sábado, 16 de diciembre de 2023

SALUD MENTAL LA MEJOR HERENCIA FAMILIAR: NAVIDAD SIN TI

Por Dra. Margarita Mendoza Burgos

Cada vez que se acerca la Navidad recuerdo el sentido mensaje que una amiga mía me envió hace unos años. “Doy gracias a Dios porque se acerca la Navidad y puedo decir que de esta pesadilla empiezo a despertar.…” Entonces pasaba a describir su pesadilla, que aquí les comparto:

En esta época perdí mi voz. Ahora puedo expresarlo y así fue como pasó. Mi corazón se fue a las cuerdas vocales y entonces sucedió: él agonizaba, lleno de tubos en un hospital, y yo le dije: "Ya todo va a pasar y vas a estar bien. Quédate tranquilo, todo va a estar bien y vas a descansar". Él movió la cabeza asintiendo. Estoy segura que ambos sabíamos que aquello era "un adiós para siempre". Y así fue. 

Ya no lo volví a ver con vida. Al estar en cuidados intensivos, prefería dejar a otros ir a verlo. Lo intubaron, lo sedaron y efectivamente estaba más tranquilo, pero de aquel sueño ya nunca despertaría. Jamás. 

Aunque por fuera me miraba tranquila y hasta sonriente, por dentro me consumía la tristeza. En ese duelo intenso no tenía unos brazos seguros en los cuales llorar. Muchas acusaciones, muchas palabras cargadas de inquinas y sola yo, sin nadie que me apoyara en aquel dolor ni me protegiera ante aquella guerra de reproches. Se fue mi vida, la persona a quien más quería desde que era pequeña. Perdí mi voz. 

Un olor a rosas invadía el ambiente. Llovía y hubo un par de chispazos eléctricos en la funeraria quedando todo a oscuras en dos ocasiones. Unas flores que vuelan de su ataúd, como levantadas en un suspenso de aire, en paralelo, no como una ráfaga de aire común. También algunas hojas de papel movidas de la misma forma, en mi presencia. Después un correo electrónico en una computadora que jamás había utilizado. Mucho olor a rosas... y finalmente se marchó. 

Espero que haya logrado partir contento y que aquella tristeza que le invadía al constatar que prácticamente todas las personas que le debían algo económico se alejaron, olvidándose de “aquel viejo que necesitaba sus ingresos". Era demasiado noble, yo que lo conocía hasta en sus silencios, lo sabía. 

Se fue y solo me queda la tranquilidad de haber tratado de darle alegrías y buenas noticias en sus últimos momentos. Se fue y una parte de mi se fue con él. Hasta pronto, hasta siempre, algún día estaremos juntos de nuevo. Pero mientras tanto, en cada Navidad me agobian los recuerdos de aquel día y la pesadilla vuelve a rondar en mi mente. 

Después de muchos años, mi amiga me ha vuelto a escribir y su tono melancólico ha cambiado bastante. Ha sido breve, pero contundente:

La Navidad ha dejado de ser una pesadilla. De aquel recuerdo, solo quedan las cosas agradables y son las que celebro en estos días sin olvidarme de ese ser tan especial. Llámale milagro navideño o un regalo de Dios, o como quieras. Para mí, la Navidad volvió a ser sinónimo de felicidad. He recuperado mi voz.
 

Acerca de la Dra. Mendoza Burgos

www.dramendozaburgos.com

 

Titulaciones en Psiquiatría General y Psicología Médica, Psiquiatría infanto-juvenil, y Terapia de familia, obtenidas en la Universidad Complutense de Madrid, España.

 

Mi actividad profesional, desde 1,993, en El Salvador, se ha enfocado en dos direcciones fundamentales: una es el ejercicio de la profesión en mi clínica privada; y la segunda es la colaboración con los diferentes medios de comunicación nacionales, y en ocasiones también internacionales, con objeto de extender la conciencia de la necesidad de salud mental, y de apartarla de su tradicional estigma.

 

Fui la primera Psiquiatra infanto-juvenil y Terapeuta familiar acreditada en ejercer dichas especialidades en El Salvador.

 

Ocasionalmente he colaborado también con otras instituciones en sus programas, entre ellas, Ayúdame a Vivir, Ministerio de Educación, Hospital Benjamín Bloom, o Universidad de El Salvador. He sido también acreditada por la embajada de U.S.A. en El Salvador para la atención a su personal. Todo ello me hizo acreedora en 2007, de un Diploma de reconocimiento especial otorgado por la Honorable Asamblea Legislativa de El Salvador, por la labor realizada en el campo de la salud mental. Desde 2008 resido en Florida, Estados Unidos, donde compatibilizo mi actividad profesional con otras actividades.

 

La tecnología actual me ha permitido establecer métodos como video conferencia y teleconferencia, doy consulta a distancia a pacientes en diferentes partes del mundo, lo cual brinda la comodidad para mantener su terapia regularmente aunque esté de viaje. De igual manera permite a aquellos pacientes que viven en ciudades donde los servicios de terapeuta son demasiado altos acceder a ellos. Todo dentro de un ambiente de absoluta privacidad.

