lunes, 22 de febrero de 2016

Mi versión de lo que ocurrió en la historia un día como hoy 22 de Febrero

Compilado por Luis Montes Brito
Un día como hoy 22 de Febrero de 1632 Galileo Galilei publica su Diálogo sobre los dos principales sistemas del mundo. Obra publicada en Florencia en 1632, e inmediatamente devino en fuerte polémica, que finalizó en acusación formal por "sospechas graves de herejía" ante la Inquisición y posterior condena del autor. El libro fue a continuación incluido en la lista de libros prohibidos, de la cual no fue eliminado hasta 1822. La revolución científica del Renacimiento tuvo su arranque en el heliocentrismo de Copérnico y su culminación, un siglo después, en la mecánica de Newton. Su más eximio representante, sin embargo, fue el científico italiano Galileo Galilei. En el campo de la física, Galileo formuló las primeras leyes sobre el movimiento; en el de la astronomía, confirmó la teoría copernicana con sus observaciones telescópicas. Pero ninguna de estas valiosas aportaciones tendría tan trascendentales consecuencias como la introducción de la metodología experimental, logro que le ha valido la consideración de padre de la ciencia moderna. Un día como hoy 22 de febrero de 1632, Galileo, protegido por el papa Urbano VIII y el Gran Duque de Toscana Fernando II de Médicis, publica en Florencia su diálogo de los Massimi sistemi (Diálogo sobre los principales sistemas del mundo) (Dialogo sopra i due massimi sistemi del mondo), donde se burla implícitamente del geocentrismo de Ptolomeo. El Diálogo es a la vez una revolución y un verdadero escándalo. El libro es en efecto abiertamente pro-copernicano, ridiculizando audazmente la interdicción de 1616 (que no será levantada hasta 1812). El Diálogo se desarrolla en Venecia durante cuatro jornadas entre tres interlocutores: Filipo Salviati, un florentino seguidor de Copérnico, Giovan Francesco Sagredo, un veneciano ilustrado sin tomar partido, y Simplicio, un mediocre defensor de la física aristotélica, un personaje que algunos quieren ver inspirado en Urbano VIII. Pero, mientras que se le reprocha el carácter ostensiblemente peyorativo del nombre, Galileo responde que se trata de Simplicio de Cilicia. Muchos autores coinciden en que Galileo no esperaba estas reacciones ni que el Papa reaccionara posicionándose entre sus enemigos. En estos cuatro días de discusión, Galileo, aunque lo tenía prohibido por el decreto de 1616, presenta dos nuevas pruebas de carácter experimental y observacional a favor de la teoría copernicana. La basada en el movimiento de las mareas, errónea, y la basada en la rotación de las manchas solares, acertada y que refutaba tanto la ptolomaica (ya descartada por las fases de Venus), como la de Tycho Brahe, en cuya defensa se habían refugiado los jesuitas del Colegio Romano. Esto motivó la intervención de la Inquisición, que sólo le permitía a Galileo el presentar la teoría como mera hipótesis, y no presentar pruebas a su favor. Por otra parte, Galileo tiene en Roma poderosos enemigos, fundamentalmente entre los jesuitas del Colegio Romano, especialmente Christoph Scheiner y Orazio Grassi, quienes se consideraban la rama intelectual de la Iglesia, y quienes pudieron ser quienes iniciaron el rumor de que el Papa Urbano era, en realidad, el simpático pero poco brillante Simplicio. Esto fue muy perjudicial para Galileo, pues en Roma era muy conocida la enorme autoestima del Papa. Por otro lado, tampoco ayudó a Galileo el escribir su citada obra en lengua vulgar, en vez de hacerlo en el idioma culto utilizado entonces entre los hombres de ciencia, el latín, pues a la Iglesia no le gustaba que las obras llegaran directamente al hombre de la calle. El proceso realizado por la Inquisición fue irregular, pues a pesar de que el libro había pasado el filtro de los censores, se le acusaba de introducir doctrinas heréticas. Puesto que esto dejaba en mal lugar a dichos censores, la acusación oficial fue de violar la prohibición de 1616. Galileo fue requerido para presentarse en Roma, sin embargo, estaba sumamente enfermo y agotado, y ya contaba 68 años, por lo que se demoró en acudir, además de que en esos momentos existía una epidemia de peste en Italia. Aunque presentó certificados médicos alegando estas circunstancias, a finales de diciembre de 1632 fue conminado a acudir inmediatamente de grado o por fuerza. Que no era voluntad suya el retrasar el viaje lo prueba el que, debido a la peste, fuera retenido por espacio de 42 días para abandonar la Toscana. Por otra parte, el trato recibido durante el proceso fue correcto, alojado en las habitaciones del palacio de la Inquisición, y recibiendo todas las atenciones que necesitaba, si bien no fue ningún trato especial distinto al resto de otras personalidades importantes y personas de su condición. El proceso comenzó con un interrogatorio el 9 de abril de 1633, donde Galileo no reconoce haber recibido expresamente ninguna orden del cardenal Bellarmino. Por otra parte, dicha orden aparece en un acta que no estaba firmada ni por el cardenal ni por el propio Galileo. Con pruebas endebles es difícil realizar una condena, por lo que es conminado a confesar, con amenazas de tortura si no lo hace y promesas de un trato benevolente en caso contrario. Galileo acepta confesar, lo que lleva a cabo en una comparecencia ante el