jorge (un santo muy popular
para los cruzados) para luego dirigirse a Jerusalén. El 6 de junio Godofredo
envió a Tancredo y a Gastón para capturar la ciudad de Belén, lugar en el que
Tancredo hizo ondear su estandarte desde la Iglesia de la Natividad. Un día
como hoy 7 de junio de 1099 los cruzados llegaron a Jerusalén, momento en el
que muchos de los cruzados llegaron incluso a echarse a llorar al contemplar el
objetivo tanto tiempo anhelado. Al igual que ocurrió con Antioquía, los
cruzados sitiaron la ciudad. Posiblemente el asedio fue más duro para los
propios cruzados que para los ciudadanos de Jerusalén, puesto que los primeros
tenían una mayor escasez de agua y comida al no haber lugares en los que
aprovisionarse cercanos a la ciudad. Jerusalén, sin embargo, estaba bien
preparada para aguantar el asedio, y el gobernador fatimí había expulsado
previamente a la mayoría de los cristianos. Del total estimado de 7000
caballeros que habían tomado parte en la Primera Cruzada, sólo quedaban unos
1500, junto con otros 12,000 soldados de a pie en buen estado físico (de un
total que puede haber sido de unos 20,000). Godofredo, Roberto de Flandes y
Roberto de Normandía (que también había dejado a Raimundo para unirse a
Godofredo) asediaron el norte de la ciudad hasta la altura de la Torre de
David, mientras que Raimundo establecía su campamento en el muro oeste, desde
la Torre de David hasta el Monte Sion. Un primer asalto directo sobre las
murallas el 13 de junio resultó un fracaso. Por otro lado, sin agua ni comida
tanto los hombres como los animales morían de sed y de inanición, por lo que
los cruzados eran conscientes de que el tiempo no corría de su parte. Sin
embargo, poco después del primer asalto llegaron un cierto número de naves
cristianas al puerto de Jaffa, y los cruzados pudieron volver a aprovisionarse
durante un tiempo. También comenzaron a acumular madera traída desde Samaria
para poder construir maquinaria de asedio. Sin embargo, seguían con carencias
de agua y de comida, y para finales de junio comenzaron a llegar noticias de
que un ejército fatimí estaba marchando desde el norte de Egipto. Enfrentados a
lo que parecía una tarea imposible, la moral del ejército subió cuando un cura
llamado Pedro Desiderio aseguró haber tenido una visión divina en la que el
fantasma de Ademar le comunicó que debían ayunar durante tres días y luego
marchar descalzos en procesión alrededor de las murallas de la ciudad. Después
de esto, la ciudad caería en un plazo de nueve días, siguiendo el ejemplo
bíblico de Josué en la conquista de Jericó. A pesar de que ya estaban
hambrientos, hicieron el ayuno y marcharon en procesión el día 8 de julio, con
el clero haciendo sonar las trompetas y cantando salmos mientras que los
defensores de la ciudad se reían de ellos. La procesión terminó en el Monte de
los Olivos, en dónde Pedro el Ermitaño, Arnulfo de Chocques y Raimundo de
Aguilers pronunciaron varios sermones. El
asalto final y la masacre. A lo largo del asedio, los cruzados llevaron a
cabo diversos ataques contra las murallas de la ciudad, pero todos fueron
repelidos. Las tropas genovesas dirigidas por Guillermo Embriaco habían
desmantelado las naves en las que habían llegado a Tierra Santa y, utilizando
la madera procedente de esas naves, construyeron algunas torres de asedio.
Estas torres fueron enviadas hacia las murallas de la ciudad la noche del 14 de
julio entre la sorpresa y la preocupación de la guarnición defensora. A la
mañana del día 15, la torre de Godofredo llegó a su sección de las murallas
cercana a la esquina noreste de la ciudad y, según el Gesta, dos caballeros
procedentes de Tournai llamados Letaldo y Engelberto fueron los primeros en
acceder a la ciudad, seguidos por Godofredo, su hermano Eustaquio, Tancredo y
sus hombres. La torre de Raimundo quedó frenada por una zanja pero, dado que
los cruzados ya habían entrado por la otra vía, los guardias se rindieron a
Raimundo. Una vez que los cruzados consiguieron entrar en la ciudad comenzaron
a realizar una masacre en la cual murieron casi todos los habitantes de
Jerusalén. La masacre se prolongó durante la tarde, la noche y la mañana del
día siguiente. Fueron masacrados musulmanes, judíos, e incluso algunos
cristianos en un arranque de violencia indiscriminada. Muchos musulmanes
buscaron refugio en la mezquita de Al-Aqsa en donde, según un famoso relato de
Gesta Francorum, «...la carnicería fue tan grande que nuestros hombres andaban
con la sangre a la altura de sus tobillos...». Según Raimundo de Aguilers, uno
de los hombres que participó en aquella masacre, Raimundo de Aguilers, canónigo
de Puy, dejó una descripción para la posteridad que habla por sí sola: “Maravillosos
espectáculos alegraban nuestra vista. Algunos de nosotros, los más piadosos,
cortaron las cabezas de los musulmanes; otros los hicieron blancos de sus
flechas; otros fueron más lejos y los arrastraron a las hogueras. En las calles
y plazas de Jerusalén no se veían más que montones de cabezas, manos y pies. Se
derramó tanta sangre en la mezquita edificada sobre el templo de Salomón, que
los cadáveres flotaban en ella y en muchos lugares la sangre nos llegaba hasta
la rodilla. Cuando no hubo más musulmanes que matar, los jefes del ejército se
dirigieron en procesión a la Iglesia del Santo Sepulcro para la ceremonia de
acción de gracias”. La crónica de Ibn al-Qalanisi establece que los defensores
judíos buscaron refugio en su sinagoga, pero que los "francos" (los
cruzados) la prendieron fuego con ellos dentro, matando a todo el mundo en su
interior. También dice que los cruzados rodearon el edificio en llamas mientras
cantaban "Cristo, ¡Te Adoramos!".
