martes, 16 de abril de 2013

DAN A CONOCER DETALLES QUE VENDRÍAN INCLUIDOS EN LA PROPUESTA DE REFORMA MIGRATORIA


Agencias noticiosas

PROYECTO MIGRATORIO PREVÉ CAMINO A CIUDADANÍA

POR LUIS ALONSO LUGO
ASSOCIATED PRESS




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WASHINGTON - El proyecto de ley de reforma migratoria que un grupo bipartidista de ocho senadores planea develar esta semana contempla otorgarle estatus legal provisional -y la opción de residencia permanente 10 años más tarde- a millones de inmigrantes sin papeles que hayan fijado su residencia en Estados Unidos antes del 31 de marzo de 2011, siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones, de acuerdo con un resumen de la iniciativa al que tuvo acceso The Associated Press.

Quienes deseen beneficiarse del programa -que empezaría hasta que la Secretaría de Seguridad Nacional certifique al Congreso que ha reforzado la seguridad en las fronteras- deberán permanecer en Estados Unidos todavía y cumplir con otros requisitos legales, agregó el texto.

El proyecto de ley, negociado desde enero a puertas cerradas, establece que solamente podrán obtener el estatus legal provisional aquellos inmigrantes sin papeles que paguen una multa de 500 dólares, impuestos atrasados y que no hayan sido hallados culpables de delitos graves, delitos simples, de delitos según leyes extranjeras, que no hayan cometido más de tres faltas menores y que no hayan votado ilegalmente.

Una persona involucrada en las negociaciones de los ochos senadores proporcionó a The Associated Press un resumen del proyecto de ley, cuya presentación podría hacerse el miércoles.

El documento indica que las personas con el estatus legal provisional podrán trabajar para cualquier patrón y viajar al extranjero, pero no podrán percibir prestaciones del gobierno federal. El estatus provisional podría renovarse a los seis años al pagar otros 500 dólares.

Al cabo de 10 años con el estatus legal provisional, los beneficiarios podrán optar por la residencia permanente, siempre y cuando hayan mantenido su residencia en Estados Unidos, pagado impuestos, trabajado con regularidad en Estados Unidos, posean conocimientos de inglés y de la sociedad estadounidense, y paguen otra multa de 1.000 dólares.

Los inmigrantes menores de 30 años que fueron traídos a Estados Unidos sin la debida documentación cuando eran niños -conocidos como "dreamers"- y los extranjeros dedicados a labores agrícolas podrían beneficiarse de la medida sin esperar la certificación de la seguridad fronteriza, por lo que podrían obtener su residencia permanente al cabo de cinco años. Los dreamers podrían obtener la naturalización inmediatamente.

La iniciativa de ley actual estipula que los residentes permanentes deberán esperar cinco años para optar por la naturalización, o tres si están casados con ciudadanos estadounidenses.

El proyecto de ley establece que los interesados podrán solicitar el estatus provisional solamente después de que aumente la seguridad en las fronteras, al detener o evitar el ingreso del 90% de las personas que intentan ingresar ilegalmente a Estados Unidos y al colocar cercas, infraestructura y tecnología a lo largo de la frontera, para lo cual asignaría 4.500 millones de dólares.

Si la meta del 90% de detenciones no se alcanza en tramos de la frontera durante los primeros cinco años, se crearía una comisión conformada por cuatro gobernadores de estados fronterizos, que emitirá recomendaciones para cuya implementación se dispondría de 2.000 millones de dólares.

Otros requisitos para que los interesados puedan iniciar el trámite son la implementación de un sistema para evitar que todos los patrones contraten a personas no autorizadas a trabajar y de un sistema electrónico para monitorear salidas del territorio estadounidense en puertos aéreos y marítimos.

La Casa Blanca ha expresado su preferencia por una reforma migratoria que no condicione la opción de la naturalización para los inmigrantes sin papeles a la seguridad fronteriza.

El proyecto de ley busca también crear una visa "W" para los trabajadores de baja capacitación académica, y ofrecer 20 millones de dólares para la creación de una nueva dependencia gubernamental encargada de determinar los máximos anuales de la nueva visa y declarar cuando haya escasez de mano de obra.

La iniciativa de legislación para una reforma amplia de las leyes migratorias también busca crear nuevas oportunidades de inmigración para trabajadores altamente cualificados, así como un nuevo "visado por méritos", dirigido a personas con talentos especiales o por determinados lazos laborales o familiares.

El proyecto de ley establecería un cambio fundamental en el actual sistema de inmigración, centrado durante mucho tiempo en los lazos familiares, al dar más importancia en las habilidades de los inmigrantes potenciales y su potencial de recibir empleo en Estados Unidos.

Los ocho senadores tenían previsto presentar formalmente el proyecto de ley el martes en una conferencia de prensa, pero después de la tragedia durante el maratón de Boston se aplazó para algún otro momento en esta semana.

La propuesta representa el intento de reforma migratoria más ambicioso desde 1986, y busca un balance entre la seguridad fronteriza solicitada por los negociadores republicanos, y las prioridades demócratas de ofrecer la opción de la naturalización para los inmigrantes sin papeles sin imponer grandes condicionantes.

La Comisión Judicial del Senado realizará audiencias sobre el proyecto de ley a partir del viernes. Numerosos grupos activistas, empresariales y religiosos se sumarán al debate en esas audiencias. Una vez que se hagan las enmiendas que se crean necesarias, el proyecto se sometería a votación en el pleno de la Comisión en mayo.

El octeto de senadores está conformado por los republicanos Marco Rubio, John McCain, Jeff Flake y Lindsey Graham, y por los demócratas Dick Durbin, Chuck Schumer, Bob Menéndez y Michael Bennet.

Otro grupo bipartidista prepara un proyecto de ley similar en la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos. Varios representantes conservadores son reacios a ofrecer la naturalización a personas que han incumplido leyes estadounidenses.
Uno de ellos es el representante republicano Lamar Smith. El lunes, en el pleno de la cámara baja, Smith dijo que el proyecto de ley del Senado "incluye un error fundamental: Legaliza casi a cualquiera que se encuentre en el país ilegalmente, algo también llamado amnistía, antes de garantizar la seguridad fronteriza. Como resultado, la propuesta de Senado es una invitación abierta para entrar al país ilegalmente. Millones más lo harán antes de que la frontera esté segura", agregó.

La iniciativa de los ocho senadores, entre los que hay conservadores y liberales, es un intento cuidadoso por equilibrar, por un lado, el enfoque en la seguridad fronteriza y la aplicación de las leyes -como han insistido los republicanos- y por el otro, el hacer el camino a la ciudadanía ampliamente accesible -una de las prioridades demócratas.

El senador demócrata Schumer, uno de los integrantes del octeto que redactó la iniciativa, dijo que un elemento clave de la propuesta es prevenir que se produzca una ola de nuevos inmigrantes.

"Siempre he dicho que los estadounidenses reaccionarán con sentido común y serán prácticos y equilibrados hacia la inmigración legalizada y los 11 millones que ya están aquí, siempre y cuando estén convencidos de que no habrá futuros flujos de inmigración ilegal, y esa ha sido la filosofía que creo que ha guiado a nuestro grupo ", dijo el demócrata por Nueva York. "Hemos elaborado una propuesta que ha hecho más o menos eso".

Schumer y otro líder del grupo, el senador republicano McCain, tenían previsto reunirse el martes con el presidente Barack Obama para informarle sobre la iniciativa de legislación, una de las principales prioridades del presidente para su segundo mandato.

Obama ha reiterado su expectativa de que el proceso legislativo culmine durante el primer semestre de 2013.

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