Mostrando entradas con la etiqueta Cumbres. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cumbres. Mostrar todas las entradas

jueves, 26 de abril de 2012

La Cumbre de las Américas vistas por el pueblo cubano

Tomado de El País


La VI Cumbre de las Américas en Cartagena ha sido el más reciente ejemplo de la astucia isleña en brillar por su ausencia

Por Yoani Sánchez
El dilema de elegir entre el portazo o la aceptación sigue dividiendo a los Gobiernos latinoamericanos en relación con Cuba. Legitimar o no legitimar al inquilino de la plaza de la Revolución se erige como una disyuntiva que enciende los debates y azuza las desavenencias. Brasil, Argentina y Uruguay —entre otros— han optado por otorgarle legitimidad a Raúl Castro, en parte porque de esa manera creen que el acercamiento puede provocar más avances en materia de derechos humanos dentro de la isla.
Mientras, Estados Unidos y en los últimos días Canadá consideran inadmisible la connivencia entre mandatarios que han pasado por las urnas y un general que heredó el poder por vía sanguínea. Ninguna de las dos estrategias, el acercamiento para convencer y la ofensiva para hacer claudicar, han dado muchos resultados hasta el momento.
El Gobierno cubano tiende a sacar partido tanto del abrazo como de la hostilidad. A uno lo muestra como gesto de validación de su sistema político, a la otra como razón para mantener la falta de libertades hacia el interior del país. No en balde en varios muros de la capital habanera ha quedado delineada la frase de Ignacio de Loyola “en una plaza sitiada, disentir es traicionar”.
Ante los llamados a democratizar el país, la Administración de La Habana se comporta como el acosado que debe protegerse de exigencias exteriores. El discurso político se refuerza y se vuelve más intransigente a medida que crece el enfrentamiento con el de afuera.
La improductividad de la tierra pasa a un segundo plano, la inconformidad ciudadana queda relegada; hasta los cortes eléctricos dejan de ser un tema en las calles, cuando las arengas nacionalistas copan todo el espacio televisivo. Los días de la cumbre de Cartagena fueron una muestra casi modélica de esa táctica. Una vez pasada la resaca informativa por la visita de Benedicto XVI, nuestros noticiarios encontraron un suculento bocado en los tropiezos de la magna cita americana.
El desplante de Rafael Correa, la ausencia de Hugo Chávez y de Daniel Ortega, la partida intempestiva de Cristina Fernández alimentaron las páginas del periódico Granma en detrimento de otras informaciones. Apenas si quedó espacio informativo para la importantísima discusión sobre la despenalización de la droga, o para narrar los detalles del tratado de libre comercio entre Estados Unidos y Colombia. “El reclamo generalizado de integrar a Cuba en estos foros hemisféricos” —en palabras de Evo Morales— sepultó otros debates urgentes en el plano social y económico que tanto urgen al continente.
Y por esta vez las islas volvieron a marcarle la pauta a todo un continente: las Malvinas por un lado y Cuba por el otro. Unas en medio de un conflicto de pertenencia y la otra en el centro de un debate sobre pertinencia. No debería extrañarnos esa desproporción entre los kilómetros cuadrados de un territorio y la cantidad de controversias que genera en una cumbre presidencial.
No tendría que sorprendernos tal desmesura porque, durante 53 años, esa ha sido la diplomacia cultivada por Fidel Castro y ahora continuada por su hermano. Estar sin estar, boicotear sin asistir, tirar la puerta sin antes hacer el intento de tocar en ella. En el palacio de gobierno habanero de seguro se esbozaron varias sonrisas al ver la falta de consenso y de declaración final en Cartagena de Indias.

Numerosos mandatarios reunidos en Colombia aseguraron que nuestra nación estará presente en la próxima cita continental. ¿Pero, de cuál Cuba están hablando en ese caso? Sin dudas, de un país que la tendrá más difícil para opacar los temas generados por las potencias emergentes del área y por los retos políticos de ese momento.
José Mújica reclamó que “la bandera de la estrella solitaria” debe acompañar a sus pares regionales, y esta aseveración puede leerse como un pronóstico de que los cubanos viviremos cambios trascendentales en los próximos años.
Incluso entre los Gobiernos más afines al de La Habana, pocos creen que Raúl Castro será incluido en la lista de invitados a la VII Cumbre de las Américas. Todo apunta a que en su lugar irá otra persona —con otro apellido— que en el mejor de los escenarios posibles será un presidente elegido por su pueblo. La isla insertada finalmente —con su justo tamaño y trascendencia— en el continente.
Yoani Sánchez es periodista cubana y autora del blog Generación Y.
Yoani Sánchez / bgagency-Milan.

Resultados de la Cumbre de las Américas

Tomado de La Prensa Gráfica


Por Eduardo Calix

El saldo más importante que produjo la reciente Cumbre de Cartagena es que no se acordó nada, y así lo reconoció el propio presidente Santos, anfitrión del evento. Este hecho, aparentemente negativo, no lo es si se reflexiona sobre sus causas y previsibles efectos.

En primer término, la cumbre abordó temas que en otros momentos habrían causado estragos severos en la reunión: el tema de la estrategia a seguir sobre las drogas y el combate al narcotráfico; el caso de la futura asistencia de Cuba a dichos eventos; y la reclamación argentina sobre las Islas Malvinas. Todo se debatió cara a cara, pero con los intereses e ideologías diversos puestos sobre la mesa. Obama ante Cristina Fernández, Calderón ante Evo Morales, y Santos, mediando hasta donde le era posible. Este hecho, el del debate entre actores disímbolos, fue un acto de civilidad democrática que reivindica la cláusula democrática del organismo y le da respiro y sentido a las reuniones de esta naturaleza.

