domingo, 30 de octubre de 2011

Población mundial alcanza los 7 mil millones de personas

Tomado del Diario La Nación

Con información del UNFPA

Fondo de las Naciones Unidas para la Población

“En lugar de preguntar si somos demasiado numerosos, deberíamos preguntar qué podemos hacer para que nuestras ciudades sean sostenibles y habitables, para eliminar las barreras que impiden la igualdad entre mujeres y hombres, de modo que cada persona pueda tomar sus propias decisiones y desarrollar plenamente su potencial”, afirmó el doctor Babatunde Osotimehin, Director Ejecutivo del UNFPA, Fondo de Población de Naciones Unidas, al darse a conocer hoy, a nivel global, el informe Estado de la Población Mundial 2011, titulado 7 mil millones de personas: su mundo, sus posibilidades.

Según las proyecciones, dentro de cinco días la población mundial llegará a 7 mil millones. La forma en que actuemos hoy determinará si tendremos o no un futuro saludable, sostenible y próspero, o si ese futuro se caracterizará por desigualdades, deterioro ambiental y reveses económicos. “Si planificamos y efectuamos desde ahora las debidas inversiones en las personas nuestro mundo de 7 mil millones podrá contar con ciudades prósperas y sostenibles, fuerzas laborales que impulsen a las economías, y poblaciones de jóvenes que contribuyan al bienestar de sus sociedades”, puntualiza el doctor Osotimehin en el prólogo de la presente edición del mencionado informe.

En el Estado de la Población Mundial 2011 se analizan las tendencias y las dinámicas que definen un mundo con 7.000 millones de personas y muestra lo que muchas personas están haciendo en sus propias comunidades y en sus países, a fin de colaborar en el logro de un mundo más justo y sostenible.

Analiza además, que desde muchos puntos de vista, puede considerarse que el actual tamaño sin precedentes de nuestra población es un reto, una oportunidad y un llamado a la acción. Si bien hoy las personas tienen vidas más largas y más saludables, este beneficio
aún no ha llegado a todos y todas.

El reporte resalta que si se planifica correctamente y se invierte en las personas, a fin de otorgarle las herramientas que les permitan tomar opciones que no solamente sean beneficiosas para ellas mismas, sino también para su comunidad, este mundo de 7.000 millones tendrá no solo ciudades prósperas y sostenibles y fuerzas laborales productivas que impulsen el crecimiento económico, sino poblaciones de jóvenes que contribuyan al bienestar de las economías y las sociedades, y una generación de ancianos saludables que participen activamente en los asuntos sociales y económicos de sus países.

Jóvenes en un mundo de 7 mil millones

Las personas menores de 25 años de edad constituyen un 43% de la población mundial. Cuando los y las jóvenes pueden reivindicar sus derechos a la salud, a la educación y a condiciones de trabajo digno y decente, se transforman en una poderosa fuerza que impulsa el desarrollo económico y el cambio positivo.

Por ello, el UNFPA aboga porque en el mundo en desarrollo se apunte a la inversión en este sector, a fin de mejorar las condiciones de sus vidas y estimular el crecimiento económico y el desarrollo de los

países. No obstante, el momento de aprovechar este bono demográfico es ahora, pues de lo contrario se perderá la oportunidad de producir un desarrollo equitativo e igualitario.

De los siete mil millones de personas de todo el mundo, 1.800 millones son jóvenes de entre 10 y 24 años de edad. Esta es la mayor población de jóvenes jamás registrada y que puede cambiar nuestro rumbo y nuestro futuro. Las personas jóvenes, plenas de energía y con posibilidades de acceso a las nuevas tecnologías, están transformando la cultura y marcan el rumbo respecto a temas relevantes que hacen a sus vidas. Las decisiones que este grupo tome determinarán nuestro futuro común. Para esto es preciso realizar inversiones en la salud y en la educación de esta población, ya que esas inversiones arrojarían enormes utilidades para el crecimiento económico y el desarrollo de las futuras generaciones.

“El hito de hoy nos recuerda que debemos actuar de inmediato”, dijo el Osotimehin, y agregó que el Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo, suscrito por Paraguay, exhorta a los gobiernos a que desarrollen políticas para que las personas adopten sus propias decisiones en materia reproductiva, lo cual continúa siendo la mejor orientación para el futuro.