tribunal el 30 de abril. Una vez obtenida la confesión, se produce la condena el 21 de junio. Al día siguiente, en el convento romano de Santa Maria sopra Minerva, le es leída la sentencia, donde se le condena a prisión perpetua, y se le conmina a abjurar de sus ideas, cosa que hace seguidamente. Tras la abjuración el Papa conmuta la prisión por arresto domiciliario de por vida. Giuseppe Baretti afirmó que después de la abjuración Galileo dijo la famosa frase «Eppur si muove» («Y sin embargo se mueve»), pero según Stillman Drake Galileo no pronunció la famosa frase en ese momento ya que no se encontraba en situación de libertad y sin duda era desafiante hacerlo ante el tribunal de cardenales de la Inquisición. Para Stillman si esa frase fue pronunciada lo fue en otro momento. El texto de la sentencia fue difundido por doquier: en Roma el 2 de julio de 1633 y en Florencia un mes más tarde, el 12 de agosto del mismo año. La noticia llegó a Alemania a finales de agosto, en Bélgica en septiembre. Los decretos del Santo Oficio no se publicarán jamás en Francia, pero, prudentemente, René Descartes renuncia a la publicación de su Mundo. Muchos (entre ellos Descartes), en la época, pensaron que Galileo era la víctima de una confabulación de los jesuitas, que se vengaban así de la afrenta sufrida por Horazio Grassi en el Saggiatore. En la madrugada del 8 al 9 de enero de 1642, Galileo falleció en Arcetri confortado por dos de sus discípulos, Vincenzo Viviani y Evangelista Torricelli, a los cuales se les había permitido convivir con él los últimos años. La célebre frase que se le atribuye (Eppur si muove, 'Y sin embargo (la Tierra) se mueve') se ha convertido en el emblema del poder incontenible de la verdad frente a cualquier forma de dogmatismo establecido. En 1992, exactamente tres siglos y medio después del fallecimiento de Galileo, la comisión papal a la que Juan Pablo II había encargado la revisión del proceso inquisitorial reconoció el error cometido por la Iglesia católica. Finalmente, es un mito la historia que señala que Galileo murió en la hoguera por orden de la Iglesia Católica, tampoco es cierto que la Santa Inquisición lo condenó a muerte. Si, es cierto que lo condenó por atreverse a sostener que la tierra se mueve y no el sol, así como también es cierto que la condena fue arresto domiciliario de por vida, condena que se mantuvo vigente hasta su muerte.
Un día como hoy 22 de Febrero de 1732 nace George Washington a orillas del río Potomac, en la finca de Bridge's Creek, en el antiguo condado de Westmoreland, entonces América Británica y ahora estado de Virginia. Pertenecía a una distinguida familia inglesa, oriunda de Northamptonshire, que había llegado a América a mediados del siglo XVII y había logrado amasar una considerable fortuna. Su padre, Augustine, dueño de inmensas propiedades, era un hombre ambicioso que había estudiado en Inglaterra y que al enviudar de su primera mujer, Jane Butler, quien le había dado cuatro hijos, contrajo segundas nupcias con Mary Ball, de una respetable familia de Virginia, que le dio otros seis vástagos, entre ellos George. Poco se sabe de la infancia del futuro presidente, salvo que sus padres lo destinaban a una existencia de colono y por ello no fue más allá de las escuelas rurales de aquel tiempo: entre los siete y los quince años estudió de modo irregular, primero con el sacristán de la iglesia local y luego con un maestro llamado Williams. Alejado de toda preocupación literaria o filosófica, el muchacho recibió una educación rudimentaria en lo libresco, pero sólida en el orden práctico, al que lo inclinaba su activo temperamento. Ya en la temprana adolescencia estaba suficientemente familiarizado con las tareas de los colonos como para cultivar tabaco y almacenar las uvas. En esa época, cuando tenía once años, murió su padre y pasó a la tutela de su hermanastro mayor, Lawrence, un hombre de buen carácter que, en cierta forma, fue su tutor. En su casa, George conoció un mundo más amplio y refinado, pues Lawrence estaba casado con Anne Fairfax, una de las grandes herederas de la región y acostumbraba codearse con la alta sociedad de Virginia. A los veinte años ocurrió un cambio decisivo en su vida, que lo convirtió en cabeza de familia. Una tuberculosis acabó con la vida de Lawrence en 1752 y George heredó la plantación de Mount Vernon, una enorme finca con 8.000 acres y 18 esclavos. Así, pues, pasó a ser uno de los hombres más ricos de Virginia, y como tal actuaba: pronto se distinguió en los asuntos de la comunidad, fue un activo miembro de la Iglesia episcopal y se postuló como candidato, en 1755, a la Cámara de los Burgueses del distrito. También sobresalía en las diversiones; era un magnífico jinete, alto y de ojos azules, un gran cazador y mejor pescador; amaba el baile, el billar y los naipes y asistía a las carreras de caballos (tenía sus propias cuadras) y a cuantas representaciones teatrales se daban en la región. Pero su vocación de soldado no había muerto, y entre sus planes figuraba ser también un brillante militar. Por entonces, ingleses y franceses se disputaban el dominio de América del Norte, y la controversia sobre las rutas de la cabecera del Ohio había conducido a una extrema tensión entre los colonos. Washington se alistó en el ejército, y poco después de la muerte de su hermanastro