
En el video que lo
encontré en el canal Youtube de TED tuvimos la oportunidad de ver una charla de
Ric Elias, presidente de una empresa y quien fuera parte del vuelo 1549 que
cayó en el Río Hudson en New York en enero del 2009.
Durante su exposición
él hablaba sobre las 3 lecciones que aprendió en ese momento en que su vida
estuvo a punto de terminar.
Siguiendo esa misma
línea de pensamiento en cuanto a cuales podrían ser las lecciones que
pudiéramos aprender con el simple hecho de viajar, no el estar en una posición
de vida o muerte, nos dimos a la tarea de encontrar las 7 lecciones al viajar.
1. Paciencia – esta cualidad
humana será puesta a prueba instantáneamente desde el momento en que llegamos
al aeropuerto. Primero, si tienes una maleta grande tienes que hacer la fila
del “counter” de la línea aérea, seguido por la fila de la seguridad, la cual
dependiendo del día puede ser de unos 10 minutos o de varias horas. Seguido por
la espera que uno tiene que hacer para abordar y sin mencionar que después de
que estás en el avión pudiera tocarte el caso de tener niños pequeños gritando;
alguien que se duerme y ronca en el oído; aquellos que viajan con tantos “carry
on” que ponen maletas en todos lados; otros que te dan con la maleta/bulto y
sin dejar atrás la más desesperante de todas, el salir del avión cuando llegas
al destino deseado.
2. Aceptación – “no es lo mismo, ni
se escribe igual”, como diría un famoso refrán. Esta palabra significa
literalmente aceptar a las personas tal y como son. En un viaje, la inmensa
mayoría del tiempo no sabes quien se sentará a tu lado, siempre hay una
variedad de personalidades en cada uno de los vuelos desde personas con sobre
peso, personas mayores que no escuchan y que te preguntan constantemente o se
sienten tan solos o tienen miedo y les da por hablar o aquellos que simple y
sencillamente hablan hasta por los codos.
3. Apreciación – “Uno no sabe lo que
tiene, hasta que lo pierde” pero cuando uno viaja no es que uno pierde, sino
que uno empieza a ver las ventajas, bendiciones y la abundancia en la que
vivimos. A su vez, nos da la oportunidad de apreciar lo que tenemos y de lo que
damos por sentado. También aquellos que hablamos otro idioma adicional al
nuestro, vemos como se abre un mundo de nuevas posibilidades y expansión del
conocimiento y a la misma vez poder apreciar la nuestra.

5. Felicidad – Es el sentimiento
más normal que sentimos al llegar al destino deseado. En algunas ocasiones se
combina con que alguien querido te está esperando; te sorprenden cuando llegas
con una pancarta diciendo “Your HOME” ‘WELCOME BACK” “BIENVENIDO a casa” o
simplemente esta cumpliendo un deseo. Cualquiera que sea, la felicidad que
sientes es inigualable.
6. Egoísmo – Curioso que uno
nunca pensaría que esta palabra pudiera tener un significado positivo, pero en
caso de una emergencia cuando la máscara de oxígeno es activada uno tiene –no
hay opción- que ponerse su máscara primero y después ayudar a otros a
ponérselas. Nos olvidamos que esta acción debería de ser la norma en la mayoría
de los casos en nuestra vida, en donde no podemos ayudar a nadie, literalmente
a nadie, si no nos ayudamos, amamos y nos consideramos a nosotros primero.
7. Flexibilidad – Esta la orden del
día, hay tardanzas de los vuelos, hay cambio de horarios, cambios inesperados y
sin tener control sobre ellos.
La mayoría de las
personas mayormente están viajando para ir a ver a alguien, se están mudando,
de trabajo o están de vacaciones.
Lo interesante de todo
esto es que no importa el por que estamos viajando, pero tenemos la oportunidad
de aprender lecciones que nos ayudaran no solo en nuestro diario vivir, sino en
empezar a ver las cosas desde otro punto de vista.
Que tal si la próxima
vez que tengamos la oportunidad de viajar nos damos la oportunidad de crecer
como seres humanos y nos damos cuenta de lo privilegiado que somos.

--
Waldemar Serrano-Burgos, CEC
Certified
Life-Business Coach
No hay comentarios:
Publicar un comentario