El gobierno de Cuba dijo, después de realizada la cumbre, que lo más importante del evento fue la “rebelión” de América Latina en contra de Estados Unidos y Canadá. Es una lectura miope y sesgada del evento. Sí se cumplió el acuerdo de pedirle a Estados Unidos la incorporación cubana en futuras cumbres, pero la verdad es que Cuba perdió mucha fuerza ante la comunidad latinoamericana, pues la ausencia de Hugo Chávez (Venezuela), Correa de Ecuador y Ortega de Nicaragua hizo que la voz de ALBA se ahogara fácilmente en el mar de declaraciones, discusiones y encendidos discursos. El reclamo sobre Cuba fue más formal, de compromiso previo ante Castro, sin hacer ninguna propuesta vinculante en los futuros encuentros.

Lo más interesante fue la idea consensuada de que debiera abrirse un compás de discusiones y análisis sobre el tema de las drogas. Se había sugerido la posibilidad de replantear las cuestiones relacionadas con la legalización de la producción, la distribución y el consumo de marihuana y otras posibles drogas. El presidente Calderón fue enfático al decir que la posición de abrir un diálogo institucional sobre las drogas en ningún sentido descalificaba la postura de su gobierno de combate frontal al crimen organizado en México.

Lo más revelador del estado de ánimo de los 30 jefes de Estado presentes en la Cumbre de Cartagena fue el tema de las Malvinas. Decir que el apoyo a la posición argentina era tibio y dividido es develar un secreto a voces. La mayoría de los gobernantes no se sentían inclinados a apoyar lo que, a todas luces, es un reclamo internacional para desviar la atención de problemas internos en ese país, y no estaban interesados en participar en un enfrentamiento de consecuencias inciertas con Gran Bretaña. La presidenta Fernández se retiró abruptamente de la cumbre, supuestamente ante la falta de una resolución favorable a su causa.

Se ha hecho un esfuerzo por construir la idea de que el gran saldo de la cumbre se define por un enfrentamiento entre Estados Unidos y América Latina. ¡Nada más falso! Sí es cierto que existen posturas diferenciadas en varios puntos. Pero, junto con las diferencias Norte-Sur, es justo reconocer el desarrollo de un centro político en muchas naciones latinoamericanas, cuyos gobernantes están más interesados en políticas económicas que en posturas ideológicas.

Al mismo tiempo, las naciones de ALBA se debilitan en su influencia política, que no convencen sobre su “modelo”.

Predominaron en la Cumbre de Cartagena el pragmatismo económico y la neutralidad ideológico-política, así como el propósito que reuniones de este nivel privilegien la unión y no el encono y el desencuentro.

sábado, 21 de abril de 2012

VI Cumbre de las Américas: Un punto de inflexión en la historia

Por Luis Montes Brito 
Para Diario El Mundo de El Salvador
Revista Digital Gurú Político, México


La mayoría de países participantes abandonaron posiciones ideologizadas marcando un punto de inflexión en la historia del continente.
Las Cumbres de las Américas son auspiciadas por la Organización de Estados Americanos. En ellas se  reúnen los Jefes de Estado y de Gobierno de los estados miembros del hemisferio para debatir sobre aspectos políticos compartidos y comprometerse a acciones concertadas con el fin de hacer frente común a los desafíos que enfrentan los países de la región.
La primera Cumbre se llevó a cabo en diciembre de 1994 en la ciudad de Miami, Florida, Estados Unidos, acordándose como objetivo prioritario el establecimiento del “Área de Libre Comercio de las Américas” (ALCA) para lo cual se eliminarían progresivamente las barreras al comercio y la inversión, estableciéndose el 2005 como fecha tope para concluir las negociaciones del ALCA.
Este acuerdo serviría de base en la región para lograr avances democráticos, erradicar la pobreza extrema, el analfabetismo, las desigualdades sociales, mejorar el acceso a la educación de calidad y a la atención primaria en materia de salud, así como para apuntalar el crecimiento económico de la región sin discriminaciones de ningún tipo.
Posteriormente se han celebrado cinco Cumbres adicionales, más  una  Cumbre de las Américas sobre Desarrollo Sostenible celebrada en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, en 1996 y una Cumbre Extraordinaria celebrada en Monterrey, México en 2001.
Todas las cumbres se han efectuado sin permitir la participación de Cuba, debido a que la solidificación de la democracia en la región ha sido un tema prioritario desde el inicio de estas conferencias y Estados Unidos ha argumentado que el gobierno autoritario de la Isla no debe formar parte de este concierto de naciones democráticas.
La VI Cumbre efectuada en Cartagena marca un punto de inflexión en los dos temas más mediáticos del evento: La participación de Cuba y un cambio en la lucha contra las drogas. Indudablemente la influencia estadounidense en la región se ha debilitado, tal vez calculadamente por el país del norte, evidenciada en el distanciamiento de los puntos de vista opuestos al resto de países de la región a excepción de Canadá.
La erosionada influencia estadounidense en la región apenas alcanzó para evitar una declaración final conjunta en contra de su posición. Los países del bloque del ALBA fueron los grandes perdedores ya que quedaron fuera de incidir en los debates, incluso antes de iniciar las reuniones, producto de la ausencia por distintas causas de Raul Castro, Hugo Chávez, Rafael Correa y Daniel Ortega. Evo Morales quedó solo y no alcanzó a incidir en la cobertura mediática del evento donde incluso el escándalo de la seguridad del presidente estadounidense recibió mayor atención de parte de la prensa acreditada para cubrir la cumbre.
La presidenta argentina no fue capaz de conseguir que se dedicara al menos un párrafo en la declaración final sobre la posición de Latinoamérica referente al reclamo de su país sobre la soberanía de la isla de las Malvinas, a lo cual se opusieron Estados Unidos y Canadá.
La mayoría de países participantes abandonaron posiciones ideologizadas marcando un punto de inflexión en la historia del continente al dar paso a visiones pragmáticas donde Colombia se convirtió en la gran ganadora de la Cumbre aprovechando óptimamente su condición de país anfitrión para liderar hábilmente a través del presidente Santos innovadoras propuestas en los temas centrales. Santos también supo plantearse como el gran mediador en las diferencias entre Brasil y Estados Unidos, sobre todo en la queja de la presidenta Rousseff por la política monetaria estadounidense que conlleva a la apreciación de la moneda de los países latinoamericanos en detrimento de la competitividad de sus exportaciones.
El Salvador ocupó un cómodo lugar de espectador pasivo de la cumbre donde su presencia fue meramente protocolaria sin que se conociese alguna propuesta interesante de parte de los rectores de la diplomacia salvadoreña, esto puede atribuirse al cada vez más evidente distanciamiento entre el presidente de la república y su partido de gobierno, que debilita progresivamente el poder del jefe del ejecutivo. La pasividad salvadoreña contrasta con la del joven gobierno guatemalteco que supo introducir a la mesa de discusión su polémica propuesta de despenalización de las drogas.

