domingo, 24 de abril de 2011

Presidente de Yemen dejará el cargo a cambio de inmunidad total

Tomado de RFI

En un plazo de 30 días, el presidente de Yemen, Ali Abdala Saleh, dejará el cargo en manos de su vicepresidente. A cambio, conseguirá inmunidad para él y sus altos cargos. La propuesta fue presentada por las monarquías del Golfo. La coalición de partidos en la oposición acepta el plan a excepción de conformar un gobierno de unidad nacional.

Después de muchos dimes y diretes, el Congreso Popular General (CPG), partido en el poder yemení, aceptó integralmente el plan con el que las monarquías del Golfo pretenden resolver una crisis que se agudiza desde finales de enero y que ha dejado al menos 130 muertos. La propuesta del Consejo de Cooperación del Golfo (Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Bahréin, Qatar y Omán) prevé que Saleh deje el poder en el plazo de un mes, elecciones presidenciales antes de los dos meses siguientes y garantías de inmunidad para él y los suyos.

Por su lado, la oposición parlamentaria yemení anunció que acepta el plan, excepto al medida que prevé la formación de un gobierno de unidad nacional en el que participaría la coalición de partidos opositores.. ‘Rechazamos servir bajo autoridad del (presidente) Ali Abdalá Saleh y de prestar juramento ante él' dijo a la AFP el portavoz de la oposición Mohamed Gahtan.

Pero sin duda, el mayor rechazo a esta iniciativa viene de los millones de manifestantes antigubernamentales que desde finales del mes de enero protestan en las calles de las principales ciudades del país exigiendo la partida del mandatario. 'Nada de iniciativas, sólo tienes que irte' fue la consigna de la movilización del viernes contra el mandatario, la más numerosa desde el inicio de las protestas.

A diferencia de los partidos tradicionales, la ciudadanía que integra este enorme movimiento contestatario parece no estar dispuesta a aceptar que el presidente Saleh, aferrado al poder hace 32 años, se vaya sin que él, su familia y su círculo de poder paguen ante la justicia los crímenes perpetrados durante las tres décadas de régimen autoritario.

Las Carteras Italianas símbolo de estatus entre las féminas

Tomado de La Tercera

Por Sofía Beuchat

Capaces de dar estatus, despertar envidia y generar verdadera devoción entre los fashionistas, las carteras 'it' -con un alto precio y fuerte carga simbólica- son quizás el objeto más aspiracional del mundo de la moda. Un fenómeno que comenzó en los años 30 con la creación de la cartera Kelly, de Hermès (homenaje a la actriz Grace Kelly), y que ha ido en aumento.

Carteras 'it'. ¿Qué querrá decir, exactamente, esta expresión tan propia de los fashionistas? La traducción exacta no ayuda a entenderla. Porque, al hablar de un bolso 'it', queremos decir que no es UNA cartera, es LA cartera. Un objeto único, que pertenece a la historia de la moda o que se convierte en el boom del año. Y eso, en rigor, se diría 'the purse'. Pero bueno. Así es la moda. La estética es lo que manda. Y por Dios que suena bien decir 'it bag'. Suena tan bien que el puro nombre ya las hace aspiracionales. Y ahí está, justamente, su esencia.

Para que una cartera califique como 'it' debe ser cara. Muy cara. Lo suficiente como para que sólo pueda ser adquirida por una elite que alimente en el inconsciente colectivo la idea de que se trata de productos inalcanzables y, por tanto, apetecidos. "Los 'it' bags son para las mujeres el equivalente a conducir un Porsche rojo para los hombres", apunta la bloguera española Milena Busquets.

Según Forbes.com, publicación estadounidense especializada en negocios y finanzas, el piso está en 500 dólares, pero desde ahí se puede escalar hasta cifras realmente estratosféricas, sin correr el riesgo de que las ventas bajen. Cuando se trata de carteras 'ít', las transacciones suelen estar aseguradas. Tanto así que muchas tienen listas de espera y llegan a los locales con la clientela asegurada.

La famosa tienda estadounidense Neiman Marcus, por ejemplo, puso a la venta en 2007 una edición especial de 25 carteras Chanel, a 25 mil dólares cada una Se vendieron todas en un par de días. Es un caso extremo, claro, pero la misma tienda afirma que el precio promedio de sus carteras de lujo es de 1.200 dólares. Eso cuestan la famosa Motorcycle de Balenciaga y la Muse de Yves Saint Laurent (favorita de Katie Holmes, Kate Moss y Jessica Alba), mientras que por la Stam de Marc Jacobs, que debe su nombre a la modelo canadiense Jessica Stam, se pagan 1.300 dólares, y por la Saddle, de Dior, 925. La Spy, de Fendi, se eleva a los 2.100 dólares. Y las versiones más económicas de la famosa Birkin, de Hermès, se empinan por sobre los seis mil.

