domingo, 9 de septiembre de 2012

Las dos cara de la Grecia actual. Una, la de los turistas. La otra, la de sus ciudadanos


Tomado de BBC Mundo  

Este verano, los turistas que visitaron Grecia aseguraron que las playas eran tan hermosas como siempre y los sitios arqueológicos tan fascinantes como siempre lo han sido. Sin embargo, los efectos de cinco años de recesión en el país se están haciendo más y más evidentes.

Durante meses, los visitantes han visto imágenes de protestas callejeras de ciudadanos enojados y han escuchado historias sobre el impacto de la austeridad. Al llegar, esperan encontrarse con un lugar que se ve y se siente casi como una zona de guerra.

Cuando un amigo mío le dijo a unos amigos este verano que vendría a Atenas durante unos días, uno de ellos le preguntó en tono grave si todavía se podía encontrar comida en las tiendas.

"¿Dónde está la crisis?" , preguntó un conocido cuando lo llevé por toda la ciudad. "No se ve".

En muchos sentidos, no se puede ver.

Es fácil pasar unos días en los pequeños restaurantes llenos de gente de la capital, deambulando por las tiendas populares, bebiendo café helado en la acera de un café debajo de la Acrópolis y no notar nada extraño.

Atenas parece funcionar más o menos normalmente, como lo hace el resto del país.

Percepción deformada

Algunos turistas este verano dijeron que habían estado a punto de cancelar sus viajes debido a temores de disturbios.

Grecia está en su mejor momento en esta época del año.

La fabulosa costa destella bajo la luz del sol a finales del verano, las casas de piedra blanca de las islas cubiertas con buganvillas sobre el azul profundo del mar Egeo hacen que este lugar se sienta como el país más bendecido en Europa -no como el más endeudado.

Las percepciones de Grecia se deforman fácilmente.

Algunos turistas este verano dijeron que habían estado a punto de cancelar sus viajes debido a los temores de disturbios, pero luego, mientras beben un ouzo -el típico aperitivo griego- en una playa perfecta, se sienten aliviados de no haberlo hecho.

Sin embargo, basta escuchar las historias de los habitantes de esta cálida nación para averiguar lo que realmente está pasando.

Recientemente conversé con un grupo de señoras mayores que se reúnen a tomar café griego fuerte desde que se retiraron. Lo que ha cambiado es la conversación.

"Ya no me puedo dar el lujo de comprar chocolate para mi nieto", dice María de 82 años con los ojos vidriosos por las lágrimas. "Si ellos me recortan aún más mi pensión mensual, me quedo con 100 euros (US$128) para vivir. ¿No soy humana?".

Se trata de mujeres que han vivido tanto - las guerras, la dictadura - y ahora simplemente tienen tiempo para una vejez confortable. Sin embargo, como muchos aquí, enfrentan nuevos salvajes recortes del gasto.

"Mi hijo me pidió prestado dos euros (US$2.5). Está tan desesperado", cuenta llorando Ermoni de 84 años. "Fue como un puñal en mi corazón. No puedo permitirme vivir más. Lo único que quiero es cerrar los ojos y no despertar jamás".

Tan bajo, tan rápido
 Las historias trágicas están por todas partes: algunos partidos distribuyen comida gratis para los necesitados.

Las historias trágicas están por todas partes. Visité a Kostas Kokotsis, un hombre de edad avanzada que depende de la caja de comida gratis que recibe.

Su hogar en el suburbio occidental de Perama está cubierto de telarañas por todos los rincones, con sonido de ratas dentro de las paredes, objetos viejos amontonados por todas partes, las sábanas sucias y sin cambios.

Sobre la mesa se encuentra una factura de electricidad -que no puede pagar- junto a su recibo de pensión de 340 euros al mes -poco más de US$435. Con eso apenas cubre el alquiler.

De hecho, hay una casa-hogar al sur de Atenas, a la que cada vez llegan más y más niños cuyos padres ya no pueden permitirse el lujo de mantenerlos.

Una madre renunció a su hija de 10 años el año pasado y ahora pasa con ella sólo un momento una vez a la semana.