 

Trato de orientar cada vez más mi profesión hacia la prevención, y dentro de ello, a la asesoría sobre relaciones familiares y dirección y educación de los hijos, porque después de tantos años de experiencia profesional estoy cada vez más convencida de que el desenvolvimiento que cada persona tiene a lo largo de su vida está muy fuertemente condicionado por la educación que recibió y el ambiente que vivió en su familia de origen, desde que nació, hasta que se hizo adulto o se independizó, e incluso después.

sábado, 2 de diciembre de 2023

SALUD MENTAL LA MEJOR HERENCIA FAMILIAR: CONTROLE SU ANSIEDAD

Por Dra. Margarita Mendoza Burgos

 

A veces tendemos a confundir tensión con ansiedad, y no es lo mismo. La mayoría de nosotros por momentos tenemos tensión, que es algo normal. Es parte del proceso de preparación para afrontar un reto. Sin embargo, ansiedad se refiere más a un proceso de tensión originado para eso y que se ha mantenido en el tiempo, incluso bastante después que ha desaparecido el estímulo. Por lo tanto, se crea la ansiedad o respuesta aprendida, pero que ya no corresponde a un estímulo. 

La ansiedad es el trastorno psiquiátrico más importante en el mundo, con el que viven más de 264 millones de personas, según la Organización Mundial de la Salud. Es tan importante que este tipo de trastornos psicológicos sean definidos por numerosos expertos en salud mental como la auténtica epidemia silenciosa del siglo XXI. 

 

A nivel cognitivo, las personas con ansiedad pueden experimentar pensamientos obsesivos, anticipar lo peor y tener dificultad para controlar o detener sus preocupaciones.  Esto pasa a ser preocupante cuando alguien es incapaz de cumplir con cualquier reto, por pequeño que este sea. La persona siente que su ansiedad va a hacerle explotar y que su corazón está siendo afectado y existe una sensación de muerte inminente.

 

Al aparecer estos síntomas, el paciente consultará a diferentes especialistas que elucubrarán sobre la causa de sus males. Intentarán diferentes terapias hasta que descubran que debe ser derivado a una consulta de salud mental,  no sin antes recibir apelativos de neuróticos, hipocondríacos, etc.

 

El proceso puede ser largo. Muchas veces e incluso antes de un buen diagnóstico, la persona acabará en salas de emergencia sin encontrar la causa verdadera de su mal. Se suele utilizar sedación ante un caso así y a veces hasta ingresos hospitalarios hasta que la persona es catalogada como paciente para ser vista por psicólogos y psiquiatras.  

 

Y aunque a veces los mismos pacientes se resisten a ser tratados por especialistas en salud mental porque se ven etiquetados como “locos”, se trata de la mejor solución. Ellos, como profesionales, tienen el tratamiento adecuado, que no solo implica la administración de fármacos y sedantes sino además psicoterapia con técnicas de relajación para controlar los ataques de ansiedad o de pánico. 

 

Pero más allá de las terapias, es importante realizar actividades físicas y placenteras en el día a día para ayudar a bajar el nivel de activación y a sentir una satisfacción general con la vida. Esto puede, por ejemplo, ser sacar a pasear el perro, reunirse con amigos, salir a caminar o leer un buen libro. 

 

Acerca de la Dra. Mendoza Burgos

www.dramendozaburgos.com

 

Titulaciones en Psiquiatría General y Psicología Médica, Psiquiatría infanto-juvenil, y Terapia de familia, obtenidas en la Universidad Complutense de Madrid, España.

 

Mi actividad profesional, desde 1,993, en El Salvador, se ha enfocado en dos direcciones fundamentales: una es el ejercicio de la profesión en mi clínica privada; y la segunda es la colaboración con los diferentes medios de comunicación nacionales, y en ocasiones también internacionales, con objeto de extender la conciencia de la necesidad de salud mental, y de apartarla de su tradicional estigma.

 

Fui la primera Psiquiatra infanto-juvenil y Terapeuta familiar acreditada en ejercer dichas especialidades en El Salvador.

 

Ocasionalmente he colaborado también con otras instituciones en sus programas, entre ellas, Ayúdame a Vivir, Ministerio de Educación, Hospital Benjamín Bloom, o Universidad de El Salvador. He sido también acreditada por la embajada de U.S.A. en El Salvador para la atención a su personal. Todo ello me hizo acreedora en 2007, de un Diploma de reconocimiento especial otorgado por la Honorable Asamblea Legislativa de El Salvador, por la labor realizada en el campo de la salud mental. Desde 2008 resido en Florida, Estados Unidos, donde compatibilizo mi actividad profesional con otras actividades.

 

La tecnología actual me ha permitido establecer métodos como video conferencia y teleconferencia, doy consulta a distancia a pacientes en diferentes partes del mundo, lo cual brinda la comodidad para mantener su terapia regularmente aunque esté de viaje. De igual manera permite a aquellos pacientes que viven en ciudades donde los servicios de terapeuta son demasiado altos acceder a ellos. Todo dentro de un ambiente de absoluta privacidad.

 

Trato de orientar cada vez más mi profesión hacia la prevención, y dentro de ello, a la asesoría sobre relaciones familiares y dirección y educación de los hijos, porque después de tantos años de experiencia profesional estoy cada vez más convencida de que el desenvolvimiento que cada persona tiene a lo largo de su vida está muy fuertemente condicionado por la educación que recibió y el ambiente que vivió en su familia de origen, desde que nació, hasta que se hizo adulto o se independizó, e incluso después.