El dinero, claro, no es todo. No se trata simplemente de cobrar caro. Ni siquiera basta con ofrecer altísimos estándares de calidad, costuras hechas a mano por artesanos de un expertise excepcional, herrajes finos, cueros intachables y diseños con vocación de clásicos, características que sustentan la fama de grandes nombres de marroquinería como Hermès o Louis Vuitton. Hay muchas carteras carísimas, que son bellas y orginales, aparecen a cada rato en las revistas de moda, se venden bastante bien en los cinco continentes e incluso gozan de cierta fama entre los fashionistas, pero no logran tener ese aura especial de una 'it'. Y algunos modelos, por más que se 'marketean' como parte del segmento 'it', tampoco: según itbags.com, las marcas sacan aproximadamente 30 o 40 modelos anuales que aspiran a ser parte de este apetecido enclave de la moda, pero con suerte entran en él entre dos y cinco diseños.

¿Qué más se necesita, entonces?

Al repasar la historia de estas carteras, sale a la luz un factor común: detrás de ellas suele haber una mujer estilosa, de fama internacional, que logra traspasarles su aura de estilo y buen gusto. En el mundo de la moda, estas mujeres se conocen como it girls, pero también con la sigla WWM (women who mater; mujeres que importan, en inglés). Al asociar su imagen con una cartera específica, les dicen al resto de las mujeres del planeta que comprar ese producto es una buena elección. Una que las hará sentirse, en algún rincón de su subconsciente, como una celebridad, sin necesidad de tener un cuerpo apto para lucir alta costura. Entre eso y una atracción fatal hay un solo límite: el saldo de la cuenta corriente. O la capacidad de endeudarse.

En algunos casos, esta asociación es buscada y aprovechada por las propias marcas, cuyo objetivo es resumir en un objeto el espíritu de la marca y de la celebridad inspiradora, un intangible de altísimo valor. "Al parecer, en el mundo de la moda, uno no es nadie hasta que alguien nombra un it bag en homenaje a ti", apunta Coni Aravena en el blog vistelacalle.com.

La cartera Birkin es el ejemplo más conocido. Tiene fama de ser el bolso perfecto. ¿Por qué? Porque nació a partir de los pedidos que a bordo de un avión le hizo al dueño de la marca la actriz Jane Birkin, mujer considerada por muchos como perfecta (al menos en lo que a estilo se refiere). Con semejante origen, es entendible que la cartera goce de popularidad. Ella, ícono de moda, debiera saber mejor que nadie lo que una cartera debe tener. Y hoy son muchas las fashionistas que aman esta cartera. Entre ellas, Victoria Beckham: se dice que posee una colección de más de cien modelos diferentes.

Uno de los ejemplos más recientes de este fenómeno es la alianza entre la marca inglesa Mulberry y la famosa presentadora de televisión Alexa Chung. La cartera Alexa es, según el Daily Mail, la más vendida en la famosa tienda Selfridge's, donde hay lista de espera para los modelos en rosado, animal print de leopardo y azul eléctrico. Y eso que cuesta casi 700 libras.

Otras veces son las celebridades las que dan fama a una cartera al escogerla por su voluntad. Lo hizo Audrey Hepburn, fanática de la cartera Speedy, de Louis Vuitton, en la década de los 60. Tanto le gustaba a la actriz que pidió que se hiciera un modelo más pequeño, de 25 x 19 cm. Lleva el famoso monograma de la marca y se convirtió en la más famosa 'city bag' (bolso urbano) de los 60, aunque nació en los años 30. Su nombre, que viene del término en inglés speed (velocidad), alude justamente a la aceleración de la vida urbana.

"Es una cartera muy cómoda, que puedes llevar del día a la noche", dice María Paz Villegas, chilena que posee una Speedy. La suya, además, tiene un plus: es una Mon Monogram. Eso significa que, a pedido, se puede personalizar, para que lleve las iniciales de su dueño. Definitivamente, un lujo.

