Tomado de RFI
Monseñor
Pietro Parolin recordó que el “celibato
no es un dogma de la Iglesia” (foto de 2009).
¿Caerá el celibato de los sacerdotes gracias a Francisco?
La prensa francesa se pregunta este 13 de septiembre si el
matrimonio de los sacerdotes será finalmente autorizado por la Iglesia católica
tras las declaraciones del número dos del Vaticano, monseñor Pietro Parolin,
quien recordó que el ‘celibato no es un dogma de la Iglesia’.
El celibato de los sacerdotes no es un dogma de la Iglesia
católica sino un precepto y, como tal, es algo que se puede “discutir”, dijo el
miércoles monseñor Pietro Parolin, el recién designado secretario de Estado del
Vaticano y saliente nuncio de Venezuela al diario “El Universal” de Caracas.
Monseñor Parolin no dice en el fondo nada revolucionario y
ya otros habían hecho esa precisión. Pero estas declaraciones parecen abrir la
posibilidad a la discusión del tema durante el papado de Francisco. La eventual
apertura de este delicado punto se haría en medio de la actual escasez de
sacerdotes, la cual afecta inclusive a los países más católicos como España e
Italia, pero también los escándalos sobre el presunto “lobby gay en el
Vaticano” y los sacerdotes pederastas.
El celibato es una regla de disciplina que se remonta al
segundo concilio de Letran en 1139 y su origen fue práctico: evitar que los
sacerdotes tuvieran herederos y preservar de esta manera el patrimonio de la
Iglesia. “El esfuerzo que hizo la Iglesia para estatuir el celibato
eclesiástico debe ser considerado. No se puede decir, sencillamente, que
pertenece al pasado. Es un gran desafío para el Papa (...) y todas esas decisiones
deben asumirse como una forma de unir a la Iglesia, no de dividirla”, agregó
Parolín.
Desde la elección en marzo Francisco, una amplia
reorganización de la Curia – gobierno del Vaticano – está en marcha. El papa
nombró varias comisiones encargadas de abordar la reforma de esta institución y
del banco del Vaticano. Las grandes líneas de la reforma de la Curia se darán a
conocer a principios de octubre.
Algunos conocedores de los entresijos del Vaticano
manifestaron a la prensa francesa que no había que descartar que el papa desee
poder instaurar la capacidad para casarse, que podría limitarse a una opción
personal, lo que haría todavía más ejemplar la opción del celibato y de una
vida de castidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario