domingo, 25 de enero de 2015

Podemos: fenómeno político en España. Para algunos populistas para otros la voz del pueblo

Tomado de Razonpublica.com

Pablo Iglesias líder del Movimiento Podemos

El fenómeno de Podemos, el partido que sacude la política en España

 

A menos de un año de su fundación, el partido político Podemos se ha convertido en la sorpresa electoral europea de 2014. ¿En qué consisten sus propuestas y por qué ha tenido tanto éxito en la España en crisis? 

Por Luciana Cadahia

Por mérito propio

Suele decirse que la popularidad del fenómeno Podemos radica en la indignación del pueblo español por la descomposición del clásico bipartidismo del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y el Partido Popular (PP), como si la influencia de Podemos dependiese más de los errores y limitaciones de sus adversarios que de los aciertos y posibilidades de su propuesta política.
Estas afirmaciones son moneda corriente en los medios de comunicación y entre los partidos políticos que pretenden restarle importancia al nuevo fenómeno. Pero si bien hay algo de cierto en esta afirmación, hay otros aspectos que explican su éxito.
Al mismo tiempo que Podemos, surgieron en España varias alternativas políticas, pero ninguna fue capaz de interpelar a la gente y despertar un entusiasmo generalizado como el que logró este partido. Con apenas cuatro meses de existencia, Podemos consiguió 1.245.948 de votos (5 escaños) en las elecciones al Parlamento Europeo y, según varias fuentes, hoy se presenta como la primera fuerza política en intención de votos en España.
La virtud de Podemos ha sido su capacidad para conectar con las demandas populares y encontrar un lenguaje común mediante nuevos canales de comunicación entre la ciudadanía y la política, dos recursos a los que la socialdemocracia europea había renunciado desde hacía mucho tiempo.
¿Cómo está organizado?
Durante el acto de clausura de la Asamblea Ciudadana, que tuvo lugar el pasado 15 de noviembre, Podemos anunció los nombres de los nuevos integrantes de su directiva, aunque ya desde finales de octubre su estructura organizacional había sido definida por votación.
En ese momento las propuestas con mayor respaldo dentro del partido eran “Sumando Podemos”, de Pablo Echenique, y “Claro que Podemos”, de Pablo Iglesias. La diferencia en las urnas fue muy amplia e Iglesias consiguió un 71 por ciento (90.451 de votos) frente al 12 por ciento de Echenique.
Entre el 10 y el 14 de noviembre se produjeron nuevas votaciones, esta vez para elegir a los integrantes de la nueva directiva. Allí fueron elegidos el secretario general, los 62 consejeros ciudadanos y la Comisión de Garantías Democráticas (5 titulares y 5 suplentes). En este caso, al igual que en la elección anterior, la línea de Iglesias se consolidó con 95.000 votos sobre un total de 107.000.  
Iglesias escogió a 10 de los 62 consejeros para que formen parte del Consejo de Coordinación, entendido como la cúpula ejecutiva de Podemos. Este Consejo tiene la  -muy difícil- tarea de darle viabilidad al programa que se ha venido elaborado durante estos meses.
Las propuestas de Podemos
El programa de Podemos resultó de un proceso de elaboración colectiva donde ha participado la ciudadanía. A partir de un borrador, los participantes tuvieron la posibilidad de debatir y de hacer aportes individuales o colectivos, para concluir con un referendo definitivo.
El programa consta de cinco puntos clave o de cinco  “recuperaciones”: la de la economía, la de la libertad, la de la igualdad, la de la fraternidad y la de la soberanía.
Pero si se repasan las palabras de Iglesias durante el acto de clausura, es evidente que la primera urgencia está en la economía. No es casual que su discurso haya dejado en un segundo plano las consignas políticas y se haya concentrado en ofrecer cifras y alternativas económicas, pues el principal desafío es diseñar un programa de desarrollo económico que encarne una real alternativa, pues de otro modo todo quedaría en palabras bonitas.
Esta propuesta deberá resolver, al menos, tres problemas urgentes: el desempleo, el pago de la deuda y la reactivación de la economía, y ya los nuevos Consejos Ciudadano y Ejecutivo de Podemos han comenzado a trabajar en estos puntos.
Si las políticas del PP y del PSOE han sido de ajustes y recorte del gasto público, las propuestas de Podemos optan por la estrategia contraria. Para eso se anticipan un plan de inversiones y un conjunto de políticas que ayuden a crear fuentes de trabajo y una renta básica para las familias que hoy carecen de ingresos.
Una de las preguntas más recurrentes de la ciudadanía es de dónde saldrá el dinero para estos programas. La respuesta de Podemos pasa por cobrar un impuesto a las grandes fortunas y por consolidar las pymes como medios principales para crear  empleo y reactivar la economía.
Vinculadas con este punto hay otras propuestas que, si bien son menos urgentes, a mediano plazo serán más importantes. Por un lado está la derogación de la nueva ley laboral, la cual abrió las puertas para la precarización y los despidos en masa. Por otro lado está modificar ley de pensiones y reducir la edad de jubilación a 60 años.
Otro de los puntos clave - y quizá el más espinoso- es la auditoría de la deuda. Durante los años de gobierno de Rajoy, el nivel de endeudamiento ha crecido del 30 al 100 por ciento como proporción del PBI. En este aspecto, Podemos anuncia que dará dos pasos inspirados en las estrategias de Ecuador y Argentina.
En un principio habría que separar la deuda privada de la deuda pública, y así determinar cuál es la deuda legítima. Y luego habría que llevar a cabo una reestructuración de la deuda que permita una rebaja importante.
Para que la reestructuración tenga lugar hace falta el acuerdo de un alto porcentaje de los tenedores de bonos, y hasta la fecha no se sabe con certeza quiénes son. Por eso, si los “fondos buitre” deciden extender su estrategia al viejo mundo, se corre el riesgo de fracasar en este punto.
Por eso, para España es muy importante la pelea que Argentina está dando ante los organismos internacionales, en su búsqueda de una regulación común para la reestructuración de la deuda.
Otro de los objetivos a mediano plazo que plantea el programa es la recuperación del control público de los sectores estratégicos de la economía, tales como telecomunicaciones, energía, alimentación, transporte, el sanitario, el farmacéutico y el educativo.
En la actualidad estos sectores estratégicos suelen controlar las decisiones del gobierno. Por eso, invertir esta relación de fuerzas requerirá de una gran capacidad de negociación y vocación política.
No hay que olvidar que el ingreso a la Unión Europea supuso la pérdida de la soberanía económica española. Por eso Podemos deberá enfrentarse “la Troika”, esa poderosa fuerza responsable del “austericidio” en Europa.