Las 10 carteras 'it' de la historia Según handbags.com:


1. Birkin, de Hermès (1981)

2. Baguette, de Fendi (1998)

3. Saddle, de Dior (2000)

4. Lariat, de Balenciaga (2001)

5. Giselle, de Luella (2002)

6. Mukarami, de Louis Vuitton (2003)

7. Bayswater, de Mulberry (2004)

8. Paddington, de Chloe (2005)

9. Stam, de Marc Jacobs (2006)

10. Muse, de YSL (2006)

Las 10 carteras 'IT' 2011 Según In Style


1. Alma Nomade Satchel, de Louis Vuitton

2. Fringe Tote, de Bottega Venetta

3. Happy Shoulder Bag, de Lanvin

4. Black Orchid, de Marc Jacobs

5. Leather Tote, de Jil Sander

6. Stirped Cross Body Bag, de Poenza Schouler

7. Bicolor Paper Flap A3 Tote, de Balenciaga

8. Zip-Around Shoulder Bag, de Celine

9. Two-Tone Shoulder Bag, de Victoria Beckham

10. Studded Nude Tote, de Valentino

Bolso Speedy, de Louis Vuitton

Busca pareja? No vaya a las discos, trate en internet, las probabilidades son mayores.

Tomado de El Clarín

CIBER-AFECTOS. “HAY UNA TENDENCIA A QUE LO VIRTUAL SE CONVIERTA, EN UN ESPACIO DE ENCUENTRO Y LO AFECTIVO NO QUEDA AL MARGEN” DICE GANDELMAN

Qué piensa un economista formado en cifras y estadísticas cuando le ofrecen dirigir un sitio que se especializa en el amor y sus circunstancias? Huir. O se entusiasma con el desafío de conjugar el mundo afectivo con los números.

Claudio Gandelman -41 años, brasileño, (foto a la izquierda), casado dos veces, dos hijos- decidió no escabullirse y asumir como Presidente para América Latina de Match.com, una empresa internacional que lidera la búsqueda de parejas por Internet.

Luego de investigar el uso de las nuevas tecnologías, asegura que el mundo digital ha revalorizado la antigua cultura de las cartas. “La mejor forma de interesarle al otro es contarse -uno, sus sueños, sus derroteros-. Para eso, nada mejor que el uso intimista de la palabra escrita”. Este carioca que le sigue fiel a Río -allí tiene su oficina desde la que coordina las actividades en los países vecinos, incluida la Argentina- cree que la búsqueda de parejas no constituye una excepción. “Cada vez hay más sociabilidad en el espacio online: ¿alguien recuerda, acaso, las reuniones que se hacían para ver fotos de viaje? Parecen de otra época, ahora el intercambio se hace en forma virtual”.

Para una persona que quiere buscar pareja, ¿qué le ofrece internet que supere otros espacios de sociabilidad como una discoteca o un gimnasio? Una nueva forma de conocerse no desplaza las otras; las complementa. Pero Internet sí ofrece algunas posibilidades singulares: antes de encontrarse, las personas intercambian varios mensajes, se cuentan sus expectativas, comparten la etapa vital que están transitando, tantean el nivel de interés y de compromiso del otro, profundizan en sus gustos y su forma de pensar. Si esto genera un clima de entusiasmo, recién en ese momento acuerdan el primer encuentro. Llegan con la ventaja de un conocimiento previo que los ha acercado, tienen una afinidad más trabajada.

Parece una mirada con un toque victoriano: mejor dejar el cuerpo para después.

No, no se trata de algo valorativo sino de una descripción de lo que sucede. Si uno va a una discoteca, es posible que encuentre a alguien que le guste a nivel físico o que lo entusiasme por el auto o por el reloj que utiliza. Habrá quizás cruce de miradas, algunas palabras, besos y, a lo mejor, sexo. Eso no significa que se conozcan. Si un hombre o una mujer buscan ese tipo de relación, perfecto. Pero si quieren ir más allá, es usual que esos momentos tengan un carácter furtivo porque fueron entusiasmo de una noche, no hubo un intercambio más profundo que les permitiera saber del otro. En ese sentido, para buscar pareja, Internet es más exitosa que una disco. Esto, claro, en reglas generales ya que siempre puede haber un amor a primera vista; sin embargo, la gente nos cuenta que a determinada edad ya existe cierto cansancio por compartir una sola noche y no poder ir, luego, más allá.

¿Pero no hay también mucho “disfraz” en los perfiles que se suben a los sitios de búsqueda de pareja? Se da un hecho interesante. Físicamente, las personas se suelen describir casi como son aunque se tientan con pequeñas mentiras, mínimas, que cuando nosotros las empezamos a detectar nos preguntamos: “¿Para qué cambiar esto, si no hace casi diferencia?” Las mujeres se sacan un par de años, o dos o tres kilos de peso y los hombres suman algún centímetro a su altura. Quizás haya ahí algo aspiracional o un cierto coqueteo. Pero de una manera u otra, son detalles pequeños. ¿Por qué? Porque en general la gente sube su foto y esta no puede contradecirse con la descripción ni tampoco provocar un efecto negativo al momento del encuentro. En Internet lo físico es importante ya que los perfiles con foto son quince veces más vistos que aquellos que no la incorporan. Sin embargo, el proceso de conquista tiene un gran componente espiritual: la escritura nos dice mucho de una persona y los mensajes vienen y van por un tiempo antes de sentarse uno frente al otro.