"Es difícil no tenerla junto a mí cuando duerme o ver su crecimiento", dijo. "Pero no hay otra opción".

Esto está sucediendo en un país de la Unión Europea -un lugar de incomparable riqueza cultural, belleza, historia. ¿Cómo ha llegado a esto?

Se pueden leer tantas teorías, estudiar las estadísticas y aún sigue pareciendo incomprensible que un país puede caer tan bajo, tan rápido.

No obstante, estas son las distintas caras de la fascinante Grecia -una, bañada por el sol, sofisticada y alegre; y otra, por el sufrimiento de una forma que todavía aturde a cada historia.

Eso la convierte en un lugar que desafía las expectativas de los visitantes del verano y que es a la vez encantadora, desconcertante y desgarradora.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Viuda de tirofijo integra comisión negociadora de las FARC


Tomado de El Espectador
 Sandra y ‘Marulanda’ durante los diálogos del Caguán, con su mascota, un lobo siberiano llamado ‘Bonie’. 

Fue su compañera sentimental por 15 años
Negociadora de las Farc es la viuda de 'Tirofijo'
Por Gloria Castrillón

Manejaba la seguridad y el cuidado personal del jefe guerrillero. Esta semana, en Cuba, se convirtió en la única mujer a la que la guerrilla ha sentado en una mesa de negociación.

“Murió de un infarto cardíaco, en brazos de su compañera”. Con estas palabras, el hoy jefe máximo de las Farc, Timoleón Jiménez, confirmó al mundo la muerte del fundador y líder histórico de esta guerrilla, Manuel Marulanda Vélez, en un comunicado que leyó el 25 de mayo de 2008. Semejante alusión no era sólo un giro retórico para darle un toque de humanidad y romanticismo a la figura del insurgente más feroz, el más buscado, el más combatido por el Estado durante más de medio siglo. Era también la forma de hacerle un homenaje a Sandra, la mujer que cuidó del anciano durante más de 15 años de su vida en el monte.

Aunque la figura de Sandra salió a relucir durante los diálogos que adelantó el gobierno de Andrés Pastrana en la zona de despeje del Caguán, nunca fue protagonista de las negociaciones. Se la veía siempre al lado del jefe guerrillero, que ya se había convertido en mito por cuenta de las muchas veces que el Estado anunció su muerte en combate. Era ella la que conducía la camioneta 4x4 en la que Marulanda llegaba de repente a la sede de los diálogos, era ella la que tomaba atenta nota de las reuniones y asuntos pendientes. Era ella la última puerta infranqueable, después de la fuerte escolta, para acceder al jefe de la guerrilla más antigua del continente. Era casi su sombra.

Ya en la intimidad, Sandra era más que su asistente. Se convirtió en la única persona que pasaba a su lado las 24 horas del día: lo acompañaba hasta la puerta del baño, le administraba las medicinas para la hipertensión y otras dolencias propias de la edad, se encargaba de su vestimenta, que iba desde una sencilla pinta de paisano — camisa, pantalón y botas pantaneras—, hasta el camuflado y las botas militares de cuero cuando la ocasión ameritaba el traje de fatiga. Le supervisaba la dieta, baja en sal y carbohidratos y abundante en frutas y verduras.
Pero tal vez el rasgo más importante de las funciones que cumplía Sandra como compañera sentimental de Marulanda era la seguridad. Sólo ella conocía el sitio donde acampaba cada noche quien fue por años el hombre más buscado del país. Los demás miembros de la pequeña escolta acogían la decisión que ella tomara, mientras los demás anillos de seguridad se encargaban de resguardar un área general.

Sandra no descuidó este asunto ni siquiera cuando estuvieron en los 42.000 kilómetros cuadrados que el Estado les cedió a las Farc para negociar. Ningún miembro del secretariado conocía la ubicación exacta del campamento. Cada noche cambiaban de refugio y ni el Mono Jojoy ni Joaquín Gómez, jefes de los bloques Oriental y Sur, que prestaban cientos de hombres para los anillos de seguridad de su jefe, conocían la decisión de la mujer.
De ella no se supo mucho. Era reservada, casi misteriosa, sabía guardar prudente distancia sin perder de vista cualquier necesidad de su compañero. Sorprendió la diferencia de edad (posiblemente él la doblaba en años) y la enorme dedicación que ella le prodigaba: le cortaba las uñas y el pelo, le leía libros, correspondencia y documentos, veía películas para comentárselas, estaba actualizada para asegurarse de que él también lo estuviera.