Fenómeno europeo
Podemos es consciente de que no bastan los cambios económicos y políticos de alcance nacional, sino que es necesaria una propuesta europea y para ello ha de contar con el apoyo de otros países de la Unión. Por eso ya cuenta con el aval del Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europa (GUE) del Parlamento Europeo, representada por líderes como Tsipras del partido griego Syriza o Marisa Matias del portugués Bloco de Esquerda.
Entre los objetivos europeos de Podemos está democratizar el Banco Central Europeo, acabar con las políticas de estrangulamiento de los países del sur mediante la compra de deuda pública de los Estados más vulnerables, y la inversión en los sectores sociales más necesitados. Esta propuesta supondría un cambio radical con respecto a la política vigente, que antepone el mercado financiero a la inversión social.
Es verdad que no son pocos los obstáculos que deberá sortear Podemos, puesto que no se trata apenas de elaborar una propuesta económica sólida, sino de tener la capacidad para llevarla a cabo. Y esto supone una gran responsabilidad que por supuesto preocupa a sus miembros.
Por eso, jóvenes economistas como Ignacio Álvarez - y otros de amplia trayectoria como Vicenç Navarro y Juan Torres - vienen trabajando para ofrecer una propuesta de ejecución de cada uno de los puntos del Programa de Rescate Ciudadano.
El grado de descomposición del PP y del PSOE, sumado a los casos alarmantes de corrupción de las últimas semanas, hace que la ciudadanía esté cada vez más decidida a votar por Podemos, que despunta como el fenómeno político del momento en Europa.
Doctora en Filosofía de la Universidad Autónoma de Madrid, ha sido profesora e investigadora invitada de esta universidad, de París I Sorbona, de F. Schiller de Jena y actualmente de FLACSO (Sede Ecuador). 

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