Le confieso que muchos perfiles a mí me parecen calcados, como si hubiera una fórmula artificiosa en la que casi todos se escudan.

En parte es cierto, pero usted no se olvide que esos contenidos similares abren también una oportunidad. Así, la persona que en verdad quiere conectarse escribe algo propio, diferente y se muestra como un individuo único. A lo mejor, a una mujer o a un hombre un poco tímidos se les complica brillar en una reunión social. La escritura por Internet les posibilita hacerlo a través de otros caminos. Para ellos, nada mejor que el uso intimista de la palabra escrita. La mejor forma de interesarle al otro es contarse -uno, sus sueños, sus derroteros-. Si lo pensamos en el largo plazo, la parte física es importante pero no lo más importante en una pareja. Lo definitivo está en cómo nos vamos a comprometer, en la calidad de nuestro mundo privado, en el compañerismo en los momentos difíciles. Ahí reside la perdurabilidad.

Más allá de las posibilidades que abre Internet al conectar a gente que nunca se hubiera conocido, ¿lo que subyace no es una soledad que se expande como epidemia? Hay un poema estadounidense que habla sobre Nueva York, probablemente la ciudad más contemporánea del planeta. Dice que es una isla de privacidad y de soledad y que anticipa lo que se viene como ola. Vivimos en una etapa curiosa: la gente quiere preservar su espacio, su mundo más personal. Pero esto suele desembocar en una soledad dura, difícil, en la que uno está rodeado de muchas personas pero no logra establecer vínculos reales que vayan más allá de lo -con suerte- amable y correcto.

¿Temas en apariencia más banales como la falta de tiempo y la eficiencia también potencian el uso de los sitos de búsqueda de pareja? Sí, no hay dudas. La vida laboral actual, con los requerimientos de productividad, y el tiempo que mucha gente pasa viajando para ir al trabajo -auto, tren, colectivo- restan espacio para llegar a casa temprano, darse una ducha y prepararse para una cena o un café. Mucha gente está cansada y sólo quiere calma, tranquilidad, más allá de que el celular y el mail hacen que la puerta de la oficina nunca se cierre. En ese contexto, los sitios permiten ampliar nuestra vida social con un esfuerzo que se adapta al momento. Uno puede responder un mensaje ahora o en un par de horas o al día siguiente. Y lo puede hacer sin necesidad de producirse, sentado en su comedor o en su cocina. No hay imposiciones ni intromisiones. Si quiere, profundiza una relación; si no, la corta. Y si la continúa, la puede hacer a su propio ritmo. Claro que esta tendencia excede la búsqueda de pareja. ¿Sabe cuál es el lugar donde más fotos de viaje se intercambian? No.

Facebook. Ha crecido infinitamente la sociabilidad en el mundo digital. ¿Alguien recuerda, acaso, las reuniones que se hacían para ver fotos de viaje? Parecen de otra época, ahora el intercambio se hace por Internet. Hay una tendencia a que lo virtual se convierta, cada vez más, en un espacio de encuentro y lo afectivo no queda al margen.

Las personas que suben su perfil a un sitio de búsqueda de pareja, ¿quieren en verdad una relación estable o a veces es un simple juego o curiosidad? Por encuestas que hemos hecho entre nuestros usuarios, el 70 % quiere una pareja para su vida. Se trata de algo serio, no de un mero pasatiempo. Eso se nota, incluso, en lo que sucede cuando dos personas deciden encontrarse y luego el vínculo no continúa. A menudo dicen cosas como “Es un buen tipo” o “una mujer de diez”, aunque no sea la persona para ellos. Y generan redes de encuentro para amigos que puedan estar interesados en conocerlos. El compromiso con la búsqueda no es de palabra y esto se reafirma al saber que el 38 % de nuestros usuarios tiene un grado universitario. Están acostumbrados a tener objetivos y a no dejarse llevar por el desánimo así porque sí. Ahora, la forma de implementarlo varía según la cultura. Por ejemplo, en Brasil es muy fácil pasar del encuentro virtual a la cita en un bar, quizás sea el lugar del mundo en el que esto provoca menos dudas. En la Argentina, en cambio, hay encuentros pero son un poco más pensados, antes de concretarlos se analiza si es la persona con la que vale mantener una relación en el largo plazo. La sociedad chilena parece más cerrada, conservadora y utiliza menos la foto porque la entiende como una exhibición un poco pudorosa. Y en México, con una fuerte tradición machista, no es usual que una mujer dé el primer paso para concretar la cita -como sí puede pasar en la Argentina o en Brasil- porque es intuido como algo poco femenino.

