La poesía del viernes, EL BESO QUE DESNUDA A UNA MUJER, por Beto Aveiga

Por Luis Montes Brito

Luis Alberto Veiga Loor
Beto Aveiga

En mi búsqueda por cumplir este compromiso auto impuesto con ustedes, aquellos que me conceden el favor de leer mi blog, de quienes en mi intento de convertirme en guía efímero hacia un viaje espiritual, he tenido la fortuna de descubrir una gran cantidad de poetas no muy conocidos, al menos para este servidor.

Algunos de ellos no gozan de la fama de muchos connotados, pero son poseedores de una prosa tan sentida y descriptiva que me han llevado al deleite con su obra. En realidad nunca me ha importado el nombre que calza con su firma los versos, ni la extensión de éstos, más bien me ha interesado el contenido de ellos. Soy un convencido que hay poemas bellísimos escritos en una sola estrofa y que provienen de personas no famosas.

Recientemente encontré unos poemas que me han gustado mucho y que pienso que valen la pena compartir con ustedes. Al leerlos me imagino a su escritor como un viejo zorro, curtido por los azares de los amores y desamores que acumula el tiempo y que le dan la vivencia más que para escribir para describir esos momentos.

Los poemas en mención están contemplados dentro del libro Poemas de Amor y otros demonios, su autor se firma como Beto Aveiga, nombre artístico que proviene de su nombre real Luis Alberto Veiga Loor.

Son profundamente intensos, apasionados en su mayoría, en sus versos se transpira tinta de romance con erotismo. Mi sorpresa fue mayúscula al leer uno breves datos que el autor comparte en su página de internet ya que el mismo es un joven nacido en Ecuador en 1983.

Comparto con ustedes, lo publicado en su página, al tiempo que me regocijo de que el romanticismo siga vivo en la mente y en los corazones de algunos jóvenes de hoy, que nos demuestran que para el mocerío actual hay algo más que reggaetón .

Algunos datos ofrecidos por el mismo poeta Beto Aveiga

Este, Poemas.ec, es mi sitio, donde publico todo lo que escribo, además de publicar los poemas que me envían mis lectores... Recuerdo que empecé a escribir por el 2000 o algo así.(sí, tengo mala memoria).

¿Qué podría decirte de mí sin temor a equivocarme? Mmm... que soy Ecuatoriano, que tengo un hijo de casi 9 años, que nací el 83, que me divierte la informática, que me gusta escuchar Arjona, y que la verdad prefiero no hablar de mí porque me parece impreciso y vanidoso :P

No te aburriré diciendo cómo quiero que me veas, o cómo me veo yo, no te contaré de mí, porque corremos el riesgo de aburrirnos. Para conocerme puedes empezar con mis poemas, y este sitio está atiborrado de ellos.

Por otro lado, si tienes mucha pereza de leer ahora, puedes añadirme en las redes sociales que listo a continuación.


Disfrute de dos poemas de Beto Aveiga, "El Beso que desnuda a una mujer" y "Viejo perro de Amor" escuchando una excelente y romántica canción interpretada con la vehemencia y la pasión que caracteriza a Alejandro Sanz, la cual inicia con una de mis frases favoritas: "Que fácil decir te quiero cuando estamos solos, lo dificil es hacerlo cuando escuchan todos..."

El beso que desnuda a una mujer
Beto Aveiga • Ecuador

De tus manantiales de mujer
mojaré mis manos y mi boca,
¡Yo de tus entrañas tengo sed!
Beberé aquel vino de tu copa...

Dulce paraíso del placer,
cálido rincón, casi prohibido,
donde nace el beso primitivo,
beso que desnuda a una mujer.

Déjame tomarte por esta vez
sólo con mis labios en lo profundo,
deja que mi lengua por un segundo
nade por tu mundo... cual libre pez.

Gritarás loca tocando el cielo
aunque allá abajo esté yo contigo,
el que besándote encienda el fuego
de aquel infierno bajo tu ombligo.

Beto / Luis Aveiga / 01-Mar-2005


Viejo Perro del Amor
Beto Aveiga • Ecuador

Imagino que si un día por fatal motivo partes
cerca de ninguna parte donde yo no pueda ir,
lejos de mis tristes ojos ya cansados de buscarte,
cuando me pierdas de vista.... estaré de nuevo ahí.

Imagino que si corres hasta donde dé tu suela
para no verme la estampa... en pos de tu porvenir,
ya distante de mis pasos cuando ya los tuyos duelan,
cuando no escuches mi risa... me verás quizá reír...

Imagino que si lloras para atravesar un río
entre lo que tuyo y mío fue tan arduo construir,
si es que acaso lo consigues lloverán los ojos míos
sobre el lado en que del río oses de mi llanto huir...

Porque lo que no imaginas es la sed de la costumbre
que te va a traer de vuelta como vuelve el sol al mar,
porque me verán tus ojos quizás lejos navegando
pero cuando estén soñando... ¡es a mí a quien va amar!

Porque lo que no te enteras son mis besos que tejidos
en tus poros inundados se arraigaron tanto a ti
que cuando la piel te queme como incendio enfurecido
aunque no estés tú conmigo... ¡arderás sólo por mí!

Yo por eso te aconsejo que te vayas los más lejos...
que te inventes infinitos, universos, ¡qué se yo!
tú podrás mentirle al mundo, a otros hombres, al espejo,
pero no este perro viejo... ¡¡¡viejo porque tanto amó!!!