En muchos países del mundo en desarrollo, donde el aumento de la población es más acelerado que el crecimiento económico, la necesidad de contar con servicios de salud reproductiva, especialmente de planificación de la familia, sigue siendo una imperiosa necesidad. El logro de una población estable es un requisito indispensable para el crecimiento económico planificado y el desarrollo acelerado. Por esto, los gobiernos no solo deberían trabajar para erradicar la pobreza, sino que también deberían comprometerse para que su sistema de salud ofrezca servicios, insumos e información que mujeres, adolescentes y jóvenes necesitan para ejercer sus derechos reproductivos.

Por otro lado, José Ángel Aguilar Gil, Director de Democracia y Sexualidad, organización no gubernamental con sede en México que promueve la salud y los derechos sexuales y reproductivos, dice que las adolescentes y las mujeres jóvenes “tienen derecho a tener acceso a programas integrados de educación sobre sexualidad, como parte de un derecho humano más amplio: el derecho a recibir educación”. En este mismo sentido en su misión a Paraguay, realizada en abril de 2009, el Relator Especial para la Educación, Vernor Muñoz, insistió en la necesidad de formular y llevar a la práctica un nuevo enfoque de educación basado en el conocimiento y la vivencia de los derechos humanos. Con ese fin, observó la necesidad de de incluir la perspectiva de género en las políticas educativas, así como ofrecer programas de educación sexual y reproductiva en el currículum educativo, todo esto considerando los altos índices de mortalidad materna, embarazos adolescentes precoces, violencia sexual y de género contra las mujeres, las niñas y las adolescentes, y la necesidad de construir relaciones humanas basadas en el respeto de todas y todos.

Una mirada histórica al proceso poblacional paraguayo

Acorde a un resumen elaborado por la oficina local del UNFPA en Paraguay, estos son los principales hitos históricos referidos al proceso poblacional paraguayo:

1570: Primer relevamiento poblacional durante la Colonia, realizado por el geógrafo López de Velazco, casi 30 años después de la Fundación de Asunción.

1630-1680: Despoblamiento de varias localidades del Paraguay a causa de las incursiones bandeirantes.


1682: Crecimiento de las villas, partidos y pueblos “paraguayos” que albergan a fines del siglo XVIII el 72% de la población total.

1700: Comienza el proceso de expansión poblacional de Paraguay a lo largo del litoral del río Paraguay, en los valles del interior y en los yerbales del nordeste.

1782: El censo realizado a pedido del Gobernador Melo de Portugal arroja una población total de 96.630 habitantes.

1846: A pedido del Obispo Basilio López se lleva a cabo el primer registro demográfico fidedigno del período independiente, anterior a la Guerra de la Triple Alianza. La población totalizaba 233.394 personas.

1865-1870: Guerra de la Triple Alianza; muere casi el 40% de la población preexistente en 1846.

1886: El censo realizado por una Oficina General de Estadística, contabilizaba a la población paraguaya en 239.774 habitantes distribuidos en la capital y otros veinte distritos electorales. A efectos de compensar el subregistro, la Oficina adicionó un 10% a la cifra censada, dando como población total del país 263.751 habitantes.

1899-1900: A través de un Informe de Población, el Ministerio del Interior comunica los datos de un relevamiento hecho bajo la dirección de M. Benítez, en el cual se había registrado “nominalmente” a 433.103 personas en los veinte distritos del interior y unas 51.719 en la capital. Estimaba, además, la existencia de unos 50.000 habitantes en el Chaco, las guarniciones militares, las colonias agrícolas y los yerbales, con lo que la población total se elevaría a algo más de medio millón de personas.

1913-1915: Período de emigración por causas económicas y políticas hacia las provincias fronterizas de Argentina y Brasil.

1932-1935: Guerra del Chaco. Durante el conflicto con Bolivia murieron entre 30.000 a 40.000 jóvenes y adultos paraguayos.

1947: La revolución civil de ese año originó la gran emigración por motivos políticos hacia Argentina y Uruguay, estimada en más de cien mil personas.

1950: Primer censo realizado bajo criterios técnicos internacionales, totalizaba a la población de Paraguay en 1.328.452 habitantes.

El informe Estado de la Población Mundial es una publicación anual del UNFPA que busca llamar la atención de los países frente a los retos sociodemográficos, a fin de contribuir a superar la pobreza, garantizar los derechos de jóvenes, mejorar la salud sexual y reproductiva, y abogar por la igualdad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario