martes, 20 de noviembre de 2012

Corteza cerebral de Einstein era única, concluye estudio


 Tomado de La Voz de América

 Cerebro de Einstein diferente al de los humanos promedio

Así quedó evidenciado en un estudio de la Universidad Estatal de Florida.

Según la investigación, se observó la corteza cerebral del científico y se detectó que tenía características únicas.  Ahí podría estar la clave de sus extraordinarias capacidades.

Dean Falk, antropólogo evolucionista describe por primera vez en la revista Brain la corteza cerebral entera de Einstein a partir del examen de catorce fotografías. Los investigadores compararon el cerebro del genio con otros 85 cerebros “normales” y, a la  luz  de los actuales estudios de imágenes funcionales, señalaron las características que parecían inusuales.

“Aunque el tamaño y la forma asimétrica del cerebro de Einstein eran normales, el prefrontal, el sistema somatosensorial, el córtex motor primario y las cortezas parietal, temporal y occipital eran extraordinarias”, afirma Falk.

Estas diferencias “pudieron proporcionar las bases neurológicas de algunas de sus habilidades viso espaciales: la capacidad de distinguir por  medio  de la vista la posición relativa de los objetos en el espacio; y  las matemáticas, por ejemplo”.

“Encontramos una región inusual más abajo en la corteza motora que procesa información del rostro y lengua y el aparato laríngeo. El  área  motora del rostro en el hemisferio izquierdo de Einstein estaba extraordinariamente expandido dentro de un gran parche que no he visto en otro cerebro”, continua el estudio.

En 1955, el día siguiente de su muerte, el doctor Thomas Harvey extrajo el cerebro de Albert Einstein con sumo cuidado, con el permiso de su familia se seccionó en 240 bloques de la cuales se prepararon cortes histológicos.

Las catorce fotografías utilizadas por los investigadores están ahora en manos del Museo Nacional de Salud y Medicina de Chicago, EE.UU.

domingo, 18 de noviembre de 2012

Obama se reeligió. Y ahora qué?


Por Luis Montes Brito
Para Diario El Mundo de El Salvador


Las consecuencias del resultado de las elecciones presidenciales estadounidenses se han hecho sentir rápidamente. El cambio de discurso y actitud de algunos dirigentes Republicanos es evidente, ahora motivados por la supervivencia política incluso se manifiestan en favor de lo que  criticaban acremente durante la campaña,  manifestando su disposición a discutir una reforma migratoria integral. También por el lado Demócrata ha servido para despejar dudas, de una vez por todas,  a aquellos pocos que pensaban que todavía no era el momento de apostarle al votante hispano.

La pregunta del título de esta columna más que orientada a la exigencia del cumplimiento de las promesas de campaña va dirigida al rumbo que tomará la política estadounidense a partir de hoy. Sin lugar a dudas el respeto a la diversidad y a los intereses de las minorías, es un tema que pesó mucho más de lo que pensaban aquellos estrategas que se equivocaron al diseñar la campaña centrándola en un mono tema económico.

Las minorías se hicieron sentir en las urnas. El 3% de los votantes fue de origen asiático, el 10% hispano y el 13% afroamericano. Obama con un lenguaje más incluyente acaparó la enorme mayoría de estos votos: 73% de los asiáticos, 71% de los latinos y como era lógico esperar, el 93% del total de los afroamericanos.

Romney no tuvo el mismo impacto con los electores clasificados como blancos, que son el 72% del universo del padrón electoral, ya que el 39% de éstos votaron por Obama.  Los números demuestran que el agresivo discurso antihispano de muchos líderes republicanos,  lejos de sumar, alejó al voto latino, obteniendo el porcentaje más bajo en los últimos 12 años. En el año 2000 George W. Bush logró el 31% del voto de esta minoría, se reeligió el 2004 con un contundente 44% de ellos, en el 2008 McCain conquistó un 31% y  Mitt Romney descendió hasta un pobre 27% del voto latino este año.

En medio de una apasionada campaña, llena de descalificaciones y frases peyorativas, los republicanos privilegiaron sus prejuicios a la tendencia demográfica. Equivocadamente dejaron brotar su retórica antihispana pensando que un mensaje economicista aunado a la exitosa imagen de un candidato empresario sería suficiente para ganar las elecciones en tiempos de crisis económica, altos índices de desempleo y una insatisfacción generalizada.

Los republicanos anclados en la antigua composición del electorado, basaron su discurso en un escenario donde los hombres blancos mayores de 65 años eran los predominantes entre los electores, negándose a aceptar los cambios de la actual demografía estadounidense donde 1 de cada 6 habitantes es hispano, siendo este el grupo étnico de mayor crecimiento. En otras palabras ignoraron a los que hoy se les conoce como "la coalición ascendente": compuesto por las minorías étnicas, los jóvenes y las mujeres de todas las razas, que en conjunto son ya la mayoría de votantes.

Conscientemente adoptaron una política de exclusión de grupos pasando por discriminaciones que van mucho más allá de lo meramente ideológico , ampliándola a creencias religiosas, preferencia sexual, raza, etnia, pensamiento liberal y otros criterios excluyentes que tal vez sean adecuados para seleccionar la membresía de un club social o una iglesia, pero inadecuados para un partido político que requiere la mayor cantidad posible de votos, ya que aspira a gobernar a una nación diversa donde el respeto a las libertades y forma de pensar individual es fundamental.