fue nombrado por el gobernador Robert Dinwiddie comandante del distrito, con un sueldo de 100 dólares anuales. Ante las invasiones de los franceses por la frontera, en 1753 el gobernador le encargó la misión de practicar un reconocimiento en la zona limítrofe. A mediados de noviembre, Washington se puso en marcha al frente de seis hombres por el valle del Ohio, un país inhóspito, poblado de tribus salvajes y múltiples peligros. A pesar del frío y las nieves, pudo llevar a cabo la dura travesía hasta alcanzar Fort-Le Boeuf en Pennsylvania, una hazaña que comenzó a cimentar su fama. Declarada en 1756 la guerra de los Siete Años, que para los colonos ingleses en América suponía la lucha por su expansión frente al predominio francés, Washington fue designado teniente coronel del regimiento de Virginia, a las órdenes del general Fry. Al morir éste en combate, le sucedió como jefe supremo de las fuerzas armadas del condado, pasando poco después a formar parte del estado mayor del general Braddock, que dirigía las tropas regulares enviadas por Inglaterra. El 9 de julio de 1755 se distinguió en la batalla de Monongahela por su coraje y capacidad de decisión, si bien ésta acabó en un desastre para los ingleses. La derrota repercutió de tal forma en su ánimo que el joven militar se retiró a Mount Vernon con el firme propósito de no volver a tomar las armas. Pero no pudo llevarlo a cabo, pues los notables de Virginia le pidieron que se hiciera cargo de las tropas, a pesar de que sólo contaba con veintitrés años de edad. Washington conservó el mando entre 1755 y 1758, época en que también fue elegido como representante del condado de Frederic para la Cámara de los Burgueses de Virginia. Su nombre ya era popular, se le admiraba por su experiencia y tacto, y comenzaba a labrarse un sólido prestigio político interviniendo activamente en las deliberaciones de la asamblea. Washington empezó a ganar condecoraciones armando tropas de la colonia de Virginia para apoyar al Imperio Británico durante la Guerra Franco-Indígena (1754-1763), un conflicto que él inadvertidamente ayudó a iniciar. El Congreso Continental designó a Washington Comandante en Jefe del Ejército Continental en 1775. Al año siguiente, los británicos fueron desalojados de Boston, perdieron la ciudad de Nueva York y fueron derrotados en Trenton, Nueva Jersey, ante la sorpresa que causó Washington cruzando el río Delaware. Debido a su estrategia, fuerzas revolucionarias capturaron a los dos ejércitos principales de combate británicos en la batalla de Saratoga y en la de Yorktown. En negociación con el Congreso, los estados coloniales y los aliados franceses, mantuvo un ejército débil y una nación frágil en medio de las amenazas de desintegración y fracaso. Después de liderar la victoria estadounidense en la Guerra de la Independencia, renunció a sus cargos militares y regresó a la vida en su plantación de Mount Vernon, acto que le trajo aún más renombre. En 1787, presidió la Convención de Filadelfia que esbozó la Constitución de los Estados Unidos de América y en 1789, fue elegido de manera unánime como el primer presidente de los Estados Unidos entre 1789 y1797 y Comandante en Jefe del Ejército Continental revolucionario en la Guerra de la Independencia de los Estados Unidos (1775-1783). En los Estados Unidos se le considera el Padre de la Patria. Es considerado uno de los Padres Fundadores de los Estados Unidos junto con John Adams, Benjamin Franklin, Alexander Hamilton, John Jay, Thomas Jefferson y James Madison. Trató de crear una nación capaz de sostener la paz con sus países vecinos. Su Proclama de la Neutralidad de 1793 sirvió de base para evitar cualquier implicación en conflictos extranjeros. Él apoyó los planes de construir un gobierno central fuerte mediante el pago de la deuda nacional, la aplicación de un sistema fiscal eficaz y la creación de un banco nacional. Washington evitó la guerra y mantuvo una década de paz con Gran Bretaña con la firma del Tratado Jay en 1795, a pesar de la intensa oposición del Partido Demócrata-Republicano. Aunque nunca se afilió oficialmente al Partido Federalista, apoyaba su programa. Sus dos períodos de gobierno establecieron muchas políticas y tradiciones que existen hasta el día de hoy. Antes de la finalización de su período de gobierno se retiró nuevamente a la vida civil, estableciendo un importante precedente de transición pacífica que ha servido de ejemplo no sólo en los Estados Unidos sino también en otras futuras repúblicas. El Discurso de Despedida de Washington fue una introducción a la virtud republicana y una severa advertencia contra el partidismo, la sectorialización y la participación en guerras en el extranjero. Se le concedió la primera Medalla de Oro del Congreso con el agradecimiento de la Cámara en 1776. Washington murió en 1799 debido principalmente a un tratamiento para su neumonía, que incluía calomelanos y sangrías, resultando en una combinación de choque hipovolémico, debido a la pérdida de cinco pintas de sangre, así como la asfixia y deshidratación. Henry Lee III fue quien pronunció la oración fúnebre, donde declaró que Washington fue el "primero en la guerra, primero en la paz y primero en el corazón de sus compatriotas". Los historiadores frecuentemente lo han considerado como uno de los más grandes presidentes de Estados Unidos.
