jueves, 4 de noviembre de 2010

Economía estadounidense recibe inyección de $600 mil millones

Tomado de The Wall Street Journal

Por Jon Hilsenrath

Inyección de líquidez podría ocasionar baja en la tasa de intereses de los créditos, también generar inflación sobre todo en países en desarrollo

La Reserva Federal de Estados Unidos divulgó el miércoles que invertirá US$600.000 millones en la compra de bonos del gobierno estadounidense en los próximos ocho meses con el fin de reducir las tasas de interés de largo plazo y estimular el crecimiento. El anuncio constituye un esfuerzo dramático por reanimar una recuperación económica que calificó de "decepcionantemente lenta".

Varios economistas, tanto dentro como fuera de la Fed, creen que se trata de una medida desesperada con pocas opciones de rendir fruto por parte de Ben Bernanke. El presidente del banco central adoptó varias medidas poco convencionales durante la crisis financiera para impedir un colapso del sistema financiero, pero un año y medio después enfrenta una economía lastrada por el alto desempleo, la amenaza de un período de deflación similar al de Japón y la posible paralización del sistema político.

La Fed dejó abierta la posibilidad de aumentar la dosis si el crecimiento no repunta en los próximos meses. Las nuevas compras de US$75.000 millones de bonos del Tesoro a la semana se suman a los US$35.000 millones mensuales que está gastando para reemplazar bonos hipotecarios en su portafolio que saldrán de circulación.

El Promedio Industrial Dow Jones prosiguió el miércoles la marcha ascendente iniciada en agosto, cuando Bernanke dejó entrever la posibilidad de llevar a cabo un plan de compra de bonos del Tesoro.

El indicador avanzó 0,24% para alcanzar 11.215,3 puntos, su mayor nivel de los últimos dos años. Los rendimientos de los bonos del Tesoro a 10 años, que habían caído justo por debajo de 3% finalizaron el día en 2,62%. La cotización del dólar, en tanto, ha retrocedido en anticipación de una avalancha de nuevos dólares en el mercado global.

La Fed opina que estas reacciones de los mercados estimulan la economía. Además del impacto del menor costo del dinero, el alza en los precios de las acciones podría alentar a los consumidores a elevar sus gastos y a las empresas a invertir más. Un dólar débil, por su parte, abarata las exportaciones estadounidenses.

"Todas estas cosas son parte de lo que la Fed está tratando de hacer y creo que han tenido éxito", dijo Lawrence Kantor, director de análisis de Barclays Capital en Nueva York.

Las medidas anunciadas el miércoles se ajustaron a las expectativas de los economistas, si bien algunos esperaban un gasto total ligeramente inferior y un desembolso más acelerado.

De todos modos, hay mucha incertidumbre y grandes imponderables en torno a los anuncios. En esencia, la Fed imprimirá más dinero para comprar hasta un máximo de US$900.000 millones en bonos del Tesoro estadounidense de aquí a junio del próximo año.

En condiciones normales, una inversión de esta magnitud sería altamente inflacionaria al inundar de dinero la economía y generar preocupación sobre el gasto fiscal. Esto podría, a su vez, elevar las tasas de interés de largo plazo y, de esta manera, anular los esfuerzos de la Fed.

Los precios de las materias primas han aumentado desde que Bernanke empezó a insinuar, a finales de agosto, la intención de comprar bonos del Tesoro. La cotización del petróleo, por ejemplo, ha subido 15% desde entonces para llegar a los US$85 el barril. Michael Pence, legislador republicano con el tercer cargo más alto en la Cámara de Representantes, dijo que la Fed estaba tomando "un riesgo incalculable".

Thomas Hoening, el presidente del Banco de la Reserva Federal de Kansas City —quien describió la decisión antes de la reunión como un "pacto con el diablo"—, fue el único en desacuerdo en una votación de 10 a 1 del comité de política monetaria de la Fed. Hoening manifestó que los riesgos de compras adicionales de bonos del gobierno superaban los beneficios.

La mayoría de los miembros del banco central, no obstante, consideran que el riesgo de un brote inflacionario es bajo puesto que todavía hay mucha capacidad ociosa en la economía, incluyendo una tasa de desempleo de 9,6%, más de 14 millones de viviendas desocupadas y fabricantes que operan a un 72% de su capacidad productiva.

