Tomado de The Wall Street Journal
En busca de dólares, Venezuela devalúa el bolívar
El gobierno expandirá un sistema de subastas para inyectar más efectivo
en la economía
Por KEJAL VYAS
CARACAS—Venezuela anunció el miércoles que
devaluará el bolívar para ciertas transacciones como el turismo y las remesas,
la más reciente en una serie de medidas para debilitar la moneda y liberar
dólares para un gobierno necesitado de efectivo.
Los venezolanos que deseen dólares para viajes al
exterior, compras por Internet y pasajes aéreos, así como los que reciban
remesas, los obtendrán a través de un nuevo sistema de subastas que ha estado
vendiendo la moneda estadounidense a 11,36 bolívares, frente a la tasa oficial
de 6,3, dijo en una conferencia de prensa el ministro de Energía y Petróleo,
Rafael Ramírez, quien es también el principal asesor económico del presidente
Nicolás Maduro.
La tasa preferencial más fuerte seguirá vigente
para las importaciones de alimentos y medicamentos considerados esenciales por
el gobierno, afirmó.
La medida del gobierno es el esfuerzo más reciente
para revertir una economía alicaída cuyo crecimiento se desaceleró a 1,6% el
año pasado, con una inflación de 56%. En noviembre, Maduro impuso controles de
precios con el fin de controlar la inflación, pero eso sólo ha servido para
empeorar la escasez de productos básicos.
Venezuela tiene un sistema cambiario complicado y
rígido. Analistas sostienen que el gobierno necesita depreciar el bolívar para
obtener más dinero al convertir los dólares de las exportaciones de petróleo a
la moneda local. Eso ayudaría a reducir el déficit fiscal, que se calcula en
alrededor de 14% de la producción económica anual.
"Esta es una primera devaluación y vendrán
más", dijo Ángel García Banchs, director de la consultora Econométrica, de
Caracas.
El gobierno de Venezuela ejerce un férreo control
sobre el flujo de dólares en la economía, empujando a muchos ciudadanos al
mercado negro, donde la moneda estadounidense se cotiza a casi 11 veces el tipo
de cambio preferencial, una señal de desesperación a medida que las personas
buscan proteger su riqueza. El bolívar perdió 73% de su valor en el mercado
negro en 2013.
La escasez de dólares al tipo de cambio oficial
está causando estragos en una economía que depende en gran medida de las
importaciones. La reducida cantidad de dólares disponibles ha llevado a una
escasez generalizada de todo tipo de productos: desde leche hasta papel
higiénico.
El gobierno también ha retrasado los pagos en
dólares a las multinacionales, que incluyen a aerolíneas e importadores de
alimentos y bienes de consumo. La organización venezolana Conindustria calcula
que hay un retraso de US$9.000 millones en pagos a empresas, lo que ha frenado
severamente la actividad empresarial en Venezuela.
En semanas recientes, el gobierno anunció que
trasladaría mayores cantidades de ventas en dólares a un nuevo sistema de
subastas, que ha estado vendiendo dólares a 11,36 bolívares. Las empresas que
necesitan bienes importados para producir productos en Venezuela o venderlos se
quejan de que las subastas son demasiado limitadas y discrecionales.
Ramírez señaló el miércoles que el gobierno
subastará US$220 millones a la semana, más del doble de lo que ha ofrecido en
meses recientes.
Eso significa que unos US$11.000 millones de los
US$42.000 millones que el gobierno ofrecerá a la economía local en 2014 vendrán
a través de las subastas, mientras que el resto será vendido al tipo de cambio
preferencial.
"Aquí la gran discusión es: le damos los
dólares a los raspatarjetas o traemos medicamentos, le damos a los que están
especulando o traemos los bienes esenciales para el crecimiento de nuestra
economía?", cuestionó Ramírez.
Cualquier tipo de devaluación de la moneda local
acarrea un costo político ya que exacerba la inflación al encarecer las
importaciones. La inflación en 2013 fue de 56%, el doble de la tasa promedio
registrada en los 15 años en que el partido socialista ha estado al frente del
país.
"Lo están haciendo poco a poco porque quieren
medir las reacciones en las calles", señala García Banchs.
Ante preguntas de los periodistas el miércoles,
Ramírez no quiso catalogar la medida del gobierno como una devaluación.
"Estamos en el proceso de determinar la distribución de dólares para que
se ajuste a las necesidades del pueblo".
El ministro indicó que la tasa de subasta podría
cambiar más adelante y que el gobierno trabaja en un nuevo sistema con bandas
cambiarias, pero no brindó detalles específicos.
Empresas Polar, la mayor compañía de alimentos del
país, señaló en un comunicado el miércoles que el gobierno le debe US$463
millones por importaciones, una suma que ha aumentado 94% en los últimos dos
años. La compañía dijo que los proveedores extranjeros tal vez no puedan
continuar enviando cargamentos si no se cancela la deuda.
Ramírez afirmó que el gobierno continuaría
evaluando el asunto de la deuda pero advirtió que hay un "sector de
empresas" que defraudaron al Estado, con las cuales no habrá "arreglo
alguno".
No hay comentarios:
Publicar un comentario