Tancredo, por su parte, reclamó el control del Templo de Jerusalén, y
ofreció protección a algunos de los musulmanes que se habían refugiado ahí. Sin
embargo, fue incapaz de evitar su muerte a manos de sus compañeros cruzados. El
gobernador fatimí Iftikhar ad-Daula se retiró hasta la Torre de David, y acabó
rindiéndose a Raimundo a cambio de un salvoconducto para él y su guardia hasta
Ascalón. Por otra parte, la Gesta Francorum establece que algunas personas
lograron escapar a la toma de Jerusalén vivas. Su autor escribió: “Cuando los paganos habían sido
vencidos, nuestros hombres capturaron a muchos, tanto mujeres como hombres, y o
bien les daban muerte o les mantenían cautivos." Más tarde se dice,"
(Nuestro líderes) también ordenaron que todos los sarracenos muertos fuesen
enviados fuera de la ciudad debido al hedor, puesto que toda la ciudad estaba
llena de cuerpos; y por ello los sarracenos vivos arrastraron a los muertos
hasta las salidas de las murallas y los colocaron en piras, como si fuesen casas.
Nunca nadie pudo ver u oír de una masacre como esa de paganos, puesto que las
piras funerarias se alzaban como pirámides, y nadie sabe su número salvo el
mismo Dios”. El historiador Thomas F. Madden considera que la masacre producida
tras la toma de la ciudad fue exagerada por cronistas musulmanes posteriores
para avivar el espíritu de la jihad contra los cruzados. Señala que no todos
los musulmanes murieron, algunos lograron escapar en el caos del asalto final
por las murallas este y oeste que habían sido desguarnecidas por los cruzados y
llegar a Damasco. Reconoce la masacre producida en la sinagoga de la ciudad
pero menciona que según documentos de la comunidad judía de El Cairo algunos
fueron perdonados para exigir un rescate. En cuanto a los musulmanes que se
refugiaron en la mezquita de Al-Aqsa Tancredo accedió a ofrecerles su
protección a cambio de un rescate pero otro grupo de cruzados los masacró. Debe
mencionarse que esta clase de masacres eran comunes en aquella época si una
ciudad o castillo caía tras un asedio, sobre todo cuanto más se resistieran los
sitiados. Eventos posteriores. Tras
la masacre, los cruzados ofrecieron a Raimundo de Tolosa el título de rey de
Jerusalén, pero lo rechazó. Después se le ofreció a Godofredo de Buillón, que
aceptó gobernar la ciudad pero rechazó ser coronado como rey, diciendo que no
llevaría una "corona de oro" en el lugar en el que Cristo había
portado "una corona de espinas". En su lugar, el 22 de julio, tomó el
título de Advocatus Sancti Sepulchri ("Protector del Santo Sepulcro")
o, simplemente, el de "Príncipe". Godofredo convenció a Raimundo para
que entregase también el control de la Torre de David. Raimundo partió en
peregrinaje, y en su ausencia, el 1 de agosto, Arnulfo de Chocques fue elegido
primer Patriarca Latino de Jerusalén. El 5 de agosto Arnulfo, tras consultar
con los supervivientes de la ciudad, descubrió las reliquias de la Vera Cruz. En
la última acción de la cruzada, Godofredo encabezó un ejército portando la Vera
Cruz en vanguardia contra un ejército fatimí invasor al que venció en la
batalla de Ascalón. Tras la victoria la mayoría de los cruzados consideraron
que habían cumplido con sus votos, y volvieron casi todos a casa. Otros
caballeros, sin embargo, se quedaron a defender las tierras recién
conquistadas. Entre ellos, Raimundo de Tolosa, disgustado por no ser el rey de
Jerusalén, se independizó y se dirigió a Trípoli (en el actual Líbano), donde
fundó el condado del mismo nombre. Godofredo murió en julio de 1100 y fue
sucedido por su hermano, entonces Balduino de Edesa, que sí que aceptaría el
título de rey de Jerusalén y sería coronado bajo el nombre de Balduino I de
Jerusalén. Con esta conquista finalizó la Primera Cruzada, la única exitosa. El
sitio de Jerusalén de 1099 pronto se convertiría en una batalla legendaria para
la cristiandad.
Un día como hoy 7 de junio de 1654 en Francia, Luis XIV
es coronado como rey. Luis XIV, llamado el Rey Sol; nació en Saint Germaine en Laye,
Francia, el 5 de septiembre de 1638. Falleció en Versalles, Francia, a los 77
años de edad, el 1 de Septiembre de 1715. Fue Rey de Francia entre 1643 a 1715,
más de 77 años de reinado.
“L’État, c’est moi” (el Estado soy yo) frase que pronunciaría para
recordar al Parlamento la primacía de su autoridad absoluta. Un día como hoy 7
de junio de 1654, tras un aplazamiento al que obligaban los disturbios de la
Fronda, Luis XIV era finalmente coronado en la catedral de Reims. Solo tenía
quince años. Felipe Mancini, uno de los sobrinos del cardenal Mazarino, tuvo el
honor de ser seleccionado como portador de la Sagrada Ampolla. Era una
distinción muy importante la que se le hacía al joven ese día, por todo el
significado que entrañaba: según la leyenda, el día de la coronación del rey
Clodoveo en dicha catedral, la Sagrada Ampolla llegó desde el cielo,
transportada por una paloma que se posó en las manos del obispo San Remigio,
con un ramillete de lirios (es decir, de flores de lis). La ampolla portaba el
óleo para ungir y santificar al rey, denotando así que su autoridad le era
otorgada por designio divino. Y éste es, pues, el origen de la flor de lis como
símbolo de la realeza francesa, representada habitualmente en oro sobre azur. Durante
la ceremonia de coronación de Luis XIV, otros notables personajes de la corte
tuvieron un papel destacado: el conde de Vivonne, primer caballero de la cámara
del rey, se ocupó del manto, el duque de Joyeuse del calzado y el hermano de
Luis XIV de las espuelas. El rey hizo su juramento, en virtud del cual prometía
mantener los derechos y privilegios de sus súbditos. Luego se preguntó a la
congregación, según era preceptivo, si aceptaban a Luis como rey. A
continuación se procedió a la bendición de las insignias reales: el obispo de
Soissons bendijo la espada, el cetro y la corona que según la tradición habían
pertenecido a Carlomagno. Otro de los símbolos es la aceptación del anillo
real, siguiendo el precedente establecido en la coronación de Enrique II en
1547. Mediante este símbolo el rey desposa solemnemente a su reino. Llegaba
entonces el momento de la consagración. El cuerpo del rey fue ungido nueve
veces con el óleo sagrado e investido con el poder milagroso atribuido a los
reyes de Francia para sanar a aquellos que padecían una enfermedad llamada
escrófula, infección tuberculosa en la piel del cuello que afecta a los
ganglios linfáticos provocando úlceras. Después el obispo le entregó el cetro
en la mano derecha, “mano de justicia”, y puso la corona sobre su cabeza. Lentamente,
el rey subió los escalones hasta el trono, donde recibió el homenaje de todos
los pares del reino. Se cantó un Tedeum, seguido de una misa en la que solo el
rey recibió la comunión bajo las dos especies. Al final de la ceremonia el
obispo entonó el “larga vida al rey”, se soltaron palomas y se abrieron las
puertas de la catedral para permitir tanto a los nobles y embajadores en el
interior como al pueblo que aguardaba fuera gritar juntos “¡Viva el rey!”. Al
ritual siguieron otras celebraciones que incluyeron la representación de una
obra teatral por parte de los jesuitas de Reims. Aquellos que no pudieron
asistir, contaron después con detalladas descripciones plasmadas en numerosos
panfletos que se repartieron por toda Francia, así como con grabados que habían
sido encargados al artista Henri d’Avice. La escena sería además recogida en un
tapiz diseñado por Charles Le Brun, uno de los principales pintores del reinado
de Luis XIV. Dos días después de la coronación, el rey tocó a dos mil enfermos
de escrófula, diciendo a cada uno: “Le roi te touche, Dieu te guérit” (“El rey
te toca, Dios te cura”). Era lo que se llamaba el toque de reyes. El mismo día
concedió el perdón a 600 prisioneros, lo que simbolizaba su intención de
cumplir su juramento y mostrar clemencia para con sus súbditos. Mediante la
sacralización de la ceremonia de la coronación se establece que el poder del
rey emana de Dios. La religión es lo único que limita su poder. El rey, como
representante de Dios en la tierra, está por encima de todos los hombres, pero
no por encima de las leyes divinas, las únicas a las que se somete. El rey sol
murió el 1 de septiembre de 1715 de gangrena, dejando abierta la puerta de la
decadencia política que viviría la monarquía francesa en los reinados
posteriores. Durante los últimos años de su vida Luis XIV tuvo que ver como su
familia también decaía, tres generaciones de sucesores murieron ante sus ojos,
primero en 1711, su hijo el Gran Delfín, luego su nieto el Duque de Borgoña,
después uno de sus biznietos, el duque de Bretaña, finalmente el hermano de
este último sería quien heredara el trono con el nombre de Luis XV, siendo
biznieto de Luis XIV. Primogénito de Luis XIII y Ana de Austria, quien
influyó decisivamente en su carácter y fue, al parecer, la responsable de su
mediocre instrucción («Ni siquiera le enseñaron a leer y escribir
correctamente», afirmaba el duque de Saint-Simon en sus memorias), subió al trono
cuando tenía cinco años y durante su infancia reinó bajo la tutela de su madre
y el gobierno de Mazarino. El comienzo del reinado de Luis XIV que coincidió
con la regencia de su madre, Ana de Austria, fue en cierta medida complicado;
sin embargo, los años posteriores de su gobierno abarcarían una etapa de
grandeza y hegemonía, un reinado en solitario donde sólo respondería de sus
acciones ante Dios y bajo la formula de
Un día como hoy 7 de junio de 1914 en Panamá, el transatlántico
estadounidense Alliance, de 40 000 toneladas, realiza la primera travesía de
prueba del Canal de Panamá, cruzándolo del océano Atlántico al Pacífico. Baso
en información de El Tiempo por Armando Caicedo. Treinta y tantos años de
construcción, con una inversión de 38 millones de dólares (de la época) y 162
millones de metros cúbicos de tierra removida, daban para una noticia más
destacada. Pero la herida aún está fresca. Solo diez años han pasado desde que
el Premio Nobel de la Paz de 1906, Theodoro Roosevelt símbolo en América Latina
de imperialismo y expansionismo despojara a Colombia, el 3 de noviembre de
1903, de Panamá. A los diez días del despojo, el Gobierno estadounidense
reconoció a la nueva nación soberana. Dos semanas más tarde, el Gobierno de
facto en Panamá estaba firmando con su similar de Estados Unidos el Tratado
Hay-Bunau-Varilla , mediante el cual Panamá cedía la franja de territorio
necesario para operar el Canal y el ejercicio soberano de la autoridad
estadounidense sobre ella, comprometiéndose los Estados Unidos, por su parte, a
garantizar la independencia de Colombia. La franja requerida por los
estadounidenses mide 200 millas de largo, por 10 de ancho, y fue traspasada a
perpetuidad, pues en el apresurado acuerdo ni siquiera se alcanzó a estipular
la duración de la cesión. Antes de un mes la Junta de Gobierno Provisional de
Panamá aprobó el acuerdo y siete semanas después hizo lo propio el Senado
estadounidense. En ese momento quedaron para los polvorientos archivos de la
historia las gestiones adelantadas por el Gobierno de Marroquín y el Tratado
Herrán-Hay , por medio del cual Colombia concedía una franja de 5 kilómetros a
lado y lado de la vía interoceánica, y se estipulaba la explotación de la obra
por 99 años, a cambio de diez millones de dólares oro y anualidades de un
cuarto de millón. El mencionado tratado, firmado en enero de 1903, debía ser
ratificado por los Congresos de los dos países antes de agosto. El Senado
estadounidense lo hizo en marzo, mientras que el Senado colombiano, enzarzado
en agitados debates políticos, lo rechazó. Un día como hoy 7 de junio de 1914,
el buque Alliance, desplazando 40.000 toneladas, realizó la primera travesía de
prueba en el Canal de Panamá. Pero solo hasta el 15 de agosto de 1914 la draga
Ancón será oficialmente el primer navío en cruzar los 82 kilómetros que separan
a bahía Limón, en el Atlántico, de la bahía de Panamá, en el Pacífico. En
contraste con los 68 días empleados, por el Oregón entre los dos océanos, la
draga Ancón ha completado en diez horas la travesía, y se ha superado la
diferencia de 26 metros de altura que existe entre los dos océanos, mediante la
utilización de un sistema de esclusas que estarán en servicio quizás, 99 años
más. En 1920, terminados los acabados, se inauguró oficialmente la ruta interoceánica.
A partir de entonces, cada año, pasarán en promedio 15.000 buques en ambas
direcciones. A finales de la década de los sesenta, el umbral de las esclusas
empezará a ser demasiado angosto para los grandes portaaviones de guerra.
Un día como hoy 7 de junio de
1915
por decreto legislativo se oficializa el nombre de «República de El Salvador»
en sustitución de «República del Salvador». Con Información de noticia
publicada por LaPagina.com por Diana Arias. Antes de 1915 el nombre era
"Estado del Salvador" lo que generó muchas dificultades con las
relaciones exteriores. El Salvador celebra este día un nuevo aniversario de
llamarse “República de El Salvador”, de acuerdo al decreto legislativo del 7 de
junio de 1915, que señaló que la forma de escribir el nombre sería de esa
manera. Con el fin de revelar un poco de la historia del país, la Secretaría de
la Cultura presentó el libro "El nombre oficial de la República de El
Salvador", en el cual se describe como dejó de llamarse "Estado del
Salvador", tal como se le conoció al país desde 1824 cuando se decretó la
primera Constitución. Desde aquel año de 1824 hasta 1958 se convirtió en
costumbre llamar a El Salvador de las siguientes formas: Salvador, del Salvador
o El Salvador. En 1915, la situación sobre el nombre fue motivo de un decreto
que declaró que el nombre oficial sería “El Salvador”. Sin embargo, el decreto
no fue efectivo y, en 1958, la nación aclaró con un nuevo mandato a sus
ciudadanos y al mundo de manera definitiva, cuál sería su nombre propio y
oficial, según los autores del libro Óscar Meléndez y Carlos Pérez, de la
dirección nacional de Investigaciones de Cultura y Arte, de Secultura. Los
historiadores a cargo del documento afirmaron que el decreto se hizo para evitar
las repetitivas incorrecciones para nombrar el país. “Las medidas adoptadas por
los representantes de El Salvador en el mundo han quedado ampliamente
registradas en los archivos diplomáticos, y dan cuenta del trabajo crucial y
efectivo que desarrollaron los diplomáticos”, dijeron. De acuerdo al ejemplar,
el nombre El Salvador fue tomado de San Salvador, la nominación que los
españoles le dieron a la primera villa que fundaron en estas tierras, aunque el
lugar del asentamiento y la fecha no están registradas. El único registro que
existe es en un archivo de Guatemala que menciona que, en mayo de 1525, Diego
de Holguín se ausentó “para ocupar el cargo de alcalde ordinario de San
Salvador”. En el marco del centenario de esta condición, la Secretaría de la
Cultura también presentó una emisión de sellos postales conmemorativos y la
agenda pedagógica sobre el estudio de la efeméride, que se pretende rescatar en
virtud de la promoción de los valores identitarios de la cultural del país.