Una de las sorpresas que se llevaron los delegados del presidente Pastrana (incluso el mismo mandatario) durante los primeros encuentros con Manuel Marulanda, fue precisamente que Sandra tomara las fotografías de los momentos más importantes de aquellos contactos preliminares y que guardara con celo los documentos que él debía revisar.

Uno de los momentos que quedó registrado para la prensa y que le dio la vuelta al mundo fue cuando Sandra, vestida como Tirofijo, con impecable uniforme camuflado, se desprendió por un instante de su esposo para cobijar al presidente Andrés Pastrana con un plástico y protegerlo de la lluvia. Era el 8 de febrero de 2001 y el mandatario había ido a San Vicente del Caguán a tratar de salvar el proceso de paz de una de sus infaltables crisis.

No hay duda de que ella conocía como nadie los secretos del octogenario guerrillero, porque además le manejaba el radio de comunicaciones, le contestaba la correspondencia y estuvo a su lado durante los momentos cruciales de los diálogos de paz. No sorprende verla como protagonista de este nuevo intento, ahora con el gobierno Santos.

Sentarla en la mesa de negociaciones durante esta primera etapa es un homenaje al mito fundador de una guerrilla campesina que sigue venerando la figura del comandante que cursó pocos años de escuela pero puso en jaque la seguridad de los 17 presidentes que lo combatieron sin éxito. Incluso se cree que más allá de darle representación a las mujeres insurgentes, se trata de darle voz y voto a la persona que conoció como nadie a su líder y que seguramente llevará sus puntos de vista a la mesa de diálogos.

Los organismos de seguridad del Estado nunca tuvieron mayor información de Sandra. No estaba reseñada en informes de inteligencia ni tenía proceso penal en contra.

Tras la muerte de Marulanda no se tuvo noticia de su paradero y sólo ahora, al verla de civil, ofreciendo una rueda de prensa al lado de curtidos hombres de la diplomacia de las Farc, vuelve a ser noticia.

CHIRLA pone a disposición de los Dreamers videos para ayudarle a llenar la aplicación de Acción Diferida