domingo, 15 de abril de 2012

Colombianos podrán obtener visa EEUU hasta para 10 años

Tomado de El tiempo


El anunció beneficiará a quienes pidan el documento por primera vez.
La visa de los ciudadanos colombianos para ingresar a territorio de Estados Unidos será extendida hasta por 10 años. EL TIEMPO estableció, con fuentes oficiales de la Casa de Nariño, sería dado a conocer por el presidente estadounidense, Barack Obama, durante su participación en la Cumbre de las Américas, en Cartagena.

La medida cobijará a quienes soliciten la visa por primera vez y, según las mismas fuentes, es un mensaje de confianza en Colombia que expresará el gobierno de Obama.

Hoy, este documento lo entregan hasta por 5 años y tiene un costo que oscila entre los $ 250.000 y $ 630.0000, dependiendo de la categoría: turista, estudiante o para trabajo.

Para el excanciller Guillermo Fernández de Soto, la disposición debe fomentar las posibilidades de hacer negocios e inversiones de colombianos en el país del norte.

"Es una magnifica noticia, que ojalá se concrete y que, de una vez, faciliten los procedimientos para acceder al documento, y que eso incorpore también facilidades para los negocios y la inversión", precisó Fernández de Soto.

El anuncio estadounidense coincide con la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre los dos países, que se viene negociando hace cerca de ocho años.

El exministro de Relaciones Exteriores Julio Londoño Paredes sostuvo que "lo importante es que esa situación se mantenga".

Paredes incluso pidió que EE. UU. contemple "eximir de visa a los ciudadanos colombianos, como ha pasado con otras naciones".

Estadísticas oficiales dan cuenta de que, en promedio, cerca de 1.600 colombianos solicitan diariamente visa para viajar hacia Estados Unidos.

El excanciller Fernando Araújo dijo que la decisión del gobierno de Barack Obama facilitará los trámites para acceder a ese documento.

"Hace que el tema sea mucho más fácil y, por su puesto, permite no tener que estar cada rato pidiendo citas en la embajada para ir a hacer colas largas para solicitar o renovar la visa", agregó Araújo.

Un promedio de 2 millones de colombianos vive actualmente en Estados Unidos, y más de un millón viajan anualmente hacia ese país.
Con la medida, Colombia ingresará al grupo de países latinos -entre los que están México, Argentina , El Salvador y Venezuela- cuyos ciudadanos obtienen visa hasta por 10 años.

Hillary Clinton visita sorpresivamente La Havana


Tomado de El Universal.com

Por RAÚL PALACIOS Y ARGEMIRO PIÑEROS

La rumba de Cartagena contagia hasta a los personajes más prestantes y ocupados del mundo. Por si alguien dudaba de ello, la noche del sábado lo confirmó la segunda funcionaria más importante del gobierno en los Estados Unidos, Hillary Rodham Clinton, quien por aquellas cosas de la diversión, y quizá por algo más desafiante, lo hizo nada menos que en el bar La Havana y con música cubana.

Havana (llamado con ortografía distinta que La Habana isleña) está en la esquina de la Calle de la Media Luna con la Calle del Guerrero, y semeja el típico bar habanero, el que conoció Mauricio Aimone, un italiano que desde hace cinco años decidió montar su propio negocio acá en Cartagena que es la ciudad en donde ahora vive.

En este quinquenio, la señora Clinton es la visitante más famosa a la que han atendido. Ella llegó a las 12 y 45 de la noche entre el sábado y el domingo, en el preciso momento en que African Charanga, el grupo musical que interpreta todas las noches los diferentes ritmos cubanos está en pleno acto y deleitando a no más de un centenar de personas abarrotaban el bar.

Unas horas antes habían llamado a Aimone para que reservara una mesa para un personaje especial, del que no sabía exactamente quién era, pero por el que tuvo la precaución de poner un letrero de "Ocupada" en la única mesa que a esa hora permanecía disponible en el bar, justo al lado de donde toca la Charanga.

Poco tiempo después, todos los presentes vieron sacudida su noche al darse cuenta de quién había llegado. Diferente a como se la ha visto en las calles y en los lugares públicos en los que ha estado, Clinton en el bar estuvo menos custodiada, le acompañaba un pequeño grupo de escoltas y, eso sí, más de una docena de amigos con los que compartió.

La secretaria Clinton de inmediato se dejó llevar por el son montuno, la pachanga y los danzones que interpretan los 11 músicos del grupo que dirige el maestro Felix Cano, un cartagenero que lo fundó en 1999, pero que para los desconocidos parece cubano, por que su emoción y sencillez hacen sentir a los asistentes que estuvieran en La Habana de Fidel y de Raúl Castro.


Una docena de cervezas, dos vasos de whisky y unas botellas de agua llegaron a la mesa de la ilustre visitante. En el momento del brindis ella tomó tres sorbos de Águila y luego siguió con la botella de agua, que le sirvieron justo antes de que se levantara a bailar “Se me perdió la cartera” de Junior González y Larry Harlow; tras la que siguió en la pista, al ritmo de “Isla del encanto”, de Héctor Lavoe y “A Matanza” de Fajardo y sus Estrellas.

Alejandro Puello, el mesero cartagenero que le atendió fue otro de los sorprendidos. En la noche del sábado le habían dicho que se hiciera en otro lugar, pero llegó tarde a esa designación y por eso se fue a Havana a reforzar al equipo tradicional. Su demora, esta vez, fue muy bien recompensada, pues al final de su turno, sobre las cuatro de la mañana contó con los billetes en la mano, que la propina de la mesa estadounidense fue buena: 40 dólares.

Pero la noche también la recordará  Ago Figueroa, un hombre cincuentón que se dedica a venderles a los visitantes unas maracas que construye en el estuche de rollos fotográficos a los que les mete semilla y por fuera les adorna con publicidad del local, para que los rumberos acompañen su baile; así lo hizo la secretaria de Estado Clinton, quien las tomó en sus manos y bailó encantada. 

En medio de la rumba Hillary también tuvo tiempo para felicitar a los músicos, ante quienes pasó y les saludó de mano a cada uno, eso sí acompañada a lado y lado de dos escoltas que no le perdían ni el menor instante de sus movimientos.

A la una y cuarto de la mañana terminó la rumba de Clinton en Havana. Volvió a las calles de Cartagena, en Colombia, y en medio de esas rutas, más solas que de nunca, por las previsiones de seguridad que impiden el paso de carros, la funcionaria estadounidense buscó su hotel para descansar, pensando en el cierre de la Cumbre de Las Américas, hoy domingo.

Dentro del bar quedaron los otros rumberos, entre ellos un grupo de periodistas y fotógrafos que a esa hora descansaban de las largas jornadas que les ha impuesto la VI Cumbre de las Américas. Esta vez el descanso les quedó interrumpido, para volver a trabajar detrás de la señora Clinton, incluso con equipo fotográfico prestado, precisamente por un par de jóvenes extranjeros, uno de ellos estadounidense, que no estaba tan sorprendido de ver a su Secretaria de Estado, sino de saber que los fotógrafos profesionales no llevaran cámara.

Dilma pone a Obama en situación incómoda al hablar sobre los aviones de Embraer


Tomado de O Globo
Los presidente de EEUU, Barack Obama y de Brasil, Dilma Rousseff se saludan al final de una reunión bilateral sostenida dentro del marco de la VI Cumbre de las Américas realizada en Cartagena, Colombia

Traducción libre por Compartiendo mi Opinión

CARTAGENA – La presidenta Dilma Rousseff aprovechó la oportunidad dada por el americano Barack Obama, durante un debate en el Foro Empresarial de las Américas, y defendió la venta de aviones Embraer a la Fuerza Aérea de Estados Unidos. El proceso fue suspendido hace un mes (por el gobierno EEUU) hasta ahora sin resolverse, pese a los llamados del gobierno brasileño.

- Brasil está cambiando.
Más brasileños compran iPad y aviones -, dijo Obama, refiriéndose a los caza estadounidenses que compiten con los franceses y los suecos en la preferencia de la Fuerza Aérea Brasileña. – también los Embraer - respondió Dilma rápidamente.

A finales de febrero, la Fuerza Aérea de EE.UU. canceló el contrato por $ 355 millones para suministrar 20 aviones Super Tucano de Embraer, citando problemas con la documentación.

En otros asuntos, esta vez para suministrar aviones de combate para la Fuerza Aérea Brasileña, el gobierno de Dilma podría prescindir de la Boeing estadounidense y elegir al  Caza Rafale, de la francesa Dassault Aviation. Fuentes del gobierno brasileño dijeron recientemente que "muy probablemente" el país escogerá el caza militar francés.

Dilma: Son medidas de defensa comercial

A los empresarios Dilma explicó que las medidas adoptadas por Brasil no son protectores, pero si son de defensa de la industria nacional. Ella volvió a criticar lo que llamó un "tsunami de dinero", quejándose de la apreciación de las monedas de los países (latinos) del continente americano y dijo que esta expansión debería traducirse en más inversiones.