Un día como hoy 7
de junio de 1929 en Roma, Italia, la Ciudad del Vaticano se convierte en
un estado soberano. Después de una disputa que existía con Italia desde 1870,
un día como hoy 7 de junio de 1929 se firman los Pactos de Letrán, entre
representantes de la Santa Sede y el primer ministro italiano, dando autoridad
a la Ciudad del Vaticano que toma desde entonces el nombre de Estado de la
Ciudad del Vaticano. Su nombre viene del monte Vaticano (probablemente del
latín vaticinĭum: predicción, vaticinio; o vāticinātio: profecía, vaticinio,
pues antiguamente la colina era la sede de un oráculo etrusco o tal vez del
nombre de un poblado del mismo origen, Vaticum). En italiano la denominación
completa es Stato della Città del Vaticano. En latín, idioma oficial de la
Santa Sede, se traduce como Status Civitatis Vaticanæ. El Estado del Vaticano
es uno de los seis microestados europeos y es considerado el país más pequeño
del mundo, con tan sólo 44 hectáreas de extensión y una población de
aproximadamente 900 habitantes. Es también calificado como el estado
independiente más urbanizado del mundo. Su lengua oficial es el latín, su
máximo jerarca es el Sumo Pontífice, alberga la Santa Sede y su forma de
gobierno es considerada una monarquía absoluta y electiva, además de una
teocracia. La Ciudad del Vaticano es, desde la firma del Tratado de Letrán
entre el Reino de Italia y la Santa Sede, el estado soberano más pequeño del
mundo, por número de habitantes y por extensión de su territorio. Este país, de
apenas 44 hectáreas de superficie en las que viven unas 800 personas, cuenta
con todos los símbolos propios de una nación independiente: bandera, himno,
moneda, sellos, ejército y matrículas propias. Además, desde 1984 la Ciudad
está reconocida por la Unesco como patrimonio cultural y natural de la
humanidad. El Vaticano, un estado
independiente con símbolos propios. Los papas fueron dueños y señores de
los Estados Pontificios hasta que el reino creado tras el proceso de
unificación italiana (1848-1870) los dejó «prisioneros en el Vaticano». Esta
situación concluirá más de medio siglo después, cuando el Reino de Italia
reconoce la soberanía de la Ciudad del Vaticano en los pactos de Letrán el 11
de febrero de 1929. Los firmantes del acuerdo fueron el jefe de gobierno
italiano Benito Mussolini y el cardenal Pietro Gasparri. Los pactos
reconocieron asimismo a la Santa Sede el gobierno de la Iglesia Católica,
entonces liderada por el Papa Pío IX y que con el Tratado pasaba a ser la
oficial de Italia. A partir de entonces, el resto de países aceptarán la
independencia de esta monarquía absoluta en la que el Sumo Pontífice posee,
como Jefe de Estado, plenos poderes ejecutivos, legislativos y judiciales. Las
fronteras de este país están delimitadas por las murallas que rodean la Ciudad
-llamadas «leoninas» por el Papa León IV, que mando construirlas- y las dos
columnatas que rodean la plaza de San Pedro, unidas en la parte exterior por
una línea de travertino en el pavimento. Además del propio territorio de la
Ciudad, la jurisdicción del Estado vaticano se extiende a otros lugares de
Roma, como el palacio de Castelgandolfo y las basílicas de San Juan de Letrán,
San Pablo Extramuros y Santa María la Mayor. Se trata de un país sin mar, pero
gracias a la Declaración de Barcelona de 1921, el Vaticano tiene derecho a
navegar con barcos propios que ondeen la bandera pontificia. En cualquier caso,
según informa el propio Estado vaticano en su página web, no ejerce este
derecho. La ciudadanía vaticana no se hereda ni adquiere al nacer dentro de los
muros del Estado, sólo se obtiene a través del servicio prestado a la Iglesia
Católica. Así, son ciudadanos vaticanos los cardenales, los miembros de las
representaciones pontificias, los laicos que trabajan allí y los guardias
suizos. En total, unas 450 personas. Esta ha sido siempre la residencia del
Sumo Pontífice de la Iglesia Universal, aunque a partir de 1309 y durante más
de un siglo la sede papal se trasladó a Aviñón. Como cualquier país. La Ciudad tiene su propia moneda de curso
legal, el euro vaticano. Ha mostrado las efigies de los papas Juan Pablo II y
Benedicto XVI y pronto lo hará con la de Francisco. El Vaticano la acuña en
Italia, hasta un máximo de un millón de euros al año. También emite sus propios
sellos, edita su propio periódico -L'Osservatore Romano- y desde Radio Vaticana
emite para todo el mundo programas en diversas lenguas. Incluso tiene
matrículas de coche propia: con las letras SCV para los automóviles propiedad
del Estado y CV para los de procedencia externa. La Ciudad del Vaticano cuenta
también con su ejército y policía: la Gendarmería y la Guardia Suiza. Esta
última, uniformada con diseños de Miguel Ángel, vela por la seguridad del Sumo
Pontífice y del Estado. El Vaticano, un
estado independiente con símbolos propios. La bandera vaticana. Como
cualquier país, la Ciudad del Vaticano tiene su propia bandera y escudo. Este
último muestra sobre un campo rojo las llaves de San Pedro, de oro y plata,
cruzadas bajo la tiara Papal. La bandera del país tiene en su diseño oficial
proporciones 1-1 -vaya, que es cuadrada- y está formada por dos campos
verticales, amarillo el del asta y blanco el exterior. Sobre la franja blanca
figura el escudo pontificio. La enseña era antes carmesí y amarilla, los
colores de la Roma imperial, pero Pío VII ordenó cambiarlos en 1808 dado que
eran utilizados por las tropas italianas al servicio de Napoleón. Con los
pactos de Letrán la insignia -ya con el diseño actual, que incluye el escudo-
se convierte en oficial de un Estado soberano. El himno oficial del país es la
Marcha Pontificia de Gounod, compositor francés conocido por su Ave María y por
ser el autor de la música de la ópera Fausto. Se interpretó por primera vez en 1869
en la celebración de la coronación del Papa Pío IX. Más adelante, otro Pío, el
duodécimo, estableció en 1949 la sustitución del anterior himno -la Marcha
Triunfal de Hallmayr- por la Marcha de Gounod, de tono más religioso. El himno
tiene dos letras, una en italiano, comúnmente cantada y obra de Antonio
Allegra, y otra en latín, de Raffaello Lavagna.