Ricky Campos organiza a personas indocumentadas que buscan llenar la solicitud de acción diferida. Una nueva serie de videos busca facilitar el proceso para los "dreamers."
Acción Diferida: CHIRLA facilita la solicitud con serie de videos
Bruno César Sotelo llegó a la pregunta sobre "país de residencia" en su formulario de solicitud para el programa Acción Diferida y no supo qué poner.
El joven de 24 años nació en Perú, pero inmigró a Estados Unidos cuando tenía 13 años.
¿Qué escribe? ¿Perú? ¿O Estados Unidos?
Sotelo no sabía la respuesta.
A partir de esta semana, miles de los llamados DREAMers como Sotelo, tienen un recurso adicional que les ayudará a completar la solicitud de Acción Diferida, gracias a una serie de videos creados por la Coalición Para los Derechos Humanos de los Inmigrantes en Los Angeles (CHIRLA).
Desde mediados de agosto, cuando comenzó a aplicarse el programa Acción Diferida anunciado por el Presidente Obama en junio y que dará residencia temporal y permiso de trabajo a jóvenes indocumentados que cumplan los requisitos, la organización comunitaria CHIRLA ha ayudado a miles de personas a completar las solicitudes por medio de foros comunitarios y consultas individuales con abogados de inmigración y voluntarios especialmente entrenados para completar las solicitudes.
CHIRLA fue formada en 1986, dice su sitio de internet, para avanzar los derechos humanos y civiles de inmigrantes y refugiados en Los Angeles, así como para promover relaciones humanas multiétnicas y multiraciales y para empoderar a inmigrantes y sus aliados a construir una sociedad más justa mediante la construcción de coaliciones, el activismo, la educación comunitaria y la organización.
La abogada de inmigración Jessica Dominguez, quien aparece en los videos y a menudo participa en estas consultas como voluntaria de CHIRLA, le dijo a Huff Post Voces que ella notó que la mayoría de las preguntas se trataban sobre las mismas secciones de la forma de solicitud.
Al notar esto, los lideres de CHIRLA hicieron una lista de las preguntas más frecuentes y en colaboración con el California Dream Network, (CDN) , una organización de alrededor de 50 grupos estudiantiles a traves del país, decidieron crear una serie de videos para contestarle estas preguntas al público general.
"Mucha gente todavía no ha podido llegar a una organización comunitaria. Estos videos son para esa gente", dijo Dominguez. Complementan la atención personal que prestan grupos como CHIRLA de manera directa: el 15 de agosto, primer día de la implementación del programa de Acción Diferida, CHIRLA ofreció ayuda directa a alrededor de mil personas. Desde entonces, si bien el número mermó, la organización sigue ocupándose de centenares de solicitantes por semana.
La serie de videos, que está disponible en inglés y en español en YouTube, muestra cómo contestar algunas de las preguntas más complicadas de los formularios I-821 D, I-765 y I-765 WS.
"Si uno sigue esas instrucciones paso por paso, uno no debería tener ningún problema en llenar la solicitud," dijo Justino Mora, organizador del California Dream Network quien aparece en el video a lado de Dominguez, vestido en una camiseta que dice "Organizador comunitario."
Mora, quien es indocumentado y uno de los llamados "DREAMers", dijo a Huff Post Voces que los videos han sido confeccionados para informar a la comunidad y hacer solicitud más comprensible para la gente.
Mora agregó que al estar disponible en las redes del internet el video puede servir a un públiconacional al que CHIRLA no puede llegar porque su enfoque es local.
"Es muy difícil ayudarle a alguien que vive en San Francisco, California, o en el estado de Nebraska, o en Oklahoma," dijo Mora, quien ha trabajado con California Dream Network desde el 2009. "Con el video podemos ayudarle a estas personas... para que la gente tenga mas confianza al someter su solicitud y si tienen algunas dudas esperamos que el video se las conteste."
El activista también denotó que los videos benefician a la comunidad indocumentada porque son un recurso gratuito, mientras que hay abogados que cobran miles de dólares solo por ayudar a llenar la solicitud. Por el mismo servicio en CHIRLA cobran 40 dólares a miembros de la organización y 80 dólares a quienes no son miembros. Mora dijo que espera que la ayuda que ofrece el video le sirva a la comunidad indocumentada para ahorrar dinero y agregó que muchos de sus amigos ya le habían dejado saber por mensajes de texto que el video les había contestado muchas de sus preguntas.
Bruno César Sotelo fue uno de estos amigos. El oriundo de Perú que también hace tareas de voluntario en CHIRLA dijo a Huff Post Voces que los videos benefician a la comunidad porque aún alguien como él, que ha sido entrenado para ayudar a otras personas a llenar la solicitud, no saben todas las respuestas.
La gente indocumentada tiene que tener mucho cuidado al someter su solicitud, ya que una respuesta equivocada los podría descalificar, advirtió.
Dominguez aconsejó que al someter la solicitud la gente siempre sea honesta y diga solamente la verdad. Más que nada, agregó Dominguez, la evidencia sometida para el programa debe ser muy clara y no dejar lugar a dudas. Por ejemplo, incluso si uno está trabajando con un número de seguro social falso o que no le pertenece, no deberían someterlo en la sección del formulario que pide este número.
Enfatizó la abogada que los Servicios de Ciudadanía e Inmigración piden buenas evidencias de su residencia en el país, y que documentos tales como cuentas de banco y records de escuela podrían servirles para esta función.
¿Y el dilema de Sotelo? ¿Entonces, qué pone bajo "país de residencia"?
Gracias al video de CHIRLA, eso ya esta resuelto: Estados Unidos, siempre.