En un comunicado difundido después de su reunión, la Fed dijo que actuaba para "promover un ritmo más sólido de recuperación económica" y para asegurar que la inflación, que en la actualidad se ubica en una tasa anual cercana a 1%, suba hasta la meta informal del banco central de 2%.

Se trata de la segunda vez que la Fed experimenta con un gran programa de compra de bonos. Entre enero de 2009 y marzo de este año adquirió aproximadamente US$1,7 billones (millones de millones) de bonos gubernamentales e hipotecarios. Esta decisión también hizo surgir temores de inflación, que hasta ahora no se han materializado. El programa de compra de bonos se conoce como relajamiento cuantitativo, o QE por sus siglas en inglés. Puesto que la Fed ha reanudado la medida, algunos economistas lo describen como QEII.

Al comprar una gran cantidad de bonos y retirarlos del mercado, la Fed espera hacer subir sus precios y reducir sus rendimientos. Esto, a su vez, haría bajar las tasas de interés que pagan los deudores hipotecarios, los consumidores y las empresas y los alentaría a endeudarse, gastar e invertir.

La Fed cree que también aumentará las compras de acciones, bonos corporativos y otras inversiones más arriesgadas que ofrecen retornos más altos.

A los socios comerciales de EE.UU., en especial los países en desarrollo, les preocupa que esta inyección de liquidez de la Fed genere presiones inflacionarias y contribuya a la formación de burbujas de activos en sus países.

Voto hispano fue crucial en los resultados electorales

Tomado de The Wall Street Journal

Por John D.McKinnon y Ana Campoy

Los electores hispanos fueron cruciales en la elección del martes de legisladores y gobernadores en Estados Unidos, creando un bastión para los candidatos en problemas en el Oeste.

Los republicanos, sin embargo, dicen que también han avanzado en este frente, con la elección de varios hispanoamericanos en cargos de alto perfil.

La pregunta para los dos partidos es la siguiente: ¿pueden sus líderes construir sobre estas ganancias pensando en las elecciones de 2012, en medio de lo que probablemente sea otro áspero debate sobre la inmigración?.

Los hispanos dieron un apoyo vital a los demócratas en las elecciones del martes de senadores en Nevada, Colorado y California, de acuerdo con los analistas. En el caso del líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, aproximadamente el 90% de los votantes latinos lo apoyaron, de acuerdo con un sondeo de Latino Decisions, un grupo independiente. La encuesta fue co-patrocinada por el Consejo Nacional de La Raza, un grupo hispano de derecho civiles, la Service Employees International Union y Voz de América, un grupo de defensa de los inmigrantes. El voto hispano "fue absolutamente la razón por la que Harry Reid ganó", dijo el encuestador de Latino Decisions, Matt Barreto.

Los republicanos, sin embargo, resaltaron sus propios avances entre los hispanos, incluyendo la victoria Susana Martínez, electa gobernadora de Nuevo México y de Marco Rubio que fue electo senador por Florida. En Nevada, el ex juez Brian Sandoval derrotó a Rori Reid, el hijo del senador Reid, y se transformó en el primer gobernador latino del estado.

En Texas, hogar de la mayor cantidad de latinos en EE.UU. después de California, los electores eligieron a dos latinos republicanos como sus representantes en la cámara baja. Bill Flores, un ex ejecutivo de la industria del petróleo y del gas y un recién llegado a la política, derrotó ampliamente al demócrata Chet Edwards, quien había sido legislador durante 20 años. Los hispanos representan más del 15% de la población en el distrito Central de Texas.

Otro republicano hispano, Francisco "Quico" Canseco, desplazó al demócrata Ciro Rodríguez en el extendido distrito 23, que incluye parte de San Antonio. Más de la mitad de los residentes del distrito son latinos y Rodríguez contó con su respaldo durante su período, pero terminó con solamente el 45% de los votos y fue superado por el 49% de Canseco.

Buena parte del respaldo hispano a los demócratas parece ser una respuesta al intenso debate sobre la inmigración en los estados del Oeste, fundamentalmente Arizona, donde los legisladores aprobaron este año una controvertida ley que establece que la policía puede interrogar a las personas si hay alguna razón para sospechar que están ilegalmente en Estados Unidos.