Un día como
hoy 7 de junio de 1942 en el marco de la Segunda Guerra Mundial, concluye la
Batalla de Midway, una victoria crucial de Estados Unidos contra la armada y la
aviación japonesa. La batalla de Midway fue un conflicto aeronaval librado, iniciando
el 4 de junio de 1942 y terminando un
día como hoy 7 de junio de 1942 en el teatro del Pacífico durante la Segunda
Guerra Mundial. En ella, las fuerzas aeronavales estadounidenses detuvieron el
intento japonés de invadir el atolón de Midway, donde los primeros tenían una
base militar. Se libró un mes después de la batalla del Mar de Coral, cinco
meses después de la conquista japonesa de la isla Wake y seis meses después del
ataque a Pearl Harbor, que supuso el inicio del conflicto en el océano Pacífico
entre japoneses y estadounidenses. La derrota japonesa supuso un serio
obstáculo para sus planes de expansión por el resto del Pacífico y fue un
«punto de inflexión» en el conjunto del conflicto. Por esto, Midway es
generalmente considerada la batalla más importante de la Guerra del Pacífic. Tras
el éxito inicial de la campaña japonesa en el Pacífico en la que Japón atacó la
base de Pearl Harbor y puntos clave del Sudeste Asiático como Filipinas o Hong
Kong, la marina japonesa, una de las más fuertes del mundo, parecía invencible.
No obstante si de verdad quería Japón controlar todo el Pacífico debería acabar
con los portaaviones americanos que amenazaban el suelo japonés debido a la
poderosa fuerza aérea que poseían los americanos. En su escalada por el
Pacífico los japoneses eligieron la base americana del atolón de Midway como
próximo objetivo ya que la base, vital para los intereses estadounidenses,
estaba defendida por los mejores barcos americanos. No obstante el servicio de
inteligencia de Estados Unidos había conseguido descifrar un mensaje japonés en
el que se anunciaban las intenciones de atacar las islas de Midway por lo que
Estados Unidos pudo concentrar unas fuerzas considerables en la zona, en total
3 portaaviones el Enterprise, Hornet y Yorktown, ocho cruceros, quince
cazatorpederos, diecinueve submarinos y cerca de 373 aviones de combate. Por
parte nipona las fuerzas concentradas eran aún mayores, cuatro portaaviones, un
portaaviones ligero, catorce cruceros, treinta y dos cazatorpederos, nueve
acorazados y cerca de 433 aviones de combate, la Batalla de Midway, la batalla
naval más importante de la Segunda Guerra Mundial en el Pacífico estaba a punto
de comenzar. La operación japonesa consistía en una operación anfibia, por un
lado se pretendía encontrar a la flota enemiga y destruirla y por otro ocupar
las islas desembarcando un importante número de soldados en ella. En la madrugada
del 4 de Junio de 1942, 108 aviones de combate japoneses dieron comienzo a la
Batalla de Midway bombardeando la base americana con efectividad pero con
grandes bajas por culpa de un esfuerzo combinado de artillería antiaérea y un
puñado de pilotos americanos que se prestaron a defender la isla, siendo las
bajas americanas también elevadas. A pesar del bombardeo japonés, las defensas
de la isla no fueron totalmente abatidas por lo que era necesario realizar otra
misión de bombardeo. Al mismo tiempo Japón había enviado 6 aviones de
reconocimiento con el fin de detectar a la flota americana, pero dicha misión
fue un fracaso puesto que las malas condiciones meteorológicas no permitieron
encontrar a dicha flota. Como respuesta a este primer ataque varios bombarderos
estadounidenses despegaron de la isla para atacar a la flota japonesa pero la
lentitud de los bombarderos estadounidenses les convertía en blanco fácil para
los cazas y antiaéreos japoneses que los derribaron con suma facilidad
permaneciendo su flota intacta. Cerca de las 7 de la mañana un avión de
reconocimiento japonés localizó por fin a la gran flota americana, pero el
mando japonés tenía un problema, cargar sus aviones con torpedos y despegar les
llevaría cerca de 45 minutos, justo el tiempo en el que la oleada que había
atacado Midway volvería a los portaaviones sin casi combustible, por lo que los
aviones que podrían atacar a la flota americana debían esperar a que los otros
aviones japoneses llegasen de la isla. Sin embargo las órdenes americanas eran
completamente opuestas, cualquier avión debería atacar con todo a la flota
japonesa prácticamente tan pronto estuviese en el aire, aunque no tengan un
grupo de aviones muy numeroso para atacar conjuntamente. De esta forma el
ataque americano fue rápido y conciso. Dos pequeñas oleadas de caza-torpederos
atacaron a la flota japonesa, de la primera oleada tan solo volvió un piloto y
de la segunda pocos más. No obstante a pesar de no causar grandes daños en los
portaaviones japoneses, si consiguieron desorganizarlos, variar sus movimientos
y lo que es más importante, mantener ocupados a los zeros (cazas japoneses) que
lo escoltaban, ya que estos perseguían a los caza-torpederos estadounidenses
descuidando la defensa de los portaaviones. Con los ataques japoneses
prácticamente paralizados por las maniobras evasivas de los portaaviones y con
la escolta de los portaaviones entretenida cazando aviones americanos, varios
grupos de bombarderos estadounidenses se aproximaron a gran altura a los
portaaviones y dejaron caer sus bombas asestando un golpe directo a la marina
de Japón ya que en apenas 6 minutos, los bombarderos acabaron con 3 de los 4
portaaviones japoneses. Al ver esto, los aviones del último portaaviones
japonés envió a sus aeronaves a atacar a la flota estadounidense hundiendo al
portaaviones americano YorkTown. Finalmente los bombarderos estadounidenses
alcanzaron al cuarto portaaviones americano, dejando a muchos pilotos japoneses
dando vueltas en el aire hasta que tras quedarse sin combustible tuvieron que
aterrizar en el mar. Durante los siguientes días las hostilidades continuaron
pero sin casi consecuencias reseñables para ninguno de los dos bandos. Las
consecuencias de la Batalla de Midway fueron determinantes en la Segunda Guerra
Mundial, la marina japonesa había sufrido un daño irreparable y la marina
estadounidense a pesar de haber perdido un portaaviones apenas se resintió de
la batalla. Fruto de la Batalla de Midway y de la Batalla de Guadalcanal Japón
perdió la iniciativa en la guerra y tuvo que pasar a la defensiva no recuperándola
jamás. Además de los barcos, Japón perdió un gran número de experimentados
pilotos que habían sido entrenados durante los años anteriores a la guerra y
que al igual que los barcos perdidos, eran irreemplazables a corto plazo. A
pesar de que el resultado de la Batalla de Midway fue ocultado a la opinión
pública, la derrota afecto a la moral y a la forma de plantear las acciones
militares al alto mando japonés. Por su parte la marina de Estados Unidos se
consolidó como la mejor marina del mundo por delante de la inglesa y de la
propia Marina Japonesa. La Segunda Guerra Mundial en el Pacífico parecía tener
ya vencedor, eso sí, la victoria americana no iba a ser fácil.
