Tomado de La
Página
ARENA: mano dura con manos cutas
El candidato de ARENA y sus
estrategas han lanzado una campaña sobre el tema de seguridad en la que están
proponiendo, sin decirlo abiertamente, que van a eliminar a los pandilleros. Es
una oferta electoral que intenta conectar emocionalmente con el rechazo de la
gente a las maras. Consideran que ARENA tiene credibilidad para sugerir un
exterminio porque en la memoria de la gente estarían los escuadrones de la
muerte que asesinaron a decenas de miles de opositores. El mensaje televisivo
de ARENA está estimulando los antivalores y las emociones más primitivas de los
ciudadanos, bajo el supuesto de que esas emociones son dominantes en los
electores. Es una posición de extrema derecha que sugiere un populismo punitivo
de alcances criminales.
Lo central es saber si
realmente el exterminio de pandilleros tiene simpatía popular. Lo que ARENA
está sugiriendo está en realidad dirigido a un país que existió en el pasado y
que ahora es bastante menos primitivo de lo que se piensa. La tercera parte de
nuestra población vive en la mayor democracia del mundo y conoce mucho sobre la
vida democrática y los derechos humanos. Esta población está conectada
culturalmente con todos los salvadoreños, lo cual ha provocado que ahora se
celebre en el país desde el día de acción de gracias hasta la noche de brujas.
Las maras mismas son una fusión cultural negativa salvadoreña-estadounidense.
Por otro lado, la guerra
terminó hace veintidós años, los militares son obedientes del poder civil, ya
no somos un país rural y agrícola, sino un país urbano con una economía de
servicios, llevamos seis presidentes y 10 parlamentos electos, existe un
balance institucional entre los tres poderes del Estado. El militarismo y el
autoritarismo provocaron la guerra y respondieron a un país más primitivo que
el actual. No somos ni Ruanda ni Honduras. En El Salvador ya no se puede
ocultar nada, no es posible ni siquiera sugerir un extermino. Que algunos
salvadoreños del diente al labio piensen que se debería eliminar a los
pandilleros no implica que apoyarían una matanza. Cuando el actual candidato de
ARENA estaba de Alcalde, lanzó unos bulldozers contra los puestos de los vendedores
ambulantes del centro capitalino. Hizo esto basado en el descontento general
por el desorden, sin embargo, el rechazo de la opinión pública a la medida fue
contundente. La mayoría quiere orden, pero no a costa de un baño de
sangre.
ARENA quiere engañar a la
gente y ganar votos asumiendo la seguridad como bandera. Pero la verdad es que
a ARENA y a sus oligarcas nunca les ha importado la seguridad de la gente.
Ellos no creen en el Estado, sino en el mercado, jamás invertirán en ni en
policías, ni en políticas sociales preventivas. Fueron ellos quienes recortaron
o desmantelaron muchas instituciones del Estado, mantuvieron a la policía en la
pobreza y abandonaron a los militares. No puede haber mano dura con un Estado
de manos cutas. ARENA lo que haría es convertir la seguridad en otro gran
negocio, privatizaría las prisiones y multiplicaría las empresas de seguridad.
Su política sería en realidad de “sálvense los que puedan pagar seguridad
privada”.
Más policías es
más seguridad
La gente no está demandando
venganza, lo que la gente pide es más policías permanentes en sus comunidades
para evitar que ocurran delitos. Esto implica fortalecer exponencialmente el
poder coercitivo del Estado con miles de policías en el terreno para disuadir a
los delincuentes, evitar delitos, recuperar territorios y reactivar la economía
de las comunidades. Sólo UNIDAD ha ofrecido multiplicar la fuerza policial y
quienes rechazan esta propuesta dicen que no hay dinero para pagarla. Cuando se
trataba de combatir a la guerrilla, el Ejército y la Policía tenían más de
60,000 efectivos a los que se sumaban decenas de miles de paramilitares. ¿Por
qué antes hubo dinero para pagar una fuerza tan grande y ahora dicen que no se
puede? La diferencia es que la guerrilla amenazaba a los oligarcas y las maras
amenazan a los pobres y las clases medias.
La seguridad es la primera
responsabilidad del Estado y el primer derecho de los ciudadanos. La seguridad
no es gasto es inversión, hay una relación directa entre la inversión en
seguridad y el crecimiento económico con resultados inmediatos. A más seguridad
más crecimiento económico y a mayor crecimiento más recaudación fiscal. Esto
quiere decir que si se puede multiplicar la fuerza policial.
Colombia estaba al borde de
ser un Estado fallido, hizo inversiones enormes en seguridad, en la actualidad
cuenta con casi 500,000 hombres entre policías y militares. Recuperó
territorios, ha derrotado a las FARC y le está ganando la guerra a la
inseguridad. El presupuesto del gobierno colombiano se multiplicó por cuatro en
diez años, pero la economía se hizo cuatro veces más grande, sólo llegaban
500,000 turistas anualmente y hoy llegan más dos millones y medio. El país era
una marca de violencia y ahora es destino de grandes inversiones. Hay otros
ejemplos en algunos lugares de México. El tamaño de la policía debe ser
proporcional a la amenaza.
Encuestas pasadas
de vivas
Las encuestas están
despeinadas por el pleito entre ARENA y el FMLN, a eso se debe que sus
resultados sean tan opuestos, desordenados e ilógicos. Las diferencias entre
unas y otras son enormes. No es razonable que en unas encuestas ARENA esté
adelante por tres puntos, en otras ARENA y FMLN estén empatados y en otras el
FMLN está diez puntos adelante. No es lógico que en algunas encuestas digan que
UNIDAD pueda ganarle a ARENA o al FMLN en una segunda vuelta y sólo tenga diez
puntos para la primera y no hace sentido que algunas encuestas establecieran
que los indecisos iban creciendo cuando la campaña se estaba
intensificando.
Las encuestas están
convertidas en instrumentos de guerra sicológica para desmoralizar a los
militantes de los partidos contrarios. ARENA y el FMLN necesitan presentarse
como punteros y ambos necesitan devaluar a UNIDAD. Las encuestas están diciendo
precisamente lo que estos dos partidos necesitan que sus militantes crean. Sólo
hay dos posibilidades: o la gente le está mintiendo a los encuestadores o los
encuestadores se están pasando de vivos y le están mintiendo a la gente. Lo más
probable es lo segundo.
Con las encuestas en esa
situación lo único que se puede afirmar es que la existencia de tres
competidores imposibilita que la elección se defina en primera vuelta; que el
FMLN tiene su pase seguro a la segunda vuelta y que la elección del dos de
febrero es para definir si será UNIDAD o ARENA quien competirá con el FMLN en
la segunda ronda. ARENA ha tratado de mostrar débil a UNIDAD para pasar a
segunda vuelta y convertirse en la única opción para los votantes de derecha.
El miedo al FMLN es su único recurso para recuperar el gobierno, por ello la
mejor opción para quienes quieren castigar a ARENA es votar por UNIDAD en la
primera vuelta, porque de esa forma sacan a ARENA de la competencia y esto es
lo que más conviene al país.