Si se toma en cuenta la áspera retórica de algunos republicanos en los temas de inmigración, la elección del martes fue "una daga para las probabilidades republicanas en 2012 en los estados del Oeste que votan en forma variable a menos que logren presentar un candidato presidencial que tenga la capacidad de conectarse con los electores latinos y no hacerlos sentir alienados", opinó Barreto.

Los republicanos tienen la esperanza de que promover candidatos hispanos conservadores los ayudará a captar una mayor porporción del creciente electorado latino. Los tres ganadores, Martínez, Rubio y Sandoval, han tomado posiciones estrictas pero mesuradas respecto a la inmigración, combinando llamados a reforzar la seguridad en la frontera con lo que Sandoval llama "respeto" a los inmigrantes legales.

La pregunta de qué hacer con los alrededor de 11 millones de indocumentados en EE.UU. acechará a los dos partidos en los próximos dos años. Los demócratas arriesgan irritar a algunos votantes no hispanos si aprueban una reforma amplia pero podrían decepcionar a los latinos si no lo hacen. Los republicanos enfrentan un debate interno respecto a cómo dar cabida a su ala anti-imigración y, al mismo tiempo, acercarse de manera efectiva a los hispanos.

"Hemos comenzado por la elección de líderes latinos y latinas", dice Ed Gillespie, un estratega republicano y ex presidente del Comité Nacional Republicano. "Esto ayuda, es un impacto positivo de esta elección. Sin perjuicio de lo anterior, tenemos que hacer un mejor trabajo en el partido para obtener una participación más grande de este creciente porcentaje del electorado".

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Latinos se expresaron a través del voto en Brentwood y Central Islip

POR LUIS MONTES BRITO


Phil Ramos reelecto con casi el 80% de aceptación

Senador Brian X. Foley obtuvo casi el doble de votos en Brentwood y CI pero el resto del distrito votó por Lee Zeldin

Steve Israel arrasó con el voto hispano que lo ayudó a reelegirse como Congresista
Federal

Cuando se han conocido los resultados electorales preliminares tanto a nivel local como nacional he aquí algunos de ellos, todo demuestra la importante participación de la comunidad latina en los mismos, veamos algunos resultados:

El líder hispano Phil Ramos fue electo para un quinto período en la Asamblea estatal con una aceptación que no deja duda de su liderazgo en el área. Portador de un mensaje claro y sin ambages, sin esconder su opción de compromiso a favor de toda la comunidad, de Brentwood y Central Islip, sin excepciones, Ramos fue electo con más del 77% de votos a su favor (dato a la hora de realizar este artículo).

La reelección de Ramos, ampliamente respaldada por la comunidad, es un mensaje claro de un avance de la diversa comunidad de su distrito de Brentwood y Central Islip, donde las minorías salieron a votar masivamente a favor de aquellos candidatos que apoyan la diversidad, creciendo en más de un 7% su participación en este tipo de comicios.

Apoyados en la figura y el liderazgo de Ramos como ancla para dirigirse a los votantes se corrieron en su distrito diferentes campañas estatales y federales como fueron las del electo Gobernador Andrew Cuomo, la de los Senadores Charles Schumer y Kirsten Gillibrand, la del candidato a Fiscal General Eric Schneiderman, la del Congresista Steve Israel, la del Senador Estatal Brian X. Foley.

Por su parte el Senador Brian X. Foley perdió su curul ante el veterano de la guerra de Irak Lee Zeldin, del partido republicano y apoyado fuertemente por el Tea Party. Aunque Foley ganó por amplio margen los distritos electorales de Brentwood y Central Islip esto no fue suficiente para compensar la diferencia en su contra en otros puntos del tercer distrito del senado Estatal.

Por su parte el Congresista Federal Steve Israel, del segundo distrito del congreso fue reelecto sobre su oponente John Gomez a quien aventajó por más de 12 puntos, contando con el masivo respaldo de los votantes hispanos de Brentwood y Central Islip distritos en los cuales obtuvo entre 3 a 4 veces más votos que su oponente.

A partir de estas elecciones los políticos de todos los niveles han puesto su mirada en los votantes de estos distritos cuya población hispana oscila en un aproximado del 60% de todos sus habitantes. Los latinos le dieron vida a la frase pronunciada en diferentes causas y demostraron una vez más que SI, SE PUEDE!

Resultado de elecciones de Estados Unidos y su impacto en la política exterior

Tomado de La Tercera


Aunque los temas electorales fueron casi exclusivamente sobre asuntos internos, los resultados podrían repercutir más allá de las fronteras del país.

A pesar de que las elecciones de mitad de período en Estados Unidos se realizaron casi exclusivamente en torno a asuntos internos, los resultados podrían tener un efecto que iría más allá de las fronteras del país.El Partido Demócrata del presidente Barack Obama perdió la mayoría en la Cámara de Representantes y aunque mantienen control del Senado sus números se redujeron.

La nueva distribución de poder significa que el presidente estará enfrentando un Congreso hostil durante los dos años que le restan en el poder.Sus propuestas para lidiar contra el déficit y el desempleo, así como la aplicación de medidas de estímulo a la economía y la realización de otros proyectos prometidos durante su campaña electoral tomarán muchísimo tiempo más para lograr aprobación legislativa, si es que no son rechazados del todo.

El más primer y más probable impacto de este nuevo ambiente político se sentirá en las relaciones exteriores de la Casa Blanca, afirma el corresponsal de asuntos diplomáticos de la BBC, Jonathan Marcus.Por una parte, si el presidente se embarca en arduas luchas en el Congreso para avanzar su agenda de gobierno, no tendrá suficiente tiempo para dedicarse a la política exterior, argumenta Marcus.

Sin embargo, el estancamiento legislativo podría alejar a Obama de su programa interno para dedicarle más energías a asuntos internacionales, un ámbito donde todavía puede dejar su huella.

MEDIO ORIENTE, RUSIA Y EL G20

El Medio Oriente y la paz entre israelíes y palestinos es un frente donde esta administración ha invertido la mayoría de su capital diplomático, dice el corresponsal de la BBC.

Obama ha presionado el gobierno de Benjamín Netanyahu a no continuar con la construcción de asentamientos judíos en territorio ocupado, pero algunos argumentan que los republicanos -con su mayoría en la Cámara Baja- podrían fortalecer la postura del primer ministro israelí.

No obstante, resalta Jonathan Marcus, la política exterior continúa siendo la esfera de acción del presidente y le quedaría muy difícil al Congreso restringir la actividad diplomática de Obama.

Añade que el control del Senado es más influyente es estos asuntos, pues después de todo es ésta cámara la que ratifica los tratados internacionales.

En ese aspecto, la ratificación de un nuevo acuerdo de control de armas estratégicas con Rusia sería lo que tendría más proyección de prosperar.En el ámbito económico internacional, a un Obama debilitado por el resultado electoral le quedará más difícil negociar la posición de Estados Unidos.

Frente al G20 los analistas concluyen que el presidente continuará abordando los temas de la guerra de divisas, presionando a China y abogando contra el proteccionismo.

Es ese aspecto, en el escenario político estadounidense hay consenso bipartidista en que China es el malo de la película y que su moneda está seriamente devaluada, lo que afecta la producción local.Pero Pekín se sentirá respaldado por los republicanos que tradicionalmente favorecen mayor liberalización de los mercados, especialmente los asiáticos, y no estarían muy dispuestos a aplicar sanciones.

Andy Cuomo gobernará Nueva York, Jerry Brown sucederá a Scwarzenegger en California

Tomado de El País

Los demócratas han conseguido el Gobierno de dos Estados políticamente valiosos en ambas costas de EE UU: California y Nueva York

Son dos Estados políticamente valiosos para el partido de Obama

Los republicanos se hacen con Tejas y Nuevo México

El de Nueva York, de hecho, fue el primer Gobierno estatal que se dirimió en la noche electoral. Sin grandes sorpresas, pues las encuestas le daban una holgada mayoría, el demócrata Andrew Cuomo ha logrado una fácil victoria sobre el candidato del Tea Party, Carl Paladino. El Partido Republicano conseguía dos sólidas victorias en el suroeste del país, al conseguir Rick Perry el Gobierno de Tejas y Susana Martínez el de Nuevo México. En total, se decidieron anoche 37 puestos de gobernador.

En un año en el que los demócratas se han visto en serios apuros para mantenerse en el poder, a Andrew Cuomo los vientos le resultaron favorables. Este miembro de una de las estirpes más conocidas en el Partido Demócrata, ha sido fiscal general de Nueva York desde 2007.

Decidió presentarse al puesto de gobernador después de la caída, por un escándalo de prostitución, de Elliot Spitzer y de que la Casa Blanca obligara a su sucesor, David Paterson, a que no se presentara. Cuomo vio la oportunidad y decidió presentarse al mismo puesto que su padre ocupó entre 1983 y 1994.


La de anoche fue además una victoria de las familias políticas. El ganador en California, Jerry Brown, accede por segunda vez al puesto después de que su padre lo hiciera entre 1959 y 1967 de haberlo hecho ya él mismo entre 1975 y 1983. Los demócratas también se aseguraron una importante victoria en Colorado, donde el alcalde de Denver, John Hickenlooper, ganó al republicano Dan Maes y al candidato radical y antiinmigración Tom Tancredo.

Justo el contrario que Nikki Haley, elegida gobernadora de Carolina del Sur después de los escándalos sexuales y las infidelidades de su ya predecesor Mark Sanford, que dejó a su mujer y a sus hijos para fugarse brevemente con una amante a Argentina.

Haley, de ideario conservador, recibió el apoyo de Sarah Palin y el Tea Party, y es la segunda persona de origen indio americano en acceder al Gobierno de un Estado, después del también republicano Bobby Jindall, de Luisiana.

El congreso estadounidense invitado a la fiesta del té

Tomado de El País

El gran desafío para el movimiento del Tea Party es convertir su capacidad de canalizar enojos a una fuerza capaz de materializar soluciones.

El movimiento ultraconservador, con figuras como Rand Paul y Marco Rubio en el Senado y Michelle Bachmann en la Cámara de Representantes, se consolida como fuerza política en el Congreso.

No todos lgraron entrar, la polémica Christine O'Donnell se queda fuera

POR YOLANDA MONGE

Gran noche para el reaccionario Tea Party, tanto en el Senado como en la Cámara de Representantes de Estados Unidos. Poco después de que se cerraran los colegios en Kentucky y Florida, dos de las máximas figuras del movimiento se alzaban con sendas victorias en las legislativas de este martes. Rand Paul y Marco Rubio culminaban la escalada al poder iniciada hace menos de dos años bajo la bandera ideológica del Tea Party, pero con la tarjeta de presentación en las papeletas de voto del Partido Republicano, y pasaban de ser dos auténticos desconocidos en la escena nacional a senadores del Capitolio de Washington.

Otros dos hombres fuertes del Tea Party tienen ya garantizado su lugar en la Cámara alta: Dan Coats, de Indiana, y Jim DeMint, Carolina del Sur.

El movimiento surgido a los pocos meses de la llegada al poder de Barack Obama se ha consolidado sin duda como una fuerza a tener cuenta en las próximas elecciones presidenciales de 2012. Lo que ahora está por concretar es cómo el Tea Party realiza la transición de movimiento de protesta a una agenda específica de Gobierno en Capitol Hill.

"Esta noche el Tea Party ha provocado una ola" sobre Washington, ha declarado Rand Paul poco después de confirmarse su victoria. El mensaje más repetido durante la campaña electoral por todos los seguidores y representantes del movimiento que tomó su nombre del motín del té del siglo XVIII, que fue el pistoletazo de salida de la Revolución americana, volvió a resonar en Kentucky: "Queremos recuperar nuestro país".

Ese fue también el mensaje de Rubio, quien aprovechó la ocasión en la que agradecía su triunfo para hacer un guiño a parte del electorado que le ha aprobado el pasaporte a Washington: "Vaya a donde vaya, tenga el título que tenga, siempre seré descendiente de exiliados cubanos". El 60% del electorado latino de Florida ha apoyado al nuevo y joven senador, 39 años. Rubio, considerado ya la gran esperanza republicana para 2012, ha anunciado que, desde su puesto en la Cámara alta, exigirá "al Partido Republicano que regrese a sus principios, a los que abrazaba hace no tanto tiempo".

En la Cámara de Representantes también se tomará té. Hasta 33 escaños podían ser exclusivos de la ideología ultraderechista del Tea Party. Michelle Bachmann, la última reina coronada del Tea Party y máximo exponente junto a Sarah Palin de las autodenominadas mamás oso, revalidaba sin problemas su cargo en Minesota.