- Por supuesto, que debemos tomar medidas para defendernos y protegernos. La defensa es que no podemos permitir que nuestros sectores manufactureros sean canibalizados y pienso que sería muy virtuoso para los países con superávit, que en lugar de una política monetaria, utilizasen políticas de inversión, dijo.

- Esto permitiría que los recursos de la expansión monetaria fuesen destinados a poner fin a la crisis y al aumento de la prosperidad internacional - completó.

Sale a luz más información sobre el escándalo de agentes del SS en Colombia


Tomado de El Tiempo
En la foto, miembros del esquema de seguridad del presidente Obama, en Tampa

El lío estalló debido a que uno de ellos no le habría pagado a una prostituta.

Durante una semana, mientras afinaban los detalles de seguridad para el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, agentes del Servicio Secreto (SS) protagonizaron escándalos que terminaron con su salida de Cartagena y una investigación por, presuntamente, estar con prostitutas en la ciudad.(Siga este enlace para leer el reporte del The New York Times sobre este caso)

Al menos 12 agentes fueron devueltos a su país y retirados del esquema dispuesto para la Cumbre de las Américas, que concluye hoy. (Lea también: Licor y prostitutas, excesos de agentes de Obama retirados de Colombia)

Aunque el portavoz del Servicio Secreto, Edwin Donovan, habló solamente de "mala conducta", el presidente de la Asociación Federal de Oficiales de ese país, Jon Adler, reveló que las acusaciones se relacionan con al menos un caso de prostitución, que ocurrió antes de la llegada de Obama a 'La Heroica'. (Lea también: Retiran a agentes de Obama por estar con prostitutas en Cartagena)

El Servicio Secreto considera la prostitución como algo "inapropiado". El caso fue destapado por The Washington Post, que explicó que fue alertado del asunto por su exreportero Ronald Kessler, autor de varios libros, entre ellos uno relacionado con el cuerpo que cuida a los presidentes de EE. UU.(Lea también: Las sillas vacías de la Cumbre)

Días de licor y desorden

Ayer, EL TIEMPO pudo establecer que los agentes secretos se hospedaron en el tradicional hotel Caribe, donde, al parecer, habría ocurrido un incidente con una trabajadora sexual que habría sido contactada por uno de los agentes. (Lea también: 'Propuestas de Obama no son innovadoras': Pérez Molina)

Un alto funcionario, que citó The New York Times (NYT) sin identificar, señaló que la discusión habría ocurrido el pasado miércoles en la noche, porque no se le pagó a la mujer por los servicios sexuales. El altercado, que se habría desatado en uno de los pasillos del hotel, fue tan fuerte que llamó la atención de la seguridad del Caribe. La barrera del idioma agravó los ánimos, dijo el NYT. (Lea también: 'Bloqueo y aislamiento de Cuba son ineficaces')

Ese día, el escándalo llegó a oídos de la Policía colombiana y se trata de establecer ahora si la mujer fue ubicada en un lugar de lenocinio que funciona cerca del Caribe. (Vea la galería: Primeras imágenes de la VI Cumbre de las Américas)

Varios de los agentes implicados están casados y, según versiones de prensa, se supo que otros de ellos también estaban con mujeres en sus habitaciones. "Eso está en manos del gobierno de Estados Unidos", se limitó a decir la relacionista pública del Caribe, Ana Beatriz Ángel. Sin embargo, lo que ha trascendido en Cartagena es que, durante varios días, los agentes tomaron bebidas alcohólicas. 

Según le comentó un trabajador del Caribe a un periodista local, primero tomaban el licor que el hotel les ofrecía, y luego salían a comprar cervezas americanas y licores extranjeros. Al parecer, los agentes también buscaron el contacto para que subieran las mujeres a sus habitaciones.
La misma fuente del Caribe, que prefirió no dar su nombre, aseguró que los agentes disfrutaban a diario de la piscina, al parecer en estado de embriaguez. 

Ayer, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo que el presidente Obama tiene "plena confianza" en su cuerpo de seguridad.

Surge otro incidente
 
Cinco militares habrían violado toque de queda

Ayer se conoció otro incidente que involucra a cinco militares estadounidenses en Cartagena, investigados por posible "conducta inapropiada" tras violar su propio toque de queda. El jefe del Comando Sur, Douglas M. Fraser, subrayó a CNN que han sido "confinados en cuarteles" porque "violaron el toque de queda", sin dar detalles.

Cumbre de las Américas deja al descubierto falta de liderazgo Latinoamericano


Tomado de La Nación

La presidenta Cristina Kirchner llegó a la Cumbre de las Américas con dos objetivos: reencontrarse con sus aliados de la zona y medir su relación con su par norteamericano, Barack Obama, después de las últimas tensiones en el vínculo bilateral. Así lo sostiene a La Nacion Luis Dallanegra, investigador de Política Internacional del Conicet y autor de Relaciones políticas entre Estados Unidos y América latina, que interpreta que la Argentina no tiene una política definida respecto de sus vecinos.

-¿Cómo llegó América latina a esta Cumbre? 
 -América latina siempre está fragmentada. Existe cada tanto una tendencia a converger en algunos proyectos o marcos institucionales, pero nunca en algo que se pueda denominar sistema político latinoamericano, como en Europa.