Un día como hoy 22 de Febrero de  1819 se firma el Tratado de Adams-Onís, mediante el cual España cede a Estados Unidos los territorios de Oregón y Florida. Bajo control de Francia desde el siglo XVII, Luisiana pasó a manos españolas en 1762 al finalizar la Guerra de los Siete Años que enfrentó a España y Francia con Inglaterra. La administración española termina en 1801, cuando el gobierno de la provincia del Mississippi vuelve en secreto a Francia. Entre 1801 y 1803, el presidente Jefferson dirigió las negociaciones para la compra de Luisiana con el gobierno de París, dirigido por Napoleón Bonaparte, entonces Primer Cónsul francés. La Compra de Luisiana constituye el comienzo de la expansión de Estados Unidos hacia el oeste, un movimiento que se desplegó durante todo el siglo XIX hasta llegar al Pacífico. La Luisiana era fundamental para la economía estadounidense: el interior de este país necesitaba el río Mississippi, bajo control español,  para comunicarse con el resto del mundo. En 1795, los españoles abrieron el Mississippi al comercio estadounidense. La Luisiana también fue fuente de conflicto con España, ya que no se habían definido los límites del territorio adquirido. Solo con el tratado de Adams-Onís, firmado en Washington un día como hoy 22 de febrero de 1819, se establecieron las fronteras definitivas entre el Virreinato de Nueva España y Estados Unidos. Antiguamente titulado Tratado de amistad, arreglo de diferencias y límites entre su Majestad Católica y los Estados Unidos de América y algunas veces denominado Florida Purchase Treaty o Tratado de La Florida de 1819-1821. Fue el resultado de la negociación entre España y Estados Unidos para fijar la frontera entre la nación norteamericana y el entonces virreinato de la Nueva España. Luis de Onís acudió como representante del rey Fernando VII de España y por los estadounidenses John Quincy Adams entonces secretario de estado (quien se convirtiera años más tarde en el sexto presidentes de EEUU 1825-1829). La negociación se inició en 1819 y aunque se firmó en ese mismo año no fue ratificado hasta un día como hoy  22 de febrero de 1821 por ambas partes. La frontera se fijó más allá del río Sabina y Arkansas hasta el paralelo 42°, como consecuencia inmediata España perdió sus posesiones más allá de esa latitud como lo fue el territorio de Oregón, también perdió definitivamente las Floridas, la Luisiana y la posibilidad de navegar el río Misisipi. La Corona Española quedó como única soberana de Texas, territorio que los Estados Unidos reclamaba como parte de la Luisiana y, por lo tanto, comprada a los franceses en 1803 según los estadounidenses.
Un día como hoy 22 de Febrero de 1913 en México asesinan al presidente Francisco I. Madero y el vicepresidente José María Pino Suárez. Francisco Ignacio Madero González fue un empresario y político mexicano, originario de Parras, Coahuila. Su proclamación en contra del gobierno de Porfirio Díaz suele considerarse como el evento que dio inicio a la Revolución mexicana de 1910. Durante este conflicto Madero fue elegido Presidente de México, cargo que ejerció desde el 6 de noviembre de 1911 hasta el 19 de febrero de 1913. Tres días más tarde, un día como hoy 22 de febrero de 1913 fue asesinado junto con el vicepresidente José María Pino Suárez como resultado del golpe de estado organizado por Victoriano Huerta. Durante su presidencia Madero promovió medidas para redistribuir la tierra, pero a los campesinos les parecieron demasiado tibias; los sectores más radicales exigían expropiaciones. En otros ámbitos de la producción, como el textil y la minería, se inició una campaña de huelgas para reclamar mejoras laborales. Entretanto, el gobierno de Madero puso en marcha acciones para mejorar la atención sanitaria y educativa de la población, y aprobó la reducción de la jornada laboral, que pasó de doce a diez horas. Intentó también racionalizar la recaudación de impuestos y evitar el encarecimiento de los artículos de primera necesidad. Pero, a la postre, los esfuerzos de Madero resultaron infructuosos. Desde el principio hubo de enfrentarse, por un lado, a los líderes revolucionarios agraristas, descontentos con su tibieza reformista, y, por otro, a las fuerzas contrarrevolucionarias conservadoras. Emiliano Zapata fue el primero en levantarse en armas contra Madero. El llamado Plan de Ayala (redactado por Zapata el 25 de noviembre de 1911 en la Villa de Ayala) acusaba a Madero de traidor, desconocía su autoridad y proponía como jefe de la Revolución a Pascual Orozco o, en caso de que éste no aceptara, al propio Zapata. Pero lo más importante de aquel documento, pieza clave de la ideología de la Revolución mexicana, era su contenido social: se establecía la reforma agraria y la distribución de tierras como eje de la política e ideología revolucionarias. Los zapatistas, en definitiva, se levantaron contra el gobierno porque Madero no había cumplido la promesa de devolver las tierras comunales. Durante los doce meses siguientes, las fuerzas gubernamentales fueron incapaces de sofocar completamente el levantamiento zapatista. Algunas mentes lúcidas, como Luis Cabrera, comprendían que era necesario encontrar una solución jurídica a las demandas campesinas. En diciembre de 1912, Cabrera elaboró una iniciativa de ley para una reforma agraria que no pudo concretarse. A ello hubo de añadir diversas insurrecciones de signo contrarrevolucionario. Tan temprana como la de Zapata fue la del general Bernardo Reyes, antiguo secretario de Guerra y Marina de Porfirio Díaz; aunque fue pronto sofocada, nuevas rebeliones y pronunciamientos tomaron el relevo. En medio de esta luchas fue ganando relevancia el general Victoriano Huerta; gozaba de la confianza de Madero y había logrado derrotar a Pascual Orozco. Comandante de las fuerzas que debían defender al gobierno, Huerta protagonizó una célebre e ignominiosa traición durante la llamada Decena Trágica, nombre con que son conocidos los violentos sucesos acaecidos en la capital mexicana del 9 al 19 febrero de 1913; con el beneplácito de Estados Unidos, Victoriano Huerta depuso a Madero y mandó fusilarlo un día como hoy 22 de febrero de 1913 alegando que había intentado escapar. De este modo Francisco I. Madero, que no había conseguido en vida mantener unidos a los revolucionarios, se convirtió tras su muerte en un símbolo de la unidad de la Revolución contra el usurpador Huerta.