Resumen de la Batalla de Midway:
Guerra:
Segunda Guerra Mundial.
Batalla:
Batalla de Midway.
Beligerantes
Estados
Unidos, Japón
Inicio
4 de junio de 1942 a un día como hoy 7 de Junio de 1942.
Lugar:
Islas de Midway.
Resultado:
Victoria estadounidense.
Clave:
Descifrado de los mensajes japoneses.
Bajas:
Estados
Unidos: 1 portaaviones, 1 destructor, 150 aviones, 307 hombres.
Japón:
4 portaaviones, 1 crucero pesado, 248 aviones, 3057 hombres
Un día como hoy 7
de junio de 1975 Sony introduce la videograbadora Betamax para la venta al
público. El Betamax una video casetera,
de la compañía Sony, de formato analógico permitió durante años a las familias
grabar programas de televisión para verlos después, fue puesta a la venta al
público un día como hoy 7 de junio de 1975. Fue líder del mercado hasta que
perdió cuota ante un fuerte competidor, el VHS. Y aunque fue derrotado en esa
batalla, ganó otra: una cruenta guerra en los tribunales contra los gigantes
Universal y Disney, quienes lo acusaban de infringir los derechos de autor de
películas y programas.Durante años este formato analógico permitió a las
familias grabar programas de televisión para verlas después. Gracias a ello su
caso, el caso Betamax, se estudió durante años en las facultades de derecho de
todo el mundo. La guerra con el VHS. Sony
introdujo el Betamax al mercado un día como hoy 7 de junio de 1975, como la
alternativa para video del clásico casete compacto de audio de Phillips. Heredó
los detalles de diseño de dos formatos anteriores, la videograbadora de Sony y
el U-Matic, de uso profesional. Era un cartucho de plástico de 16 x 9,6 x 2,5
centímetros y alojaba una cinta de 12,65 milímetros de ancho y 150 metros de
longitud. El cartucho alojaba una cinta de 12,65 milímetros de ancho y 150
metros de longitud que permitía una hora de grabación. El producto de Sony tuvo
el mercado de la videograbación solo para él durante casi un año, hasta que JVC
y Matsushita (Panasonic) lanzaron el VHS. Con ello inició una guerra entre
ambos formatos, que terminó perdiendo Sony. En ello fue crucial la diferencia
de tiempo de grabación que una y otra ofrecían: una hora Betamax y el doble,
dos, VHS. Y eso que Betamax era más pequeño que el casete de la competencia, su
cinta tenía mayor resolución y ofrecía mejor calidad de sonido. Aunque los
expertos señalan que también tuvo que ver que Sony nunca dejó su licencia, para
no sacrificar sus ganancias por ella, mientras que JVS autorizó que otras
empresas utilizaran su tecnología. Así, para 1984 solo 12 compañías fabricaban
aparatos compatibles con Betamax, mientras había 40 fabricantes de
reproductores VHS. Como consecuencia, ese mismo año Sony vendió 2,3 millones de
unidades de su cinta para video y JVC tres veces esa cantidad. La batalla con Universal y Disney. Hubo
otro factor que hizo que Betamax empezara a perder cuota de mercado. En 1979
Universal Studios y The Walt Disney Company acusaron a Sony de infringir con
Betamax el derecho de copia de los programas de televisión y de películas. Sony
libró una batalla en los tribunales contra Universal y Disney, y finalmente
ganó. El poderoso estudio cinematográfico y la segunda compañía de medios de
comunicación y entretenimiento más grande del mundo temían que la posibilidad
de grabar contenidos con derechos de autor acabara con el cine para siempre. Pero
cinco años después, el 17 de enero de 1984 la Corte Suprema de Estados Unidos
le dio la razón a Sony. El máximo tribunal del país consideró que grabar
contenidos para verlos después de forma privada cumplía con el uso que permitía
la ley de protección de la propiedad intelectual de la época. El temor de ambas
compañías era que grabar contenidos con derecho de autor terminaría con el
cine, algo que se replicó en la industria de la música. Y también concluyó que
si había que ampliar las limitaciones que establecía dicha regulación, no le
correspondía a la Corte Suprema hacerlo. Superviviente.
