Por Dra. Margarita Mendoza Burgos
En términos de enseñanza, el camino de la
búsqueda al sistema ideal está plagado de mitos.
En El Salvador podemos observar claramente
dos sectores muy diferenciados. Por un lado, uno obsoleto; por otro, uno
demasiado lleno de métodos con falsas esperanzas, dirigidas a formar
"niños genios".
Obviamente ninguna de los dos formas es lo
ideal.
Todo empieza en casa, pero en los hogares
no existe un criterio claro de lo que es educar. Es más, se suele creer que la
escuela es la que educa y poco se considera que la misma apoya el aprendizaje
más formal y con detalle de los humanos. Sin embargo, es el hogar el encargado de generar la actitud dentro del
aprendizaje. Puede ser pasiva e incluso desdeñosa y satirizada, o activa y
deseosa de hacer crecer cualquier área.
Por supuesto, también hay un margen que lo
proporcionará la personalidad y capacidad de cada quien, ya que no todos
disfrutan lo estudiado o aprendido del mismo modo.
Lo primero que se necesita es darle la
importancia a los conocimientos en la conducta
dentro de la sociedad.
Se debe entender que la forma y amplio bagaje de lo estudiado será
observado en relación directa al éxito en el grupo familiar.
En muchos hogares solo piensan en
"agregar" volumen e interés poniendo de moda los últimos hitos
escritos en las revistas o best sellers sin meditar sobre los mismos, ni mucho
menos ejercer un mecanismo que nos haga confiar o desconfiar de ellos.
De
repente, dejamos de consultar a los expertos.
Simplemente nos creemos expertos en cada
tendencia sugerida.
Un ejemplo es la estimulación temprana
mejorada por una serie de ejercicios que suelen ser repetidos y estudiados con
los padres y los niños en las academias de moda.
Este sistema, creado en la década de los
60 por Glenn Doman, está demostrado científicamente que “se trata de un método
sin fundamento basado en teorías anticuadas y simplificadas, y que no hay
afirmaciones científicas que lo respalden”.
En cambio, lo que sí se debe propiciar es
el contacto materno y del resto de la familia en el desarrollo adecuado del
niño. Por ejemplo, el habla mediante el mismo succionar de las mamas al
alimentarse. No es solo el aumentar la estimulación sino ejercer la misma con
amor y constancia.
Sin conocimientos, es fácil caer en
situaciones engañosas y dejarse llevar por métodos erróneos, como creer que
todo problema escolar -llámese lectura, escritura o matemáticas- sea
simplemente un tema de lateralidad. Debe ser estudiado y tratado, pero puede no
ser un causante único de un mal aprendizaje.
Durante años, nadie se atrevía a poner en
duda la afirmación de que el uso de computadoras ayudaba a que los niños
aprendieran más, la consideraban una herramienta clave en la pedagogía moderna.
Incluso de esa teoría surgió un programa
mundial conocido como OLPC (One Laptop per Child), donde se distribuyeron
millones de computadoras portátiles para los estudiantes de zonas rurales o
colegios pobres.
Sin embargo, a la hora de evaluar el
impacto quedó claro que no tuvo el efecto deseado. Resultó negativo en el
rendimiento en lenguaje y matemática. Para peor, el estudio también reveló que
los jóvenes que recibieron las computadoras estudiaban y leían menos, y
preferían no hacer las tareas escolares. Los nuevos métodos, sobre todos los
que llegan con un envoltorio revolucionario y novedoso; no siempre son lo más
recomendables.
Consultas on line
Titulaciones
en Psiquiatría General y Psicología Médica, Psiquiatría infantojuvenil, y
Terapia de familia, obtenidas en la Universidad Complutense de Madrid, España.
Mi
actividad profesional, desde 1,993, en El Salvador, se ha enfocado en dos
direcciones fundamentales: una es el ejercicio de la profesión en mi clínica
privada; y la segunda es la colaboración con los diferentes medios de
comunicación nacionales, y en ocasiones también internacionales, con objeto de
extender la conciencia de la necesidad de salud mental, y de apartarla de su
tradicional estigma.
Fui
la primera Psiquiatra infanto-juvenil y Terapeuta familiar acreditada en
ejercer dichas especialidades en El Salvador.
Ocasionalmente
he colaborado también con otras instituciones en sus programas, entre ellas,
Ayúdame a Vivir, Ministerio de Educación, Hospital Benjamín Bloom, o
Universidad de El Salvador. He sido también acreditada por la embajada de
U.S.A. en El Salvador para la atención a su personal. Todo ello me hizo
acreedora en 2007, de un Diploma de reconocimiento especial otorgado por la
Honorable Asamblea Legislativa de El Salvador, por la labor realizada en el
campo de la salud mental. Desde 2008 resido en Florida, Estados Unidos, donde
compatibilizo mi actividad profesional con otras actividades.
La
tecnología actual me ha permitido establecer métodos como video conferencia y
teleconferencia, doy consulta a distancia a pacientes en diferentes partes del
mundo, lo cual brinda la comodidad para mantener su terapia
regularmente aunque esté de viaje. De igual manera permite a aquellos pacientes
que viven en ciudades donde los servicios de terapeuta son demasiado altos
acceder a ellos. Todo dentro de un ambiente de absoluta privacidad.
Trato
de orientar cada vez más mi profesión hacia la prevención, y dentro de ello, a
la asesoría sobre relaciones familiares y dirección y educación de los hijos,
porque después de tantos años de experiencia profesional estoy cada vez más
convencida de que el desenvolvimiento que cada persona tiene a lo largo de su
vida está muy fuertemente condicionado por la educación que recibió y el
ambiente que vivió en su familia de origen, desde que nació, hasta que se hizo
adulto o se independizó, e incluso después.