Un día como hoy 22 de Febrero de 1939 muere exiliado en Colliure, Francia, el poeta español Antonio Machado. Antonio Cipriano José María Machado Ruiz nació a las cuatro y media de la madrugada del 26 de julio de 1875 (festividad de Santa Ana y por tanto onomástica de la parturienta), en una de las viviendas de alquiler del llamado palacio de las Dueñas, en Sevilla. Fue el segundo varón que dio a luz su madre, Ana Ruiz Hernández, de una descendencia de ocho en total. Once meses antes había nacido Manuel, el primogénito, compañero de muchos pasajes de la vida de Antonio, y con el tiempo también poeta y dramaturgo. La familia de la madre de Machado tenía una confitería en el barrio de Triana, y el padre, Antonio Machado Álvarez, era abogado, periodista e investigador del folclore, trabajo por el que llegaría a ser reconocido internacionalmente con el seudónimo de «Demófilo». En otra vivienda del mismo palacio son vecinos sus abuelos paternos, el médico y naturalista Antonio Machado Núñez, catedrático y rector de la Universidad de Sevilla y convencido institucionista, y su esposa, Cipriana Álvarez Durán, de cuya afición a la pintura quedó como ejemplo un retrato de Antonio Machado a la edad de cuatro años. La infancia sevillana de Antonio Machado fue evocada en muchos de sus poemas. Antonio Machado se convertiría en poeta. Aunque influido por el modernismo y el simbolismo, su obra es expresión lírica del ideario de la Generación del 98. Su hermano menor, Manuel Machado, también fue poeta, pasó su infancia en Sevilla y en 1883 se instaló con su familia en Madrid. Se formó en la Institución Libre de Enseñanza y en otros institutos madrileños. En 1899, durante un primer viaje a París, trabajó en la editorial Garnier y posteriormente regresó a la capital francesa, donde entabló amistad con Rubén Darío. De vuelta a España frecuentó los ambientes literarios, donde conoció a Juan Ramón Jiménez, Ramón del Valle-Inclán y Miguel de Unamuno. En 1907 obtuvo la cátedra de francés en el instituto de Soria, ciudad en la que dos años después contrajo matrimonio con Leonor Izquierdo. En 1910 le fue concedida una pensión para estudiar filología en París durante un año, estancia que aprovechó para asistir a los cursos de filosofía de Henri Bergson y Joseph Bédier en el College de France. Tras la muerte de su esposa en 1912, pasó al instituto de Baeza. Doctorado en filosofía y letras (1918), desempeñó luego su cátedra en Segovia, y en 1928 fue elegido miembro de la Real Academia Española. Al comenzar la Guerra Civil Española (1936-1939) se encontraba en Madrid, desde donde se trasladó con su madre y otros familiares al pueblo valenciano de Rocafort y luego a Barcelona. En enero de 1939 emprendió camino al exilio, pero la muerte lo sorprendió en el pueblecito francés de Colliure. Los textos iniciales de Machado, comentarios de sucesos y crónicas costumbristas escritos en colaboración con su hermano y firmados con el seudónimo Tablante de Ricamonte, aparecieron en La Caricatura en 1893. Sus primeros poemas se publicaron en Electra, Helios y otras revistas modernistas, movimiento con el que Machado se sentía identificado cuando comenzó su labor literaria. No obstante, aunque las composiciones incluidas en Soledades (1903) revelaron la influencia del modernismo, el autor se distanció de la imaginería decorativa de la escuela rubeniana para profundizar en la expresión de emociones auténticas, a menudo plasmadas a través de un sobrio simbolismo. En su siguiente libro, Soledades, galerías y otros poemas (1907), reedición y ampliación del anterior, se hizo más evidente el tono melancólico e intimista, el uso del humor como elemento distanciador y, sobre todo, la intención de captar la fluidez del tiempo. Al igual que Unamuno, Antonio Machado consideró que su misión era "eternizar lo momentáneo", capturar la "onda fugitiva" y transformar el poema en "palabra en el tiempo". En los años posteriores se acentuó su meditación sobre lo pasajero y lo eterno en Campos de Castilla (1912), pero no por medio de la autocontemplación, sino dirigiendo la mirada hacia el exterior, y observó con ojos despiertos el paisaje castellano y los hombres que lo habitaban. Una emoción austera y grave recorre los poemas de este libro, que evoca la trágica España negra tan criticada por la Generación del 98 desde una perspectiva regeneracionista, al tiempo que se describe con hondo patriotismo la decadencia y ruina de las viejas ciudades castellanas. En su siguiente volumen de poemas, Nuevas canciones (1924), el autor intensificó tanto su enfoque reflexivo como la línea sentenciosa de los "Proverbios y cantares" incluidos en el libro anterior. Esta tendencia filosófica se había manifestado ya entre 1912 y 1925, etapa en la que Machado redactó una serie de apuntes que verían la luz póstumamente con el título de Los complementarios (1971). En este cuaderno, miscelánea de lecturas, esbozos y reflexiones cotidianas, aparecieron por primera vez sus heterónimos, el filósofo y poeta Abel Martín y su discípulo, el pensador escéptico Juan de Mairena. Ambos son personajes imaginarios que permitieron expresar al creador