¿La gran perdedora de la noche? La aprendiz de bruja Christine O'Donnell, candidata al Senado por Delaware. "Muchos de nosotros no hemos ganado, pero el sistema político ya no será el mismo. El Partido Republicano ya nunca será el mismo. Nuestras voces han sido escuchadas y no vamos a quedarnos nunca más callados", ha dicho la portavoz de la abstinencia sexual antes de cerrar su discurso y recordar a los asistentes a su mitin que el local estaba alquilado "toda la noche" y había "mucha comida". "Festejemos", recomendó.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Las elecciones de medio término y su impacto en una reforma migratoria

Por Luis Montes Brito
Para Diario El Mundo, El Salvador
y Revista Digital Gurú Político, México

Dentro del legado que nos dejan las elecciones de medio término a celebrarse este martes 2 de noviembre en los 50 Estados que conforman los Estados Unidos de América, el más importante para la comunidad hispana es el reconocimiento a su potencial electoral como una fuerza capaz de definir al ganador de los eventos electorales.

Cabe llamar la atención que mas allá de cualquier estereotipo que pretenda calificar a los hispanos como un conjunto de personas con los mismos intereses, con los mismos hábitos y preferencias, a partir de estas elecciones los partidos políticos están conociendo lo que todos sabemos desde siempre, que somos una comunidad diversa, con pensamiento y conductas también diversas.

Si bien es cierto que tenemos rasgos genéticos y compartimos valores, costumbres y elementos culturales que definen a la comunidad hispana, no actuamos como un cuerpo con una sola cabeza. El tema político es precisamente uno donde la diversidad aflora con más fuerza.

En este tema el hispano como comunidad ha sido de los más afectados por la actual crisis económica, de ahí su importancia a privilegiar temas como el desempleo, cuya tasa es mayor entre los latinos, junto a temas como el acceso a la salud y la educación antes del migratorio.

Las encuestas demuestran que aunque el 87% de los votantes hispanos están dispuestos a votar en contra de aquellos candidatos que favorecen las deportaciones masivas, éstos tienen como temas prioritarios los apuntados anteriormente, ya que para los votantes hispanos el tema migratorio no les afecta directamente porque son parte de la primera, segunda o tercera generación naturalizados o nacidos en territorio estadounidense.

Las elecciones de este noviembre, enmarcadas en un contexto de la peor crisis económica conocida desde 1930, son calificadas como de “medio término”, debido a que se dan precisamente a la mitad del período presidencial, tradicionalmente son atendidas en menor cuantía que las presidenciales. Este año será igual, pero habrá cambios que se manifestarán con importancia y serán un punto de inflexión en la historia de los comicios estadounidenses. Uno de estos cambios será la participación de los latinos.

Se espera que la participación de esta comunidad se incremente un 17% respecto a las elecciones de medio término anteriores celebradas en noviembre de 2006. Por lo apretado que se reflejan las encuestas el voto hispano será determinante en aquellos Estados y distritos electorales con concentraciones tradicionalmente considerables de latinos como California, Texas, Florida y Nueva York entre otros, a los cuales se suman nuevos estados donde según los datos arrojados por el censo de este año ha habido significativos aumentos de población hispana con respecto al censo del año 2000 como son: Carolina del Sur con un incremento de un 157% , Nevada 164%, Carolina del Norte 250% y Georgia con un 392%.

Obviamente los hispanos cambiarán el mapa político de estas regiones y de ahí la resistencia de algunos, sobre todo de los seguidores de la fracción ultraconservadora del Tea Party quienes según encuesta de CBS/New York Times el 18% de los estadounidenses se definen seguidores de este movimiento que tiene como uno de sus principales reclamos que les “devuelvan su país”.

Ante este escenario actual, las alternativas en materia de inmigración que se generan de estas elecciones se reducen a 2 vías contrapuestas entre sí: Si los demócratas mantienen o incrementan la mayoría en ambas Cámaras del Congreso las probabilidades para la aprobación de una reforma migratoria integral se incrementan, si por el contrario los demócratas la pierden, no solo se aleja la posibilidad de que ésta sea aprobada, sino que se aumentarán seriamente las condiciones para que la temida ley de Arizona conocida como la SB1070 se propague por diferentes estados, tal cual ha sido la plataforma de muchos candidatos republicanos sobre todo de aquellos que son respaldados por el Tea Party.