-¿Cuál es el rol de la Argentina en América latina?
-La Argentina es un país con bastante bajo perfil. No tiene un proyecto latinoamericano. Está demasiado sumergida en su conflictividad interna. Tiene lazos de amistad con ciertos países de la región, pero no hay una política.

-¿Cómo analiza su relación con Estados Unidos?
-Están en un mal momento. Por las conductas proteccionistas que está adoptando la Argentina, Estados Unidos ha dejado la diplomacia de lado y simplemente aplica sanciones. Y no sé hasta qué punto la Argentina tiene buena relación con los países asiáticos, como para pensar en un mercado alternativo.

-¿Cuál es el objetivo del gobierno norteamericano en Cartagena?
-Estados Unidos está preocupado porque no puede frenar el crecimiento de China en la región. Tiene que tratar de mantener su patio trasero, sin que se le despegue tanto. Pero en esta Cumbre no se van a abordar temas comerciales, así que lo de Barack Obama va a ser más bien discurso. El está mucho más preocupado por la recuperación de la economía en su país y en Europa.

-¿Cómo evalúa la gestión de Obama respecto de la región?
-Hubo más ausencia que otra cosa. Primero por los problemas en Medio Oriente que dejó Bush y después se vio comprometido en Libia a través de la OTAN. Además, estuvo limitado por la mayoría republicana en el Congreso, con una mentalidad expansionista corporativa.

-Brasil está reemplazando a Estados Unidos como motor regional, ¿cómo encarna este rol?
-Brasil es una potencia creciente, con un gran marketing. En América latina es muy poderosa, representa el 50% del PBI de la región, pero no tiene una política de integración latinoamericana ni de inserción de la región en el mundo. No es el gran conductor de América latina; nadie sigue su modelo en la región.

sábado, 14 de abril de 2012

Pérdida de influencia EEUU sobre Latinoamérica se refleja en Cumbre

Tomado de Semana.com

Por Por Frank Bajak y Vivian Sequera, The Associated Press

Pese al desacuerdo para incluir los asuntos de Cuba y las Malvinas en la declaración final, ambos siguen en la lista de reclamos preparada por los mandatarios de la región. Drogas: tema pendiente.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, no puede ser culpado por el retroceso en la influencia comercial y económica de su país en las Américas y los otros 32 líderes hemisféricos con los que se encontrará este fin de semana lo saben. 

Tal influencia retrocedía ya desde antes de que Obama llegara a la presidencia. 

Pero eso no evitará que en Cartagena, donde se celebra la VI Cumbre de las Américas, Obama sea empujado a una esquina por varios asuntos, entre ellos la terquedad de Estados Unidos en mantener un veto a la participación de Cuba en estas citas hemisféricas y el reclamo de Argentina por las islas Malvinas.

Obama aterrizó en Cartagena poco antes de las 5:00 p. m. Incluso los amigos de Obama aseguran que tres años después de que prometió mantener una relación de igual a igual al asistir a su primera cumbre, el mandatario no ha puesto mucho esfuerzo en forjarla. 

Y eso sólo causa daños a su propio país. 

"Lo que yo he dicho, y se lo he dicho en Estados Unidos a muchas personas del gobierno, es que más les vale mirar hacia el sur, porque para ellos los intereses estratégicos de largo plazo están en América Latina, no en países lejanos", dijo el presidente colombiano Juan Manuel Santos en una entrevista en vísperas de la cumbre publicada en el diario El Tiempo

En una entrevista con The Associated Press, el presidente de Guatemala Otto Pérez Molina lo puso en simples palabras: "Yo creo que Estados Unidos tiene que voltear a ver realmente con mayor responsabilidad a América Latina, creo que ha estado abandonado... (en) sus relaciones con América Latina". 

El mandatario guatemalteco agregó que no se trata de dar más ayuda financiera "sino de abrir mercados, propiciar mejores relaciones con los países de Latinoamérica". 

"La verdad lo que yo siento es que la agenda de Estados Unidos y la agenda de los países de Latinoamérica, en lugar de ir paralela o de converger, está tomando caminos que van separándose, que van distanciándose", aseguró Pérez Molina. 

Pero en una entrevista con la cadena radial La W antes de viajar a Colombia, Obama mantuvo su discurso. 

"He dicho consistentemente desde que llegué al cargo (en 2008) que nuestro objetivo con respecto a Latinoamérica... y el Caribe es ser un buen socio, poder trabajar con los países sobre la base del respeto mutuo", dijo Obama a la emisora. 

Sin embargo, para Diálogo Interamericano, un destacado grupo de 100 ex diplomáticos e intelectuales, la mitad de ellos de Estados Unidos, fue más tajante: "La mayoría de los países de la región miran a Estados Unidos como menos y menos relevante para sus necesidades y con la declinante capacidad de proponer y concretar estrategias para lidiar con los asuntos que más les preocupan", dijo el grupo en un informe. 

El grupo con sede en Washington enumeró tres razones: la inflexibilidad de las políticas migratorias de Estados Unidos, la inhabilidad o falta de voluntad para reconsiderar una política antidrogas que ha convertido a México y Centroamérica en un sangriento campo de batalla, y un consenso en el hemisferio de que la mejor manera de promover la democracia en Cuba es poner fin al embargo, en lugar de reforzarlo. 

Las alternativas a esa guerra contra las drogas y la inclusión de Cuba en las cumbres serán los temas que dominarán la agenda el 14 y 15 de abril, cuando los presidentes tendrán su cónclave.