sus ideas sobre cultura, arte, sociedad, política, literatura y filosofía, especialmente en el libro Juan de Mairena. Sentencias, donaires, apuntes y recuerdos de un profesor apócrifo (1936). Paralelamente, en las ediciones de Poesías completas de 1928 y 1933 se decanta una lírica de tema amoroso y erótico inspirada por la que fue, tras la muerte de su esposa, su gran pasión en la vida real, Pilar de Valderrama, llamada Guiomar en dichos versos. Ya durante la contienda civil, Machado escribió algunos poemas y varios textos en prosa, parte de los cuales fueron recogidos en La guerra publicado en 1937 con ilustraciones de su hermano menor José Machado Ruiz. Se trata de escritos testimoniales, plenamente incardinados en las circunstancias históricas del momento. De entre sus últimos escritos, obra de compromiso histórico y testimonial, destacan textos de hondura estremecedora, como la elegía dedicada a Federico García Lorca: El crimen fue en Granada.  Ante el peligro de que Valencia quede aislada, los Machado se trasladaron a Barcelona, donde tras un hospedaje provisional en el Hotel Majestic, ocuparon la finca de Torre Castañer. El lujo del lugar contrasta con las miserias de la guerra: no hay carbón para las estufas, ni su imprescindible tabaco, ni apenas alimentos. Allí permanecieron desde finales de mayo de 1938 hasta los primeros días del siguiente año. Exilio y muerte. El 22 de enero de 1939, y ante la inminente ocupación de la ciudad, el poeta y su familia salieron de Barcelona en un vehículo de la Dirección de Sanidad conseguido por el doctor José Puche Álvarez; les acompañan, entre otros amigos, el filósofo Joaquín Xirau, el filólogo Tomás Navarro Tomás, el humanista catalán Carlos Riba, el novelista Corpus Barga y una interminable caravana de cientos de miles de españoles anónimos huyendo de su patria. Tras una última noche en suelo español, en Viladasens, las cuarenta personas que componían el grupo cubrió el último tramo hacia el exilio. Apenas a medio kilómetro de la frontera con Francia, tuvieron que abandonar los coches de Sanidad, embotellados en el colapso de la huida. Allí quedaron también sus maletas, al pie de la larga cuesta que hubo que recorrer bajo la lluvia y el frío del atardecer hasta la aduana francesa, que solo gracias a las gestiones de Corpus Barga (que disponía de un permiso de residencia en Francia) pudieron superar. Unos coches les llevaron hasta la estación ferroviaria de Cerbère, donde gracias a las influencias de Xirau se les permitió pasar la noche en un vagón estacionado en vía muerta. A la mañana siguiente, con la ayuda de Navarro Tomás y Corpus Barga, se trasladaron en tren hasta Collioure (Francia), donde el grupo encontró albergue en la tarde del día 28 de enero, en el Hotel Bougnol-Quintana. Allí quedaron a la espera de una ayuda que no llegaría a tiempo. Antonio Machado murió a las tres y media de la tarde de un día como hoy 22 de febrero de 1939, siendo un Miércoles de Ceniza. Varios autores han estudiado si Machado era masón o en que grado lo fue. Según António Apolinário Lourenço sería «prácticamente unánime» la aceptación de este hecho, aunque destaca la nula actividad del poeta en actividades de la orden. Para el hispanista Paul Aubert, si bien este no descarta la posibilidad, no existen pruebas de su vinculación con ninguna logia, aunque señala sus contactos con miembros de la masonería. Antonio Machado como poeta evolucionó hacia un intimismo simbolista con rasgos románticos, que maduró en una poesía de compromiso humano, de una parte, y de contemplación casi taoísta de la existencia, por otra; una síntesis que en la voz de Machado se hace eco de la sabiduría popular más ancestral. Dicho en palabras de Gerardo Diego, « Antonio Machado hablaba en verso y vivía en poesía».
Un día como hoy 22 de Febrero de 1994 en EE. UU., Aldrich Ames y su esposa son condenados por espiar para la URSS. Ames era un ex oficial y analista de contra-inteligencia de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense, quien entre 1985 y 1991 espió a favor de la Unión Soviética, por lo que sería detenido y juzgado en 1994. Este responsable del servicio de contrainteligencia de la CIA, es considerado uno de los más grandes traidores que Estados Unidos ha sufrido en su historia reciente. Destinado a la división contra actividades soviéticas, fue detenido tras descubrirse que había estado espiando para los rusos desde 1985. Ames, que fue detenido junto con su esposa, le hizo un 'agujero' difícil de medir a la comunidad de inteligencia estadounidense, que durante los años más duros de la Guerra Fría perdió a cientos de agentes y fracasó en misiones de infiltración en la URSS por culpa de este renegado, que sólo actuó por codicia, según confesó él mismo. Tras declararse culpable fue condenado a cadena perpetua. La traición de Ames, llevada a cabo a lo largo de casi una década, resultó en la ejecución de tal vez una docena de espías estadounidenses por la Unión Soviética, y le reportó a Ames recompensas por un total aproximado de 2,5 millones de dólares. Ames, que fue arrestado y condenado un día como hoy 22 de febrero de 