Nadie duda que Mitt Romney tiene mayor capacidad de hacer dinero que Obama, al mismo tiempo pocos dudan que Romney distribuiría ese dinero entre sus amigos y no en la clase media que es la mayoría de la población estadounidense. De que sirve que un candidato sea capaz de generar riqueza si al final esta no bajará más allá de las altas esferas.

Un caso parecido se da en El Salvador donde muy pocos dudan ya de la incapacidad del FMLN para sacar al país de la pobreza, pero también muy pocos dudan de la insensibilidad social mostrada por algunos dirigentes y patrocinadores de ARENA para distribuir la riqueza que pudieran generar. La experiencia alrededor del mundo demuestra que políticamente ya no es posible continuar ignorando el tema de una distribución más equitativa de lo producido por un país. 

Clausuran Cumbre de Cádiz con una nueva etapa de relaciones Iberoamericanas


Agencias Noticiosas

Termina en Cádiz la XXII Cumbre Iberoamericana que buscó reequilibrar relación entre países

Califican la Cumbre como una de las mejores de la historia

La economía y la búsqueda de herramientas para ayudar a la zona Euro a superar la recesión, han estado en el centro de casi todas las conversaciones en la Cumbre de Cádiz.


Los líderes iberoamericanos propusieron como fórmula contra la crisis fortalecer el comercio y la inversión, con estabilidad jurídica y financiera, y ayudar a las empresas a crear empleo.

"En estos años América Latina se ha convertido en una de las regiones con mayor potencial de crecimiento", afirmó el presidente del gobierno español, el conservador Mariano Rajoy, al clausurar la cita.
"Europa, por su parte, debe aunar esfuerzos para arrancar el motor común del crecimiento", agregó, en un momento en que los países de la UE se enfrentan por un presupuesto europeo marcado por la austeridad.
En este contexto, "queríamos que Cádiz sentara las bases para una relación renovada" que refleje este reequilibrio de fuerzas entre países europeos y latinoamericanos, afirmó Rajoy, considerando que el encuentro culminó con éxito "muchos meses de trabajo y reflexión" entre los 22 miembros de la comunidad iberoamericana.
El impacto social de la crisis europea, que golpea con especial fuerza a Portugal y España, se convirtió en el tema central de la cumbre, en un contexto de cuestionamiento a las medidas de ajuste como forma de salir de la recesión.
La austeridad, "aunque aleja el quiste de una quiebra financiera, no aleja la desconfianza de los mercados, y aún más importante, no aleja la desconfianza de las poblaciones", lanzó la presidenta brasileña, Dilma Rousseff.
Para hacer frente a la creciente insatisfacción social es necesario adoptar una política para incentivar el crecimiento que "obtenga resultados concretos para las personas y presente un horizonte de esperanza, no sólo la perspectiva de más años de sufrimiento", agregó.
Abriendo sus mercados y garantizando un marco regulatorio transparente y estable, los países latinoamericanos pueden contribuir a la superación de una crisis que, de prolongarse, podría afectar también a sus economías.
"Es importante que hay una masa de 600 millones de latinoamericanos que trabajando juntos puedan darse apoyo" en estos tiempos de crisis, destacó por su parte el Secretario General Iberoamericano, Enrique Iglesias.
"Hay una corriente importante de empresas españolas que van para América y tenemos la posibilidad de crear empresas multi ibéricas", agregó.
Este estrechamiento de la cooperación quedó reflejado en la declaración final de la cumbre, en la que los líderes se comprometieron a "fortalecer reglas claras, estables y previsibles que ayuden a promover las inversiones productivas nacionales y extranjeras".
La seguridad jurídica, que interesa especialmente a España tras la expropiación de la petrolera YPF a Repsol por Argentina, es también fundamental para los cientos de empresas multilatinas con intereses en todo el continente.
En el marco de la cumbre se presentó asimismo la creación de un Centro Iberoamericano de Arbitraje privado, que permita una resolución rápida y simplificada de los conflictos entre empresas.
La cita adoptó también una Carta Iberoamericana de las Pymes destinada a propulsar a las pequeñas y medianas empresas como elementos claves de desarrollo y creación de empleo.
Junto a la crisis, los dirigentes iberoamericanos trataron cuestiones de interés regional, y por petición de México y los países centroamericanos, pidieron que se realice una reflexión a nivel internacional sobre la despenalización de la producción, la venta y el consumo de ciertas drogas.
La XXII Cumbre Iberoamericana se celebró este año en Cádiz coincidiendo con el bicentenario de la Constitución de 1812, promulgada en esta ciudad por diputados de España y América, un texto que fue fundamental para la posterior independencia de los países latinoamericanos.
Un total de 21 países estuvieron presentes en esta cita, a la que no acudió Paraguay debido al conflicto con sus socios de Unasur y Mercosur a raíz de la destitución del presidente Fernando Lugo.
Estuvieron también ausentes los presidentes de Cuba, Venezuela, Argentina, Guatemala, Uruguay y Nicaragua, representados por sus vicepresidentes o cancilleres.
La próxima cita tendrá lugar en Panamá, que propuso las fechas del 18 y 19 de octubre coincidiendo con el quinto centenario del descubrimiento del 'Mar del Sur' (océano Pacífico) por el navegante español Vasco Núñez de Balboa.