Tanto el presidente de Guatemala como la presidente de Costa Rica Laura Chinchilla manifestaron la necesidad de debatir el tema contra los narcóticos.

"La legalización de la droga me parece que es un debate al cual no hay que tenerle temor", dijo Chinchilla en una entrevista con la AP.

"Lo último que quiere Costa Rica es una guerra (dentro de su propio país) contra las drogas, que seamos arrastrados a los escenarios que ya han enfrentado otros países como Colombia, como México o el norte de Centroamérica en donde han tenido que sacar sus ejércitos a un costo altísimo para enfrentar este problema", indicó la mandataria, cuyo país no tiene fuerzas militares desde 1949. 

Las opciones por las que "nosotros apostamos son diferentes, por eso que Costa Rica se pone a la par de las naciones que dicen hay que debatir sobre ciertos escenarios" diferentes, indicó. 

Pero en tema de Cuba, la presidente fue menos tajante y sólo mencionó que su gobierno buscaba consensos aunque resaltó que Cuba se ha marginado de otras cumbres como la Iberoamericana, que reúne a los presidentes y jefes de gobierno de América Latina, España y Portugal.

El canciller peruano Rafael Roncagliolo adelantó la negativa de su país a la despenalización de las drogas.

"Sobre el tema de las drogas, como lo sabe el presidente Ollanta Humala, Perú no está a favor de la despenalización... considerando nuestra situación de país productor y la importancia que le damos a la lucha contra el tráfico de drogas y el crimen organizado", señaló el ministro peruano desde Cartagena a la radio limeña RPP

A su llegada a Cartagena el viernes, el presidente de Bolivia, Evo Morales, ratificó la postura sobre una participación de La Habana. 

"Habría sido importante que el pueblo cubano esté presente", dijo Morales en una breve declaración en el aeropuerto de Cartagena. "Que sea la última cumbre sin Cuba", añadió.

De igual manera parece asumir protagonismo el reclamo de Argentina al Reino Unido por las islas Malvinas.

Aunque se desconoce oficialmente si ese viejo reclamo de Buenos Aires estará en la agenda, las autoridades argentinas ya confirmaron que habrá una reunión bilateral el sábado entre Obama y la presidente Cristina Fernández. 

Cuba está excluida de estas cumbres desde que se realizó la primera en 1994, mientras líderes de distintos países, incluyendo Santos, han expresado su deseo y voluntad de que ésta sea la última sin la presencia de La Habana. 

"Hasta ahora sólo el gobierno de derecha de Canadá... y el gobierno de Estados Unidos son los únicos que mantienen posiciones retrógradas, antihistóricas, de no acompañar a Argentina en su lucha por las Malvinas y frente a Cuba, rechazar su presencia en estas reuniones", dijo a periodistas el canciller de Venezuela, Nicolás Maduro, el jueves por la noche tras una de las sesiones de trabajo de los ministros del Exterior que deben redactar la declaración final del encuentro que será sometida a la consideración de los jefes de Estado.
Estados Unidos y Canadá "o escuchan y rectifican a tiempo o estas cumbres se acaban", agregó Maduro. 

Debido a que en la cumbre todos los temas deben ser acordados por consenso, un veto de Estados Unidos y Canadá dejaría por fuera el asunto de Cuba y Malvinas en la declaración final de los jefes de Estado, aunque ya funcionarios latinoamericanos han dicho que ambos podrían ser tratados en dos declaraciones breves aparte. 

Las cumbres son un fruto de la Organización de los Estados Americanos (OEA), de la que Cuba fue expulsada en 1962.

Pero en estos años, la relevancia de la organización ha decaído al tiempo que surgieron otros grupos regionales como la llamada Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), un grupo de países de izquierda que promovió el presidente de Venezuela Hugo Chávez; la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), con el apoyo de Brasil y más recientemente la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), que agrupa a 33 países, incluyendo Cuba. 

Todos esos grupos tienen una cosa en común: dejan por fuera a Estados Unidos y Canadá. 

Estados Unidos paga 59% de los 81 millones de dólares del presupuesto anual de la OEA. Pero el peso de Washington en la región sigue achicándose, mientras crece el volumen de remesas que los latinoamericanos, viviendo en Estados Unidos, envían a las familias en su tierra natal. 

Una década atrás, 61% de las exportaciones estadounidenses iban a la región, de acuerdo con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.

Mientras tanto, China ha superado a Estados Unidos en el volumen de intercambio comercial con Brasil, Chile y Perú y se coloca en segundo lugar en Argentina y Colombia.

La asistencia de Estados Unidos a la región también ha disminuido. El volumen total de asistencia militar, policial y económica de Estados Unidos a América Latina cayó de 3.200 millones de dólares en 2009 a 2.400 millones de dólares para el presupuesto de 2013, según datos de tres distintos centros de análisis, entre ellos la Oficina en Washington para América Latina.

Latinoamericanos debemos sentir vergüenza por inequidad sentenció presidente colombiano en cumbre


Tomado de El Espectador


Excepto Canadá y EE.UU., la región respalda a Argentina en su exigencia de soberanía sobre las Malvinas.

Las voces de importantes dirigentes del hemisferio se unieron al Foro Social que se realizó en el marco de la VI Cumbre de las Américas en Cartagena, en donde el principal reclamo fue construir caminos que conduzcan a reducir los niveles de pobreza, discriminación y exclusión.
Además, se escuchó la voz de protesta en materia de relaciones internacionales y soberanía. El presidente de Bolivia, Evo Morales, insistió en la necesidad de que Cuba participe en las cumbres futuras y, de forma más contundente, el canciller argentino, Héctor Timerman, reclamó la soberanía de su país en las islas Malvinas.