1994, dijo al New York Times que fueron la codicia y el deseo de equilibrar la pugna entre las dos superpotencias lo que le llevó a espiar para la URSS durante casi una década, en la que -añadió- siempre vivió con miedo a ser descubierto. Ames, que pasó en la CIA 31 de sus 53 años, era un oficial de contraespionaje de alto grado cuando inició lo que se ha calificado como la acción de espionaje más dañina en la historia de los Estados Unidos. La CIA emprendió una profunda reforma tras descubrirse su incapacidad para descubrir antes a Ames. Maniobra distractora Este también declaró que el escándalo que estalló a mediados de los años 80 por los sistemas de escucha instalados en la recién construida embajada de Estados Unidos en Moscú y la condena de un marine estadounidense por espionaje fueron una maniobra de diversión para alejar a los investigadores de la CIA de su propia pista. Cuando Ames trabajaba en Roma para la CIA en 1986, su contacto del KGB le advirtió que la CIA sabía que había un topo en sus filas. Agregó que el KGB estaba tratando de desviar sospechas e iba a inventar una brecha de comunicación, una escucha telefónica o con micrófonos que pudiera explicar la filtración de informaciones. El director de la CIA, James Woolsey, calificó a Ames de traidor a su país que, a cambio de dos millones de dólares, mató a varias personas que ayudaban a Estados Unidos y a Occidente a ganar la Guerra Fría. Emparejando la guerra. El exagente de la CIA Aldrch Ames dijo que solamente estaba emparejado el campo de juego , ayudando así a poner fin a la guerra fría, cuando pasaba secretos de estado a la Unión Soviética y luego a Rusia. En la entrevista el espía traidor dijo haber llegado a la conclusión que la Unión Soviética estaba presa de su propia versión de paranoia, similar a la vivida en Estados Unidos durante la llamada era de McCarthy de los años 50, y que estaba erróneamente convencida que la Agencia Central de Inteligencia había infiltrado todas sus instituciones. Ames dijo que decidió que si podía demostrar a los soviéticos que ello no era verdad, caerían en cuenta que los problemas del país reflejaban la debilidad del sistema comunista propiamente dicho. El emparejamiento del campo de juego , tal como lo denomina Ames, se lograría dando a la Unión Soviética los nombres de las personas que trabajaban secretamente a favor de Estados Unidos dentro del sistema soviético.
Un día como hoy 22 de Febrero de 1998 en Colombia, el presidente Ernesto Samper realiza una sorprendente oferta de dimisión para mejorar las relaciones de su país con Estados Unidos. Ernesto Samper es un abogado, economista y político colombiano. Fue Presidente de 1994 a 1998. Tan pronto se conoció el resultado de la segunda vuelta, la campaña de Samper fue acusado por su contendiente, Andrés Pastrana, de haber recibido dineros provenientes del Cartel de Cali. Inmediatamente, Samper le pidió al Fiscal general de la Nación una investigación cuyos primeros resultados exoneraron la campaña. Con posterioridad, a raíz de unas declaraciones del Tesorero de la misma, se abrió un largo proceso que terminó comprometiendo al Coordinador de la campaña, el ex ministro Fernando Botero Zea y al propio Tesorero en una operación de robo de los dineros que ellos mismos gestionaron ante el Cartel de Cali como supuesto aporte a la campaña. Algunos Parlamentarios de distintos partidos fueron igualmente vinculados a esta financiación ilícita en lo que se conoció como el proceso 8.000, la justicia lo exoneró. Durante el desarrollo del proceso 8.000, la capacidad del presidente para atender los asuntos de estado se vio notablemente afectada, ante la presión social y mediática generada, siendo notable la intervención y oposición continua de las altas jerarquías de la iglesia católica, el gobierno de los Estados Unidos a través del embajador Myles Frechette y personalidades notables como ex-ministros y ex-candidatos presidenciales como Álvaro Gómez Hurtado, este último se convirtió en el principal opositor y opción política anti-Samperista y fue asesinado en confusas circunstancias, crimen por el cual ha sido vinculado e investigado en repetidas ocasiones el mismo Ernesto Samper. El Proceso 8000 tuvo grandes consecuencias a nivel nacional e internacional para el país. En el ámbito internacional se deterioraron las relaciones diplomáticas con los países andinos y con Estados Unidos, que no dudó en descertificar al país y retirarle la visa al presidente Samper y otros políticos de importancia. La razón anterior provocó, la supuesta oferta del presidente Samper de dimitir a su alto cargo para que mejoraran las relaciones con Estados Unidos. Simultáneamente esto generó un interés del gobierno colombiano para lograr acercamientos con la Unión Europea. Sin embargo, las relaciones diplomáticas se restauraron antes del final del mandato de Samper. A nivel nacional hubo malestar general entre la población (el cual aumentó ligeramente con la descertificación), la cual veía deslegitimada la autoridad del Estado y de las instituciones. Ocurrieron grandes marchas, tanto a favor de Samper como en su contra pidiendo su renuncia.