¿El hombre y la mujer van a buscar lo mismo en el primer encuentro? ¿O suele haber diferencias? Recordemos que ambos ya se conocieron por un intercambio virtual. A partir de allí, si hubo “química”, es usual que la mujer tenga la expectativa de estar frente al hombre de su vida. El varón, en cambio, es más cauto. Va a verificar si esa química existe, si puede llegar a ser aún mayor y va a concertar una segunda cita si entiende que todo eso se puede dar. En la mujer flota la idea de salir de la cita con un novio y en el hombre, no aún. Claro que esto sucede en general, luego cada persona le agrega su particularidad. Lo ideal es que se pueda hablar de la expectativa de los dos para que no haya desencanto por la actitud del otro. Si esas expectativas van a la misma velocidad, es posible que el primer encuentro crezca y se empiece a delinear la pareja.

Murió a los 84 años Sathya Sai Baba

Tomado de DPA

SAI BABA. Había pronosticado su muerte a los 96 años.

Millones de sus seguidores en la India y en el mundo lloran hoy la muerte de Sathya Sai Baba, el popular y controvertido gurú que conquistó a empresarios, políticos y famosos. Tenía 84 años y murió de un paro cardíaco en Puttaparthi, su ciudad natal.

"Sathya Sai Baba ya no está con nosotros. Ha muerto a las 7.40 horas como cualquier otro paciente humano", anunció el médico que lo atendía, A. N. Safaya. Estaba internado desde hacía dos meses como consecuencia de sus problemas coronarios.

El gurú, que se había autoproclamado dios, y cuyo verdadero nombre es Sathyanarayana Raju, cuenta con millones de seguidores, entre ellos influyentes políticos, deportistas y actores de cine, que lo consideraban una encarnación de la trinidad hindú formada por Brahma, Vishnúy Shiva.

Nacido en 1926 en el interior de una familia pobre, a los catorce años el gurú dijo tener naturaleza divina y predicó durante tres días bajo un árbol de Puttaparthi, donde luego levantó su centro religioso, el "Prashanti Nilayam" o "Morada de la Paz".

Tiempo más tarde se hizo famoso por sus supuestos milagros, habilidades místicas con las que producía ceniza o comida de lanada, o se sacaba de la boca joyas, bolas de oro y relojes, unas prácticas denunciadas como prácticas fraudulentas por diversas asociaciones.

Otros ex seguidores lo acusaron a él y a miembros de su organización en el año 2000 de abusos sexuales contra niños y adultos varones, hechos que él siempre negó y por los que nunca fue acusado formalmente.

Sai Baba, conocido por su melena estilo "afro" y su larga túnica naranja, se hizo popular en Occidente en la década de los setenta, en gran parte gracias al movimiento hippie, y actualmente cuenta con seguidores en más de 100 países de todo el mundo. Su centro religioso es lugar de peregrinación para muchas personalidades indias, al punto que tanto la presidenta, Pratibha Patil, como el primer ministro, Manmohan Singh, acudieron a su último cumpleaños.

"Sathya Sai Baba era un líder espiritual que inspiró a millones de personas, sin renunciar a su propia religión, llevar una vida moral, siguiendo las ideas de verdad, conducta adecuada, paz, amor y no violencia", se lamentó hoy el premier en un comunicado.

En los últimos años, y tras las acusaciones de fraude, Raju había abandonado sus milagros, y se había centrado en las ayudas sociales, apoyado en un Consejo que gestiona, según el ministerio de Economía indio, más de 9.000 millones de dólares en donaciones. El gobierno será el encargado de decidir quiénes lo sucederán al frente de la organización, cuyo valor se estima en 10.000 millones de dólares.

Conocida la noticia de su muerte, frente al hospital en el que falleció miles de sus seguidores estallaron en llanto. La policía dispuso un amplio operativo de seguridad para contener a la multitud.

El cuerpo del gurú estará expuesto durante dos días, para que sus fieles puedan verlo antes de su funeral previsto para el miércoles en Purraparthi y hasta donde se prevé se movilizarán cientos de miles de fieles.