Como anfitrión, el presidente Juan Manuel Santos llamó la atención sobre la problemática social en el continente, al advertir que “si hay algo por lo cual nosotros los latinoamericanos debemos avergonzarnos, y yo siento vergüenza como dirigente de un país, es la tremenda inequidad que tenemos en este continente. Y eso nos sucede infortunadamente a los latinoamericanos. Somos un continente muy rico rodeado de pobreza, donde la pobreza es la regla y no la excepción. No tiene que ser así, no debe ser así”.


Para el mandatario colombiano, el mejor negocio para el continente es superar la pobreza. “Cada persona que sale de la pobreza es un cliente, es un consumidor, es una persona que va a ser económicamente activa y además está comprobado ya desde todo punto de vista que el desarrollo cuando hay más equidad es mucho más fácil”, dijo Santos.

Este planteamiento fue secundado por la secretaria de Estado de Estado Unidos, Hillary Clinton, quien afirmó que “hoy, más que nunca, es necesario trabajar para superar las desigualdades sociales y étnicas que vive la región. Trabajaremos lo mejor posible en esta cumbre para que los mandatos se conviertan en actos”. Para este fin pidió acompañamiento de la sociedad civil y agregó que “este es un trabajo conjunto entre los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil. Sin alguno de esos tres, el sistema colapsa”.

El presidente Evo Morales en su intervención hizo un llamado al gobierno de Estados Unidos para que se ponga de parte del resto de América y acabar con la exclusión. Esta solicitud de Morales hacía referencia a la exclusión de Cuba en el encuentro de mandatarios del hemisferio. “Le pido a la secretaria de Estado que se sume a la iniciativa de todos los países de América de convocar a Cuba a todas las Cumbres de las Américas”, afirmó.

Y fue el mandatario boliviano el que puso sobre el tapete lo que se está convirtiendo en una solicitud generalizada en el hemisferio: el reclamo de soberanía de Argentina a Gran Bretaña por las islas Malvinas. “Saludo la gran resolución en este evento de apoyo a Argentina y espero que Estados Unidos se pueda sumar a decir que Malvinas es de Argentina, porque Malvinas es de América”.

Al respecto el canciller de Argentina, Héctor Timerman, pidió apoyo a los representantes de la sociedad civil reunidos en el foro social de Cartagena. Solicitó que “pidan a sus gobiernos que apoyen la resolución sobre las islas Malvinas, porque la agresión colonial contra un país es la agresión colonial a todos”.

Timerman agregó que “parte del territorio argentino está bajo la potencia colonial extraterritorial de Gran Bretaña. ¿Cómo podemos avanzar sometidos a una potencia del siglo XIX? Tenemos los desafíos del siglo XXI y Argentina todavía lucha contra una potencia del siglo XIX”. El diplomático informó que salvo Estados Unidos y Canadá, todos los países presentes en esta cumbre apoyan que la declaración final contenga “una nueva manifestación de solidaridad con la decisión de Argentina de negociar con Gran Bretaña la devolución de las islas”.

Las conclusiones de este foro social serán entregadas a los mandatarios para su debate en el marco de la Cumbre. Entre las solicitudes que fueron incluidas en el documento oficial están brindar atención especial a la población indígena y negra en la lucha contra la pobreza, la discriminación y los derechos humanos dentro del sistema interamericano. También pidieron cesar la discriminación contra la población LGBTI. Finalmente, las organizaciones sociales pidieron para el caso de Colombia la activación de mecanismos diplomáticos que permitan al Gobierno y las guerrillas “explorar caminos no militares que superen el único conflicto armado del hemisferio”.


Ausencia de Chávez en cumbre genera especulaciones sobre su estado de salud


Tomado de Globovisión.com

Gravedad en su  estado de salud habría marginado a Chávez de la Cumbre de las Américas

Chávez, busca ser el centro de atención en las cumbres a las cuales ha asistido

El Ciudadano: Al faltar a Cartagena el presidente Chávez reconoce que la enfermedad lo limita

Leopoldo Castillo, El Ciudadano, señaló que el presidente Hugo Chávez se encuentra "bien enfadado, sumamente enfadado", porque quería ir a la Cumbre de las Américas, y no podrá debido a su enfermedad, lo que significa que reconoció ante la comunidad nacional e internacional que su condición física es limitada.  

"Es terrible para el presidente, para su psiquis, y quienes estaban presentes allí no se llaman a engaños, como no nos llamamos engaños quienes vimos esa cadena, el presidente está enfermo", sentenció Castillo.

"Dentro de su soberbia no ha tenido el coraje de decir la verdad completa al pueblo venezolano, es decir, con la gravedad del momento el presidente no nos dice la verdad, la calla, no nos respeta el presidente, como no respeta a su adversario político, como no respeta a quienes piensan diferente. Se va con la amargura de su limitación, con la amargura de su enfermedad, y con la amargura de su discurso", continuó el ciudadano.

El presidente Chávez, durante la cadena de radio y televisión que protagonizó desde el Balcón del Pueblo en el Palacio de Miraflores, indicó que pedirá permiso al presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, para ir a Cuba durante 1 semana para realizar tratamientos contra el cáncer que padece.
"Le deseamos buen viaje, presidente", manifestó Leopoldo Castillo.