Un día como hoy 22 de Febrero de 2012 en la Estación de Once de Buenos Aires sucede un accidente ferroviario que deja 51 muertos y 703 heridos. La Estación Once de Septiembre es una de las cuatro terminales ferroviarias más importantes de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina. Inaugurada el 20 de diciembre de 1882, está ubicada en el barrio de Balvanera, en inmediaciones de la Plaza Miserere. Denominada comúnmente Once, su nombre conmemora la Revolución del 11 de septiembre de 1852 de la provincia de Buenos Aires contra el gobierno federal y posterior secesión de la Confederación Argentina. Otros dicen que su nombre se debe en honor a Domingo Faustino Sarmiento, de ahí su nombre a la línea, quien falleció un 11 de septiembre de 1888. Un día como hoy, miércoles, 22 de febrero de 2012, a las 8:33 hs, un tren entró a la estación a 20 km/h y chocó contra el andén que marcaba el final del recorrido, dejando un saldo de 51 muertos y 703 heridos. Fue clasificada como la peor tragedia en trenes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Un día como hoy 22 de Febrero de 2014 Joaquín Guzmán Loera, conocido como el "Chapo" Guzmán fue capturado por elementos de la Marina Armada de México, a las 6:40 horas en Mazatlán, Sinaloa. Con información de CNN. Joaquín El Chapo Guzmán, el narcotraficante más buscado en México, fue recapturado un día como hoy, sábado, 22 de febrero de 2014 a las 06:40 horas por la Marina en un edificio de la ciudad turística de Mazatlán, Sinaloa, tras un operativo de varios meses y sin disparos. Alrededor del mediodía, después de que el procurador Jesús Murillo Karam informara sobre la detención, en una conferencia de prensa en el hangar de la Secretaría de Marina, en el Aeropuerto de la Ciudad de México, Guzmán apareció ahí mismo esposado y escoltado por marinos mientras era trasladado a un helicóptero de la Policía Federal. Los celulares lo 'delataron'. Poco después de las 15:00 horas, el líder del cártel de Sinaloa ingresó al penal de máxima seguridad del Altiplano, ubicado en Almoloya de Juárez, Estado de México, informó la Procuraduría General de la República (PGR), según un reporte de la agencia Notimex. En la prisión le tomaron sus datos personales y quedó a disposición del agente del Ministerio Público federal para continuar con las indagatorias y determinar su situación jurídica, agregó la PGR. Guzmán fue detenido junto con uno de sus presuntos colaboradores, Carlos Manuel Hoo Ramírez, en un operativo que Murillo Karam calificó como "impecable" y después de otros intentos entre el 13 y el 17 de febrero de ese mismo año 2014. Hoo Ramírez fue llevado a las instalaciones de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) para rendir su declaración, informó la PGR, según Notimex. Antes de que Murillo diera la conferencia, el presidente Enrique Peña Nieto había confirmado la noticia a través de su cuenta de Twitter. Guzmán Loera fue detenido por el gobierno de Carlos Salinas de Gortari en 1993, escapó al inicio de la administración de Fox y era prioridad para Calderón. Anunciar la recaptura de Joaquín El Chapo Guzmán era algo que el presidente panista Felipe Calderón (2006-2012) decía que quería hacer, pero este sábado felicitó a su sucesor, el priista Enrique Peña Nieto, por haber logrado ese objetivo. La fuga del líder del cártel de Sinaloa, el narcotraficante más poderoso del mundo, ocurrió en 2001, en el histórico primer año de gobierno del Partido Acción Nacional (PAN), liderado por Vicente Fox. Ocho años antes, Guzmán había sido detenido en la administración de otro presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Carlos Salinas de Gortari. Durante los 13 años que El Chapo estuvo prófugo, su poder y su leyenda crecieron. En conjunto, las autoridades de México y EU ofrecían hasta 96 millones de pesos (7.3 millones de dólares) por información que llevara a su captura, mientras que la ciudad de Chicago lo había declarado Enemigo Público número 1, al igual que lo fue Al Capone. Si bien hubo algunas detenciones de sus colaboradores, incluido su hermano Arturo Guzmán Loera en 2001, quien fue asesinado en prisión, él permaneció como uno de los principales objetivos de seguridad para los gobiernos panistas, sobre todo de la estrategia de Calderón. Un año antes de concluir su gobierno, Calderón dijo a la revista Quien que le habría gustado anunciar la captura de Guzmán. Al enterarse de su captura, envió felicitaciones a las autoridades antes de que Peña tuiteara la primera confirmación del arresto. En mayo de 2001, Fox dijo que traían "de cerquita" a El Chapo. Ese mismo año, el entonces procurador Rafael Macedo de la Concha aseguró que el narcotraficante contaba con "escasos recursos materiales para proseguir con su infructuosa fuga", según reportes del diario Reforma. Las felicitaciones de Fox llegaron por la tarde del mismo sábado de la captura del chapo: "Felicidades, un gran evento, felicidades para todos los cuerpos de seguridad", dijo al diario El Universal en Durango. En su último año, el gobierno de Calderón estuvo a punto de capturar a Guzmán Loera, según José Cuitláhuac Salinas, entonces subprocurador de investigación especializada en delincuencia organizada de la PGR. El narcotraficante supuestamente escapó a un operativo federal a finales de febrero de 2012, cuando se encontraba en una residencia en Los Cabos. En febrero de 2012, el gobierno de Guatemala anunció que el líder del cártel de Sinaloa había muerto en un enfrentamiento cerca de la frontera con México, pero después se retractó de la información y ofreció una disculpa. Fue hasta un día como hoy 22 de febrero de 2014 —13 años, un mes y tres días después de su escape— que el gobierno mexicano detuvo nuevamente a Joaquín Guzmán Loera. Cuando era aspirante a la presidencia, Peña dijo que su partido había entregado al narcotraficante tras las rejas y que "el PAN lo puso en la lista de los más buscados y en las listas de Forbes". Nueva fuga de "El Chapo" Guzmán: una burla y un desafío a México. Lo volvió a hacer. El sábado 11 de julio de 2015 el mayor narcotraficante del mundo escapó por segunda vez de una cárcel mexicana. Su fuga, es sin embargo la noticia que nunca hubiera querido dar el gobierno de Peña Nieto. Esta vez el chapo fue recapturado 6 meses más tarde, exactamente el viernes 8 de enero de 2016, lo cual se convirtió en una noticia a nivel mundial la cual el presidente Peña Nieto todavía está tratando de convertirla en una recuperación de la confianza popular de su gobierno.

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