Por lo tanto, Betamax ganó algunas batallas y perdió otras, pero a todas
ellas sobrevivió. Y desde el lanzamiento del innovador formato Sony siguió
sacando al mercado aparatos compatibles con el formato y fue añadiendo a éste
tecnologías que aumentaban sus prestaciones. Por ejemplo, en 1975 sacó al
mercado un videograbador junto con un televisor de gran tamaño. Y en 1976
empezó a vender el grabador por separado. Este formato fue el favorito de
medios de comunicación y profesionales. En 1983 introdujo el sonido
estereofónico en pistas de alta fidelidad. Tres años después, en 1986, salió al
mercado el teatro para el hogar a base de cintas Betamax, el mismo concepto de
los modernos DVD con amplificadores y altavoces. En el ámbito profesional
Betamax fue el medio clásico para hacer cortometrajes y también para varios
medios de comunicación, especialmente debido a su bajo precio. Lo fue hasta que
le comió terreno el sistema miniDV, un formato de menor tamaño que el Betamax. Sony
dejó de fabricar el último equipo para reproducir el formato Betamax en 2002,
pero a día de hoy se pueden comprar por internet, en tiendas como Amazon. El
presidente y director ejecutivo de Sony, Kazuo Hirai, dio su última charla
sobre Betamax en Las Vegas, EE.UU., el año pasado. Quizá por esa vía se podrán
adquirir en el futuro estas cintas de video tan innovadoras en su momento. Y
serán toda una reliquia, ya que Sony no las fabricará más. "Sony dejó de
distribuir los casetes de video Betamax y los microcasetes MV en marzo de
2016", informó Sony través de un comunicado en japonés. Lo hizo después de
haber vendido 18 millones de unidades de ese formato en todo el mundo, según
datos de la propia empresa. Así terminó historia que, curiosamente, ya parecía
acabada tras la revolución digital. El Betamax estuvo en el mercado durante 40
años.
Un día
como hoy 7 de Junio de 1999 en la Ciudad de México es
asesinado el humorista y conductor Paco Stanley siendo su homicidio el más
impactante del espectáculo de México. La mañana de un día como hoy 7 de Junio
de 1999 a la edad de 56 años fue asesinado Francisco Jorge Stanley Albaitero
humorista y presentador mexicano conocido como Paco Stanley. El atentado fue
perpetrado a las afueras de un restaurante de la Ciudad de México por supuestos
sicarios que dispararon contra él y a sus acompañantes en varias ocasiones, lo
que le causó una muerte inmediata. Luego de este aparatoso percance, , se le
relacionó con delincuentes y vendedores de droga que supuestamente habrían
saldado cuentas con entonces conductor. Un agente de seguros que pasaba por la
zona también murió en el supuesto atentado, además de que su compañero Jorge
Gil resultó herido. En ese entonces las dos televisoras más importantes del
país se enlazaron con lo acontecido afuera del restaurante “El Charco de las
Ranas”, y sus principales voces pedían la renuncia del primer Jefe de Gobierno,
Cuauhtémoc Cárdenas. Alguien tiene que renunciar" decía Jacobo Zabludovsky
en el noticiero del programa Hoy de Televisa, "La responsabilidad es de
Cuauhtémoc Cárdenas..." afirmaba enojado Jorge Garralda en su programa A
quien corresponda de Tv Azteca. Ese día con un enorme nivel de audiencia
alcanzado en muy poco tiempo, nació un nuevo estílo periodístico en el que la
televisión mexicana se convirtió en un arma en contra del estado, Televisa por
un lado y TV Azteca vigilando desde un helicóptero al Ministerio Público en sus
instalaciones. La fuente relató que la Procuraduría del Distrito Federal
estableció una línea de investigación en la que se indicaba que “Paco fue
ejecutado por el líder del Cártel de Colima, quien instruyó a un tirador para
matarlo, lo hizo con la venia de Mario Bezares, conocido en la farándula como
Mayito, el amigo del conductor, quien junto a la edecán del programa, Paola
Durante, “puso” a Stanley”. Y es que Bezares no se encontraba en la zona del
ataque pues se estaba en el sanitario por problemas estomacales, lo que levantó
grandes sospechas. La Procuraduría General de Justicia (PGJDF) basó sus
acusaciones en las declaraciones hechas por el entonces cocinero del
narcotraficante Luis Ignacio Amezcua (presunto líder del cártel de Colima),
Luis Valencia; quien aseguró que Amezcua se reunió con Mario Bezares y Paola
Durante para planear el asesinato de Paco Stanley debido a deudas con las
mafias de drogas. Durante las investigaciones también fue detenido Erasmo Pérez
Garnica alias "El Cholo" cuyo físico coincidió con muchas de las
caracterizaciones del retrato hablado del asesino de Stanley según testigos.
Valencia señaló que escuchó a Amezcua ordenarle a el "El Cholo" (el
autor material) que asesinara al actor "dado que le debía mucho dinero"
y que Paola Durante actuó como enlace entre ellos. Además, mencionó que Bezares
se retrasó de manera intencional en el baño del restaurante para dar tiempo a
que los asesinos cumplieran con su misión. El proceso se vino abajo después de
que Valencia, que se encontraba en la cárcel por otros delitos, se retractara y
denunciara que la PGJDF lo sometió a torturas para inculpar a los detenidos.
Todos los acusados en el caso fueron declarados inocentes por falta de pruebas
después de estar presos por más de un año. El asesinato no fue esclarecido y no
existen culpables por falta de pruebas, lo que sí quedó fue un clima de
inseguridad e impotencia por el deceso del famoso. Paco Stanley es considerado
uno de los mejores conductores en la historia de la televisión mexicana, en
donde logró consolidarse y fue muy querido por el público de Televisa y TV
Azteca, pues formó parte de ambas empresas.